EL BAUTISMO Y LA
LLENURA DEL ESPÍRITU
SANTO
“Escuela de Teología Pleroma Dabar”
Ps. Alex Donnelly
INTRODUCCIÓN: ¿Es la misma cosa?
1. EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU
El verbo ‘baptizo’
significa ‘sumergir’.
¿Quién es el ¿A quién
CUATRO que bautiza? bautiza?
PREGUNTAS
¿En qué ¿Cuál es el
IMPORTANTES elemento propósito del
bautiza? bautismo?
Aplicándolo al bautismo de Juan
AHORA A LA PROMESA
DEL BAUTISMO DEL MESÍAS
• “Yo a la verdad os bautizo en [‘en’] agua para [‘eis’]
arrepentimiento; pero el que viene tras Mí, cuyo
calzado yo no soy digno de llevar, es más poderoso
que yo; Él os bautizará en [‘en’] Espíritu Santo y
fuego” (Mt. 3:11).
AHORA A LA PROMESA
DEL BAUTISMO DEL MESÍAS
• “Yo a la verdad os he bautizado con [¿‘en’?] agua;
pero Él os bautizará con [¿‘en’?] Espíritu Santo” (Mr.
1:8).
AHORA A LA PROMESA
DEL BAUTISMO DEL MESÍAS
• “respondió Juan, diciendo a todos: Yo a la verdad os
bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que
yo, de quien no soy digno de desatar la correa de Su
calzado; Él os bautizará en [‘en’] Espíritu Santo y
fuego” (Lc. 3:16).
AHORA A LA PROMESA
DEL BAUTISMO DEL MESÍAS
• “Y yo no le conocía; pero el que me envió a bautizar
con [‘en’] agua, aquél me dijo; Sobre quien veas
descender el Espíritu y que permanece sobre Él, ése es
el que bautiza con [‘en’] el Espíritu Santo” (Jn. 1:33).
NOTA: La BDLA traduce “en agua… en Espíritu Santo”.
AHORA A LA PROMESA
DEL BAUTISMO DEL MESÍAS
• “Porque Juan ciertamente bautizó con
agua, mas vosotros seréis bautizados con
[‘en’] el Espíritu Santo dentro de no
muchos días” (Hch. 1:5).
AHORA A LA PROMESA
DEL BAUTISMO DEL MESÍAS
• “Entonces me acordé de lo dicho por el
Señor, cuando dijo: Juan ciertamente
bautizó en agua, mas vosotros seréis
bautizados con [‘en’] el Espíritu Santo”
(Hch. 11:16).
AHORA LA AFIRMACIÓN
APOSTÓLICA
•“Porque por [‘en’] un solo Espíritu fuimos
todos bautizados en [‘eis’] un cuerpo,
sean judíos o griegos, sean esclavos o
libres; y a todos se nos dio a beber de
[‘eis’] un mismo Espíritu” (1 Co. 12:13).
ANÁLISIS
En los Evangelios y Hechos, el bautismo en el Espíritu
Santo está relacionado con el bautismo de Juan.
• La preposición ‘en’ puede ser locativa (‘en’) o
instrumental (‘con’ o ‘por’), según el contexto; pero
tanto el verbo ‘baptizo’ como el contexto en que se usa
aquí, exige la traducción ‘en’. Eso queda claro cuando
consideramos Mateo 3:6 y Marcos 1:5 (bautizados por
él en el Jordán”).
ANÁLISIS
En el segundo caso, el que bautiza es Cristo; el elemento en que bautiza
es el Espíritu Santo; pero el propósito no está especificado.
En cada pasaje, lo que se resalta es la mayor obra que hará el Mesías, y
para entender qué es lo que Juan (en los Evangelios) y el Señor (en
Hechos 1) tenían en mente habría que recordar las profecías del nuevo
pacto (Ez. 36:26). Juan el Bautista solo podía bautizar con miras al
arrepentimiento y el perdón de los pecados. Él no podía lograr que las
personas tuvieran una nueva naturaleza y dejaran de pecar. Esta es la
mayor obra del Mesías: conceder el nuevo nacimiento, por medio del
Espíritu Santo (Jn. 3:3, 5).
CONCLUSIÓN
El bautismo “en el Espíritu Santo” es algo que Cristo efectúa, como
señal del nuevo pacto.
Lo hace en el momento del nuevo nacimiento, cuando nos ‘sumerge’
en el Espíritu Santo.
EJEMPLO Hechos 19:1-7
EN 1 CORINTIOS 12:12-13
RECORDEMOS…
•“Porque por [‘en’] un solo Espíritu fuimos
todos bautizados en [‘eis’] un cuerpo,
sean judíos o griegos, sean esclavos o
libres; y a todos se nos dio a beber de
[‘eis’] un mismo Espíritu” (1 Co. 12:13).
• Lo extraño es que en 1 Corintios 12:13, Pablo no
menciona el elemento en que somos bautizados.
La frase: “en un cuerpo” nos confunde, porque la
preposición en griego es ‘eis’ no ‘en’. El bautismo al que
el apóstol se refiere es un bautismo ‘para un cuerpo’; es
decir, con miras a participar en un cuerpo. El contexto
indica que está hablando del cuerpo místico de Cristo,
que es la Iglesia. Por lo tanto, aquí en 1 Corintios 12:13,
Pablo está hablando de un bautismo que el Espíritu Santo
efectúa, al colocarnos “en Cristo” (2 Co. 5:17).
La conclusión a la que llegamos es que el bautismo “en el
Espíritu Santo” es algo que Cristo nos concede en la
regeneración, y el bautismo “del Espíritu Santo” es algo
que el Espíritu Santo nos concede al colocarnos “en Cristo”.
En ambos casos, el bautismo es único. La Biblia no habla de
varios bautismos en o del Espíritu Santo. Al parecer, estamos
frente a una experiencia única que está bajo el control
exclusivamente de Dios. Lo mucho que podemos hacer es
clamar a Dios que lo haga (Lc. 11:13; Hch. 8:14-17; 19:1-7).
2. LA LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO
DESTACA
La frecuencia de textos.
Las metáforas que lo describen.
La exhortación específica a
creyentes (Ef. 5:18).
a. DESCRIPCIONES
Elizabeth (Lc. 1:41); el efecto fue conocimiento sobrenatural (Lc.
1:42-45).
Zacarías (Lc. 1:67); el efecto fue un cántico profético (Lc. 1:68-79).
El Señor Jesús (Lc. 4:1a); el efecto fue la dirección de Dios y el
poder para resistir la tentación (Lc. 4:1b-13) y luego desarrollar Su
ministerio terrenal (Lc. 4:14-15).
a. DESCRIPCIONES
Los ciento veinte (Hch. 2:4); el efecto fue hablar en lenguas (Hch.
2:4), predicar poderosamente (Hch. 2:14-41) y vivir vidas
transformadas (Hch. 2:42-47).
NOTA: Aquí el bautismo en el Espíritu Santo coincidió con la
llenura del Espíritu Santo (ver Hch. 1:5).
a. DESCRIPCIONES
Pedro (Hch. 4:8); el efecto fue testificar con denuedo ante las
autoridades (Hch. 4:9-13).
Los creyentes en Jerusalén (Hch. 4:31a); el efecto fue hablar con
denuedo (Hch. 4:31b).
Pablo (Hch. 13:9); el efecto fue discernimiento espiritual y el
conocimiento sobrenatural de la voluntad de Dios (Hch. 13:10-11).
b. METÁFORAS
i. Derramamiento (Jl. 2:28-32; Is. 32:15; Ez.
39:29; Zac. 12:10).
En Isaías 44:3, el verbo “derramar” va en
paralelo con “ríos”. Señala una abundancia
del Espíritu Santo (ver Is. 35:6b-7).
Indica que la voluntad de Dios es conceder
el Espíritu Santo en plenitud.
b. METÁFORAS
ii. Templo del Espíritu Santo (1 Co. 6:19).
En el A. T. , cuando todo preparado, la gloria
llenó el tabernáculo (Ex. 40:34-38).
Luego, lo mismo con el templo (2 Cr. 7:1-3).
Todo una ‘sombra’ de la Iglesia y el creyente
(Hch. 2; Heb. 9:1-12). ¡Llena todo!
b. METÁFORAS
iii. Fuente de agua (Jn. 7:37-39).
Profecías del A. T. (Sal. 46:4; Ez. 47:1-12).
Se cumple en la Iglesia, como la Nueva
Jerusalén (Ga. 4:25-29) y el Templo de Dios
(Ef. 2:21-22).
Tiene cumplimiento personal (Jn. 4:14).
c. EXHORTACIÓN (Ef. 5:18)
El problema
EMBRIAGUEZ – el vino en la sangre,
afecta a todo el cuerpo. El ebrio se
convierte en otra persona
(extrovertida, generosa, elocuente,
etc.).
LA LLENURA DEL ESPIRITU SANTO
tiene un efecto similar (Pedro, Juan,
Pablo, etc.).
DOS DETALLES
Voz pasiva: ‘sean
llenados del Espíritu 2. Tiempo presente:
Santo’. ¡No hay que un estado permanente
impedir que el Espíritu (Lc. 5:12).
Santo obre en nosotros!
UNA ANALOGÍA
Nuestras vidas son
complejas; tenemos
muchas áreas.
Cada una necesita
estar abierta al
Espíritu Santo.
EL CAMINO DE LA CRUZ…
LA LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO
Este debería ser el estado normal del creyente (Hch. 6:3, 5; 11:24).
Es nuestra responsabilidad.
Es un proceso que durará toda la vida.
Habrá muchos altibajos.
LA LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO
Cada decisión de obedecer a Dios, promueve la llenura (Pr. 1:23).
Cada decisión de desobedecer a Dios atenta contra la llenura (Hch.
5:32).
LA LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO
Pueden haber momentos de ‘crisis’.
Las ‘crisis’ pueden estar acompañadas por experiencias especiales.
No busquemos las experiencias, sino la llenura.
La llenura producirá la imagen de Cristo e impulsará la Gran Comisión.