Academia.edu no longer supports Internet Explorer.
To browse Academia.edu and the wider internet faster and more securely, please take a few seconds to upgrade your browser.
…
11 pages
1 file
Al aproximarnos a la figura y la obra de Andrés Laguna (Segovia, 1499/1510? -Guadalajara, 1559 se nos presenta con toda brillantez un hombre del Renacimiento. Ciencia y humanismo son, sin duda, el impulso que mueve la obra de Laguna. Su interés por el hombre desde una perspectiva humana, no deja al margen la religión en su función redentora. En el retorno a los clásicos trata de elaborar el pensamiento científico desligado de la perspectiva teológica. Tres facetas nos ayudan a conocer su proyección científica y humanista: su variada obra escrita, su pensamiento erasmista y su manifiesta vocación europeísta. Laguna, hombre del Renacimiento, es también el hombre para Europa, muy identificado con el sentido imperial de Carlos V, desde un profundo amor a España y a su ciudad natal, Segovia. Es el segoviano, el español, que se proyecta en Europa.
Este ángel flautista fue tallado en bronce, en el siglo VIII, en una de las caras de una linterna votiva colocada en el camino que lleva al templo de Todai, en ia ciudad japonesa de Nara. Esta ciudad fue la primera capital del Japón y en ella. M culminó, de mediados del siglo Vil a fines del siglo VIII, el arte del país, alcanzando Foto © Erich Lessing -Magnum
Debate en la Universidad de Humanidades de Albacete, sesión 29 abril 1999. Tema tradicional que surge fundamentalmente con la separación de Kant entre Conocimiento y Saber. Las Ciencias Sociales y Humanas surgen a finales del siglo XIX y se produce la gran escisión entre Ciencias Naturales y Ciencias del Espíritu. El problema se centra en las valoraciones asociadas. Para algunos -filósofos básicamente como Hegel, Ortega y Gasset...- las ciencias naturales por su positivismo asociado dejan a un lado los aspectos más humanos del hombre; el científico pasa a considerarse el máximo representante del hombre masa, sin atributos... Si se marginan esas valoraciones pueden estimarse las Ciencias Sociales y Humanas del mismo rango que las disciplinas propias del campo de las Ciencias Naturales salvando sus diferencias metodológicas. Y todas son construcciones de la mente humana, son todas igualmente humanas.
En este trabajo se presentan los resultados obtenidos a través del análisis cuantitativo y de dispersión espacial sobre el registro bioarqueológico del sitio Laguna Tres Reyes 1 (partido de Gonzales Cháves). Los fechados radiocarbónicos realizados sobre restos humanos y faunísticos ubican cronológicamente al sitio en el Holoceno tardío. Ambos tipos de análisis se realizaron con el fin de obtener valores útiles para examinar la integridad anatómica del conjunto de entierros y los porcentuales de supervivencia de cada unidad ósea; así como para evaluar las distancias recorridas por los huesos desplazados, establecer las relaciones anatómicas con las partes esqueletarias correspondientes y reconocer si existe una tendencia en la clase de huesos dispersos. Los resultados obtenidos contribuyen a la reconstrucción de la trayectoria tafonómica recorrida por estos restos óseos humanos. En referencia a los índices cuantitativos, se concluye que el conjunto de entierros humanos de TR1 presenta un alto grado de representación diferencial en relación con la integridad esqueletal. Respecto del índice de supervivencia, sólo el 35% del total de huesos esperados está presente en esta muestra. Este bajo porcentaje indica la acción de uno o más factores tafonómicos que inciden en la configuración actual de este registro. No obstante este alto índice de pérdidas de partes esqueletarias, debe destacarse la excelente preservación del tejido óseo en la gran mayoría de los huesos.
Letras Históricas, 2012
Reseña del libro Otras armas para la Independencia y la Revolución. Ciencias y humanidades en México, coordinado por Rosaura Ruiz, Arturo Argueta y Graciela Zamudio (México, fce–unam–uas–umsnh–hch, 2010, 311 pp).
en Rogelio Laguna (coord.), Filosofía de la historia : una introducción iconoclasta , México, Asociación Interdisciplinaria para el Estudio de la Historia de México, A.C., 2022. ISBN: 978-607-99719-2-2
ada época pasa al recuerdo de los ciudadanos caracterizada por alguna peculiaridad que la identifica. Nuestro tiempo hará historia al definirse probablemente como aquel que perdió el sentido ético de los acontecimientos científicos. La experiencia nos confirma que cada vez es más frecuente que los profesionales sanitarios interpreten una actividad asistencial o investigadora como correcta, al valorar exclusivamente el rigor científico con el que se ejecuta o se diseña, de modo que se olvida cualquier otra consideración derivada de la relación interpersonal inherente al acto médico. Se olvida que todos los actos médicos tienen dos dimensiones que conviene identificar con el máximo rigor y precisión: el aspecto técnico y la vertiente ética o moral. No hay duda de que para ser unos profesionales excelentes, nuestras intervenciones sanitarias deben ser evaluadas en estos dos sentidos. Es bien sabido que la perfección técnica se valora a través de unos estándares de calidad fundamentados en un riguroso análisis científico; sin embargo, la perfección ética es siempre un asunto extracientífico, ya que la bondad o maldad de cualquier acción viene definida por aspectos inmateriales, axiológicos, que escapan a la metodología experimental del ámbito de la ciencia. C Una premisa fundamental para entender la importancia de estos hechos es aceptar que en las relaciones humanas no existen actos éticamente neutros. La práctica sanitaria es una actividad hecha por personas y para personas; es una ciencia humana que, al ser interpersonal, siempre tiene una dimensión ética. No existe la neutralidad. Podrán declararse diversos grados de trascendencia y valoración ética; pero, en cualquier caso, siempre la relación interpersonal es éticamente valorable. La investigación con seres humanos, los transplantes de órganos, la manipulación del código genético, la fecundación in vitro, la prolongación artificial de la vida y otras posibilidades de la técnica actual, han suscitado problemas desconocidos hasta ahora. La necesidad de explicarlos adecuadamente y resolverlos de forma lúcida, ha hecho aparecer, en nuestros días, con fuerza comparable a la magnitud de las dificultades, una disciplina nueva, la Bioética, centrada en el «estudio de los problemas éticos que plantea el desarrollo de las diferentes ciencias y tecnologías que pueden aplicarse -y por tanto influir o modificar-la vida humana» 1 .
Ciencia - Academia Mexicana de Ciencias, 2013
Loading Preview
Sorry, preview is currently unavailable. You can download the paper by clicking the button above.
ARGUTORIO. REVISTA CULTURAL, 2018
Preámbulos de la esperanza. Reflexiones en torno al humanismo cívico de Alejandro Llano, 2005