Osorio HBR El Arte de Fallar

Inédito (Ensayo para curso doctoral)

Prof. Lilliana Ramos-Collado, Ph.D.

Teoría y Realidad Constitucional, 2023

1972

El. sistcilia de investigación establecido, jan~ds puesto en duda de modo abierto Iiasta el presente, propugtia [ 1 9 esta visión de la pintura mural catalariii del siglo xxx:

En cada ciudad hay lugares tranquilos, apacibles y seguros, porque "los muertos no hablan" y "están quietitos" en sus tumbas. Son pequeños rincones de nuestra ciudad capital, donde podemos correr para escapar del caos continuo, del ajetreo constante al que nos vemos sometidos, en el que nos vemos envueltos: los cementerios. Si bien todos parecen cubrirse con las mismas connotaciones negativas, para la mayoría de la gente, uno de ellos escapa, en nuestro país, a toda clasificación ordinaria: el Cementerio Central.

Resumen: Esta investigación trata el nacimiento del arte asirio, que ocupa aproximadamente del año 1350 al 1000 A.C, su principal tema son los de tema religioso. Abstract: This research works about the first moment of the asirian art, between 1350 up to 1000 B.C, the main toppic is the religious representations.

Explorador

Barrameda es la calle Bolsa, aunque en realidad son tres calles en una, de ahí su longitud. Hoy día no lo es tanto pero antiguamente era una calle de contrastes pues si el primer tramo de la calle resultaba ser de lo más elegante y señorial, el segundo y el tercero eran de lo más humilde y popular. En mis primeros años íbamos, mis hermanos y yo, a una miga que se hallaba al final del segundo tramo, lo que llamábamos el colegio de Conchita, y recuerdo perfectamente, cómo, desde la plaza del Cabildo, pasábamos de una calle limpia y silenciosa, llena de ricas y elegantes mansiones, a una calle pobre y bulliciosa, llena de casas de vecinos. Ya, en el siglo XVII, la calle se dividía en tres tramos con un nombre distinto para cada uno de

Boletín Cultural y Bibliográfico, 1994

(No. 38885). , contemporáneo Alvarez Lleras. Así empieza Osario-quien desde pequeño hace lo imposible por asistir a los pocos espectáculos de la pequeña aldea que era Santafé de Bogotá-a incursionar en los procesos de la literatura: pequeñas obras teatrales, novelas adaptables, poemas y zarzuelas. Tras la generación del , Centenario, Osorio y Alvarez Lleras, innovaron, proponiendo las 0fras ya no en verso sino recurriendo a la prosa lisa. La dramaturgia entonces se mueve de manera más libre en un típico esquema costumbrista, romántico, basado en las situaciones del campo, las tentaciones de la carne, la moral. Temas que algunas veces se entrelazaban con severas críticas a la sociedad. Esta clase de teatro encajaba con el gusto del público de los teatros Municipal y Colón, y enfurecía al grupo de intelectuales que en 1925 se agruparán para bautizarse Los Nuevos (en contra de la generación del Centenario): León de Greiff, Jorge Zalamea.