Introducción Entre las modificaciones que se pueden hacer a las dietas para potencializar su efec... more Introducción Entre las modificaciones que se pueden hacer a las dietas para potencializar su efecto terapéutico se encuentran las alteraciones en el consumo de macronutrientes, de tal manera que podemos encontrar dietas altas o bajas en proteínas, lípidos y carbohidratos, cada una tiene sus propias indicaciones en relación con las necesidades fisiológicas del individuo y los requerimientos específicos de la patología que sufre (Universidad Abierta y a Distancia de México, s/f). Algunos ejemplos de estos tipos de dietas se encuentran la dieta cetogénica y la hipoproteica, la primera se caracteriza por la reducción en la ingesta de carbohidratos hasta llegar a aportar tan sólo un 5% de la energía diaria y el aumento del consumo de lípidos proporcionando hasta el 70% de la energía, su principal objetivo es inducir un estado cetónico en el organismo, es decir, obligar al organismo a utilizar sus reservas lipídicas para la obtención de energía en lugar de generarla a través del metabolismo de los carbohidratos, se utilizan ampliamente para el control de las crisis epilépticas y en las últimas décadas se han popularizado en el tratamiento de la obesidad, ya que propician la rápida pérdida de peso, su utilización para este fin es controvertido, existe gran cantidad de estudios cuyos resultados se contradicen en los beneficios y perjuicios que causa el apego prolongado a este tipo de dietas (Pedrón et al., 2016) .
Introducción Entre las modificaciones que se pueden hacer a las dietas para potencializar su efec... more Introducción Entre las modificaciones que se pueden hacer a las dietas para potencializar su efecto terapéutico se encuentran las alteraciones en el consumo de macronutrientes, de tal manera que podemos encontrar dietas altas o bajas en proteínas, lípidos y carbohidratos, cada una tiene sus propias indicaciones en relación con las necesidades fisiológicas del individuo y los requerimientos específicos de la patología que sufre (Universidad Abierta y a Distancia de México, s/f). Algunos ejemplos de estos tipos de dietas se encuentran la dieta cetogénica y la hipoproteica, la primera se caracteriza por la reducción en la ingesta de carbohidratos hasta llegar a aportar tan sólo un 5% de la energía diaria y el aumento del consumo de lípidos proporcionando hasta el 70% de la energía, su principal objetivo es inducir un estado cetónico en el organismo, es decir, obligar al organismo a utilizar sus reservas lipídicas para la obtención de energía en lugar de generarla a través del metabolismo de los carbohidratos, se utilizan ampliamente para el control de las crisis epilépticas y en las últimas décadas se han popularizado en el tratamiento de la obesidad, ya que propician la rápida pérdida de peso, su utilización para este fin es controvertido, existe gran cantidad de estudios cuyos resultados se contradicen en los beneficios y perjuicios que causa el apego prolongado a este tipo de dietas (Pedrón et al., 2016) .
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