¿Qué es la modernización de aplicaciones?
Muchas empresas dependen de aplicaciones «legacy» o heredadas, lo que les impide aprovechar el enorme potencial del cloud computing. Al modernizar el software existente utilizando un enfoque que prioriza el cloud, la empresa puede mejorar el rendimiento y la escalabilidad mientras abre nuevas oportunidades para el crecimiento, la productividad y las formas de trabajar.
Qué supone la modernización de aplicaciones
El principio es sencillo: en lugar del gasto de retirar el software heredado y reemplazarlo todo con soluciones nuevas, la infraestructura de plataforma de la aplicación existente, la arquitectura interna y los conjuntos de características se transforman en un modelo que prioriza el cloud. Por lo general, esto se lleva a cabo en etapas para evitar el cambio enorme y repentino que puede acompañar a las estrategias agresivas de migración al cloud. Esto se logra mediante la adopción de un modelo Lift & Shift, que transfiere los datacenters locales existentes y las aplicaciones heredadas al cloud para satisfacer las necesidades actuales del negocio.
Una vez finalizada la migración, puede llevar a cabo la modernización específica de las aplicaciones mediante el refactoring (reacondicionamiento), la introducción de nuevas características y la adopción de las mejores prácticas actuales. Esta transición es vital a medida que la estrategia de modernización de aplicaciones adecuada aumenta el rendimiento de la empresa, mejora las experiencias de clientes y empleados y ayuda a ofrecer nuevos tipos de software y servicios al mercado con mayor rapidez.
Cómo comenzar un viaje de modernización de aplicaciones
Existen tres pasos clave que conforman una estrategia de modernización de aplicaciones de éxito y garantizan una implementación personalizada para la modernización de aplicaciones heredadas. El primero es planificar la transición, que debería abarcar todo, desde la auditoría de aplicaciones y sistemas heredados hasta la definición de los objetivos finales del cambio, sin olvidar un elemento clave como el ROI.
El segundo paso para el negocio es la implementación, donde se aprenden las habilidades necesarias para la transición y más importante, donde se adopta un enfoque iterativo para que los cambios sean escalonados y manejables, en lugar de producirse todos a la vez y arriesgar la continuidad del negocio. El tercer y último paso es operativo. Se centra en las herramientas y servicios empresariales que ofrece el cloud computing. Ambos pueden simplificar la gestión, la seguridad, la gobernanza y la optimización de las aplicaciones modernizadas de la organización, así como hacerlas más eficientes y rentables.
Cómo elegir una estrategia de modernización de aplicaciones que funcione
No existe un camino establecido para la creación de un proceso de modernización de aplicaciones que tenga éxito. De lo que se trata es de evaluar sus necesidades únicas durante la fase de planificación. A partir de ahí, se puede adoptar y desplegar una estrategia individual o una combinación de las siguientes estrategias cloud:
«Rehosting»
Con «Lift & Shift», una aplicación heredada existente se traslada simplemente a un nuevo entorno, que a menudo es una plataforma en el cloud. Si bien las características nativas del cloud no se pueden aprovechar completamente, el cambio es rápido ya que se requieren pocos cambios de codificación, además se reducen los costes de mantenimiento y cualquier aplicación heredada que se ejecute en el nuevo hardware disfrutará de aumentos de velocidad.
«Refactoring»
El rehosting (realojamiento) Está estrechamente relacionado con el replatforming (reconversión de plataformas). En este caso se realizan cambios en el código de la aplicación heredada para que se pueda integrar con un entorno nativo del cloud. Esto abre oportunidades para aprovechar servicios específicos nativos del cloud, como la mensajería y la base de datos basada en el cloud. Al igual que el rehosting, el refactoring (reacondicionamiento) es rápido y tiene el potencial de aumentar significativamente los niveles de productividad.
«Re-architecting»
Este enfoque de la modernización de aplicaciones está diseñado para las empresas que necesitan acceder a la escalabilidad que ofrece el cloud. Esta solución de modernización de aplicaciones requiere mucho más trabajo que el rehosting o refactoring, ya que la arquitectura y el diseño de las aplicaciones heredadas deben modificarse significativamente para ofrecer el resultado correcto.
«Rebuilding»
El re-architecting (reestructuración) es el cambio más importante ya que implica reescribir completamente la aplicación heredada desde cero y conservar su funcionalidad. Inevitablemente, esto requiere más tiempo e inversión, pero los beneficios para una estrategia de modernización de aplicaciones pueden ser significativos. La nueva estructura a menudo ampliará la funcionalidad o la vida útil de la aplicación. La aplicación reconstruida representa el resultado ideal de la modernización de aplicaciones, ya que el resultado es optimizado para el cloud, capaz de acceder a todo su potencial e introducir aumentos masivos en la escalabilidad y el rendimiento, así como reducciones en el coste de mantenimiento de las aplicaciones.
«Replacing»
En lugar de reconstruir las aplicaciones heredadas, una alternativa más práctica y económicamente viable es reemplazar una aplicación heredada con una solución disponible de forma instantánea o un reemplazo personalizado. Existen desventajas evidentes en este cambio general, incluido el riesgo de interrupciones en la organización, así como la posible reducción de las oportunidades para la futura modernización de las aplicaciones. Sin embargo, reemplazar las aplicaciones heredadas es más rápido que volver a construirlas y le permite utilizar los recursos de desarrollo asignados para la reconstrucción en otras partes de su estrategia de transformación digital.
Qué tecnologías son necesarias para la modernización de las aplicaciones
Para ejecutar con éxito una estrategia de modernización de aplicaciones, se requieren diferentes tecnologías en función de las necesidades de la aplicación y los objetivos previstos. Las principales tecnologías para el negocio incluyen:
Cloud computing
Los entornos o plataformas cloud que alojarán la modernización de las aplicaciones son esenciales para la oferta de cloud computing. Entre los tipos de plataformas cloud se incluyen el cloud público, privado e híbrido (como los que ofrece OVHcloud), que pueden ser administrados, escalados y mantenidos por un proveedor en lugar de por un equipo interno.
Contenedores y orquestación
Los contenedores están formados por componentes de software ejecutables, bibliotecas y dependencias de la aplicación. El uso de una plataforma de orquestación como Kubernetes permite recoger, mover y ejecutar estas aplicaciones en contenedores en cualquier entorno (también en el cloud) de forma coherente y fiable.
Microservicios
En lugar de depender de una aplicación estructurada como si fuera un monolito, la aplicación se divide en componentes más pequeños e independientes llamados microservicios. A diferencia de una solución monolítica, esta nueva infraestructura de aplicaciones permite a los desarrolladores trabajar en un único microservicio independientemente de los demás. Esta versatilidad y flexibilidad permite realizar rápidamente las tareas de actualización y desarrollo sin alterar la totalidad de la aplicación, lo que es esencial para cualquier estrategia de modernización de aplicaciones.
Automatización
Con el fin de ayudar a escalar la aplicación, también se pueden implementar sistemas y servicios de automatización de terceros. Estos servicios realizan tareas comunes de forma automática, lo que lleva a una mejor implementación de los procesos de modernización de aplicaciones, así como a un mejor desarrollo, administración y monitoreo de aplicaciones.
¿Cuáles son los beneficios de la modernización de aplicaciones para el negocio?
La modernización de las aplicaciones ofrece ventajas clave con respecto a los sistemas heredados existentes, entre las que se encuentran:
Innovación
La implementación correcta de la modernización de las aplicaciones liberará a los equipos de desarrollo para que se centren en objetivos de misión crítica relacionados con el negocio y la innovación, en lugar de perder tiempo en otras tareas.
Seguridad
Los datos y las cargas de trabajo pueden protegerse mejor mediante las políticas de seguridad y actualización que ofrece un proveedor de cloud como OVHcloud. Los proveedores de prestigio también ofrecen servicios de recuperación ante desastres y backup de datos, además de acceso a un nivel de disponibilidad que puede escalarse fácilmente según las necesidades de la organización.
Agilidad
No importa cuán rápido evolucione la tecnología, una aplicación modernizada podrá seguir el ritmo. De hecho, el problema de la modernización de las aplicaciones desaparecerá con el tiempo para muchas organizaciones, ya que las aplicaciones modernizadas le brindan la capacidad de realizar cambios a gran velocidad a medida que evolucionan sus requisitos en materia de infraestructura y sistemas.
Rendimiento
Incluso con las cargas más pesadas, la aplicación modernizada tendrá un rendimiento mucho mejor que su versión original heredada, aumentando los niveles de satisfacción del usuario, así como la entrega de operaciones y servicios que son rápidos y sin fisuras.
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