Academia.edu no longer supports Internet Explorer.
To browse Academia.edu and the wider internet faster and more securely, please take a few seconds to upgrade your browser.
…
6 pages
1 file
La ciencia moderna de la economía tiene su origen en el conjunto de ideas expresadas por el escocés Adam Smith en su libro investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones, publicado en 1776, mediante el cual estableció los fundamentos de lo que más tarde consideraría la "escuela clásica" de esa disciplina.
Uno de los objetivos de la explicación de las fluctuaciones económicas es poder predecir las futuras oscilaciones del sistema económico y específicamente las crisis, la caída del empleo y el crecimiento (Giudice, 1993). Es por este motivo que la literatura existente sobre este tema es amplia y aún hoy en día sigue en boga. El debate acerca de la explicación del ciclo económico y de las crisis es aún más antigua que las doctrinas económicas expuestas en este capítulo. Las teorías del ciclo económico tienen su origen a finales del siglo XVIII e inicios del siglo XIX (véase Apéndice 3. Teorías del ciclo económico: antecedentes y clasificación). La economía clásica predominaba y los primeros intentos de explicar las fluctuaciones económicas se contrastaban con el sistema que postulaba la idea de un mecanismo armónico del organismo económico. Las primeras explicaciones de las crisis fueron las teorías utopistas que criticaban al sistema capitalista y que veían un sistema en constante crisis de sobreproducción con disminución de precios, pánico bursátil y crisis bancaria. Más adelante, a principios de la segunda mitad del siglo XIX, apareció el marxismo. Con Marx por primera vez aparece un análisis completo de las crisis, considerándolas como un elemento inherente al sistema capitalista. A partir del siglo XX comenzaron a surgir cada vez más teorías del ciclo económico. Tal es el caso de la teoría de sobreinversión de Spiethoff y sus variaciones en Schumpeter y Aftalion; las teorías monetarias (reafirmando la teoría neoclásica), tales como la explicación de Hawtrey y Hayek; y luego de la Gran Depresión, la teoría keynesiana, la cual se considera que tiene características de las teorías del subconsumo, de las psicológicas y de la sobreinversión. A partir de Keynes 1
Contribuciones a la economía, 2011
Resumen El presente trabajo constituye una aproximación a las teorías acerca del desarrollo económico y el subdesarrollo. Hemos, no obstante, analizado algunas de las principales teorías acerca del Desarrollo, haciendo especial hincapié en el enfoque marxista sobre el mismo, y si bien es cierto que no existe una teoría del desarrollo en Marx, el análisis concienzudo de su doctrina económica nos proporciona los elementos suficientes para aseverar que en última instancia este tópico no pasó desapercibido ante los ojos de Marx en su análisis del modo de producción capitalista y por ende nuestro aporte se basa en demostrar que la lectura de su teoría económica nos conduce a la interpretación de un Enfoque Marxista sobre el Desarrollo. Palabras Clave: Teoría; Desarrollo; Enfoque. Abstract This work is an approach to the theories of economic development and underdevelopment. We, however, analyzed some of the major theories of development, with particular emphasis on the Marxist approach on it, and if it is true that there is no theory of development in Marx, the thorough analysis of its economic doctrine provides sufficient grounds to assert that ultimately this topic has not gone unnoticed in the eyes of Marx's analysis of the capitalist mode of production and hence our contribution is based on demonstrating that the reading of his economic theory leads to the interpretation of a Development Marxist approach.
El carácter de la vida económica actual es la fluctuación. La actividad económica sube, a veces baja. Desde hace dos siglos, más o menos, es lo que ha venido sucediendo con la economía de los países industrializados, unos más fuertes, tonalidades más débiles en otras.
Esta teoría fue en base a las relaciones económicas.
La teoría económica tiende a suponer la existencia de comportamientos simétricos. Esta inclinación se debe, según Scitovsky, a la predilección de los economistas por la elegancia matemática. Sin embargo, algunos de los fenómenos centrales de la realidad económica contemporánea se caracte-rizan por ser asimétricos. Tal el caso de la flexibilidad sólo ascendente de los precios o el hecho de que las políticas monetarias tienden a generar la caída del producto cuando tienen signo contractivo, pero elevan los pre-cios cuando adquieren el sesgo contrario. En verdad estos ejemplos no son sino casos singulares —aunque sin duda los más notorios— de todo un conjunto de comportamientos asimétricos que se verifican en la realidad empírica contemporánea. En el presente trabajo vamos a señalar algunos de ellos, puntualizando cómo el supuesto de simetría lleva a la teoría a derivar predicciones que no se ajustan a los comportamientos verificados empíricamente.
ay algo nuevo en la teoría del crecimiento? Es la principal pregunta que impulsó la investigación y elaboración de este capítulo. Debe haber algo nuevo, diferente a lo esbozado hace doscientos años por los clásicos de la economía; el mundo capitalista es el mismo en rasgos generales pero a la vez ha cambiado mucho; es diferente el capitalismo campesino-artesanal-manufacturero circunscrito a la Inglaterra de fines del siglo XVIII, al capitalismo industrial, de servicios y globalizado de nuestra época. Las investigaciones y teorizaciones de los últimos años deben arrojar nuevos elementos para comprender las fuerzas motrices que impulsan el crecimiento y desarrollo de los países a largo plazo.
El tema de este libro es el crecimiento de la producción por habi-tante. Lo que sigue no depende de las definiciones precisas de esos tér-minos, aunque puede ser útil hacer algún comentario acerca de su signi-ficado. En primer lugar, deberá notarse que nuestro tema es el crecimien-to, y no la distribución. Es posible que crezca la producción y, sin embargo , que la masa del pueblo se empobrezca. Tendremos que considerar la relación entre el crecimiento y la distribución de la producción, pero nuestro interés primordial estriba en analizar el crecimiento y no la dis-tribución. En segundo lugar, nuestra preocupación principal no es el consumo sino la producción. La producción puede aumentar y el consumo dismi-nuir, ya sea porque aumente el ahorro, o porque el gobierno utilice una mayor proporción del producto para sus propios fines. Tendremos que considerar las relaciones entre producto, consumo, ahorro y activiclad gubernamental, pero lo haremos desde el punto de \ista del crecimiento del producto, y no del crecimiento del consumo. Dejamos la definición del producto a los teóricos del ingreso nacio-nal. Se presentan problemas difíciles de números índices al comparar la producción de un año con la de otro. Existe el difícil problema de deci-dir que es lo que debe considerarse como producto y qué como costo de producción. ¿Deberá considerarse un aumento de los gastos de distri-bución al menudeo, o de publicidad, o de transportes, como un aumento de la producción, o meramente como el costo de una mayor cspeciali-zación? Si el trabajo que anteriormente hacía el propio consumidor por sí mismo (v. gr. confección de ropa) se transfiere ahora a las fábricas, ¿constituye esto un aumento de la producción? Mencionamos estos pro-blemas para quedar a salvo de los críticos pedantes que pudieran creer que los ignoramos. Empero, no necesitamos resolverlos, puesto que nuestro interés no estriba en la medición del producto, sino en su cre-cimiento. Para los propósitos de este libro es suficiente cualquier defini-ción congruente de producción de bienes y servicios. Esta defmieión, empero, guarda relacié)n con bienes v servicios-producción "económica", de acuerdo con el \íejo significado de la * Primer capitulo del libro de \\". Arthur Lewis, Teoría de/ dcsanoUn económico que pu-blicara próximamtntc el I'V)ndr) di: C^^ultiini lúniuiniKa. I ,a trjduccirní es de Rodolfo StiU ciiba£;c!i \ órcar Sobcrón. 454
Tratamos de discutir, de un modo breve e introductorio, el lugar que ocupó la economía en la gestación de la Teoría Crítica del siglo XIX. El particular modo a través del cual se articuló filosofía, sociología y economía en una perspectiva que abrió el cauce a reflexiones interdisciplinarias con propósitos prácticos. Asimismo, queremos acercarnos a las variaciones que tuvo en la Teoría Crítica, el acento o centralidad asignada a la economía. Para ello se tomará en cuenta la génesis de la denominada Escuela de Frankfurt, su desarrollo en el exilio y retorno en la postguerra del ’45 y, finalmente, algunas posturas sostenidas en las posteriores generaciones que se desarrollaron en torno al actual Instituto de Estudios Sociales de la Universidad de Frankfurt.
Loading Preview
Sorry, preview is currently unavailable. You can download the paper by clicking the button above.