La finca es la unidad básica productiva y de gestión de
los recursos naturales renovables de mil... more La finca es la unidad básica productiva y de gestión de los recursos naturales renovables de miles de productores agropecuarios a nivel nacional y de la selva peruana en particular —y debidamente ordenada, planificada y manejada—, es la unidad básica para la conservación y la gestión de paisajes sostenibles y funcionales.
Gran parte del territorio de la selva alta peruana en el flanco oriental de los Andes, entre los 800 hasta 1.800 msnm, está ocupado por familias productoras que cultivan café, donde la mayoría de este espacio es clasificado como Tierras aptas para producción forestal (F) y Tierras de protección (X), de acuerdo con el Reglamento de Clasificación de Tierras según su Capacidad de Uso Mayor1 . Estas tierras, a su vez, son en su mayoría de pendientes muy pronunciadas, de poca profundidad, y muy expuestas y susceptibles a la erosión al removerse la cobertura boscosa. Asimismo, las tierras donde se cultiva café ocupan, por lo general, suelos con cobertura boscosa perteneciente a ecosistemas de montaña; es decir, bosques montañosos de alta fragilidad pero que brindan importantes servicios ambientales como la provisión de agua, hábitat de especies endémicas, belleza escénica, mantenimiento de stocks de carbono, etc.
En este ambiente están asentadas más de 300.000 familias productoras de café a quien es el Estado debe atender buscando opciones legales y técnicas para que estas tierras sean manejadas bajo enfoques de conservación y recuperación ambiental, e impulsando a que estas familias sean aliadas del desarrollo agropecuario sostenible. En este sentido, la agroforestería con café es uno de los sistemas productivos llamado a ser difundido como una actividad dirigida a hacer frente a la fragilidad de estas tierras y, asimismo, que contribuye significativamente a mejorar las condiciones de vida de las familias
Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono. Guía para el productor cafetalero, 2019
Es común que la actividad ganadera acompañe a la caficultura en las parcelas o fincas del Perú, ... more Es común que la actividad ganadera acompañe a la caficultura en las parcelas o fincas del Perú, lo que la convierte en una actividad productiva que genera ingresos económicos inmediatos para el productor. Basándose en esta realidad nacional, Solidaridad desarrolla una propuesta que busca mejorar la calidad de vida de los productores en su finca, quienes a su vez se desempeñan como caficultores, incorporando la silvopastura como una actividad productiva complementaria que refuerza la actividad ganadera doméstica. Con ello, se establecen, a su vez, sistemas de manejos de la tierra resilientes al cambio climático en armonía con otras actividades paralelas que puedan desarrollar, y de esta forma, se incrementa el potencial que puede ofrecer el sistema de la finca. Como parte de su estrategia global con acciones locales, la publicación “Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono. Guía para el productor cafetalero” es el resultado de un trabajo de investigación de tres años del proyecto “Caficultura, Conocimiento y Carbono para REDD en el Perú”, ejecutado en la región San Martín por Solidaridad con el financiamiento de la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo (NORAD). Solidaridad considera a la finca como la unidad básica y funcional del paisaje. Una buena gestión del paisaje requiere que las unidades productivas (fincas) tengan un desarrollo sostenible, lo cual implica el uso eficiente de sus recursos como el suelo, el agua y los bosques. De esta manera, la buena aplicación de técnicas agrícolas pueden satisfacer las necesidades económicas de los integrantes de la familia productora. Este documento es parte de una serie de tres publicaciones complementarias. Una publicación principal titulada “Café 2.0: Manual de caficultura climáticamente inteligente” y dos guías para el productor cafetalero: “Forestería en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono” y la presente publicación “Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono”.
... II. REVISIÓN DE LITERATURA Según Pennington (11), la especie en estudio se reporta en Venezue... more ... II. REVISIÓN DE LITERATURA Según Pennington (11), la especie en estudio se reporta en Venezuela, Colom-bia, Ecuador y Perú. ... donde usualmente se apoyan los pies se des-gastan prematuramente; los mostradores de locales de atención al público se rayan fácil-mente ...
La finca es la unidad básica productiva y de gestión de
los recursos naturales renovables de mil... more La finca es la unidad básica productiva y de gestión de los recursos naturales renovables de miles de productores agropecuarios a nivel nacional y de la selva peruana en particular —y debidamente ordenada, planificada y manejada—, es la unidad básica para la conservación y la gestión de paisajes sostenibles y funcionales.
Gran parte del territorio de la selva alta peruana en el flanco oriental de los Andes, entre los 800 hasta 1.800 msnm, está ocupado por familias productoras que cultivan café, donde la mayoría de este espacio es clasificado como Tierras aptas para producción forestal (F) y Tierras de protección (X), de acuerdo con el Reglamento de Clasificación de Tierras según su Capacidad de Uso Mayor1 . Estas tierras, a su vez, son en su mayoría de pendientes muy pronunciadas, de poca profundidad, y muy expuestas y susceptibles a la erosión al removerse la cobertura boscosa. Asimismo, las tierras donde se cultiva café ocupan, por lo general, suelos con cobertura boscosa perteneciente a ecosistemas de montaña; es decir, bosques montañosos de alta fragilidad pero que brindan importantes servicios ambientales como la provisión de agua, hábitat de especies endémicas, belleza escénica, mantenimiento de stocks de carbono, etc.
En este ambiente están asentadas más de 300.000 familias productoras de café a quien es el Estado debe atender buscando opciones legales y técnicas para que estas tierras sean manejadas bajo enfoques de conservación y recuperación ambiental, e impulsando a que estas familias sean aliadas del desarrollo agropecuario sostenible. En este sentido, la agroforestería con café es uno de los sistemas productivos llamado a ser difundido como una actividad dirigida a hacer frente a la fragilidad de estas tierras y, asimismo, que contribuye significativamente a mejorar las condiciones de vida de las familias
Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono. Guía para el productor cafetalero, 2019
Es común que la actividad ganadera acompañe a la caficultura en las parcelas o fincas del Perú, ... more Es común que la actividad ganadera acompañe a la caficultura en las parcelas o fincas del Perú, lo que la convierte en una actividad productiva que genera ingresos económicos inmediatos para el productor. Basándose en esta realidad nacional, Solidaridad desarrolla una propuesta que busca mejorar la calidad de vida de los productores en su finca, quienes a su vez se desempeñan como caficultores, incorporando la silvopastura como una actividad productiva complementaria que refuerza la actividad ganadera doméstica. Con ello, se establecen, a su vez, sistemas de manejos de la tierra resilientes al cambio climático en armonía con otras actividades paralelas que puedan desarrollar, y de esta forma, se incrementa el potencial que puede ofrecer el sistema de la finca. Como parte de su estrategia global con acciones locales, la publicación “Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono. Guía para el productor cafetalero” es el resultado de un trabajo de investigación de tres años del proyecto “Caficultura, Conocimiento y Carbono para REDD en el Perú”, ejecutado en la región San Martín por Solidaridad con el financiamiento de la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo (NORAD). Solidaridad considera a la finca como la unidad básica y funcional del paisaje. Una buena gestión del paisaje requiere que las unidades productivas (fincas) tengan un desarrollo sostenible, lo cual implica el uso eficiente de sus recursos como el suelo, el agua y los bosques. De esta manera, la buena aplicación de técnicas agrícolas pueden satisfacer las necesidades económicas de los integrantes de la familia productora. Este documento es parte de una serie de tres publicaciones complementarias. Una publicación principal titulada “Café 2.0: Manual de caficultura climáticamente inteligente” y dos guías para el productor cafetalero: “Forestería en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono” y la presente publicación “Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono”.
... II. REVISIÓN DE LITERATURA Según Pennington (11), la especie en estudio se reporta en Venezue... more ... II. REVISIÓN DE LITERATURA Según Pennington (11), la especie en estudio se reporta en Venezuela, Colom-bia, Ecuador y Perú. ... donde usualmente se apoyan los pies se des-gastan prematuramente; los mostradores de locales de atención al público se rayan fácil-mente ...
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los recursos naturales renovables de miles de productores agropecuarios a nivel nacional y de la selva peruana en particular —y debidamente ordenada, planificada
y manejada—, es la unidad básica para la conservación y
la gestión de paisajes sostenibles y funcionales.
Gran parte del territorio de la selva alta peruana en
el flanco oriental de los Andes, entre los 800 hasta
1.800 msnm, está ocupado por familias productoras
que cultivan café, donde la mayoría de este espacio es
clasificado como Tierras aptas para producción forestal (F) y Tierras de protección (X), de acuerdo con el
Reglamento de Clasificación de Tierras según su Capacidad de Uso Mayor1
. Estas tierras, a su vez, son en
su mayoría de pendientes muy pronunciadas, de poca
profundidad, y muy expuestas y susceptibles a la erosión al removerse la cobertura boscosa. Asimismo, las
tierras donde se cultiva café ocupan, por lo general,
suelos con cobertura boscosa perteneciente a ecosistemas de montaña; es decir, bosques montañosos de
alta fragilidad pero que brindan importantes servicios
ambientales como la provisión de agua, hábitat de especies endémicas, belleza escénica, mantenimiento de stocks de carbono, etc.
En este ambiente están asentadas más de 300.000 familias productoras de café a quien es el Estado debe
atender buscando opciones legales y técnicas para que
estas tierras sean manejadas bajo enfoques de conservación y recuperación ambiental, e impulsando a que
estas familias sean aliadas del desarrollo agropecuario
sostenible. En este sentido, la agroforestería con café
es uno de los sistemas productivos llamado a ser difundido como una actividad dirigida a hacer frente a la
fragilidad de estas tierras y, asimismo, que contribuye
significativamente a mejorar las condiciones de vida de
las familias
productores en su finca, quienes a su vez se desempeñan como caficultores, incorporando la silvopastura como una actividad productiva complementaria que refuerza la actividad ganadera doméstica. Con ello, se establecen, a su vez, sistemas de manejos de la tierra resilientes al cambio climático en armonía con otras actividades paralelas que puedan desarrollar, y de esta forma, se incrementa el potencial que puede ofrecer el sistema de la finca.
Como parte de su estrategia global con acciones locales, la publicación “Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono. Guía para el productor cafetalero” es el resultado de un trabajo de
investigación de tres años del proyecto “Caficultura,
Conocimiento y Carbono para REDD en el Perú”, ejecutado en la región San Martín por Solidaridad con el financiamiento de la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo (NORAD).
Solidaridad considera a la finca como la unidad básica
y funcional del paisaje. Una buena gestión del paisaje
requiere que las unidades productivas (fincas) tengan
un desarrollo sostenible, lo cual implica el uso eficiente
de sus recursos como el suelo, el agua y los bosques. De
esta manera, la buena aplicación de técnicas agrícolas
pueden satisfacer las necesidades económicas de los
integrantes de la familia productora.
Este documento es parte de una serie de tres publicaciones complementarias. Una publicación principal titulada “Café 2.0: Manual de caficultura climáticamente inteligente” y dos guías para el productor cafetalero:
“Forestería en las fincas cafetaleras con baja emisión de
carbono” y la presente publicación “Silvopasturas en
las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono”.
Papers by Ignacio Larco
los recursos naturales renovables de miles de productores agropecuarios a nivel nacional y de la selva peruana en particular —y debidamente ordenada, planificada
y manejada—, es la unidad básica para la conservación y
la gestión de paisajes sostenibles y funcionales.
Gran parte del territorio de la selva alta peruana en
el flanco oriental de los Andes, entre los 800 hasta
1.800 msnm, está ocupado por familias productoras
que cultivan café, donde la mayoría de este espacio es
clasificado como Tierras aptas para producción forestal (F) y Tierras de protección (X), de acuerdo con el
Reglamento de Clasificación de Tierras según su Capacidad de Uso Mayor1
. Estas tierras, a su vez, son en
su mayoría de pendientes muy pronunciadas, de poca
profundidad, y muy expuestas y susceptibles a la erosión al removerse la cobertura boscosa. Asimismo, las
tierras donde se cultiva café ocupan, por lo general,
suelos con cobertura boscosa perteneciente a ecosistemas de montaña; es decir, bosques montañosos de
alta fragilidad pero que brindan importantes servicios
ambientales como la provisión de agua, hábitat de especies endémicas, belleza escénica, mantenimiento de stocks de carbono, etc.
En este ambiente están asentadas más de 300.000 familias productoras de café a quien es el Estado debe
atender buscando opciones legales y técnicas para que
estas tierras sean manejadas bajo enfoques de conservación y recuperación ambiental, e impulsando a que
estas familias sean aliadas del desarrollo agropecuario
sostenible. En este sentido, la agroforestería con café
es uno de los sistemas productivos llamado a ser difundido como una actividad dirigida a hacer frente a la
fragilidad de estas tierras y, asimismo, que contribuye
significativamente a mejorar las condiciones de vida de
las familias
productores en su finca, quienes a su vez se desempeñan como caficultores, incorporando la silvopastura como una actividad productiva complementaria que refuerza la actividad ganadera doméstica. Con ello, se establecen, a su vez, sistemas de manejos de la tierra resilientes al cambio climático en armonía con otras actividades paralelas que puedan desarrollar, y de esta forma, se incrementa el potencial que puede ofrecer el sistema de la finca.
Como parte de su estrategia global con acciones locales, la publicación “Silvopasturas en las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono. Guía para el productor cafetalero” es el resultado de un trabajo de
investigación de tres años del proyecto “Caficultura,
Conocimiento y Carbono para REDD en el Perú”, ejecutado en la región San Martín por Solidaridad con el financiamiento de la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo (NORAD).
Solidaridad considera a la finca como la unidad básica
y funcional del paisaje. Una buena gestión del paisaje
requiere que las unidades productivas (fincas) tengan
un desarrollo sostenible, lo cual implica el uso eficiente
de sus recursos como el suelo, el agua y los bosques. De
esta manera, la buena aplicación de técnicas agrícolas
pueden satisfacer las necesidades económicas de los
integrantes de la familia productora.
Este documento es parte de una serie de tres publicaciones complementarias. Una publicación principal titulada “Café 2.0: Manual de caficultura climáticamente inteligente” y dos guías para el productor cafetalero:
“Forestería en las fincas cafetaleras con baja emisión de
carbono” y la presente publicación “Silvopasturas en
las fincas cafetaleras con baja emisión de carbono”.