Ideología Dominante- Veganismo

Introducción Vivimos en una sociedad en la que desde pequeños se nos enseña a comernos a algunos animales. Los cerdos, pollos, atunes y vacas son considerados alimento y esto es algo que pocos se cuestionan ya que este hábito ha estado ocurriendo desde hace varios sig-los. Crecimos en una sociedad que considera a los animales no-humanos como " recur-sos " o " cosas " para nuestro beneficio. Millones de animales no-humanos mueren cada hora al ser víctimas de nuestra ex-plotación. De acuerdo a la asociación IGUALDAD ANIMAL , es la explotación para ali 1-mentación la más representativa. Por esta razón decidí hacer este ensayo sobre el vegan-ismo, creando consciencia sobre un consumismo ético que nos haga conscientes de que todos los animales (humanos y no-humanos) somos seres vivos sintientes por lo que debemos de gozar todos del derecho a no sufrir y ser respetado. El veganismo data desde 1944, cuando el co-fundador de la British Vegan Society, Donald Watson, acuñó el término con el significado de " vegetariano que no come lácteos ". En 1951, esta sociedad expandió la definición a " el hombre debe vivir sin explotar a los ani-males ". Los veganos evitan todos los productos de animales en comida, ropa, o cualquier producto. El veganismo es una ideología, una opción moral. Existen tres argumentos principales que quiero defender a favor del veganismo: el primero es que los animales son tratados como esclavos que viven y mueren sometidos a la vol-untad de sus amos. El segundo es el mensaje anti-ético que han promovido los princi-pales productores de carne a nivel mundial haciéndonos creer que el consumo de este alimento es benéfico para la salud cuando en la mayoría de los casos es todo lo contrario. Y el tercer punto es el cuidado del medio ambiente y la responsabilidad que tenemos cada uno como habitantes del planeta por lo que debemos crear consciencia del impacto ambi-ental que tienen los productos que consumimos. Aunque el consumo de productos de origen animal pueda parecer éticamente justi-ficado por los posibles beneficios que generan para la salud del ser humano nu-igualdadanimal.org

La reflexión sobre el lugar que ocupa el animal humano en el mundo incorpora nuevas miradas que redefinen la interacción de este con su entorno. Los límites entre naturaleza, animales humanos y los otros animales, definidos históricamente desde una mirada antropocéntrica, son cuestionados. La creencia de la superioridad y distinción del ser humano en el reino animal, característica de la mirada antropocéntrica, es batallada por una sensibilidad moral nueva que confronta y redefine la interacción entre animales humanos y no humanos: el veganismo. El veganismo aparece como generador de una identidad social emergente en las sociedades occidentales que implica una actitud de respeto hacia los animales no humanos. Consiste en un firme posicionamiento ético fundamentado en la convicción de que los otros animales, al tener un sistema nervioso central similar al de los animales humanos, pueden sentir dolor, característica que los hace acreedores de respeto y consideración moral. Las personas veganas deciden conscientemente no consumir productos derivados de la explotación y muerte de los otros animales ni utilizar a estos en ningún ámbito de la vida humana. El veganismo deviene una filosofía de vida, configurada por un conjunto de prácticas integradas que un individuo abraza porque otorga forma material a una particular narrativa de auto-identidad. La propuesta es desarrollar una investigación, en clave etnográfica, sobre la existencia o no de una identidad no antropocéntrica ni especista de las personas que, adheriéndose al veganismo, se convierten en veganas y, actuando por principios, son generadoras de una acción en cadena de la cual son pioneras y que puede conducir a que progresivamente un número cada vez más crítico de individuos acompañen esa decisión.

El veganismo es básicamente un principio moral que se resume en la idea de no usar a los animales nohumanos. No usarlos para ningún propósito ni en ninguna forma. En la práctica implica dejar de participar en la explotación animal. Esto es, no consumir productos de origen animal, ya sea con fines alimenticios, para vestimenta, higiene y aseo, o entretenimiento.

Políticas de la Memoria, 2024

A mediados del siglo XX, los activistas Donald Watson, Eva Watson, Fay Henderson, Elsie (Sally) Shrigley y Leslie Cross conceptualizaron el veganismo como un principio ético capaz de esculpir una forma de vida alternativa a la construida a partir de diferentes formas de “esclavitud animal”. El veganismo, en contraste con el concepto de especismo, fue desde sus inicios una apuesta afirmativa por la constitución de nuevos modos de existencia. Con el transcurrir del siglo XX y lo que llevamos del siglo XXI, la noción de veganismo pasó de ser casi desconocida a estar presente en el lenguaje cotidiano. Sin embargo, esta generalización ha tendido a reducir al veganismo a una moral inflexible o a una identidad asentada en prácticas de consumo de productos alternativos a los de origen animal. A contracorriente, el siglo XXI también ha sido testigo de una revitalización del concepto que cuestiona ese reduccionismo y lo tiende a pluralizar. Así, actualmente se alude a los veganismos negros, indígenas, populares, (trans)feministas, crip, entre otros. El presente artículo tiene como objetivo reconstruir, de manera genealógica, ese trasegar del concepto y proponer un abordaje que esté en sintonía con las prácticas y los usos contemporáneos.

Animales Y Sociedad, 2022

CULTURAS ALIMENTARES NA AMÉRICA LATINA, 2021

La patrimonialización de la cultura alimentaria constituye una de las modalidades expresivas de un proceso más amplio que integra gentrificación, patrimonialización y turismo en las ciudades contemporáneas. A partir de la sinergia Estado/Mercado, se promueven itinerarios gastronómicos que revalorizan y exaltan el comer y la comida ‘auténticos’ a la vez que buscan proyección internacional. En esta tensión, buscamos reflexionar sobre el trabajo ideológico que performa ciertas experiencias del comer contemporáneo en tanto mercancias. Para ello, analizamos cómo gastronomía y cultura se enlazan en imágenes en tanto condición de cognoscibilidad que regula sensibilidades e interacciones. El ejercicio analítico de un producto comunicacional elaborado por el estado nacional y provincial nos revela cómo las ‘identidades’ y los ‘sabores’ objetualizados y estetizados se vuelven rentables a la vez que ocultan la conflictividad y desigualdad social.

Revista chilena de semiótica, 2020

Un pequeño paquete de salami italiano todavía yace en mi refrigerador. Unas latas de atún subsisten en el armario. Cuando las miro, ya no puedo situarlas como elementos de una cadena de pensamientos, sentimientos y acciones que me llevan del hambre a la comida. Para mí, parecen criaturas extrañas en sus envases plásticos y metálicos.

2018