Como niños

Resumen En el presente trabajo se exponen algunas ideas sobre la aplicación de los procedimientos naturalis-tas en logopedia. Después de una breve presentación de los fundamentos de este tipo de intervención, en el artículo se comentan las ventajas e inconvenientes de su uso, comparándolos con los procedimientos tra-dicionales. También se alerta sobre algunos usos erró-neos y sus posibles causas sobre acabar con la aporta-ción de sugerencias sobre la formación de logopedas que deseen emplear la intervención naturalista con profesionalidad. Palabras clave: Intervención naturalista, buenas prácticas, formación de logopedas Some reflexions about naturalistic intervention in speech therapy This article discusses some of the current ideas on applied naturalistic intervention procedures in speech therapy. After a brief presentation of the underlying principles of naturalistic intervention, the article comments on the advantages and drawbacks of its use while comparing it to the traditional procedures used in speech therapy. At the same time it warns of the erroneous notions and uses that surround it and their probable causes. The article ends with suggestions for practitioners who whish to implement the naturalist intervention procedures in a professional way.

En el 2012 celebramos los 40 años del caminar de nuestra Diócesis, en donde se inspiran los ejercicios espirituales, e invitan a retomar la vida, renovando nuestro caminar.

Invitarte a ir al paso de los niños, explicando y repasando lo básico que enseña la Biblia. Palabra clave: Andar como Yeshúa. Proposición: ¡Para andar como Yeshúa, corre a tu propio paso, sin olvidarte de los niños! Texto: Salmo 26:1-12 (inicio), 1ª Corintios 10:23-33 (todos), Varios (Mensaje Semanal) INTRODUCCIÓN ¿Qué tan rápido caminas o corres? Para mí, caminar un kilómetro en diez minutos, es algo que hace cualquiera de mis amigos scouts (y muchos de ellos, corren con mayor velocidad que yo), pero, cuando estudié en Monterrey, una compañera de clase me hizo notar que caminaba más rápido, no sólo que ella, sino que el resto de la gente; quizás se deba a que es el ritmo al que el D.F. se mueve, a que cuando era chico me gustaba platicar con gente que era más alta que yo, y tenía que marchar a su paso, a que soy algo impaciente, o a la suma de todo eso, y algo más. Sin embargo, cuando mis sobrinos eran pequeños, acomodaba mi paso al de ellos, recuerdo una vez en Teotihuacán, mi sobrina Joany, quien estaba bien chiquita, quiso subir la pirámide de la Luna, y lo hicimos a su paso, de bajada fue otra la historia, porque el esfuerzo la cansó y la baje dormida. Alguna vez, ¿has visto como un niño, con el brazo estirado, es arrastrado por alguno de sus padres que camina de prisa, sin percatarse de lo incómodo que es para el niño? En la vida llega a suceder eso, no solamente con quienes por su edad son niños, sino también con aquellos que son nuevos ejecutando una disciplina, trabajo o actividad recreativa, y los "adultos" se exasperan porque no avanzan al ritmo de ellos. La Biblia nos muestra qué hacer cuando nos encontramos en una circunstancia, en la que alguien que es adulto (maduro), tiene que caminar con niños, es decir, andar como Yeshúa anduvo. DESARROLLO 1) Hay que ir con lentitud. Génesis 33:12-14 Luego dijo: Partamos y marchemos, yo iré delante de ti. Pero le dijo: Mi señor sabe que los niños son delicados y que tengo ovejas y vacas que están criando, y si las fatigan, en un día podría morir todo el rebaño. Pase ahora mi señor delante de su siervo, y yo me iré con lentitud, al paso del ganado que va delante de mí y al paso de los niños, hasta que llegue a mi señor en Seír. ‫ים‬ ‫ָדִ‬ ‫ְל‬ ‫ַי‬ ‫ה‬ ‫ֶל‬ ‫ג‬ ‫ְרֶ‬ ‫ּול‬ (ULeReguel HaYeladim). Al paso de los niños, poco a poco, lentamente. Sabemos por la narrativa, que Jacob no fue a Seír, sino a Canaán, y que aunque Esaú ofreció acompañarlo, Jacob rechazó la oferta, alegando lentitud de movilidad por los niños y el ganado; quizás lo motivaba también, el no abusar de la reconciliación, y evitar cualquier incidente que pudiera revivir el resentimiento, además, recordemos que Esaú sólo venía con hombres de guerra. Cuando sales a una caminata, o a un campamento, los más fuertes tienen que acomodarse al paso de los más débiles, pues si no lo hacen, tarde que temprano, deberán hacer un alto, por haberlos agotado al marcarles un paso que no pueden sostener por mucho tiempo. Por experiencia, sé que eso genera reproches de ambas partes y conflictos que pueden evitarse, si se actúa sabiamente. En la iglesia, cuando hay personas que recientemente han nacido de nuevo, no podemos esperar que avancen al paso de quienes, en vez de conformarse con una religión, ya tienen tiempo de haber optado por tener una relación personal, cercana, íntima y de amor con EL Todopoderoso. Por esa

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Cuadernos LIRICO, 2014

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El Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (UNICEF) distingue dos modelos en la definición de <<niños de la calle>>. El primero sería el que conceptualiza que "son aquellos que pasan la mayor parte del tiempo en la calle, pero que tienen algún tipo de soporte familiar y vuelven a su casa por la noche". El segundo es aún más radical, y se refiere a los que "pasan el día y la noche en la calle y, están funcionalmente sin soporte familiar" 1 . El presente estudio está pensado precisamente desde estos últimos.

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y Adolescentes 26.061 se materializa en las políticas sociales de infancia, cuya universalización es imprescindible. Sin embargo, dicha ley encuentra sus limitaciones en el sesgo biopolítico y eonttob.dor en el que se constituyen las leyes liberales pregonando una ciudadanía virtual, enmarcada en un discurso de igualdad que se reproduce en la base de las desigualdades generadas por el capital. Es por ello que se plantea al protagonismo infantil como una matriz de pensamiento superadora, posicionando al niño como un ser político, hablante y emancipado de la apropiación del mundo adulto.

Los bebés y los niños son muy diferentes de los adultos en términos de perspectivas sociales, psicosociales, de comportamiento y médicas. Hace más de 100 años, el Dr. Abraham Jacobi, el padre de la pediatría estadounidense, reconoció la importancia y la necesidad de una farmacoterapia adecuada para su edad cuando escribió: "La pediatría no trata con hombres y mujeres en miniatura, con dosis reducidas y la misma clase de enfermedad en cuerpos más pequeños, pero… tiene su propio rango y horizonte independientes". A medida que nuestro conocimiento del crecimiento y desarrollo normales ha aumentado en las últimas décadas, también lo ha hecho nuestro reconocimiento de que los cambios en el desarrollo afectan profundamente las respuestas a los medicamentos y producen una necesidad de ajustes en las dosis dependientes de la edad.