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Las opiniones expresadas en esta revista son responsabilidad de sus autores.
Desde mediados del Siglo XX, han surgido corrientes contra-culturales en el interior de las sociedades occidentales que han buscado combatir al sistema capitalista mediante distintos métodos, desde el hippismo en adelante, éstas corrientes se erigieron como contrarias a la logica del mercado y la sociedad de masas. En el presente trabajo se expone el desarrollo de estas corrientes contra-culturales a lo largo de la historia, sus distintas características y los componentes que comparten entre sí, analizados desde la perspectiva de autores referentes en la temática, como así, de expertos en Sociología e Historia. Por otro lado, se presenta cómo el mercado, mediante los aportes de disciplinas como el Marketing y las Relaciones Públicas, ha logrado insertar a estas contraculturas dentro de la lógica mercantilista generando una contradicción en la ideología de las contraculturas abordadas, surgida de la relación entre estos actores.
Cyber Humanitatis, 2009
¿A qué se denomina contracultura? Generalmente se acepta, por ser de uso común, sobre todo en las últimas décadas, que con este término se hace referencia a todas aquellas tendencias y formas sociales que chocan con lo establecido en una sociedad. Si consultamos lo que figura en el Diccionario de la Lengua Española hallamos que este artículo ha sido recientemente enmendado y que dicha palabra se ha gestado como calco del inglés: Counterculture 1. Según la Real Academia Española sirve para denominar como tal a un movimiento social surgido en los Estados Unidos de América en la década de 1960, especialmente entre los jóvenes, caracterizado por rechazar el establishment. Pero también con él se remite a un conjunto de valores que caracterizan a ese movimiento y, por extensión, a otras actitudes de oposición al sistema de vida vigente 2. Desde esta perspectiva podemos afirmar que el concepto de "contracultura" está signado por lo "temporal", de tal manera que esa conciencia de "vigencia", a la que alude el diccionario, no hace más que poner el énfasis en ciertas leyes, ordenanzas, estilos y costumbres que están en vigor-y observancia-en un período determinado. Esto nos lleva a subrayar, "observando" los cambios ocurridos en la sociedad, que lo que en un momento determinado se considera "contracultural" podrá luego ser admitido, integrándose así en la cultura oficial. Pensemos, por citar sólo unos pocos ejemplos, y yendo más atrás en el tiempo, en la bohemia de aquellos "decadentes" años parisinos y los llamados poetas malditos del siglo XIX, la generación beat, el movimiento hippie o la ideología punk del siglo XX, todos ellos concebidos en su día como tendencias transgresoras, forjadoras de una identidad inconformista que atentaba contra el orden social y, sin embargo, con el transcurrir de los años han llegado a transformarse en moda, en la mayoría de los casos "fagocitados" por el mercado. Un mercado capitalista que antes que "crear vínculos con el Otro, convierte al Otro en mercancía; y en lugar de servir para pensar(se) constituye un dispositivo de imaginación de la infinitud y eterna renovación vampírica del capital" 3. Tal es lo que ha ocurrido con la música, por ejemplo con el "rock duro", más tarde rebautizado como grunge, etiqueta más comercial que, en parte, fue propiciada por el cantante de Nirvana, Kurt Cobain, un punk, un rockero alternativo que, no obstante, vendió millones de discos. Tal vez ésta fuera la causa que lo llevó al suicidio: "prefirió abandonar (sin haberse «vendido al sistema») antes que perder lo que le quedaba de integridad" 4. La polémica y controvertida obra de los canadienses Joseph Heath y Andrew Potter, Rebelarse vende. El negocio de la contracultura (2005)-The Rebel Sell. Why The Culture Can´t Be Jammed (2004), en su versión estadounidense Nation of Rebels: Why Counterculture Became Consumer Culture (2004) 5-, insiste precisamente en marcar las diferencias que una época y una estética imponen sobre otra. En este punto dichos autores recuerdan cómo la primera generación de hippies trató por todos los medios, incluso físicos, de distanciarse de la década anterior, la de los años cincuenta: Los hombres se dejaron barba y pelo largo, negándose a llevar chaqueta y corbata; las mujeres empezaron a llevar minifalda, tiraron a la basura todos los sujetadores y dejaron de usar maquillaje, etcétera. Pero esas prendas y estilos de vestir tardaron poco en saltar a la publicidad y los escaparates de las tiendas. Los grandes almacenes empezaron a llenarse de colgantes con el signo de la paz y collares largos. En vez de considerar a los hippies como una amenaza para el orden establecido, el "sistema" había sabido ver sus posibilidades comerciales. Y
Desde el surgimiento de la palabra juventud en los años 60 como derivación de la Segunda Guerra Mundial, así como de grupos "contraculturales", disciplinas académicas como la Psicología, la Sociología y la Antropología han dado distintas interpretaciones sobre por qué los individuos suelen concentrarse en grupos y del por qué de sus manifestaciones. Este trabajo se centra en las posturas que han derivado de la Sociología a través de un recorrido teórico e histórico, así como de sus principales aportes y limitaciones. Este artículo pretende responder a la pregunta: ¿qué tan útil es clasificar desde la academia a los grupos "contraculturales"?
2006
Since the birth of the avant-garde movements of the 20th century, there has been a mutually fruitful influence between the avant-garde and advertising. It is obvious that the avant-garde has a need for differentiation which it achieves through a great creative vitality. This ability to use differentiated creative language, the use of cuttingedge concepts to attract attention, is what makes avantgarde language and latterly, the esthetic trends of countercultural and "anti-system" movements interesting for advertising. The 60s, characterized by the definitive enthroning of creativity in the advertising message, remind us of the maturity of the sector and the ability of ads to become the principal icons of popular Western culture, in great part thanks to the countercultural language. Critical models are turned into trends which the cool-hunters recognize and adapt to brands of music, sports clothing, design, decoration and entertainment. The dynamic is unstoppable. The acceleration of a globalized world facilitates the appearance of new countercultural forms which, simultaneously, become fashionable.
La Contraloría General de la Republica como organismo de control La Constitución Política de Colombia de 1991 es la actual carta magna de la Republica de Colombia. De acuerdo a esta, en los artículos 117-119 del Titulo X, se considera que los organismos de control son dos, uno es el Ministerio Público, cuyo nombre mas común es Procuraduría General de la Nación y la defensoría del pueblo que esta adscrita a ésta; el otro órgano es la Contraloría General de la Republica. El Ministerio Público integra el Estado, pero no depende de ninguna de las ramas constitutivas para realizar sus funciones, y esta encargado principalmente de ejercer la representación de la sociedad ante las demás manifestaciones del Estado y actuar solamente cuando aparece comprometida la causa publica como motivo de la aplicación de la ley.
Compilación publicada en forma de policopiado que reune dos ensayos sobre la contracultura en Bolivia. Fue re editada el 2015 por la editorial Perro Calato de la ciudad de Tacna-Perú
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Imago mundi, 2021
Analéctica, 2013
Clivajes. Revista de Ciencias Sociales, 2018