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Memorias de un viaje de egresado

Abstract

Todo empezó una tarde. Estábamos en el patio de mi casa esperando junto a un amigo mío, faltaba un día para el viaje de egresado. Esperábamos hasta que apareció Ramón un amigo de mi hermano. Traía algo parecido a un diario y su mochila. Lo hicimos pasar a casa, mamá y papá se habían ido a comprar las últimas cosas que tenía que conseguir para mi viaje de egresado. Ramón nos saludó y se sentó junto a mi hermano. Mi hermano era casi como un guía, gracias a el había cultivado el gusto por leer, siempre me recomendaba libros de la biblioteca o me prestaba de los suyos. Recuerdo que mi hermano nos habló a mí y a Fede.-Mañana se van de viaje de egresado y Ramón y yo tenemos el regalo perfecto para ustedes pero deben aceptar las responsabilidades. Mañana se van de gira por la playa pero antes van a probar mariguana, pero no cualquier porquería que anda en la calle sino flores recién cosechadas. También les trajimos y espero que esto les interese, una revista y la prensa obrera-nos miraba a los ojos fijamente sin perder su sonrisa-ustedes deben ser gente informada.-Ramón dejo el diario sobre la mesa y saco un paquete de cigarrillos que nos regalo junto con una revista THC de las cuales ya había oído hablar. Abrí la caja y en ella encontré cigarrillos y tres porros armados. Sabía lo que eran porque había escuchado hablar de ello a mi hermano a veces.-Mañana se van a la playa, quizás tengan su primer beso sino lo han tenido, quizás le toquen el culo a una chica de su edad, mañana tienen la primera oportunidad de viajar junto a sus amigos y disfrutar del mar. Hoy vamos a festejar con un porro y una cerveza antes de que vengan los viejos. Me lanzo un encendedor y me pidió que prendiese uno. Yo me sentía intrigado, no sabia que este día iba a llegar tan repentinamente. Fede y yo nos miramos, y sin que me ganara el pulso prendí mi primer caño, a medida que fumaba sentía el gusto dulce de las flores en mi boca, mi hermano me decía que tratara de aguantar al máximo el aire en los pulmones y que luego se lo pasara a mi amigo para que todos podamos fumar. Mi hermano se levanto y puso música desde la computadora, escuchábamos Las Pelotas. Sentía que se había reducido parte del peso de mi cabeza y me sentía relajado junto con la música, el churro siguió girando hasta que llego a mi hermano que fumo rápido y nuevamente nos hablo.-Ustedes tienen que ser personas informadas y quizás esto nunca podría haber pasado pero ayer, mientras pensaba en todas las cosas que hice cuando me fui de viaje de egresado, con Ramón, nos dimos cuenta de que quizás lo podríamos haber pasado mejor…-fumaba y se detenía mientras retenía el humo, se percato de que nos faltaban la cerveza y me devolvió el caño para que siguiera fumando-Voy a comprar las cervezas al quiosco de la esquina, ustedes espérenme acá con Ramón. Y salió. Ramón también se estaba dejando llevar por la música y el día que estaba un poco gris y nublado, incluso llovía un poco. Ramón me pidió un cigarrillo de regalo de los que tenían en la caja y se lo prendió. Comenzó a hablarnos.