2013
Cuando hablamos de microbios (bacterias, hongos y levaduras), lo primero que viene a nuestra mente son aquellos organismos microscópicos-imperceptibles a primera vista-y que son responsables de las numerosas enfermedades que aquejan al ser humano. Diarreas, cólera, tuberculosis, tifoidea, infecciones urinarias, o "pie de atleta" son algunas de las enfermedades originadas por microorganismos y que les da su mala reputación. Los microbios, sin embargo, cumplen también una serie de tareas beneficiosas y fundamentales para la humanidad y la vida en su conjunto. Jamás nos imaginamos que puedan existir microorganismos útiles en la fabricación de innumerables productos como vino, cerveza, yogurt, pan, medicamentos, entre otros; o que sean capaces de vivir en condiciones extremas de temperatura y acidez y que puedan ser útiles en la extracción de metales contenidos en minerales. El empleo de microorganismos-bacterias, levaduras y hongos, principalmente-como catalizadores de procesos industriales se conoce como biotecnología, y en el sector minero mundial concita enorme interés por la enorme posibilidad de recuperar metales presentes en minerales difíciles de tratar con la tecnologías convencionales. BIOMINERÍA Lixiviación bacteriana, biolixiviación, biooxidación, son algunas de las denominaciones que han recibido las múltiples aplicaciones de la biotecnología en la industria minera. En tiempos actuales, estos procesos y otros más que involucran hasta el tema de remediación ambiental en el sector minero, reciben, en su conjunto, la denominación de biominería. La biolixiviación es una tecnología que emplea bacterias para extraer, o lixiviar, un metal valioso como uranio, cobre, zinc, níquel y cobalto, contenidos en una mena o concentrado mineral. El producto final de la biolixiviación es una