Academia.edu no longer supports Internet Explorer.
To browse Academia.edu and the wider internet faster and more securely, please take a few seconds to upgrade your browser.
…
30 pages
1 file
La célula es la estructura más pequeña que puede considerarse un ser vivo. De hecho los primeros seres vivos sobre la Tierra eran organismos unicelulares (que vivieron hace unos 3500 millones de años) muy parecidos a las bacterias actuales.
Capitulo 3 de el mundo de la célula
En el Capítulo 2 se consideraron algunos de los princi-pios básicos de la organización química de la célula. Vimos que las macromoléculas biológicas-proteínas, ácidos nu-cleicos y polisacáridos-están formados por la repetición de un número relativamente pequeño de monómeros (de 1 a 20). Estos polímeros se sintetizan en reacciones de con-densación, en las que los monómeros activados se unen entre sí, con liberación de agua. Una vez sintetizados, los polímeros se pliegan de forma espontánea, dando lugar a estructuras tridimensionales estables. Las moléculas plega-das se asocian luego de forma jerárquica, en estructuras de mayor nivel de complejidad, generalmente sin necesidad de aporte energético o instrucciones nuevas. Estamos pues en disposición de estudiar los principales tipos de macromoléculas biológicas. En cada uno de los ca-sos, nos centraremos primero en la naturaleza química de los monómeros, y luego analizaremos la síntesis y las pro-piedades de los polímeros. Como veremos en breve, la ma-yoría de las macromoléculas se sintetizan a partir de sólo unas 30 moléculas pequeñas. Empezaremos por las proteí-nas, ya que desempeñan muchos y muy importantes pape-les, tanto en la estructura, como en las funciones celulares. Posteriormente analizaremos los ácidos nucleicos y los po-lisacáridos, para concluir con los lípidos que, si bien no son polímeros en el sentido estricto, sí que son constituyentes esenciales de la célula. Proteínas Las proteínas son, sin duda, las macromoléculas más abun-dantes y de distribución más amplia en la célula. De hecho, su nombre lleva implícita su importancia, pues en griego, la palabra proteios significa «preeminente». Ya estemos ha-blando de la fijación del dióxido de carbono durante la fo-tosíntesis, del transporte de oxígeno en la sangre, o de la motilidad del flagelo bacteriano, el proceso depende bási-camente de determinadas proteínas con propiedades y funciones específicas. Atendiendo a su función, las proteínas pueden clasifi-carse en nueve categorías (Tabla 3.1). Muchas proteínas son enzimas, que sirven como catalizadores que incremen-tan la tasa de miles de reacciones químicas, de las que de-pende la vida. Las proteínas estructurales, por otra parte, confieren forma a células y orgánulos, dándoles su apa-riencia característica. Las proteínas motoras intervienen en la contracción y en los movimientos de células y estructu-ras intracelulares. Las proteínas reguladoras son responsa-bles del control y organización de las funciones celulares, permitiendo que las actividades estén en consonancia con las necesidades celulares. Las proteínas transportadoras es-tán implicadas en la entrada y salida de sustancias, tanto en la célula, como en sus orgánulos. Las hormonas proteicas median en la comunicación entre células que están aleja-das dentro de un organismo y los receptores proteicos facul-tan a la célula para responder a los estímulos químicos del medio. Finalmente, las proteínas de defensa proveen de protección frente a enfermedades y las proteínas de almace-naje sirven como reserva de aminoácidos. La mayoría de las proteínas tienen una única función, ya sea catalítica, es-tructural, motora o reguladora. Sin embargo, algunas son bifuncionales, es decir, que pueden ejercer dos funciones diferentes. Teniendo en cuenta que, virtualmente, todo lo que es o hace una célula depende de las proteínas que tenga, es evi-dente que necesitamos comprender qué proteínas son y Proteínas 45 3 Las macromoléculas de la célula
En la actualidad, es ampliamente conocido que el papel es uno de los productos de mayor uso en la vida del hombre. Se fabrica a partir de una materia prima renovable: las fibras de celulosa extraídas principalmente de los árboles, pero también de otras especies vegetales, como paja, bagazo de la caña de azúcar, bambú, algodón, lino, entre otros. Sin embargo, es menos conocido que la celulosa se encuentra comercialmente disponible en una gran variedad de presentaciones y se utiliza en las industrias de los detergentes, textil y alimenticia, entre otras. Esto se debe a la posibilidad de romper la molécula de fibra celulósica (un polímero) en unidades más pequeñas, gracias a la acción de algunas enzimas llamadas celulasas. Las enzimas celulasas que utilizan naturalmente los hongos y bacterias para degradar la celulosa, se encontró que la hidrólisis (degradación) de este polímero es muy compleja. Por eso, es necesario investigar las estructuras y funciones de estas enzimas para conocer con mayor detalle los mecanismos enzimáticos involucrados en la degradación de la celulosa. En este sentido, se espera que las herramientas moleculares y biotecnológicas permitan mejorar los procesos ya existentes, o bien encontrar nuevas aplicaciones.
La celula del sistema oseo: -La celula de los huesos .la celula porgenitora.
Los niños y los jóvenes presentan limitaciones en el proceso de formación de los conceptos científicos. Esto se puede explicar a la luz de las propuestas de Gastón Bachelard en relación con los obstáculos epistemológicos que se presentan en el proceso de aprendizaje de las ciencias a nivel de estudiantes de enseñanza primaría. De acuerdo con Bachelard se dan cinco obstáculos principales: 1 .Los conocimientos previos 2. El obstáculo verbal 3.El peligro de la explicación por la utilidad 4. El conocimiento general 5. El obstáculo animista Es necesario que el o la docente los conozcan para que establezcan estrategias didácticas que permitan superarlos y así facilitar a los niños y niñas el proceso de aprendizaje en el área de ciencias y el logro de los propósitos fundamentales de esta asignatura.
Loading Preview
Sorry, preview is currently unavailable. You can download the paper by clicking the button above.
Cátedra de Patrimonio y Arte navarro. Memoria 2006. Pamplona, 2007, pp. 214-216 y Web de la Cátedra de Patrimonio y Arte navarro, 2007