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Matanza infernal

2017, Matanza infernal

Jesus Maroto de las Heras Matanza infernal Los secuaces del canónigo Calvo han atado de dos en dos a los prisioneros mientras que al sacerdote solo se le oye susurrar a los que se acercan: "Si señor, morirán todos". En esa situación angustiosa, el propio Calvo parece no estar seguro de que la amenaza se consume, sale de la Ciudadela y se persona en casa del conde de Cervellón para decirle que: "Para evitar efusión de sangre en los del pueblo era de opinión que se mandase ir al verdugo para que degollase a todos los franceses en la Ciudadela". Mientras tanto, la alarma de la posible ejecución llega a varios conventos y sus comunidades deciden entrar en la fortaleza….. Se pide que aguarden hasta el amanecer para evitar que se ejecuten a inocentes o a otros detenidos que no son franceses. Un hombre de edad, que surge de los grupos, contesta que los franceses tienen que ser ajusticiados y levanta un puñal como amenaza. Ésta es secundada por los que le rodean. Ante ese agravamiento el sacerdote comienza a rezar en voz alta el rosario. En ese momento llega Baltasar Calvo que exclama: "En tanto que los padres rezan, oíd". No se conocen las palabras que dijo, pero un grito unánime es el de: "¡Mueran todos, mueran todos!"…. .. Las comunidades que entran en la Ciudadela a la luz de las antorchas, muestran las imágenes sagradas a los secuaces de Calvo. Sin embargo estos atropellan a los religiosos y se abalanzan sobre los prisioneros para asesinarlos. Lo hacen. La lúgubre escena adquiere caracteres de pesadilla porque los asesinatos se llevan a cabo apuñalando a los prisioneros a pesar de las voces de los religiosos que presencian impotentes esa ejecución. Baltasar Calvo se distingue entre la multitud gritando a los religiosos que, desesperados, piden confesión para aquellos franceses: "No hay confesión, no hay confesión". ¿Qué acontecimiento es este donde mueren en Valencia cerca de 400 ciudadanos franceses?...... Los días 6 y 7 de junio de 1808 tuvo lugar un suceso que dejará una huella profunda en la memoria histórica de los valencianos y que les condicionó para enfrentarse a las ofensivas francesas de los años siguientes. En dos días fueron asesinados en Valencia cerca de 400 ciudadanos franceses que habitaban en el Reino y se dedicaban al comercio. Cómo sucedió este hecho es un suceso que los historiadores locales han narrado con detalle pero que, al nivel general de la Guerra de la Independencia, otros historiadores, han pretendido rebajar su importancia por tratarse de algo que, si bien gran parte de la población rechazó, fue incapaz de evitar. Entre los historiadores que han tratado con cierta extensión este hecho se pueden citar a Vicente Martínez Colomer, Vicente Boix, Natalio Cruz Guzmán y Vicente Genovés Amorós, 1 Asimismo, tanto el conde de Toreno, como Gómez Arteche, le han dedicado menos extensión posiblemente para rebajar su importancia. 2 Por parte francesa el historiador Jean-Marc ha dedicado a este tema un pequeño estudio no publicado 3. Un documento base que han utilizado casi todos es el del juez José María Manescau 4. El responsable de este asesinato colectivo fue un sacerdote, el canónigo Baltasar Calvo. Este individuo aparece en Valencia a finales de mayo en los días de la efervescencia popular que se originó ante la noticia de la renuncia de los reyes en Bayona y la proclamación de José Napoleón. La ciudad hervía de rumores, alarmas, fantasías y violencias que