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Iniciativa Socialista, nº31, Octubre 1994. El artículo "The Agonies of Liberalism: What hope progress?" fue publicado originalmente por New Left Review, nº 204. Traducido al castellano por Iniciativa Socialista y publicado con autorización de NLR y del autor. La traducción ha sido revisada y corregida por el propio profesor Wallerstein.
Despues del liberalismo - Immanuel Wallerstein
LOS COLMILLOS DEL CAPITALISMO, 2021
A través de la historia hemos visualizado la manera en la que el capitalismo se ha perpetuado como una forma de masacrar los ideales que por naturaleza pertenecen al hombre, pero no lo voy a mencionar como una unidad aislada de la racionalidad y los pensamientos individuales que, como sabemos, cada persona debería poseer, pero el “deber” también es cuestionable. Por ello nos adentramos en el siguiente ensayo que a todas luces pretende contemplar en resumidas paginas la significancia y el simbolismo del mundo en el que habitamos, en el que la utopía ya no es venidera, solo queda una distopía que nos embarga, gracias a Manuel Chaparro y su espléndido libro “Claves para repensar los medios y el mundo que habitamos: La distopía del desarrollo”.
VII. LOS ORIGENES DEL CAPITALISMO INDUSTRIAL Y DE LA GRAN INDUSTRIA 1. LA EXPANSION COMERCIAL Y LA REVOLUCION INDUSTRIAL Los capítulos anteriores han puesto en claro la función esencial desempeñada por el capitalismo comercial. Una de las grandes contribuciones de éste a la vida económica fue el impulso que dio a la gran transformación industrial, que sobrevino en la segunda mitad del siglo XVII y que conocemos con el nombre de "Revolución Industrial". Ésta surgió en Inglaterra y de aquí se extendió a Francia. Inglaterra se enriqueció ente todo por el comercio marítimo en grande; siguió el ejemplo de Holanda cuyo comercio de comisión le valió la fortuna. La evolución de Francia, fue más tardía y menos intensa; aquí la Revolución Industrial sólo se producirá mucho tiempo después de la transformación de Inglaterra. Paul Mantoux, en su excelente Revolución Industrial en el siglo XVIII, demuestra que la fortuna Industrial de Lancashire fue debida sobre todo a los progresos del puerto de Liverpool, el cual en un principio se dedicó casi exclusivamente al comercio colonial: su importación de algodón hizo que la región de Manchester se convirtiera en el centro de la industria algodonera. El mismo autor insiste con razón sobre la influencia que tuvo el mejoramiento de las vías internas de comunicación sobre el progreso industrial. En Inglaterra una red de canales y caminos se extendía rápidamente. Pero ésta pareció haber sido una influencia menos importante, pues Francia también construyó caminos en gran escala en el siglo XVII y sobre todo en el siglo XVIII. Está claro que este mejoramiento contribuyó a transformar toda la vida económica de Francia. Pero el superior comercio marítimo inglés nos indica la razón por la cual la Revolución Industrial en este país fue espontánea, mientras en Francia la introducción del maquinismo y la creación de la gran industria bajo el antiguo régimen fueron sobre todo obra del gobierno. 1 El comercio se consideraba de tal modo la fuente de la actividad industrial que en los siglos XVII y XVIII la palabra comercio designa tanto a la industria como al comercio propiamente dicho. La misma observación es aplicable a la palabra inglesa trade. Notemos, además, que en aquella época no era el productor industrial quien solicitaba pedidos, o se esforzaba por ajustarse al gusto de la clientela: ésta era tarea del comerciante al por mayor, del exportador. Magon de la Balue, armador de Saint-Malo, que hacía sus pedidos de seda a los comisionistas de Lyon, no cesaba de quejarse de la fabricación defectuosa, de los engaños de los fabricantes y de su poco empeño para satisfacer a la clientela. Y en Lyon la fabricación ya estaba controlada por los comerciantes. No hay que olvidar, sin embargo, que la industria misma con contribuyó, en cierto modo, a la acumulación de capitales. Así en Inglaterra la industria de lana y especialmente la exportación de telas transformó a este país en una gran potencia marítima. En muchos oficios bastantes maestros se enriquecieron lo suficiente para poder diferenciarse de sus compañeros y ser algo así como empresarios capitalistas. Este es un hecho que puede observarse en todos los países; pero que Unwin ha señalado especialmente en Inglaterra en su obra The Industrial Organization in the XVIth and XVIIth Centuries. 2. LA INDUSTRIA RURAL Y DOMÉSTICA El dominio efectivo del capitalismo comercial sobre la producción de manufacturas fue posible debido a la industria rural y doméstica, fase ésta de la evolución industrial que caracteriza la historia económica de todos los países de la Europa occidental. En los Países Bajos, como lo ha demostrado Pirenne en su Historia de Bélgica, la industria rural presenta en el siglo XVI una notable extensión y abarca muchas producciones que, antes se limitaban a las 1 Sobre este punto véanse las interesantes observaciones de Charles Ballot, con referencia especial a la industria de la seda (L´introduction du machinisme, Paris, 1923, pp. 300 ss.)
• Macrofilosofia: según la definición del Prof. Gonçal Mayos son los estudios de los procesos, estructuras y sistemas sociales, económicos de largo alcance significativo y temporal (industrialización, revolución) y de los grandes conceptos agregados significativos (mentalidades sociales, grandes líneas culturales…). • Tiene una perspectiva transversal, multidisciplinar (filosofía, psicología, sociología, economía, etc…) y holística por vocación. • Es un retornar a la episteme (filosofía) griega como saber omnicomprensivo al servicio del conocimiento. • Permite entender de forma multidisciplinar cual es la lógica de la fase actual del Capitalismo como concepto y proceso agregado de larga duración a través de la utilización de un modelo de análisis. El Capitalismo no puede ser analizado sólo desde una perspectiva economicista.
Cuando acepté escribir este libro, recibí, por casualidad, una invitación de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander, España, para dar un seminario de verano sobre "análisis de sistemasmundo". El curso consistiría en cinco conferencias. Los participantes eran en su mayoría alumnos graduados y profesores jóvenes de universidades españolas, quienes, en su mayoría, habían tenido escaso contacto con el análisis de sistemas-mundo. Eran alrededor de cuarenta. Aproveché así la ocasión para presentar una primera versión de los cinco capítulos de este libro. Y me he beneficiado por los comentarios recibidos. A ellos les agradezco. Cuando terminé de escribir el borrador de este libro, le pedí a cuatro amigos que lo leyeran y criticaran. Estos amigos son personas en cuyo juicio como lectores y experiencia docente confío. Pero todos tenían cierto grado de participación e interés en el análisis de sistemas-mundo. Esperaba por tanto obtener una variada gama de reacciones, y eso fue lo que sucedió. Como es el caso con un ejercicio semejante, les estoy agradecido por rescatarme de zonceras y pasajes oscuros. Me ofrecieron sus avezadas sugerencias, las cuales incorporé. Pero, por supuesto, persistí en mi opinión acerca del tipo de libro que yo consideraba más útil escribir, y los lectores merecen mis disculpas por ignorar parte de sus sugerencias. Así y todo, el libro es mejor gracias a las cuidadosas lecturas de Kai Erickson, Walter Goldfrank, Charles Lemert y Peler Taylor.
Nomadas, 2006
Para entender el pensamiento "utopístico" de Immanuel Wallerstein primero es necesario diagramar un breve recuento de su perspectiva teórica, mejor conocida como "sistema-mundo". No pretendo aquí una síntesis exhaustiva de esta perspectiva sino mencionar aquellos aspectos relevantes a nuestro tema, para luego exponer el pensamiento de Wallerstein con respecto al fin del capitalismo histórico y la transición hacia un nuevo sistema-histórico. Palabras clave: sistema-mundo, utopística, Immanuel Wallerstein. Para entender o pensamento "utopístico" de Immanuel Wallerstein, primeiro é preciso diagramar uma breve recapitulação de sua perspectiva teórica melhor conhecida como "sistema-mundo". Não pretendo aqui realizar uma síntese exaustiva desta perspectiva senão mencionar aqueles aspectos relevantes ao nosso tema, para então expor o pensamento de Wallerstein com respeito ao fim do capitalismo histórico e a transição em direção a um novo sistemahistórico. Palavras chave: sistema-mundo, utopística, Immanuel Wallerstein. In order to understand Immanuel Wallerstein's "utopistic" thought, it is necessary, first, to make a brief account of his theoretical perspective which is better known as "world systems theory". Here, I do not try to make an exhaustive synthesis of this perspective but to mention those aspects more important, and, then, to expose Wallerstein's thought with respect to the end of the historical Capitalism and the transition towards a new historical-system.
De familia judía austriaca que emigró a Alemania y luego a Estados Unidos, nace en 1930 en Nueva York. Estudios en la Universidad de Columbia donde se gradúa en 1951. Obtuvo la maestría en 1954 y el doctorado en 1959. Profesor de sociología 1976-1999; director del Centro Fernand Braudel de estudios económicos, sistemas históricos y civilización; Director de estudios asociados en la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales en París; Presidente de la Asociación Sociológica Internacional 1994-98 y Presidente de la Comisión Gulbenkian para la restauración de las ciencias sociales.
Nuestra Bandera, 2021
En el verano de 1991, Edward Ashod Tiryakian publicaba uno de sus artículos más conocidos, «Modernisation: Exhumetur in Pace (Rethinking Macrosociology in the 1990s)». El provocativo título hacía una burlona referencia a un popular texto de Immanuel Wallerstein en el que el neoyorkino invitaba a superar la vetusta teoría de la modernización, aquella que, con distintas variantes, había predominado desde los mismos comienzos de las ciencias sociales y por la que se presuponía que todas las sociedades debían pasar por las mismas fases evolutivas para alcanzar el desarrollo. Esta perspectiva, afirmaba Wallerstein, olvida que el desarrollo no es lineal, sino que depende de la situación de cada país en un sistema de jerarquía global planetario, el capitalismo, y que incluso los países centrales no dejan de deber su posición de privilegio a una coyuntura evolutiva de dicho sistema, por lo que tampoco tienen por qué resultar ejemplares para los demás. Con la Unión Soviética en pleno proceso de derrumbe y el Muro de Berlín caído apenas dos años antes, Tiryakian criticaba en su artículo tanto a Wallerstein como a otros teóricos de la dependencia, e invitaba a recuperar una renovada y matizada teoría de la modernización que sirviese como guía para impulsar el desarrollo social y económico una vez fracasada la alternativa socialista. Son muchos los méritos de un gran científico social como Tiryakian y, sin duda, su propuesta contiene elementos valiosos. Con todo, treinta años después resulta inevitable mirar a aquel texto con el escepticismo que nos da un presente preñado de incertidumbre. Con la larga lista de problemáticas que amenazan la estabilidad de nuestro mundo, aquel desmedido optimismo de la inmediata Posguerra Fría, por el que parecía que habíamos llegado al fin de la historia, se nos antoja terriblemente ingenuo.
Sin Permiso, 2018
Durante tres décadas, las políticas e ideologías neoliberales han sido casi incontestables en todo el mundo. Sin embargo, la crisis económica de 2008, las profundas desigualdades que existen en nuestra sociedad-en particular entre el Norte y el Sur Globales-y los dramáticos problemas ambientales de nuestro tiempo han instado a distintos académicos, analistas económicos y políticos a reabrir el debate sobre el futuro de capitalismo y la necesidad de una alternativa. Es en este contexto que hoy, en casi todas partes del mundo, con ocasión del bicentenario del nacimiento de Marx, hay un "renacimiento de Marx"; un retorno a un autor que en el pasado fue asociado erróneamente con el marxismo-leninismo dogmático y, luego, descartado precipitadamente tras la caída del Muro de Berlín. Volver a Marx no solo es indispensable para comprender la lógica y la dinámica del capitalismo. Su obra es también una herramienta muy útil que proporciona un examen riguroso que aborda por qué fracasaron los experimentos socioeconómicos previos para reemplazar el capitalismo por otro modo de producción. Una explicación de estos fracasos es fundamental para nuestra búsqueda contemporánea de alternativas. Immanuel Wallerstein (www.iwallerstein.com), actualmente investigador sénior en la Universidad de Yale, New Haven-EE. UU., es uno de los sociólogos vivos más importantes y uno de los académicos más idóneos con quién hablar sobre la relevancia actual de Marx. Veterano lector de Marx, su obra se ha visto influenciada por las teorías del revolucionario nacido en Trier el 5 de mayo de 1818. Wallerstein es autor de más de 30 libros, que han sido traducidos a varios idiomas, incluido su afamado The Modern World-System, publicado en cuatro volúmenes entre 1974 y 2011. Le entrevistó Marcello Musto, profesor asociado de
Por IMMANUEL WALLERSTEIN siglo veintiuno editores 1 RECONOCIMIENTOS Cuando acepté escribir este libro, recibí, por casualidad, una invitación de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander, España, para dar un seminario de verano sobre "análisis de sistemasmundo". El curso consistiría en cinco conferencias. Los participantes eran en su mayoría alumnos graduados y profesores jóvenes de universidades españolas, quienes, en su mayoría, habían tenido escaso contacto con el análisis de sistemas-mundo. Eran alrededor de cuarenta. Aproveché así la ocasión para presentar una primera versión de los cinco capítulos de este libro. Y me he beneficiado por los comentarios recibidos. A ellos les agradezco. Cuando terminé de escribir el borrador de este libro, le pedí a cuatro amigos que lo leyeran y criticaran. Estos amigos son personas en cuyo juicio como lectores y experiencia docente confío. Pero todos tenían cierto grado de participación e interés en el análisis de sistemas-mundo. Esperaba por tanto obtener una variada gama de reacciones, y eso fue lo que sucedió. Como es el caso con un ejercicio semejante, les estoy agradecido por rescatarme de zonceras y pasajes oscuros. Me ofrecieron sus avezadas sugerencias, las cuales incorporé. Pero, por supuesto, persistí en mi opinión acerca del tipo de libro que yo consideraba más útil escribir, y los lectores merecen mis disculpas por ignorar parte de sus sugerencias. Así y todo, el libro es mejor gracias a las cuidadosas lecturas de Kai Erickson, Walter Goldfrank, Charles Lemert y Peler Taylor. 2 PARA COMENZAR: COMPRENDER EL MUNDO EN EL QUE VIVIMOS Los medios, así como también los científicos sociales, repiten constantemente que hay dos cosas que dominan el inundo en que vivimos desde los últimos decenios del siglo xx: la globalización y el terrorismo. Ambos se nos presentan como fenómenos sustancialmente nuevos: el primero rebosante de esperanzas y el segundo, de peligros temibles. El gobierno de los Estados Unidos parece desempeñar un papel central en el avance de uno y la lucha contra el otro. Pero por supuesto, estas realidades no son meramente estadounidenses sino mundiales. Lo que subyace a gran parte de este análisis es el eslogan de la señora Thatcher, primer ministro de Gran Bretaña entre 1979 y 1990: TINA ("There is NO Alternative", en español: "No Hay Ninguna Alternativa"). Se nos dice que no hay ninguna alternativa a la globalización, a cuyas exigencias todos los gobiernos deben someterse. Y se nos dice que, si queremos sobrevivir, no hay ninguna alternativa más que aplastar sin piedad al terrorismo en todas sus manifestaciones. La caracterización no es falla de verdad, pero sí muy parcial. Si observamos la globalización y el terrorismo como fenómenos definidos en un tiempo y escena limitados, tendemos a llegar a conclusiones tan efímeras como los periódicos. En general, no hemos sido capaces de comprender el significado de estos fenómenos, sus orígenes, su trayectoria y, más importante aún, cuál es su lugar en el orden mayor de las cosas. Solemos ignorar su historia. Somos incapaces de juntar las piezas del rompecabezas y nos sorprendemos constantemente de que no se cumplan nuestras expectativas a corto plazo. ¿Cuántas personas esperaban en los años ochenta que la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas se desmoronase tan rápida y pacíficamente como lo hizo? ¿Y cuántos esperaban en 2001 que el líder de un movimiento del que pocos habían oído hablar, al-Qaeda, atacase las torres Gemelas de Nueva York y el Pentágono el 11 de septiembre, provocando tanto daño? No obstante, vistos desde cierta perspectiva, ambos hechos forman parte de un escenario mayor cuyos detalles pudiéramos no haber conocido por adelantado pero cuyos rasgos generales eran mas que predecibles. Parte del problema es que hemos estudiado estos fenómenos en compartimientos estancos a los que hemos dado nombres especiales -política, economía, estructura social, cultura-sin advertir que dichos compartimientos eran construcciones de nuestra imaginación más que de la realidad. Los fenómenos de los que nos ocupábamos en dichos compartimientos estancos estaban tan estrechamente entrelazados que cada uno presuponía al otro, cada uno afectaba al otro y cada uno era incomprensible sin tener en consideración a los demás compartimientos. Y otra parte del problema es que tendemos a dejar fuera de nuestras consideraciones analíticas acerca de aquello que es "nuevo" o no los tres puntos de inflexión importantes del sistema-mundo moderno: 1) el largo siglo XVI, durante el cual nuestro sistema-mundo moderno vio la luz como economía-mundo capitalista; 2) la Revolución francesa de 1789, como acontecimiento mundial que dio lugar a la dominación subsiguiente, durante dos siglos, de una geocultura para este sistema-mundo, cultura que fue dominada por un liberalismo centrista, y 3) la revolución mundial de 1968, que presagió la larga fase terminal del sistema-mundo moderno en que nos encontramos y que socavó la geocultura liberal centrista que mantenía al sistema-mundo unificado. Quienes proponemos el análisis de sistemas-mundo, lema del que trata este libro, venimos hablando acerca de la globalización desde mucho antes de que el término fuera inventado (no, empero, como de algo nuevo sino como de algo que había sido un elemento básico para el sistema-mundo moderno desde que éste comenzara en el siglo XVI). Hemos argumentado que los compartimientos estancos de análisis -lo que en las universidades se denomina disciplinas-son un obstáculo y no una ayuda en la comprensión del mundo. Hemos argumentado que la realidad social en que vivimos y determina cuáles son nuestras opciones no ha sido la de los múltiples estados nacionales de los que somos ciudadanos sino algo mayor, que hemos llamado sistema-mundo. Hemos dicho que este sistema-mundo ha contado con muchas instituciones -estados y sistemas interestatales, compañías de producción, marcas, clases, grupos de identificación de todo tipo-y que estas instituciones forman una matriz que permite al sistema operar pero al mismo tiempo estimula tanto los conflictos como las contradicciones que calan en el sistema. Hemos argumentado que este sistema es una creación social, con una historia, con orígenes que deben ser explicados, mecanismos presentes que deben ser delineados y cuya inevitable crisis terminal necesita ser advertida. Este punto de vista no sólo nos ha enfrentado a la sabiduría oficial de quienes detentan el poder, sino también a buena parte del conocimiento convencional propuesto por los científicos sociales a lo largo de los últimos dos siglos. Por tal motivo, decimos que es importante mirar de un nuevo modo no sólo el modo en que funciona el mundo en que vivimos, sino también cómo hemos llegado a pensar acerca de este mundo, Los analistas de sistema-mundo se ven a sí mismos, por lo tanto, como participantes de una protesta fundamental contra los modos en los que hemos pensado que conocíamos el mundo. Pero 3 7 54
Reencuentro, 2013
RESUMEN El presente artículo analiza la importancia de la obra Immanuel Wallerstein en las ciencias sociales latinoamericanas, su trabajo a pesar de haberse retardado en la sociología latinoamericana, cobró importancia en tanto que su planteamiento representaba un cuestionamiento al conocimiento establecido, o si se prefiere, la ideología dominante, en particular a la teoría de la modernización. Asimismo en su obra discute sobre las respuestas a las polémicas de los latinoamericanistas en torno a la concepción de un sistema mundial de un mundo de estados-naciones que se ven como algo natural y en el cual se establecen los cambios políticos económicos y sociales, sobre todo para comprensión de la democracia como mercado político, como opción para la compresión de la transición del socialismo al capitalismo en Europa Oriental así como para comprender los procesos de reconstrucción democrática post dictatoriales en América Latina. En síntesis, se presentan así los elementos importantes en la obra de Wallerstein para la posibilidad de discutir la situación actual desde un punto de vista que no comienza por aceptar la fatalidad del liberalismo dominante.
NOTAS SOBRE EL CAPITALISMO, 2023
Este libro contiene tres ensayos, elaborados por el autor para responder a idéntico número de interrogantes que, frecuentemente, ocupan a los estudiosos no sólo de las ciencias económicas, sino de todas las profesiones que conforman las ciencias sociales. Redactado de una manera amigable, busca ser accesible, también para el lector no iniciado. El libro trata, como dijimos, tres grandes temas o interrogantes: el primer ensayo, en dónde se discute qué debemos entender válidamente por Capitalismo, desde un enfoque, principalmente histórico y debatiendo con concepciones distintas. Un aporte central es la ponderación de las variables institucionales en su conformación y su uso para definirlo. Un segundo ensayo, se ocupa de la definición del subdesarrollo capitalista e indaga sobre las razones que podrían explicar su persistencia. Y, finalmente, un tercer ensayo discurre sobre el proceso de acumulación de capitales, antes y durante el capitalismo, para luego concentrarse en el modo típico en el capitalismo contemporáneo y los factores que estarían generando su inestabilidad.
Sociohistorica, 2001
Difícilmente el impacto teórico e historiográfico de la obra de Immanuel Wallerstein pueda ser exagerado. En especial, la publicación del primer tomo de El moderno sistema mundial puede ser considerado como un acontecimiento fundante de la disciplina actualmente llamada "sociología histórica" (Paramio, 1986: 1). La laudatoria opinión de Andrés Aubry, según la cual historiadores como Wallerstein hay sólo uno o dos por siglo (cit. Avendaño Figueroa, 2000), resume la actitud de respeto y admiración que provoca una obra altamente erudita y un discurso sumamente elaborado. Tal cual él mismo lo ha destacado en nurnerosos textos, sus desarrollos teóricos suponen un intento de replantear el marxismo en su conjunto y enriquecerlo con una vinculación estrecha al legado de Fernand Braudel, para dar a luz un nuevo paradigma científico que reemplace a los paradigmas anteriores. En ese sentido, ha construido una metahistoria que intenta servir de base interpretativa de los principales acontecimientos del mundo moderno, en los cuales naturalmente se incluyen los procesos revolucionarios. Pero ese irn p acto tiene además un correlato en el plano de los posicionamientos práctico-políticos. Para Theda Skocpol, Wallerstein ha intentado teorizar y argumentar en sus obras la visión de la historia subyacente a los movimientos revolucionarios del Tercer Mundo, con lo cual su discurso
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