1) La UTOPÍA DEL CLÁSICO ENTRE REVOLUCIÓN Y
IMPERO
1. DE LAS REPÚBLICAS JACOBINAS AL REINO NAPOLEÓNICO
All'inizio dell'Ottocento, la società e la cultura italiana sono influenzate da
Revolución Francesa (1789), que tiene como primera consecuencia el conflicto entre
la nueva Francia republicana y las potencias monárquicas (Rusia, Prusia,
Austria y Gran Bretaña.
En 1796, el general Napoleón Bonaparte (1769-1821) entra en Italia.
comando del Ejército de Italia, cuya llegada causa la sustitución de los soberanos y
de los oligarcas de los antiguos Estados italianos y la formación de los llamados
repúblicas hermanas
La ilusión de un rescate nacional tiene una vida corta: con el tratado de
Campoformio (1797) Napoleón cede a Austria la República de Venecia,
causando el desconcierto de los patriotas venecianos como Foscolo.
En las repúblicas francesas se abolieron los títulos y privilegios nobiliarios, y también se
incautados los bienes de la Iglesia; esto, sin embargo, no determina un proceso de
reestructuración social.
El 'trienio jacobino' termina en 1799 con la llegada de los rusos a Italia: los
las repúblicas francesas caen y comienza la represión de los demócratas, que es
durísima sobre todo en la napolitana República Partenopea.
Los exiliados napolitanos se mueven entonces hacia el norte de Italia y Europa,
portando con loro le idee e le riflessioni dell’Illuminismo meridionale, ma
sobre todo la filosofía historicista de Gianbattista Vico (1668-1744).
En 1804 Napoleón se convierte en emperador de los franceses y en 1805 crea el Reino
de Italia, estrechando así aún más el cordón que une la península a la
Francia, aislándola de facto del resto de Europa.
La posterior derrota de Napoleón, sancionada por la batalla de Waterloo
(1815), abre en toda Europa continental la época de la Restauración.
2. LOS LETRADOS ENTRE COMPROMISO Y PROPAGANDA
La literatura del trienio jacobino (1796-1799) no se aleja del público
de los burgueses/notables y del estilo neoclásico, ni tampoco del primitivismo
allaOssian.
La nueva temporada política favorece el desarrollo de una poesía civil, que se
inspira en el ejemplo de las virtuosas repúblicas antiguas: Atenas, Roma, Esparta.
La verdadera ruptura se encuentra en la condición social de los literatos: desaparece por
siempre la figura del 'letrado de corte', los intelectuales ahora están obligados a
encontrar un empleo, cosa en la que se ven ayudados por el desarrollo
de la administración pública.
La libertad de prensa y de asociación ofrecen a los jóvenes literales también la
nueva perspectiva del intelectual militante, que a partir de los modelos
Parini y Alfieri reivindican la capacidad de las letras para emitir juicios morales sobre
historia y política.
Esta también es la temporada de la floración de los periódicos, sobre todo de aquellos de
natura política, destinados a desaparecer con la caída de las repúblicas y con el
sucesivo dominio napoleónico.
Los gobiernos buscan de todos modos el apoyo de los intelectuales, que son utilizados
comefunzionari, útiles para legitimar el poder constituido; a dominar esta
categoría es Monti, ''poeta e historiador'' del Reino de Italia.
El declive que han vivido Venecia y Nápoles hace que sea Milán el que asuma el
rol del capital cultural del país: aquí se verifica un notable impulso
de la industria tipográfica y libraria, testimoniada por el proyecto de 1802 de
Sociedad Tipográfica de Clásicos, que publica las obras de 'genios italianos'.
A pesar del rol vertical de Milán, capital del Reino y sede de los varios
ministerio, Italia continúa a estar fragmentada políticamente.
3. LENGUA, CULTURA Y GUSTO ''ESTILO IMPERIO''
En el periodo 1796-1814 se debe constatar la notable influencia del francés
sobre la lengua italiana, que ya era fuerte en el siglo XVIII.
Contra el uso y el aumento de los franceses se lanza el abad Antonio Cesari
(1760-1828), que propone ampliar el Diccionario de la Crusca insertando una
terminología proveniente de los vulgarismos antiguos y de los escritos prácticos y
devoto del Trecento.
Cesari propone el regreso a ''una ingenua espontaneidad originaria'', que no sea
contaminada por la civilización y la cultura racionalista ilustrada, de la cual
Cesari (creyente y conservador) es un subversivo.
Los lazos político-administrativos con Francia hacen que Italia se coloque en
relativo aislamiento respecto al mundo alemán y al inglés, donde en
en esos años se estaba elaborando la nueva experiencia del Romanticismo.
Solo en 1816, Italia se enfrentará a esta nueva cultura, que
pone en crisis ese código neoclásico basado en los modelos greco-latinos de los que se
era apropiado también Napoleón en la elaboración del llamado 'estilo
impero'', ejemplificado a la perfección por los trabajos del escultor deAntonio
Canova (1757-1822).
El aislamiento cultural italiano se agravaba por el escaso conocimiento del
tedesco, que obstaculizó la difusión del idealismo; se difundió en la península el
sensismofrancese, según el cual toda la actividad psíquica del hombre se forma
enteramente sobre la base de las sensaciones físicas y su combinación.
La producción literaria no se aparta de premisas neoclásicas, del gusto
para las celebraciones y la grandiosa solemnidad de la Roma imperial: una
tendencia que explica esa divergencia, de la que habla Foscolo, entre 'literatura
alta'', rivolta a pochi ''letterati'', y la producción narrativa en prosa para un
público medio, es decir, a mitad camino entre la cima y la enorme masa de analfabetos.
Para obtener un éxito literario estable es necesario el apoyo de críticos
ed intenditori, que alaban sobre todo el ejercicio de la poesía.
Si impone un infinito canon neoclásico, que sigue los modelos literarios y el
repertorio mitológico greco-latino, que permanecen puntos de referencia estéticos
fundamentales.
La escena literaria está dominada por Monti y Foscolo, personajes cercanos y sin embargo
antitéticos en el ámbito de la carrera.
Monti conquista el vértice literario con sus excepcionales capacidades técnicas y
la capacidad de complacer el gusto; Foscolo en cambio elige seguir el camino
del intelectual militante e independiente, convirtiéndose a menudo en un disidente y
haciendo cada vez más difícil obtener un consenso unánime.
A Foscolo se le atribuye el mérito de haber propuesto también una jerarquía de
géneros literarios neoclásicos, que ven al fondo novela y cuento (destinados
al entretenimiento y a la educación del lector menos letrado), mientras sobre
cima ‘la historia, la elocuencia, la tragedia, la lírica sublime y la epopeya’, es decir, los géneros
de la Antigüedad grecolatina, reservados para los literatos 'altos', como Monti.
4. MONTI, CUOCO Y GIORDANI: EL CÁNON NEOCLÁSICO
La carrera del romagnolo Vincenzo Monti (1754-1828) comienza en 1797, año
en el que abandona la corte papal para trasladarse a Milán.
Monti ya había alcanzado la fama con el poema En la muerte de Ugo Basville
(1793), a cui segue una fase di celebrazione della Rivoluzione, in cui emerge
siempre su excepcional habilidad técnica.
Él elabora un lenguaje elevado, hecho de elegantes joyas verbales que enriquecen
la 'belleza ideal' de los textos canónicos.
La producción de Monti se ve afectada, sobre todo, por las vicisitudes políticas: él
abandona el ambicioso poema en honor a Napoleón, El bardo del bosque negro
(1806), para dedicarse a la traducción de la Ilíada.
Sin duda se trata del trabajo más célebre, llevado a cabo entre 1806 y 1810
sobre la base de una traducción de las versiones en latín del poema homérico, que
le permiten, a diferencia de Foscolo que traduce del griego, construir
una lengua graciosa, fluida y armónica.
La Ilíada de Monti se convierte de inmediato en un clásico en toda Europa, siendo alabada
también de la romántica Madame de Staël, que define a Monti como 'el primer poeta
d’Italia
Caído Bonaparte, el gobierno austriaco reentrante encarga a Monti la redacción de
inni per el regreso de los antiguos soberanos (El regreso de Astrea, 1816) y la dirección
de la revista 'Biblioteca Italiana', concebida para recuperar el apoyo
de los intelectuales.
Se retira después de poco para dedicarse a la cuestión del idioma: en la Propuesta de
algunas correcciones y adiciones al vocabulario de la Crusca (1817-1826) Monti busca
de superar el purismo de Cesari y se propone conciliar el estilo neoclásico
con las modernas exigencias de comunicación.
Entonces se habla de un uso moderado del léxico técnico-científico y del retorno
al italiano al massimo del suo fulgore, ossia nella sua fase cinquecentesca.
NelSulla Mitologia(1825) Monti tenta di rilanciare la poesia del mito greco-
latino, opuesta a la ''audaz escuela boreal'' romántica, que había apostado en cambio
sullamitología escandinava.
El último trabajo es la canción por el día onomástico de mi mujer (1826), más
cercano al clasicismo moderno, introspectivo y sentimental de Leopardi en
A mi dama.
Monti, por su oportunismo político, será excluido posteriormente del canon
literario risorgimentale.
Para el teatro, que a esta altura en Italia aún se basa en el principio de los tres
unidades aristotélicas (espacio, tiempo, lugar), se debe mencionar a Gioacchino
Rossini (1792-1868).
La tragedia de argumento alfieriano, caracterizada por personajes desgarrados por
contradicciones insalvables, todavía es muy apreciada por el público y la crítica.
En historiografía se impone el trabajo de Vincenzo Cuoco (1770-1823), autor del
Saggio storico sulla rivoluzione di Napoli (1801), pubblicato a Milano.
En la obra, que tiene una fortuna considerable y que se traduce casi
subito en alemán y francés, está inspirada en el estilo de los grandes historiadores
de la Antigüedad (Polibio, Plutarco, Tucídides).
La explicación que Vico ofrece del fracaso de la Partenopea, culpable de
ser hija de una 'revolución pasiva' e incapaz de hacer realidad sus propios ideales
‘’ popolari’’, se apoya también en el realismo político de Maquiavelo y sobre el
historicismo vichiano.
El ensayo histórico se convertirá más tarde en uno de los textos fundamentales del movimiento
unitario; menos fortuna tendrá la obra siguiente, el Platón en Italia (1804 y
1806), en el que Cuoco finge haber traducido un manuscrito platónico en el que se
cuenta de un viaje del filósofo en Italia, durante el cual él habría
descubierta la 'gran civilización itálica prerromana'.
El primado en el ámbito de la ensayística y de la elocuencia oratoria es en cambio de
asignar al exmonje piacentino Pietro Giordani (1774-1848), autor del
Panegírico de las hazañas de su majestad Napoleón el Grande (1804), obra en prosa.
basada en los dictados neoclásicos, en los que se elogia la legislación reformadora
napoleónica.
La producción de Giordani deja una sensación de inconclusión, debido a la
tendencia a la insatisfacción del autor, incapaz de ir más allá de los dictámenes
de perfección clasicistas y de escribir obras de amplio aliento.
Mucho más interesante es su obra en el ámbito de la crítica: escribe ensayos
sobre la literatura contemporánea e incluso sobre el arte.
Después de ser expulsado del Estado Pontificio, se dirige a Milán, donde trabaja.
en la Biblioteca Italiana, de la que sin embargo dimite en virtud de que está en desacuerdo con el
gobierno austriaco.
En 1817 conoce a Leopardi y intuye sus potencialidades literarias, que lo convierten en
para Giordani, el ''escritor italiano perfecto''.
En los años veinte se encuentra en Florencia para colaborar en la Antología del conde Piero
Vieusseux (1779-1863), a pesar de ser de simpatías ateas.
En los últimos años se dedica a la redacción de cartas abiertas semiclandestinas en las que
propugna posiciones morales y denuncia la impiedad, como los maltratos infligidos
a los alumnos de las escuelas religiosas.
Su prosa será en las décadas siguientes útil para Carducci en su recuperación
del clasicismo.
5. UGO FOSCOLO: EL YO, LA REBELIÓN Y EL MITO
Niccolò Ugo Foscolo (1778-1827) nace en la isla griega de Zante, entonces parte
del territorio de la República de Venecia.
A la muerte del padre, la familia Foscolo se traslada a Venecia, donde Ugo
recibe una educación humanística y se acerca a la literatura de Ossia, Parini,
Alfieri; aquí también se encuentra con su primer amor, la aristócrata Isabella Teotochi.
Albrizzi, que lo introduce en su salón literario.
La vocación literaria lo llevará a inscribirse en la Universidad de Padua, donde
asiste a las lecciones de Melchiorre Cesarotti (1730-1808) y entrará en contacto
con los ideales democráticos y jacobinos.
El debut literario llega con la tragedia Tieste (1796), que sin embargo recibe la
fría acogida del público veneciano, sospechosa de las simpatías francesas
di Foscolo.
Los sospechas lo empujan a trasladarse a Bolonia, donde asiste a la caída de los
eventos y la traición napoleónica de Campoformio, que marcará de manera
irrimediabile la vita di Foscolo, passato a posizioni democratico-nazionaliste.
Assunta de frente al mundo la figura descriptor independiente, él continúa
se presenta como 'hijo de la Revolución' y se alista en el ejército de
República Cisalpina, combatiendo contra los ejércitos austro-rusos.
Los del trienio jacobino son para él años de actividad político-literaria.
frenética, pero también marcadas por las numerosas historias de amor.
El amor y la vocación político-literaria se entrelazan en la novela epistolar
Ultime lettere di Jacopo Ortis (1802, ediciones definitivas en 1816-1817), inspirado
Los sufrimientos del joven Werther (1774) de Johann Wolfgang Goethe (1749-1832).
La trama amorosa entre Jacopo y Teresa, que sigue el modelo goethiano,
el autor añade el elemento político, que representa una notable novedad.
El texto es una recopilación de las cartas del protagonista Jacopo, editada por el mejor
amigo Lorenzo Alderani.
Jacopo, joven veneciano de opiniones democráticas buscado por los austriacos
después de Campoformio, se enamora de Teresa (que lo corresponde), que sin embargo su padre
ha prometido al conservador Odoardo.
Jacopo entonces realiza un viaje por Italia, constatando las injusticias y las
contradicciones de los nuevos gobiernos republicanos; a su regreso descubre que
Teresa se ha casado con Odoardo, lo que lo lleva a suicidarse con un arma.
como los héroes de la Antigüedad.
La obra de Foscolo logra ir más allá del canon neoclásico, logrando no
solo al llegar a un público más grande sin renunciar al neoclásico
alcanzamiento del sublime, pero también a producir un intercambio entre la vida
(Teresa está inspirada en la amada Antonietta Fagnani Arese) y literatura.
En la prosa del Ortis es posible captar el eco de poesías antiguas y modernas,
de la Biblia, de Rousseau y también de Ossian, que se combinan en el 'concierto de
dissonancias'' producido por Foscolo a través de períodos fragmentados y desarmónicos,
ellissi, exclamaciones y sobre esos acoplamientos paratácticos utilizados por el Cesarotti
para traducir la poesía primitiva de Ossian; presente, pero no demasiado al fin de
no bajes el nivel literario, el registro realista.
En el ámbito político, el personaje de Jacopo Ortis es una metáfora de la crisis
producida por el desvelamiento de las ilusiones revolucionarias y patrióticas, que
han hecho lugar a una lucha hobbesiana de todos contra todos.
En un mundo en el que no es posible intervenir, solo queda cultivar el arte.
la literatura, la belleza y la amistad, que elevan al hombre de la sórdida
realidad.
Allafredda razones se oponen a las 'pasiones generosas': un tema,
quello della squalifica della razionalità a favore del sentimento, che diverrà
importante en el Romanticismo.
Sin embargo, Foscolo también idealiza su retrato a través de Jacopo,
cui necesidad de absoluta libertad se contrapone a la negatividad del presente
histórico y al conformismo de los privados (el matrimonio entre Teresa y Odoardo).
L'Ortisè sobre todo el relato de la irreconciliable conflicto entre la injusticia del
el mundo y la nobleza del héroe, que usa como los antiguos estoicos el suicidio como
mezzo para afirmarse.
La novela obtiene un éxito realmente notable, logrando ir más allá de la
calificación literaria del género.
En 1803 se publica la colección de Poesías, doce sonetos y dos odas, caracterizada por la
búsqueda de la perfección formal a partir de la reanudación del modelo de Parini, capaz
pero también de dar nueva vida al repertorio mitológico neoclásico.
Nei Sonetti, le figure del mito e gli echi dei poeti antichi si fondono con
la expresión lírica del yo y sus vicisitudes biográficas y existenciales: el
suicidio del hermano, la origen griego, el exilio de Venecia.
En los Discursos introductorios a su traducción del poemeto helenístico La chioma
di Berenice (del poeta alessandrino Callimaco, III secolo a.C.) Foscolo chiarisce
la propia poética.
Refiriéndose al historicismo vichiano, explica que a diferencia de la poesía
antigua, no afectada por la razón, la poesía de los modernos debe lograr
‘’golpear el corazón y la mente’’ con el maravilloso rasgo de la mitología griega, que
custodia un patrimonio universal apreciado y comprendido por todos.
Con el consolidarse del poder napoleónico, Foscolo decide intentar de nuevo
la carrera militar, sin embargo, sin celebrar la cultura oficial como lo hace
Monti, con quien tiene buenas relaciones.
Nel1807esce el carmeDei Sepolcri, la máxima expresión de la poética
foscoliana.
El carme nace a partir de la discusión con Hipólito Pindemonte (1753-
1828) sobre el edicto napoleónico que establece la imposibilidad de enterrar a los muertos
dentro de las ciudades.
El texto de Foscolo va más allá del simple lamento elegíaco que caracteriza la
poesía sepolcral tardosettecentesca de Thomas Gray y Edward Young, para
abrir una reflexión ética y filosófica sobre el papel del culto a los muertos.
Escrita en endecasílabos sueltos según el uso clasicista, el texto se caracteriza
de la dificultad en la lectura, debida principalmente a la densidad de significados.
El poema se puede dividir en cuatro momentos:
1) La importancia privada, afectiva y moral de las tumbas, conservadoras de la
memoria de las personas honestas, permitiendo una 'correspondencia de amorosos
sensi con quienes las ha amado y estimado en vida.
2) Vínculo entre el culto a los muertos y el nacimiento del vínculo social: a la tenebrosidad
del culto cristiano-medieval de la muerte se contraponen la luminosidad de las
tumbas de los antiguos y de los modernos (el ''verde perenne'').
3) La función civil y política de las tumbas, que pueden inspirar a los hombres
en vida a las grandes empresas; llega la alabanza de Santa Croce en Florencia, donde están
sepultados los grandes italianos.
4) La transmisión de la memoria permitida por los sepulcros está asociada al papel
eternador de la poesía, en primer lugar la de Homero, que de 'honor de llantos'
también a los vencidos.
Esta estructura argumentativa está densificada por un recurrente recurso al mito,
todas las descripciones y episodios históricos (como la batalla de Maratón).
En el carmen, la lírica filosófica intenta alcanzar lo sublime neoclásico: a
paisajes idílicos y sentimientos delicados se contraponen así extensiones
batallas salvajes y feroces.
Estas imágenes están relacionadas entre sí de manera estrecha, y sin embargo la
la transición de una escena a otra es repentina; Foscolo busca deliberadamente
referirse al estilo altísimo de los Epinicios de Píndaro (518-438 a.C.).
El repertorio mitológico está, en resumen, sumido en el presente, en el que aún puede
por lo tanto asumir un significado.
La poesía asume la tarea de resistir al poder destructivo de la naturaleza,
andando atramandare las ilusiones (ética y civilización), asumiendo así el papel
de valor supremo para una humanidad sin esperanza.
Los poetas se convierten así en legisladores morales, asumiendo el papel de los antiguos
sacerdotes laicos y de los profetas.
Sepolcrisanciscono de alguna manera el nacimiento del rol civil del escritor
independiente del poder; también tendrán un éxito clamoroso gracias
a su función nacionalista.
En 1808, Foscolo obtiene gracias a la ayuda de Monti la cátedra de elocuencia.
en la Universidad de Pavía, sin embargo, después de solo un año su enseñanza,
iniciado en 1809, está suprimido.
De esta experiencia nace, sin embargo, el origen y la oficina de la literatura.
cui se reflexiona sobre el papel del escritor, que asume una posición intermedia
entre los pocos ''señores'' y la multitud de ''sirvientes''.
En 1811 su tragedia Ajace es censurada ya que el gobierno la considera
anti-napoleónica, también es expulsado del Reino de Italia.
En 1812 se traslada a Florencia donde traduce la novela humorístico-sentimental
Viaje sentimental de Yorick por Francia e Italia del escritor inglés
Lawrence Sterne (1713-1768) atribuyendo sin embargo el trabajo a su nuevo alter
egoDidimo Chierico, que se opone en total antítesis a su predecesor
Jacopo Ortis.
En la Noticia sobre Didimo el Clérigo, al final de la traducción, encontramos
un personaje hijo de la desilusión de la madurez y mucho más atento
la realidad cotidiana, que también se ve a través de una perspectiva muy
más humorística.
Características que en realidad también están presentes en la autobiografía incompleta Sesto
tomo dell'io.
En 1812, Foscolo comienza la redacción de su obra más ambiciosa: Las Gracias.
Mientras Europa es nuevamente arrastrada por la guerra, Foscolo propone un
refugio del 'delirio de batallas', aprovechando el poder civilizador de la
arte.
El estilo y la estructura narrativa son los de Los Sepulcros, pero la energía del texto
esta vez se concentran más en una serena compostura y en la búsqueda de la
elegancia, para acercar los versos a las esculturas de Canova.
Atendiendo al pensamiento de Vico, se quiere trazar una historia ideal de la civilización
humana, a través de la difusión de las artes desde la Grecia clásica hasta Italia
moderna.
Foscolo busca evocar el encanto inmediato de los antiguos griegos a través de
tres inktober:
1) En el primero se habla del nacimiento de las Gracias, deseado por Venus para apaciguar
los instintos bestiales de los hombres.
2) Un rito propiciatorio a las tres diosas celebrado en Florencia por tres amigas.
del poeta.
3) La fuga de las Gracias en la isla de Atlántida para escapar de los deseos impuros
y dedicarse a la tejido del velo milagroso, que presenta imágenes de los
sentimientos más aterradores y que protegerá a las diosas en el momento de su regreso entre
los hombres.
En el texto de Foscolo se nota un uso insistente de la alegoría, como medio para
recrear la belleza absoluta de lo antiguo; se puede hablar de una cosmogonía
poética a la altura de las elaboradas por varios Hölderlin, Goethe, Keats,
Shelley.
Al colapso del Imperio Napoleónico, Foscolo está entre aquellos que intentan mantener en
viva el Reino de Italia, motivo por el cual las autoridades austriacas, deseosas de
obtener el apoyo de los intelectuales, les ofrecen en 1815 la dirección de la
Biblioteca Italiana, que sin embargo Foscolo rechaza.
Si reca entonces primero a Suiza y luego a Inglaterra, a Londres: aquí
dios de notable fama, pero su comportamiento ajeno a los códigos de la
la nobleza inglesa le hace totalmente imposible integrarse.
También la relación con los otros exiliados italianos y los literatos locales es muy difícil.
causa de su declarada hostilidad al Romanticismo; mientras tanto, su estilo
una vida lujosa lo reduce rápidamente a la miseria.
Las condiciones adversas le impiden trabajar con continuidad a las Gracias
la traducción de la Ilíada, comenzada en paralelo con Monti; más amplia es la
producción en prosa.
En las Cartas escritas desde Inglaterra se compara la civilización inglesa con
aquella italiana, pero también escribe sobre la literatura italiana, sobre aquella más
reciente, su Dante, Petrarca, Boccaccio y sobre el poema caballeresco.
La crítica foscoliana resiente sin duda de la impostación filosófica
mutuata da Vico e dai sensisti.
De los sensistas se extrae la idea de que la literatura ofrece al lector el ''placer de
moltiplicaresensazioni e ideas''; de Vico retoma en cambio la concepción histórica
e antropológica de la poesía, que lo conduce a colocar a los varios autores dentro del
su tiempo histórico.
Los ensayos de Foscolo sobre Dante tendrán a lo largo del siglo XIX un carácter particular.
fortuna, y también los ensayos sobre la literatura contemporánea representan una
fuente notable ya que escritos por una persona con conocimiento de los mecanismos
del mundo literario.
De estos últimos se obtienen aún útiles informaciones sobre la geografía de
centros culturales y editoriales y sobre la relación entre el sistema de géneros y la
composición social del público.
Después de su muerte en 1827, la figura de Foscolo asume un papel realmente
imponente en la imaginación de las generaciones del resurgimiento, hasta el punto
que en 1871 sus restos fueron trasladados a la Iglesia de Santa Croce en Florencia.
Foscolo obtiene así la canonización laica por parte de esa religión civil
del patriotismo del que se había hecho promotor y sobre el que Italia postunitaria
intentará fundar su nueva identidad colectiva.
2) LA VUELTA ROMÁNTICA BAJO LA
RESTAURACIÓN (1816-1840)
1. LA RESTAURACIÓN Y SUS ENEMIGOS
Después de la definitiva derrota de Napoleón, las potencias vencedoras se reunieron
en el Congreso de Viena (1814-1815) para redefinir los ajustes geopolíticos del
continente y restablecer las monarquías absolutas basadas en la investidura divina.
Se operó en todas partes la restauración de los soberanos que habían sido desterrados por la furia
revolucionario (aunque no siempre fue así, se ve Venecia, que fue anexada
a Austria) y confió la tutela del nuevo orden a la 'Santa Alianza', en la que
figuraban Austria, Prusia y Rusia, es decir, las potencias de la Restauración.
En toda Europa crecen la censura de la prensa y la represión de los
opositores, mientras disminuye el peso político de la burguesía.
Italia está nuevamente fragmentada en diversos Estados y se impone nuevamente un
proteccionismo económico que frena el crecimiento económico italiano.
En el continente, además de las ideas liberales, emergen también las ‘ identidades’
nacionales''; también en Italia empresarios y propietarios de tierras presionan por
la unificación del país y para el superamiento del proteccionismo.
La oposición a los gobiernos restaurados está guiada por asociaciones secretas, como la
Carbonería, que entra en acción tanto durante los movimientos de 1820-1821 como en
aquellos de 1830-1831, que sin embargo en Italia se enfrentan a la derrota debido a
del intervención austriaca.
Solo en el mundo sudamericano, en Francia (donde surge la monarquía liberal y
costituzionale de Luigi Filippo d'Orleans), en Grecia y en Bélgica las revueltas
tuvieron éxito.
El fracaso de la Carbonería hace que surjan también nuevas sociedades
nacionalistas, como la democrática Juventud Italiana, fundada en 1831 en
Marsella de Giuseppe Mazzini (1805-1872).
2. LA CULTURA A LA OPOSICIÓN
Estos años de revueltas reprimidas en sangre están caracterizados en Italia
de la alianza entre el poder político y la Iglesia católica.
La censura domina casi en todas partes (más tolerante en Toscana), las universidades
decadono, crolla la instrucción pública laica y vuelve a ser dominante la que está confiada
para los entes eclesiásticos, los niveles de alfabetización siguen siendo muy bajos.
Se debe recordar la situación del precariado vivida por los intelectuales, que
después del colapso de las instituciones napoleónicas se ven privados de numerosos
salidas laborales, excepto la actividad editorial y la enseñanza privada.
La península sigue siendo policéntrica culturalmente, aunque Milán, como en la
temporada anterior, permanece el centro apical, la sede de la primera moderna
industria editorial en Italia.
Aquí nace la figura del letrado de profesión, que debe su bienestar
económico al éxito de sus propias obras y a la actividad periodística.
Siempre en Milán, algunos jóvenes románticos lanzan en 1816 un ataque a la
tradición clasicista, representada por la filogubernativa Biblioteca Italiana, y
fundaron la revista El Conciliador en 1818, que se inspira en el cafetín del siglo XVIII
que retoma de él la idea de 'utilidad general', pero que también afirma de
querer dirigirse no solo a los ‘doctos’, sino a un ‘amplio público juzgante’.
A contender el papel de hegemón en Milán está Florencia, donde la herencia del
Conciliatore (cerrado en 1819) es recopilado por la Antología, fundada por el grupo
haciendo referencia al ya citado Vieussieux.
La revista, de clara inspiración liberal, permanece activa desde 1821 hasta 1833, cuando
viene costretta a la cierre por Austria, cada vez más represiva después de los motines
del ‘30/’31.
Entre los colaboradores de la Antología merece ser mencionado Niccolò
TommaseoeGiuseppe Montani (1789-1833).
ARomaprevalgono en cambio la antigüedad y un clima clásicista y conservador,
en el que el Estado Pontificio combate toda forma de innovación.
La red de centros culturales italianos se extiende también al extranjero: en la red
las ciudades de París, Londres, Bruselas y Ginebra actúan de manera diferente
esuli, que imprimen y venden a bajo precio las obras italianas más importantes
del periodo (como los Novios).
3. POÉTICAS ROMÁNTICAS E INNOVACIONES LITERARIAS EN EUROPA
Entre fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX, en Europa se desarrollan nuevas formas de
sensibilidad y gusto que se lanzan contra la racionalidad ilustrada,
oponiéndole la fuerza de los sentimientos y la dimensión religiosa.
Este tipo de experiencias son reunidas por la crítica en el hilo, imposible
da definir unívocamente (en cuanto muy diferente según los diferentes
contesti), del Romanticismo.
Las premisas de esto se establecen a mediados del siglo XVIII en Alemania y
Inglaterra, donde se desarrolla un filón a veces indicado con el nombre de 'Pre-
El 'Romanticismo', al que se le atribuyen los géneros de la novela gótica, de la
poesía sepulcral y la experiencia de los Cantares de Ossian el escocés James
Macpherson (1736-1796).
Estas tendencias son reinterpretadas en Alemania por el más importante de los
alumnos de Kant, es decir, Johann Herder (1744-1803), quien se vale de un
enfoques histórico-genéticos a las obras del pasado.
Según Herder, el valor de una cultura depende de su originalidad y de su
capacidad de expresar el ‘Volkgeist’, el ‘espíritu del pueblo’, es decir, el carácter
profundo de la nación.
Le sue posizioni sono riprese da una serie di giovani autori che creano una
nueva tendencia literaria, en adelante llamada 'Sturm und Drang' ('tempestad
e ímpetu''.)
A este hilo se le atribuyen las monumentales figuras de Goethe de Friedrich
Schiller (1759-1805), que escribe novelas y sobre todo tragedias de inspiración
shakespiriana sin respetar los principios de unidad aristotélica.
Gottfried Burger (1747-1794) hace revivir las leyendas espectrales del
medieval en el nuevo género de la balada narrativa: la Leonora (1774) y el
Cazador feroz (1778).
Estas tendencias coexisten inicialmente con los principios iluministas y
clasicistas, con los cuales llegan al inevitable choque solo después de 1789,
cuando la fase del Terror pone de manifiesto las contradicciones de la razón
iluminista.
Uno de los promotores de la crítica a esto es el francés François René de
Chateaubriand (1768-1848), quien en su El genio del Cristianismo (1802) habla
de las ''bellezas de la religión cristiana'', tan devaluada por la Ilustración; en
romanzoRené(1802) retrata en cambio las inquietudes de su presente.
La Francia ilustrada viene en esencia despojada de su posición de
hegemonía intelectual de Alemania, donde se asiste a caballo entre los siete-
Ottocento a la elaboración de la filosofía del idealismo.
Con la obra de Georg Wilhelm Friedrich Hegel (1770-1831) el idealismo, en la
su forma dialéctica, llegará a imponerse como filosofía dominante en todo el
continente: en la Fenomenología del Espíritu (1807) Hegel traza el entero
desarrollo histórico de la civilización humana (o 'espíritu').
Remitiéndose a Hegel, Schiller escribe sobre La poesía ingenua y sentimental
(1794), en el que compara la poesía de los antiguos, pura en cuanto a que está en directo
contacto con la naturaleza, y la poesía de los modernos, que ha perdido esta armonía y
que por lo tanto ya no puede ser 'ingenua', sino 'sentimental'.
La poesía romántica no puede imitar la naturaleza, sino solo proporcionar un retrato.
parcial, del que sin embargo no puede renunciar: la 'sehnsucht', el 'deseo de
desear
El poeta debe, por tanto, transformar su tensión (streben) hacia la naturaleza en
una aspiración más alta, que lo lleve a captar 'el arte del infinito'.
Autori cercanos a las ideas schillerianas están reunidos en el Círculo de Jena, hermanos.
August Wilhelm (1767-1845) y Friedrich Schlegel (1772-1829), ellos mismos
autores de obras literarias y teatrales.
Los miembros del círculo se oponen a toda la brillante tradición greco-latina
gótica oscuridad de la Edad Media, es decir, la época en la que se originó la
poesía sentimental de los modernos, que por lo tanto también está inspirada por la fe
cristiana.
El arte es una actividad individual y no mecánica y sostiene que la diferencia entre
la poesía atemporal de los antiguos y la de los modernos, ya sea que esta última
tiende al infinito.
En su Curso de literatura dramática (1811), August Wilhelm Schlegel se
sirven estas consideraciones para abrir la dicotomía clásico-romántica,
que tiene en el teatro su primer terreno de confrontación.
El mérito de haber difundido en Europa las ideas de los románticos alemanes se debe a
asignar al Circulo de Coppet (castillo cerca de Ginebra en Suiza), reunido
dall ’esule politica antinapoleonica Germaine de Staël (1766-1817), il cui
el ensayo ''Alemania'' (1813) tiene un notable éxito.
La importante obra de traducción realizada por de Staël hace que en el resto del
continente las nuevas generaciones encuentren en las poéticas románticas uno
instrumento de disenso.
En Italia y Francia, los románticos intentarán derribar las fortalezas clasicistas.
mientras en Inglaterra la adhesión al canon romántico no es política tanto
más bien estilística.
La fecha inicial del romanticismo inglés se fija en 1798, año en el que
William Wordsworth (1770-1850) y Samuel Taylor Coleridge (1772-1834)
publican las Ballatas líricas, enriquecidas en la edición de 1800 por la Prefacción de
Wordsworth, en la que se propone una estética de la expresión objetiva.
Los temas que desde el inicio son queridos en el ambiente romántico inglés son lo sobrenatural,
el misterio y lo fantástico; al mismo tiempo, sin embargo, es en Inglaterra donde
nace el mercado editorial, que favorece ese proceso de desacrocalización
del poeta-profeta que se hace portador de ideales liberales y igualitarios.
La importancia asumida por la dimensión individual determina una explosión
dellalirica, en la que cada vez tienen más importancia las pulsiones del yo, que
ponen en definitiva un segundo plano la épica y los aspectos más argumentativos.
Emerge la tradición popular, en el centro de obras como la de George
Gordon conde de Byron (1788-1824): Peregrinación del joven Aroldo (1812) y
Giaur(1813).
Las obras de Byron introducen un nuevo tipo de héroe, abrumado por las pasiones
más extremas que desafían las reglas de la moral y que están destrozadas por culpas
espantosos e indicibles: es la figura del héroe titán/demoníaco, destinado a
tener un enorme éxito durante todo el siglo XIX.
El género de la novela llega a dominar en la prosa en cuanto a mucho
libre, móvil y sin modelos restrictivos.
El escocés Walter Scott (1771-1832) obtiene un éxito gigantesco en toda
Europa con Waverley (1814) e Ivanhoe (1820), che introducono nel continente il
nuevo género de la novela histórica, capaz de unir el elemento caballeresco y
medieval de los antiguos romances con la narración prosaico-realista de la
novela (el efecto final es la creación de un mundo pintoresco y romántico).
Las novelas de Scott se convierten en bestsellers de inmediato y se convierten en el modelo
dominante en toda la narrativa europea, solo con la generación siguiente
de novelistas, la de Stendhal (1783-1842)/Balzac (1799-1850)/Dickens
(1812-1870) se comienzan a mostrar también los aspectos más prosaicos y
desagradables que caracterizan el mundo contemporáneo.
4. La afirmación de los románticos en Italia
En Italia, la polémica clásico-romántica se abre en Milán en 1816, año en el que
la Biblioteca Italiana publica una carta de Madame de Staël titulada Sobre
manera y utilidad de las traducciones, en la que la mujer invita a los intelectuales italianos a
traducir las poesías románticas inglesas y alemanas para crear obras que surjan de
corazón
A la propuesta de de Staël responde el classicista Pietro Giordani, que
defiende el canon classicista y critica la recuperación de la Edad Media como época de
supersticiones y prejuicios: estamos ante la apertura del debate de la década
clasicista-romántico.
Son sobre todo jóvenes escritores activos en Milán los primeros en presentarse.
voluntariamente 'románticos' en un país neolatino.
El aristócrata Ludovico di Breme (1780-1820) escribe ensayos, a los cuales
risponderà Leopardi nel suo Discorsosulla poesia romantica, in cui oppone ai
precetti classicistas el 'furor poético' y la fuerza demoníaca de los personajes de
Byron.
El noble milanés Ermes Visconti (1784-1841), en las Ideas elementales sobre la poesía
romántica (1818) salidas sobre el Conciliador sistematiza las ideas de August Schlegel
y de la de Staël, pero toma distancia de la reevaluación de la Edad Media.
Lo que une a todos los escritores románticos activos en Milán es sin duda la
comunematrice iluminista, y por lo tanto la confianza en el progreso, combinada
pero también con la fe católica; elementos que mantienen a Italia distante de
ambientaciones oníricas e irracionales de la imaginación septentrional.
El burgués Giovanni Berchet (1783-1851) sostiene en su Carta semiseria
di Grisostomo a su hijo (1816) que la poesía debe acercarse ahora a un
público intermedio, a mitad entre el 'parisino' (los literatos) y los 'hotentotes' (la
plebe).
Por eso sugiere tomar como modelos las poesías de Burger.
La ofensiva de los románticos lleva, en el período de 1820-1840, al desarrollo de una
generación capaz de renovar el sistema de géneros y sobre todo capaz de
vencer en la disputa con los clasicistas ya que es más capaz de ir en contra
los procesos de transformación de la sociedad.
Los classicistas partían de una posición realmente limitante: la literatura
debe imitar las formas de los antiguos, aunque eso signifique limitar el público
que se beneficia de las letras; para los románticos, en cambio, es todo lo contrario: se debe
ir en contra de la mentalidad contemporánea.
En la escena literaria se impone Manzoni, considerado el líder de los románticos.
italianos por su poesía religiosa y patriótica, que le permite ascender
al ruolo discrittore 'nazionale'.
Las innovaciones románticas se reciben en primer lugar en el teatro, donde colapsa la
regla de las tres unidades y ahora también aparecen ambientaciones históricas (de edad
medieval o renacentista), que se centran en el elemento trágico, patético y
apasionado por involucrar al público.
El autor más célebre y apreciado es Silvio Pellico (1789-1854), que combina
religiosidad y sensibilidad patriótica.
La mediocridad nel melodrama de los libretistas es compensada por el talento
musical de los compositores, como Gaetano Donizetti (1797-1848) y Vincenzo
Bellini (1801-1835), que extraen las nuevas sugerencias del teatro romántico
y a todas las escenas de venganza/adulterio de las obras de Scott, Schiller, Byron, que
sono coniugate poi con la tradizione italiana del 'bel canto'.
En poesía, las sugerencias leopardianas son captadas por pocos, mientras que mucho más
hay éxito en los poetas que apuestan por el dialecto y aquellos que practican los géneros
de la balada y de la novela sentimental en versos: vale la pena recordar
Tommaso Grossi (1790-1853) y Berchet, cuyos trabajos se caracterizan por un tono
patético, da ambientaciones pintorescas y exóticas, de la figura del exiliado
por amor a la patria, del tema del amor/de la fe/de la familia.
En el campo de la prosa domina la novela histórica, en la que se distingue una
serie de escritores epígonos de la obra maestra manzoniana, que recogen por lo tanto
más atención a la reconstrucción histórica que Scott.
En Italia, la novela histórica continúa disfrutando de un inmenso éxito también
cuando ya en Francia e Inglaterra había sido relegado a un segundo
piano.
La mayor parte de estos trabajos carece de originalidad y tiende a seguir lo
mismo esquema además de tener para ambientaciones los mismos episodios
rinascimentales/medievales identificados como ejemplares en la lucha por
la independencia.
Estas novelas, caracterizadas por la presencia del narrador manzoniano
omnisciente, por lo tanto tienen una marcada función propagandística o de
entretenimiento, generalmente canalizado en un canal sin variantes.
La vuelta represiva de 1820-1821 garantiza un notable éxito al
género de libros de memorias, dentro del cual destaca la obra maestra de
PellicoMis prisiones (1832), en las que se cuentan, de manera austera y
conmocionado, las sufrimientos de los reclusos en las cárceles austriacas.
5. LA REVOLUCIÓN DIALETAL: PORTA Y BELLI
Dalla parte dei romantici si schiera anche il poeta dialettale Carlo Porta (1775-
1821), continuador de esa lírica en dialecto milanés que en el siglo XVII y en el
El setecientos se oponía a la Arcadia y al Barroco.
Porta, borghese, trae i suoi riferimenti dai membri della classe media, dipinta
como pragmática, desencantada y moderadamente igualitaria.
En 1816, en el máximo de su madurez artística, disputa con Giordani, que había
estroncado el trabajo dialectal de Porta, culpable de hacer más difícil la
formación de una lengua itálica.
Se trata de una disputa lingüística, destinada a prolongarse también en la fase post-
unitaria, en la que chocan los dialectos, lenguas 'municipales' y vivas, y el
fiorentino arcaico, lengua más pura pero conocida solo por los intelectuales.
En los textos de Porta, los personajes son a menudo también frailes gaudenti y sacerdotes, de los cuales
se representan deseos carnales (siguiendo la estela de Boccaccio y Voltaire) y
la dimensión física de los protagonistas.
Porta va en sustancia a revertir la moral perbenista, lo que produce las
secuencias cómicas y surrealistas.
Paralela a este tipo de producción, sin embargo, existe una segunda trayectoria del
trabajo portiano (La Ninetta del Verzee, Lamento del Marchionn di gamb avert), en
quienes son los pobladores que narran en primera persona su historia.
Porta devuelve así la palabra a los humildes, que a través del monólogo hablan
su lengua llena de invectivas, incongruencias sintácticas e intercalaciones.
Se trata esta vez de un cambio radical: la literatura dando voz al pueblo
restituye dignidad humana y espesor psicológico.
Las historias que el pueblo cuenta con gran ingenuidad son historias amargas pero no
lacrimógeno, que llevan al lector a identificarse con los aspectos más reales
de la vida: sensualidad, pasión, sexo, trabajo, necesidades económicas.
Toda la obra de Porta inspira al poeta romano Giuseppe Gioacchino Belli (1791-
1863), que paralelamente a una actividad pública como rimador satírico,
conduce de forma semiclandestina la actividad de rimador dialectal.
De formación iluminista pero reaccionario a partir de 1848, Belli no
nunca publicó en vida su monumental obra dialectal: i2000Sonettiin
romanesco, compuestos entre 1830-1839 y 1842-1847.
Como escribe en la Introducción, sus poesías son un ''monumento a la plebe de
Roma'', o sea a aquella que es la parte más humilde de la ciudad, que se expresa con
vivacidad en un lenguaje 'estropeado y corrompido'.
El 'romanesco' es la lengua que el gobierno papal ha relegado a la ignorancia y
la miseria, por lo que quienes lo usan apenas conocen las palabras italianas en
loro forma corretta (filosofo diventa ‘filosofo’).
Belli abandona el elemento narrativo de Porta, a quien prefiere formas teatrales.
como monólogos y diálogos, que le permiten dar a sus poesías un
tono de realismo desinhibido.
Sonettis se presentan como una polifonía de perspectivas diferentes, a las cuales
Belli decide dejar todo el espacio, relegando su voz en un espacio del
todo secundario por no decir mínimo.
El "hilo oculto" que une los varios sonetos, como explica Belli en la Introducción, está
desde el punto de observación desde abajo, que rompe por completo la perspectiva
de la clase media-alta del mundo.
La plebe de Belli vive en un mundo muy físico, del cual los 'Señores' no
conocen nada; un mundo sin tiempo y que parece no cambiar nunca, en
en cuanto a su cumbre siempre está el 'Visceddio' (el papa) que 'comanda y sse
no me importa.
[Link] MANZONI: LITERATURA ROMÁNTICA Y 'VERDAD'
CRISTIANA
El conde Alessandro Manzoni (1785-1873), nacido del matrimonio entre el conde
Pietro y Giulia Beccaria (hija del ilustrado Cesare Beccaria, autor de Dei
delitos y penas, 1764), es el más importante heredero del más prestigioso
tradición cultural milanesa.
En 1805, diez años después de la traumática separación de sus padres, se va a vivir
de la madre a París, donde conoce al historiador Claude Fauriel y donde escribe
también su primera obra, el poema En la muerte de Carlo Imbonati (1806).
El momento decisivo en su vida llega entre 1808-1810: después de haberse casado
la calvinista Enrichetta Blondel, se convierte al catolicismo.
La vuelta religiosa se traduce rápidamente también en un giro literario: entre el
1815 y 1822 salen los cinco Himnos Sagrados: La Resurrección, El nombre de María, El
Navidad, La Pasión, La Pentecostés (este último de 1822).
Se trata de poesías antilíricas, a medio camino entre la oración y la prédica, en las que el autor
deja a un lado el yo para poner en claro lo que para él son verdades
universales.
El año antes de que en Italia comience la disputa clásico-romántica (los primeros
quattroInnisono del 1815), Manzoni abandona el elemento mitológico y se
refacción de la poesía de los Salmos.
El léxico de los himnos es el de la alta literatura, y sin embargo al mismo tiempo
encuentra espacio la dimensión emocional con exclamaciones, interrogantes, los
apelaciones y repeticiones.
También las elecciones métricas van en contracorriente con el estilo neoclásico: a los
endecasílabos sueltos, Manzoni prefiere el decasílabo, más capaz de dar
ritmo al tema de la fe, que es rítmico, percusivo y cantabile.
Acostumbrado a la perspectiva internacional de París, Manzoni está más dispuesto y
capaces de otros literatos de alinearse con las nuevas tendencias románticas, sin
pero que eso signifique participar en el debate clásico-romántico.
Las obras que cierran esta primera fase de la producción manzoniana son:
- Las Observaciones sobre la moral católica (1819), en las que el autor replica al teólogo
calvinista Jean Charles de Sismondi, que había acusado a la Iglesia católica de
ha causado la ruina ética de los italianos.
Manzoni demostró haber perdido la confianza en la racionalidad ilustrada, a la
cuál hora opone la necesidad de un sistema de valores superior, que encuentra en la
fe cristiana.
- La tragedia El Conde de Carmagnola (1820), en la que Manzoni experimenta los nuevos
modelos dramaturgicos ajenos al neoclasicismo, y al mismo tiempo (hace esto
en la Introducción) se distancia de los escritores católicos más rigurosos, que
condenaban el teatro.
En el texto se representa la dramática vicisitud del valiente conde de
Carmagnola, que es condenado a muerte por el Gran Consejo de Venecia,
che está convencido de su traición.
El conde es capturado mediante un engaño del cual es artífice el amigo fraternal.
Marco, obligado a elegir entre la patria y el amigo: 'cualquiera que elija, es
culpa''.
El tema discutido es el de la fractura entre la acción política y las reglas morales.
tema del que es el coro (que habla en endecasílabos) a hacerse portavoz.
La conquista y el dominio son igualmente injustos para Manzoni, porque, y aquí
se recupera el cosmopolitismo ilustrado, rompen la fraternidad
universal entre los hombres, unidos por el sacrificio de Cristo.
El lenguaje y el estilo de la obra son solemnes y altisonantes, pero deliberadamente no
ricercati a la manera neoclásica en cuanto el deseo del autor es el de
hablar ante un amplio público.
El éxito del Carmagnola inaugura una fase de extraordinario éxito
creativo: de hecho, entre 1820 y 1823 es cuando Manzoni comienza sus dos obras más
importante.
Sin embargo, esta es también la temporada de la dura represión austriaca de
1820-1821, que causa la pérdida de muchos amigos y que ofrece la ocasión para
comporre il Marzo 1821, che verrà pubblicato solo nel 1848.
La otra gran obra de este período es sin duda El Cinco de Mayo, el
componimento poético compuesto a la muerte de Napoleón, en el que se refleja sobre
personaje del emperador, gran líder y político.
La grandeza de Napoleón, que se confronta con el destino impenetrable de
Dios, se interesa solo por la eternidad, sin que esto signifique renunciar
a la fe: Manzoni se imagina, de hecho, que en su exilio en Santa Elena el gran
general se haya confiado a la misericordia divina.
El esquema métrico es el disestino de heptasílabos, rítmicos a través del juego
de los acentos.
La relación entre la ética cristiana y la violencia de la historia, planteada contra el fondo de la
la lucha por la unidad, es el tema principal del Adelchi (1822), cuya elaboración es
precedida por un trabajo desatento sobre las fuentes históricas, que desemboca en el apéndice
de la tragedia: Discurso sobre algunos puntos de la historia longobarda en Italia.
NelDiscorsocerca di guardare no solo a los grandes personajes, sino también a
aquella 'inmensa multitud' que en la historia y en los documentos oficiales no
deja huella.
Él refuta así la teoría de que los 'Latinos' en el momento de la conquista franca
si de Italia ya se hubieran fusionado con los lombardos: ellos en realidad son espectadores
impotentidestinati solo a cambiare padrone (el paralelo con los italianos aquí
ovvio).
La vicenda del testo se desarrolla entre 772 y 774 d.C. y tiene como protagonista al
príncipe Adelchi, hijo del rey de los longobardos Desiderio, que no quiere
restituir a Papa Adriano las tierras que le ha despojado y que ahora planea
conquistar Roma.
Adelchi, como buen hijo, no puede más que obedecer a su padre y moverse hacia
Roma, cosa que sin embargo causa la intervención de Carlomagno, rey de los francos, que
repudia a su esposa Ermengarda (hermana de Adelchi), que muere confiando en
Dios.
Carlo logra vencer a los longobardos gracias a la ayuda del diácono Martín, que
representa el apoyo divino al franco, apoyo que sin embargo no debe ser
leído como una ayuda a lo justo.
Carlo es un soberano decidido, autoritario y sin escrúpulos, movido por la avaricia de
poder y de la ambición, el cual no tiene ninguna intención de 'liberar' a los
poveri Latini (el primer coro), pero a dominarlos.
Desiderio, Ermengarda y sobre todo Adelchi una vez derrotados emergen en
toda su fragilidad: Ermengarda es víctima de la Providencia, que la ha
condenada a la ''desgraciada suerte'' a la que están condenados aquellos que antes
dominaba; Adelchi en el punto de muerte invita a su padre a no estar triste por la
pérdida del trono, 'Godi que rey no eres', en cuanto quien gobierna de
el conquistador no podrá hacer ninguna acción amable.
El consenso recogido por el Adelchitoglie a la tragedia neoclásica el primado en el
teatro italiano.
En la Carta al Sr. Chauvet sobre la unidad de tiempo y de lugar en la tragedia, puesto
Como introducción a la edición francesa de su obra de 1823, Manzoni va
a delinear su poética del drama histórico.
Para Manzoni, la ruptura de las unidades clasicistas de tiempo y de espacio era el
medio a través del cual el tragediógrafo lograba reconstruir realísticamente los
relaciones que vinculan los eventos.
Mientras tanto, ya desde 1821 Manzoni había comenzado a escribir una novela.
histórico, un género que más que la tragedia podía permitirle dirigirse a
un público más amplio.
El texto en 1823 se llama temporalmente Fermo y Lucia, y con ella
Manzoni se proponía componer una novela más atenta a la verdad histórica
respecto a los de Scott.
La trama está ambientada entre Lombardía y Veneto entre 1628 y 1631, un período que
el autor define como 'mal gobierno, guerra, abusos, pestilencia'.
Privo de una tradición nacional a la que hacer referencia, Manzoni reinicia desde las
bases europeas del género, del Don Quijote de la Mancha (1615) de Miguel de
Cervantes (1547-1616) y obviamente de las novelas más recientes de Walter Scott.
La innovación respecto a las novelas de este último radica en dar más concreción
a la acción real de las personas, dando así espacio a lo que era opuesto al
espíritu romanzesco
Manzoni parte, por lo tanto, del análisis de fuentes del período, para poder hacer
emergere el espíritu del tiempo y por lo tanto hacer que la historia no sea un
ingrediente, pero respondo realmente.
La mayor dificultad es la 'pobreza de la lengua italiana', casi
exclusivamente escrita y fijada dentro del fallecido canon purista; además
no habiendo ni unidad lingüística ni política es difícil indicar cuál es la
lengua nacional.
Manzoni tiene, por lo tanto, el mérito de haberse inventado un idioma capaz de
coniugare la dignidad del escrito con la espontaneidad del habla: sin embargo el
El primer resultado de Fermo y Lucialo lo deja insatisfecho.
Por esto, se dirige a la parlata toscana contemporánea, que es una lengua
viva y sobre todo el heredero de la más autoritaria tradición literaria nacional.
La novela sale en 1827 (edición conocida como 'ventisettana') con el título I
Promessi Sposi. Historia milanesa del siglo XVII descubierta y rehecha por Alessandro
Manzoni.
El autor finge haber encontrado el texto de un anónimo del siglo diecisiete, verdadero
autor de la historia, que habría copiado en un estilo diferente al original
ampolloso y barroco.
El relato dialógico con el anónimo permite a Manzoni parodiarlo
asuntos más irracionales y retrógrados de la cultura del siglo XVII, pero al mismo tiempo
también de poner una distancia entre sí y los eventos representados, respecto a los cuales
si pone como narrador omnisciente, que va a dejarse algunas secuencias en las que
da juicios morales y políticos (imbuidos de ironía a veces sonriente y a veces
amara).
En el texto se encuentra un número realmente amplio de personajes: fra'
Cristóforo, personificación de la Iglesia fiel a la vocación de socorrer
los oprimidos; Sor Gertrudis, la 'monja de Monza', gracias al cual regresa el
tema ilustrado de la lucha contra la monacación forzada; el Innominato y su
‘’castellaccio’’ gótico, un personaje inspirado por los ‘’titanes’’ de Byron.
Todas las vicisitudes individuales de los personajes se entrelazan con las grandes desventuras del
tempo: la Guerra de los Treinta Años, la peste, los lanzicheneques que saquean el
país natal de los protagonistas, la carestía.
La conclusión de la novela simboliza tanto el final del recorrido de
formación de Renzo como cristiano, así como ofrecer un juicio sobre el sentido de la
historia: incluso quien se comporta de la manera más irreprochable puede enfrentar
‘’guai’’, a los cuales la única respuesta es la ‘’confianza en Dios’’.
La Providencia es un personaje ultraterreno, invocado más de una vez a lo largo
de la historia, que sin embargo no se caracteriza como un diseño preciso: el
el narrador permanece en silencio en el momento en que debería ofrecer el sentido de la
vicenda.
A la fina, lo que emerge es sobre todo el antítesis, el final positivo de los dos.
protagonistas, trasladándose a Veneto, y el colapso del mundo que los rodea, donde
la guerra continua.
La trama intricatísima hace imposible identificar cada tipo de esquema.
simplificador.
Manzoni ofrece al lector un complejo fresco de los comportamientos y de la
mentalidad de los diferentes estratos sociales de Lombardía, dejando pero justo a
quien lee la perspectiva del juicio ético en el ámbito de la moral cristiana.
Recuperando la lección de Pascal del 'Deus absconditus', el escritor
milanés recuerda que incluso en los tiempos más difíciles es posible comportarse con
honestidad y humanidad.
El texto ofrece sobre todo el punto de observación de los dominados, de aquellos
‘’genti meccaniche, y de pequeño negocio’’, es decir, de trabajadores del pueblo.
La pobreza, el analfabetismo, el hambre y los abusos de los poderosos son elementos que entran
con fuerza en el texto; esto sin embargo no se traduce en un lenguaje incorrecto, al contrario,
Manzoni en este sentido lleva a cabo una revolución conceptual y lingüística.
Los humildes protagonistas hablan en un italiano impecable y se expresan
a través de formas de razonamiento muy elaboradas.
En esto, y en la elección de excluir las pasiones amorosas (inútiles en la perspectiva de
una maduración cristiana), se pone el límite del realismo manzoniano.
La novela tuvo un éxito extraordinario desde su primera edición, también
en el extranjero, haciendo que Manzoni se presentara como sucesor de Monti al
vértice del mundo literario italiano.
Sin embargo, este triunfo también implica el final de la temporada creativa, frustrada.
de la reflexión sobre la incompatibilidad entre el rigor histórico y la imaginación
romanzesca.
Manzoni se dedica también al problema de la lengua, que lo lleva por un tiempo
mese en Florencia, para eliminar con un ''enjuague en el Arno'' los residuos
lombardi e dotare allo stesso tempo i Promessi Sposi di una lingua viva che
pueda funcionar como un modelo lingüístico adecuado para todas las necesidades comunicativas.
La novela se vuelve a publicar en 1840 (edición 'cuarantana'), esta vez
añadido de ilustraciones y de un apéndice ensayístico, la Historia de la columna infame,
en el que se reexamina el proceso contra los envenenadores milaneses de 1630.
Andando en contra de la opinión del ilustrado Pietro Verri, que había sostenido
que el proceso contra los untori se debía al fanatismo y a la ignorancia
Dei tempi, Manzoni sostiene en cambio que los culpables fueron utilizados por el gobierno.
español comecapri espiatori.
Una vez más se pone de relieve la acción moral del individuo,
que incluso en una época difícil puede elegir actuar con justicia.
La exigencia religiosa, moral y científica se hace en esta última fase cada vez más
fuerte, cosa que lleva al noble milanés a desmentir su itinerario creativo
del romance histórico, y en general, de los composiciones mixtas de historia e invención
(1850).
El romance histórico parece ahora al autor 'intrínsecamente contradictorio'.
en cuanto aparece imposible no considerarlo 'un engaño... que falsifica y
confunde la verdad histórica; la única cura a este mal parece ser precisamente la crítica
histórica.
Manzoni, a pesar del retiro de la escena literaria, permanece hasta la muerte la
personalidad más autoritaria y el único autor canónico del panorama literario
italiano.
[Link] LEOPARDI: LA RAZÓN, LA LÍRICA Y LA RISA DE LOS
MODERNI
Giacomo Leopardi (1798-1837) nace en Recanati, en el Estado Pontificio, de una
familia aristocrática de escasos recursos económicos.
Viene formato por una serie de preceptores religiosos adheridos a un catolicismo
conservador, aunque impregnado de principios ilustrados.
A los catorce años empieza a estudiar solo: aprende latín, griego e incluso
el hebreo, madurando así capacidades de erudito y filólogo; estos años de estudio
‘ matto e disperatissimo ’ influyen sin embargo en su constitución (se vuelve
de hecho raquítico y jorobado.
Establece amistad con el clasicista Pietro Giordani, quien lo acerca a opiniones
laiche y antilegittimiste, que lo llevarán a rechazar el propósito de la
familia de hacer que emprenda la carrera eclesiástica con el fin de poder
obtener una renta.
El enfrentamiento con los padres hará que la estancia en posteriormente sea totalmente desagradable.
Recanati, donde comienza a dedicarse a la poesía y a la reflexión filosófica.
En 1818 escribe el Discurso de un italiano sobre la poesía romántica (quedó
inédito), en el que se posiciona del lado de los clasicistas y se lanza contra las pretensiones
románticas.
A pesar de defender la necesidad de imitar a los antiguos, Leopardi también señala
una fractura entre la sensibilidad de los antiguos y la de los modernos; imitar los
antichi es necesario para liberar a los modernos de la ''corrupción'' producida por el
proceso de ‘incivilización’ cantado por los románticos.
Desde 1817 Leopardi comienza a anotar en el Zibaldone de pensamientos propios
reflexiones filosóficas; el texto, no pensado para la publicación, se redacta
especialmente entre 1821-1823 y se caracteriza por un estilo sintético y
corredera.
Inicialmente, Leopardi ve en la razón la causa de la infelicidad humana, que
deriva del avance de la civilización, que habría hecho colapsar las ilusiones
genera nei uomini dalla natura.
La razón es enemiga de la naturaleza, ya que 'aniquila la imaginación, la virtud,
amor patrio y heroísmo'', sentimientos sin los cuales la vida es ''árida''.
Los antiguos y los hombres de la Edad Media, a diferencia de los modernos, resultan por
Leopardi superiores en cuanto capaces de considerar reales los sueños producidos por la
imaginación.
Se trata de un razonamiento paradójico, en el que Leopardi critica la razón.
pero al mismo tiempo admite la verdad de sus descubrimientos; se presenta
por lo tanto, como una compra negativa e irreversible.
Gradualmente se acerca también a teorías empiristas y sensistas, que lo llevan
ad elaborar la 'teoría del placer', según la cual la condición de perpetua
la infelicidad del género humano se debe a la incapacidad de satisfacer un deseo
que no tiene límites.
La teoría del placer lleva a Leopardi a elaborar una poética con el centro en los
límites de la condición de los modernos, para los cuales es difícil poetizar debido a la
decadencia de las ilusiones y del dominio de la razón sobre la imaginación.
La poesía de Leopardi asume entonces las 'semejanzas del infinito', también
gracias a una cuidadosa distinción léxica, que a raíz de la reflexión
illumista distingue los 'términos', es decir, palabras con significado único, de las
'parole proprie', que no tienen un significado único y logran evocar
una multitud de concepciones.
Entre 1818 y 1823, Leopardi explora dos géneros líricos: la canción y el idilio.
che lo orientan hacia los clasicistas y de las cuales toman vida las dos primeras
recopilaciones poéticas.
LeCanzoni(1824) intentan el camino de la poesía difícil, aquella hecha de metáforas
complejidades y similitudes, de latinismos arcaizantes y de inversiones sintácticas:
son las poesías destinadas a la meditación filosófica que se refieren a
manera implícita ai Sepolcri de Foscolo, con los cuales comparten la inspiración
alsublime pindárico.
Simbolos de la recolección son el Último canto de Safo, que arremete contra lo amargo
destino que le ha negado el amor del hombre amado, y el Bruto menor, que se
mata cuando la república es derribada por César.
La infelicidad de los antiguos resuena en las dos líricas leopardianas, que se
se necesita un monólogo para dar voz a la infelicidad de los antiguos, insertado en
en ambos casos en el contexto de un inmenso nocturno lunar.
De las letras emerge la amargura por la relación irremediablemente perdida con
la naturaleza, de la que los antiguos aún podían escuchar la voz; la recopilación se
chiude con Alla sua donna, que trata del amor por una mujer perfecta y
inaccesible ya que es un habitante del perfecto mundo de las ideas platónicas.
Leopardi reinventa así la estética neoclásica en declive, experimento sin embargo
poco apreciado por los contemporáneos, que prefieren con mucho las letras
de inspiración patriótica.
La misma suerte se reserva a los Versos (1826), donde aparecen los primeros idilios, en los cuales
enciende la vida en una reinvención creativa de lo antiguo.
El idilio es un género lírico de la poesía helenística: breves bocetos de vida de
campaña, retratada del natural, muy imitada por los poetas del siglo XVIII
de la Arcadia.
Los idilios a diferencia de las Canciones apuntan a la simplicidad y juegan en un
abbasamiento de los tonos: sintaxis más lineal, ambientaciones cotidianas, léxico
meno elevado.
El metro es el de los endecasílabos sueltos queridos por el mundo clasicista, forma
ripresa quizás de una serie de composiciones de Monti a finales del siglo XVIII, de los
cual sin embargo Leopardi se distancia (de hecho, considera a Monti un poeta ''no del
cuore'', ma ''dell'udito''.
En la noche del día festivo en la luna regresan temas queridos como la antinomia entre
la angustia del yo-poetante y la calma de la noche.
Nocturnos iluminados por la luna, sueños, recuerdos, meditaciones solitarias frente a
la naturaleza evoca grandezas perdidas y sensaciones de anulación y de
infinitezza como en el más famoso idilio: El Infinito.
Qui l'io-poetante exprime y explora sensaciones y sentimientos que brotan
en el acto mismo de soñar.
A través de la introspección lírica, la fantasía se transforma en una sensación.
emoción de dulce fusión con la inmensidad, representada por ese 'mar' de
richiamo dantesco en el que el autor ''naufraga''.
La tensión hacia el infinito es virtual, representa una apertura ilimitada de
significados posibles.
Desde 1823, Leopardi se aleja de Recanati y vive primero en Milán y luego en
Bolonia, donde trabaja para un editor milanés lográndose emancipar de
familia económicamente.
La vocación lírica se desvanece momentáneamente, mientras se vuelve cada vez más
intensa la lectura de los filósofos materialistas franceses del Siglo XVIII (d’Holbach,
Helvetio, etc…).
El conflicto entre razón y naturaleza cambia definitivamente de connotación: ahora por
Leopardi todo lo que existe está compuesto solo por agregaciones de materia, que
es capaz de sentir y pensar.
Esto expone sin embargo la materia de los individuos con sentimientos (hombres, animales y
piante) a las mutaciones de la materia inorgánica, que es, por lo tanto, causa de todo
el dolor humano, en cuanto que el 'sistema de la naturaleza' coloca a todos en la condición
de sufrir.
La 'santa natura' de la primavera ahora deja espacio a un ciego mecanismo
indiferente, gobernado por el azar de las leyes absurdas/nefastas observadas por el
punto de vista de aquellos que lo habitan.
A la nostalgia por los tiempos antiguos le sigue la idea de que 'no hay otro bien que el'
no ser; solo ser animales o dioses salvajes alivia, aunque sea un poco, esto
amargo destino.
Esta nueva conciencia emerge en las Operetas morales de 1827, en las que el
el título quiere aludir a una aparente ligereza, matizada por las convicciones
sobre el significado de la existencia y de la acción humana.
El texto juega con la contraposición entre la tragicidad de las consideraciones y la
comicidad de los procedimientos estilísticos; notable es también la intención de servir de
una 'buona lengua italiana' en la revalorización de la filosofía del siglo XVIII.
Las Operetas son una obra de filosofía en estilo ilustrado del siglo XVIII, es decir
una reflexión racional no sistemática escrita en géneros entre sí diferentes; i
los modelos en este sentido son, obviamente, Voltaire (1694-1778) para los modernos y
Luciano de Samosata (120-180 d.C.) para los antiguos.
Los géneros presentes en el texto (desde el diálogo hasta la simple prosa narrativa) encuentran
un punto en común en el gusto por la paradoja.
El desarrollo novelístico, los viajes, el regreso a la vida de los muertos, la biografía
fittizzia se presentaron con tonos de vez en cuando fantásticos, grotescos o
surrealista al final de presentar un mundo materialista desencantado y negativo
en la que ''todo es digno de risa, excepto reírse de todo''.
El libro se abre con el relato mitológico Historia del género humano, en el que se narra
el gradual desarrollo de la civilización humana, destinada al inevitable descubrimiento
de la 'Verdad', es decir, de la absurdidad de la existencia.
Los emblemas de la obra son sin duda:
- El Diálogo de la Moda y la Muerte, en el que la primera convence a la segunda de
esseresua sorellain quanto essa di continuo stravolge idee, gusti, mentalità
haciendo envejecer cada cosa a una velocidad vertiginosa; en este sentido
la edad contemporánea, adoradora de la moda, es el 'siglo de la muerte'.
El Diálogo de la Naturaleza y de un Islandés, en el que un islandés, después de haber pasado
toda la vida a eludir los peligros y las asperezas del mundo natural, se encuentra
infine laNatura, che gli rivela che ilmondo non è fatto per gli uomini, che le
son del todo indiferentes y que el universo es un ciclo continuo de producción
destrucción, que funciona con el 'sufrimiento de los vivos'.
El materialismo y el estilo irónico/esquivo de la opereta no se encuentra el
consenso de los contemporáneos; además, la salida paralela de los Promessi Sposi (y la
la consecuente proliferación de novelas históricas de inspiración escocesa hace que
que estén relegadas a un público muy reducido, compuesto por eruditos.
Leopardi se traslada a Florencia, donde está cerca del grupo de liberales que frecuenta
los ambientes de la Antología de Vieussieux; en Pisa vuelve a escribir poemas
con el corazón de siempre
En la ciudad toscana toman forma iCanti(1831-1835), en los que se recopilan las
lírico que corresponden a los nuevos criterios poéticos y filosóficos del autor,
incluye las canciones y los idilios.
El título de la obra alude a la identidad entre la poesía y la música, teorizada por
Leopardi en sus reflexiones sobre la lírica, género poético 'eterno y universal'.
ICantirompono las particiones tradicionales del género lírico neoclásico, que
en cambio se habían respetado en las recopilaciones juveniles.
La sucesión de los poemas parece constituir una novela autobiográfica en
verso, que crece con el transcurso de la vida del autor, resultando así la
‘storia di un’anima’, en la que se establecen analogías, referencias y contrastes entre los
diversos momentos.
El libro está abierto por las canciones y los idilios, que remiten a la juventud, que
ya tiene el sabor de una replantación: en este hilo inicial aparece una
canción más tardía, El gorrión solitario, en la que emerge la similitud entre un
pájaro que no juega con los otros pájaros y el poeta que estudia y no juega con
los otros chicos.
Sin embargo, se trata de una similitud desconsoladora en cuanto a que el gorrion es
un comportamiento natural, mientras que el del yo no, lo que hace aumentar
el sentido de arrepentimiento futuro por la juventud y la belleza desperdiciadas.
Las nuevas necesidades filosóficas llevan a Leopardi a elaborar una nueva
forma métrica, la canción ‘leopardiana’, compuesta por el libre alternarse de
endecasílabos y septenarios.
Para Leopardi es una forma más capaz de evocar la musicalidad y de modular
la armoniosidad antigua, una estructura totalmente opuesta a los ritmos martilleantes y
todas las rimas obligatorias de los románticos italianos.
EnA Silviae neLe Ricordanzeritorna a la vida la Recanati juvenil, sin embargo ya
anch ’essa inserita nel nuovo orizzonte filosófico, en el cual la prematura
la muerte de Silvia adquiere una valencia positiva, ya que previene un 'vago
avvenir’'.
La desilusión de la madurez deja luego espacio para el misterio de la existencia
humana, tema del Canto nocturno de un pastor errante de Asia, en el que el yo hace
espacio a la conmovedora ingenuidad del nómada, que se dirige a la Luna como
a una antigua deidad.
Las escenas bucólicas y hechas de simplicidad resurgen en la Recanati de La quiete
Después de la tormenta: surge un alivio momentáneo que
sembra evocar la dulzura de la esperanza.
Para comprender mejor la estructura de los Cantos tiene sentido recordar que a
Firenze Leopardi establece dos relaciones cruciales: la amistad con Antonio
Ranieri (1806-1888), que lo asistirá hasta su muerte, y el amor no correspondido
con la noble Fanny Targioni Tozzetti (1801-1889).
El sentimiento por esta última, aún más que por la mujer misma, inspira una serie
di poesie presenti nella seconda edizione dei Canti (1835) e raggruppate nel
cosiddetto ‘Ciclo de Aspasia’.
Entre ellos vale la pena recordar El pensamiento dominante y Amor y muerte, donde la
la muerte es representada como una joven bellísima, a la que se le dedica el
componimiento afín que pueda rapir, ‘pietosa’, el sufriente yo-poetante.
El fin del amor emerge en la poesía A sí mismo, en la que asistimos a un
retorno de afirmaciones precisas y sin esperanza.
A disgusto en el ambiente florentino de la Antología, Leopardi se traslada a Nápoles
con Ranieri, donde se compone la Ginestra, un largo poemita publicado
en 1845 (edición póstuma de los Canti).
Qui encuentran espacio la argumentación filosófica y la invectiva polémica contra
las teorías antropológicas y el optimismo espiritualista del 'siglo soberbio y
tonto
El contraste entre la poderosa majestuosidad del Vesubio y la precariedad de la
ginestra, que con su ‘’dulcísimo’’ aroma ‘’consola a los desiertos ’’, evoca la
condición de los hombres.
Alle pretese di questi ultimi di centralità universale Leopardi oppone il
coraje de la ''lenta'' genista, lista para dejarse arrastrar por la lava sin
pedir al ''futuro opresor'' que me ahorre.
A diferencia de Manzoni y de los otros románticos, que escriben para su propio
tempo, Leopardi elige conscientemente ir en contra de las tendencias
hegemonía de su propia época; esto también en el lenguaje de la poesía,
placenteramente 'indefinido' y capaz de distinguirse del 'hablar prosaico y
vulgar
A través de una música antigua Leopardi modula problemas antiguos y modernos: en
una época en la que dominan los razonamientos sobre la felicidad de las masas y el
novela histórica, él elige el materialismo y reflexiona sobre las contradicciones de
una humanidad hecha de individuos que sufren.
La concepción de lírica como efusión espontánea del sentimiento señala una
frattura respecto a los mismos poetas románticos, de los cuales lo separa la concepción
materialista e iluminista del mundo.
La idea de una poesía filosofante como remedio parcial del sufrimiento
humana está en total conflicto con las instituciones culturales de su tiempo, cosa
que harán que Leopardi sea desagradable y rechazado tanto por la sensibilidad cristiana
sia dall’opinione pubblica, cosa che spiega il disinteresse dei contemporanei.
Será redescubierto y plenamente reconocido solo a partir de la segunda mitad del siglo.
3) DESPUÉS DEL ROMANTICISMO: LITERATURA Y
UNIFICACIÓN NACIONAL (1840-1860)
1. ALLÁ CONQUISTA DE LA UNIDAD
Alrededor de 1840 en los países más desarrollados de Europa, el crecimiento frenético de
el capitalismo industrial hace que los regímenes absolutistas entren en conflicto con la
burguesía empresarial, atestiguada en posiciones liberales, y la nueva clase
social del proletariado industrial, que reclama una revolución radical
social a partir de las posiciones expresadas por Karl Marx (1818-1883) y
Friedrich Engels (1820-1895) en el manifiesto del partido comunista (1848).
En Italia este último debate permanece en segundo plano, ya que los intelectuales
están comprometidos en la discusión sobre la unificación.
Per Giuseppe Mazzini (1805-1872) eso debe ocurrir en un sentido democrático y
sobre la base de valores cristianos, pero condensados con posiciones socialistas.
La nación es para él un patrimonio de memorias históricas/culturales a las que Dios ha
dado el deber de hacer avanzar a la humanidad; por esto a la estela de Victor
Hugo elabora el eslogan 'Dios y patria'.
El sacerdote turinés Vincenzo Gioberti (1801-1852) sostiene en su Del
primato morale y civil de los Italianos (1843), impreso en Bruselas para evitar la
censura, que data el alma católica de la península la única manera de llegar
la unificación sea constituir una federación con el papa a la cabeza.
A la hipótesis neogulefadi de Gioberti se opone la neoghibellina del noble
Cesare Balbo (1789-1853) que en Las esperanzas de Italia (París 1844)
adopta una posición políticamente más realista y propone la constitución de
una federación con en la cima la dinastía de Saboya.
Per Carlo Cattaneo (1801-1869), la unificación debe en cambio llevarse a cabo en la
forma de una república federal como en Suiza y en los Estados Unidos, para él el
el capitalismo liberal es el motor para desarrollar una sociedad en la que los intereses
los conflictos deben ser moderados jurídicamente.
El napolitano Carlo Pisacane (1818-1857) se posiciona en posturas socialistas y
afirma que la unidad debería alcanzarse a través de un ejército popular
revolucionario que instaure un orden social igualitario.
En la década de 1840-1850, muchas insurrecciones mazzinianas fracasan, sin embargo
La elección del papa liberal Pío IX (1846-1878) y los motines de 1848-1849 abren
nuevas posibilidades.
En 1848, Carlos Alberto de Saboya (1831-1849) declara la guerra a Austria: él
conquista la Lombardia, ma nel 1848 viene sconfitto a Custoza e nel 1849 a
Novara: la Primera Guerra de Independencia termina con su abdicación y el
retorno a un clima represivo en toda la península.
Solo en Piemonte el nuevo rey Vittorio Emanuele II (1849-1878) mantiene la
constitución: él confía al conde Camillo Benso de Cavour (1810-1861) el
compito di modernizzare lo Stato.
Cavour obtiene la alianza de Francia de Napoleón III, decisiva para la victoria
en la Segunda Guerra de Independencia (1859), durante la cual es tomada la
Lombardía y posteriormente a través de plebiscitos se anexan también Toscana y
Emilia-Romaña.
En 1860 la expedición de voluntarios democráticos al mando del general
Giuseppe Garibaldi (1807-1882) lleva a la conquista de todo el Reino de
Dos Sicilias: Cavour envía al ejército regular a conquistar Las Marcas y Umbría.
El 17 de marzo de 1861 nace oficialmente el Reino de Italia, que comprende toda la
península a excepción del Lacio, que quedó en manos del papa, y del área veneciana, dominada
de Austria.
[Link] Y MERCADO EDITORIAL
En el transcurso de la temporada del Risorgimento, todos los intelectuales están involucrados
directamente en la lucha política: el intelectual-militante se afirma llevando
él mismo delante del debate político y civil, participando a su vez en
moti risorgimentales, en los que muchos pierden la vida/son exiliados o encarcelados.
En las ciudades, este fervor hace que vuelva a estar de moda el periodismo político, cosa
que determina una expansión del público que impulsa a las pequeñas empresas
librerías a devenir de las grandes sociedades editoriales.
La revolución comienza en los Estados más liberales, por lo tanto el Reino de Cerdeña (Turín) y
dal Granduca di Toscana (Firenze).
Después de 1848, la Turín de Cavour se convierte en el centro cultural más importante.
de la península, donde fluyen muchísimos intelectuales atraídos por la industria
editorial y del Parlamento.
Milán organiza las iniciativas culturales más importantes contra el gobierno austriaco; se
señala el Politécnico (1839-1844, 1859-1866) fundado por Carlo Cattaneo, que
propugna una cultura laica y racionalista, presentando a los lectores las nuevas
prácticas de la ciencia y los desarrollos en los estudios humanísticos.
Cattaneo actualiza el clasicismo laico de Giordani y Leopardi proponiendo
una lengua comunicativa que sintetiza los diferentes hilos lingüísticos de
tradición literaria nacional, indicando así una propuesta
alternativa a la de Manzoni.
Cerca de Cattaneo está Carlo Tenca (1816-1883), quien funda el Crepusculo (1850-
1859), que propone una línea patriótica-liberal y propone una crítica
militante.
Entre los ensayos de Tenca se debe señalar Sobre las condiciones de la literatura moderna en
Italia (1846), uno de los primeros intentos en Italia de una crítica sociológica de la
literatura.
[Link] Y CRISIS DE LAS PROPUESTAS ROMÁNTICAS
Adquiere en esta fase mucha importancia la saggística (histórica, política,
) civili), mientras que dentro de géneros de ficción domina la producción media-
bassa.
Manzoni sigue siendo el escritor más autoritario, aunque ya se ha agotado su
fase de creatividad literaria.
Se desarrolla una literatura estereotipada de propaganda patriótica, que replica
los géneros y los motivos de la gran poesía romántica, lo que favorece en todos los
ambiti una elección de soluciones expresivas simples y esquemáticas.
La poesía es el género símbolo de la producción del Risorgimiento, modelada sobre
metri ritmati e cantabili di Manzoni e Berchet: in questo ambito si distingue
Giovanni Mameli (1827-1849), mazziniano genovés autor del Canto
nacional(1849).
Los lectores aprecian sobre todo el sentimentalismo agotador, las atmósferas de
sueño, las descripciones esteticistas, ámbitos en los que sobresale Giovanni Prati
(1814-1884), que experimenta el género de la novela en versos.
La sua Ermenegarda (1841) abandona el tema histórico para concentrarse en la
contemporaneidad; la historia es un drama burgués extraído de la crónica: una
la esposa adúltera abandona al esposo y a los hijos para escaparse con el amante, salvo luego
volveré humillada pidiendo el perdón del marido.
El autor más autoritario de estas tendencias espiritualistas es Niccolò Tommaseo
(1802-1874), que en sus Poesías (1872) experimenta motivos y géneros, inspirados en los
Salmibíblicos y a Dante.
A ligar los composiciones están los tormentos del autor, católico inquieto.
La recopilación Canti popolari corsi illirici e greci (1842) se separa, en cambio, de las formas
las métricas codificadas anticipan la introducción del verso libre.
Se distingue de esta producción el hilo cómico-realista del toscano.
Giuseppe Giusti (1809-1850), que reinterpreta en clave satírica los eventos y los
malcostumbres contemporáneas, sin embargo, nunca saliendo de las lógicas del buen
senso.
Después de dos décadas de éxitos, la novela colapsa en la narrativa europea.
histórico-escocés, mientras se leen/traducen/discuten las novelas de Balzac,
enfocados en la realidad social contemporánea.
También en Italia se impone la tendencia de poner el presente en el centro de la
narración literaria: el giro llega con Fe y belleza (1842) de Tommaseo,
en la que el autor también se dedica al análisis psicológico.
El espacio del narrador omnisciente es reducido, con el fin de representar
dentro los ''afectos'' de los dos protagonistas; el lenguaje es el de también el
fiorentino popular, llevando al extremo la propuesta de Manzoni.
El romance histórico sigue siendo muy vivo en Italia: Giuseppe Rovani (1818-
1874) es el primer novelista de entrega exitoso en Italia con su Cento
anni, publicado por entregas en la Gazzetta de Milán entre 1856 y 1863.
El romancero de folletín, ya exitoso en Francia con las obras de Eugène
Sue (1804-1857) y Alexandre Dumas (1802-1870), está hecho de tramas intrincadas,
aventurosos, giros inesperados y contrastes maniqueos entre el bien y el mal exacerbados.
El prestigio alcanzado en Europa por las novelas idílicas de George Sand (1804-
1876) hace que haya epígonos del género también en Italia, donde se
comienza a discutir sobre la necesidad de poner en el centro de la literatura el
proletariado campesino.
El manifiesto de la literatura rural es el De la literatura rural, dirigido a
1846 al romanziere Giulio Carcano (1812-1884) dal liberale Cesare Correnti
(1815-1888); la invitación es contar las sufrimiento de los ''pobrecillos''.
La narrativa rural se desarrolla principalmente en el área veneta, donde opera
la aristocrática Caterina Percoto (1812-1887), que escenifica de manera
dramáticas las durísimas condiciones de vida del mundo rural.
El realismo está limitado por los esquemas ideológicos, que dibujan oposiciones.
maniqueo entre la corrupción y el egoísmo de los ciudadanos modernos y un arcaico
universo campesino, pintado en tonos idílicos.
4. LA ''PALABRA ESCÉNICA'' DE GIUSEPPE VERDI
En las escenas teatrales predomina el melodrama del parmense Giuseppe Verdi
(1813-1901), el único que logra apasionar a todas las clases sociales.
Verdi debutó con una serie de óperas que se alinean con la vocación
literaria: con el Nabucco (1842) se convierte junto a Manzoni en el artista símbolo
de la lucha por la unificación.
En el centro de la primera producción de Verdi están las relaciones entre los padres-
padrones con los hijos, el amor absoluto que choca con las convenciones sociales, los
excesos y culpas.
Verdi pero no se limita solo a la búsqueda musical, sino que también dirige el trabajo
deilibrettistiperché pieghino il linguaggio alla messa appunto di una
palabra escénica
Después de las decepciones de 1848, la producción de Verdi se concentra cada vez más.
sobre la psicología conflictiva de los afectos privados: es la temporada de las obras maestras
de la madurez como Rigoletto (1851), Il trovatore (1853) y La traviata (1853).
Su trayectoria creativa se desarrolla aún más en estas direcciones en el
anni post-unitari, tratteggiando personaggi sempre più complessi come Don
Carlos (1867), Aida (1871), Otello (1887) y Falstaff (1893).
Para los últimos libretos Verdi se sirve de uno de los protagonistas de la Scapigliatura,
Arrigo Boito, pero sobre todo decide ir más allá de las divisiones tradicionales
tra arias y recitativos, para crear una inédita recitación melódica continua.
[Link] NIEVO: LAS AVENTURAS DEL YO Y EL NACIMIENTO DE LA
NACIÓN
En el caótico y confuso panorama literario italiano a caballo de la unificación,
se desarrolla el fulminante recorrido creativo de Ippolito Nievo (1831-1861), único
escritor capaz de dialogar a distancia con los grandes novelistas europeos.
Hijo de un magistrado mantuano y de una noble veneciana, él crece en
castillo de Colloredo en Friuli.
En 1848 participa en los movimientos y se acerca al ambiente mazziniano; en el mismo
periodo ha una storia d’amore con Matilde Ferrari (1830-1838), che, una volta
finita, autoparodia en el breve romance humorístico de inspiración sterniana
el Antiafrodisíaco para el amor platónico (1851).
Nievo se dedica a todos los géneros literarios, desde el periodismo hasta el ensayo, desde
teatro alla lirica.
Escribe también novelas de tema rural, en las que pinta con realismo la
vita de los campesinos, una novela histórica (Ángel de bondad de 1856), el relato
humorístico-filosófico Las desgracias del número dos (1857), esta vez inspirado por los
trabajos de Voltaire y de Sterne.
Entre 1857 y 1858 se dedica por completo a una novela mucho más ambiciosa
Es importante: Las confesiones de un italiano, en las que retoma soluciones ya
sperimentate in precedenza, ma si allontana dalle convenzioni e dai generi
prevalentes.
Como escribe en un artículo de 1858 en el que toma distancia de Carcano, que
acusado de retratar una 'sociedad artificiosa y personal', Nievo sostiene que quiere
representar sin censuras moralistas la sociedad contemporánea, sobre la
scorta de los procedimientos de los novelistas franceses.
La novela es la autobiografía ficticia, contada en primera persona, del ya
octogenario Carlino Altoviti, que escribe sus memorias desde el año de
nacimiento, en 1755, hasta 1858.
La suya es sobre todo la historia de una toma de conciencia política: 'Nací
venecianos…. y moriré por la gracia de Dios Italiano''.
Sus peripecias aventureras, sin embargo, están contrarrestadas por la escandalosa historia.
d'amore con la cugina Pisana, con la quale trascorre un'infanzia de cuento a
Fratta.
Con el paso del tiempo, se llega al descubrimiento de la sociedad y de sus mecanismos, con
las grandes contradicciones del Antiguo Régimen y su colapso bajo el peso de la
nuevas instituciones liberales.
Carlino primero combate en el ejército de la Partenopea, evitando sin embargo de
servir bajo la República Cisalpina del tirano Napoleón; vuelve entonces a
Fratta con la amada Pisana.
Carlino posteriormente participa en los movimientos de 1820-1821, terminando arrestado y puesto
en prisión, donde pierde la vista; luego se traslada a Londres, donde se recupera
la vista gracias a Pisana, que por atenderlo se enferma y muere.
Tornado a Venecia, Carlino educa a los hijos en los ideales patrióticos y lucha en el
curso de la Revolución de 1848.
El libro concluye con el diario del hijo Giulio, muerto luchando.
por la libertad de Argentina: el autor admite estar sereno y consciente
di haber vivido 'un bonito capítulo de historia', deseando por fin poder encontrar
Escrita en el más allá.
El imponente romance-río de Nievo (unas mil páginas) se presenta tanto
como una novela histórica tanto como una novela de formación, que trata
de la maduración privada del protagonista, que es paralela al desarrollo
colectivo de la identidad nacional.
Sin duda, los dos protagonistas, Carlino y Pisana, dominan la trama.
che pero están rodeados de un infinito número de personajes y destinos
diversos.
Pisana es retratada como un personaje fuera de lo convencional: provocadora
es inasible, ella asume rasgos adherentes a los imperativos moralistas de su
tiempo solo al final de la novela.
Inicialmente tiene una movilidad y una libertad de acción que sorprende tanto al
protagonista tanto quanto el lector, solo su 'conversión' final le permite
obtener el rescate ante el código cultural femenino y antropológico
dominante.
También Carlino es, sin embargo, un personaje que escapa a los esquemas tradicionales en
a quién reconducir la figura del protagonista: él es en efecto un antihéroe, del todo
opuesto a Jacopo Ortis en cuanto a que es más capaz de hacer que el lector se identifique
lo que lo convierte en el personaje de una narrativa realmente 'popular'.
Carlino, por un lado, nunca renuncia a los ideales civiles y patrióticos, respondiendo
así a la función político-pedagógica solicitada los personajes literarios
de la época, por otro lado comete errores, termina en situaciones cómicas o
trágicas, tiene ilusiones, esperanzas.
Desempeña una función doble: unamobile, como protagonista que
crece junto a la historia; una estática, como narrador que comenta la
propia historia sabiendo ya el resultado de los eventos, sobre los cuales a menudo se destaca un
velo de nostalgia.
La permanencia de este yo-narrante, que anticipa y analiza con distancia las
situaciones (a veces irónicamente, a veces conmovedoramente) le permite a Nievo de
relativizar la figura del narrador.
De hecho, sigue siendo omnisciente, y al mismo tiempo dotado de un fuerte
connotato ideológico.
Además, presentándolo como un 'no literato', permite al autor a Nievo (que
amaba definirse uno 'straccivendolo de literatura' de poner a punto un estilo
espontáneo y directo, capaz de 'hacerse entender por muchos'.
Nievo se distancia del modelo manzoniano basado en el florentino, prefiriendo
mezclar modos de decir venecianos, lombardos, emilianos en un plurilingüismo
vivaz y comunicativo.
La novela es demasiado escabrosa, políticamente y por la moral de la época, para
encontrar de inmediato un editor; Nievo, mientras tanto, participa en la segunda guerra
de independencia y la relata en versos (Los amores garibaldini, 1860).
La política entra de lleno en los escritos de los últimos años: deplora el abandono
del Véneto a los austriacos y afirma la necesidad de involucrar el estamento rural
en la unidad (de no dejar la tarea a los adversarios socialistas, sino a los párrocos de
campaña).
Participa en 1860-1861 en la expedición de los Mil y regresa a Sicilia en 1861 para
recuperar unos documentos necesarios para Garibaldi para defenderse de las trampas de
Cavour: desafortunadamente, el transatlántico en el que está embarcado desaparece en el Tirreno.
Las Confesiones se publican en 1867 por la amiga poeta Erminia Fuà
Fusinato, que lo reconfigura mucho, y cambia el título por presiones del editor
en la historia de un octogenario.
La figura demasiado transgresora de Pisana hace que el trabajo sea condenado por
contemporáneos, solo en el siglo XX, cómplice del cambio de gustos, la obra
otterrà el aplauso de la crítica y del público.
4) La ÉPOCA POSTUNIFICADA Y LOS DESAFÍOS DE LA
MODERNIDAD (1861-1889)
[Link] LA NACIÓN
Los primeros gobiernos del Reino de Italia, con Cavour y la Derecha Histórica, buscando
di completar la unificación de la península: en 1864 la capital es trasladada a
Firenze para acercarse a Roma; en 1866 Italia, aliada de Prusia, declara
guerra a Austria: es la Tercera Guerra de Independencia, en la que el ejército italiano
es derrotado, pero las victorias prusianas hacen que se tome el Véneto; la guerra
la franco-prusiana de 1870 permitió en cambio a Italia tomar Roma.
La conquista de la ciudad crea una fractura clara con el mundo clerical: Pío IX
scomunica a los re de Italia y prohíbe a los fieles participar en la vida política del
Estado (‘’Non expedit’’).
La burguesía reacciona adhiriendo a la masonería, que hace propaganda anti-
clerical y republicano; mientras tanto el gobierno elimina los aranceles y unifica los
leyes, que sin embargo desfavorecen al Sur, rural y poco industrial.
Si plantea el problema de 'hacer a los italianos', es decir, de crear una identidad.
nacional; problema no menor debido al enorme tasa de analfabetismo,
combatido introduciendo la educación pública a cargo del Estado.
El debate sobre el idioma se convierte en un problema institucional: el gobierno crea una
comisión, presidida por Manzoni, que llegará a producir un texto
(De la unidad de la lengua y de los medios para difundirla), en el que se replantea el modelo
del florentino contemporáneo, cosa que transforma los Prometidos en el punto de
referencia para la lengua escolar.
En 1876 el gobierno pasa a la Izquierda Histórica de Agostino de Pretis (1813-
1887), que se alía con la Derecha en 1882 (política del 'transformismo'),
involucrada en el proceso de creación de una religión laica del Estado.
A esta se educa la burguesía urbana, ya clase dirigente de la
nación, que se dota de una propia identidad cultural basada en el patriotismo,
laicidad y paternalismo hacia el proletariado.
Dura la vida de los campesinos, que a causa de las crisis del mundo rural, son
impulsaron la urbanización, contribuyendo al aumento de popularidad de los anarquistas y
socialistas.
2. LOS ESCRITORES CONTRA EL MERCADO: LA BOHEMIA, EL ARTE POR
EL ARTE, EL NATURALISMO
La Francia de Luis Felipe vive un período de expansión notable, incluso desde
punto de vista cultural-literario: aquí nacen los procedimientos más innovadores,
que sin embargo se encuentran haciendo frente a la modernización social y por lo tanto
dellenuove esigenze letterarie delle classi piccolo-borghesi.
La ya mencionada historia de éxito de la novela por entregas permite de
introducir una distinción fundamental entre aquellos escritores que se conforman
las necesidades del público, escribiendo textos a menudo estereotipados, y autores que
sacrifican el mercado y que solo pueden contar con el apoyo de la crítica.
El prestigio atribuido a la romántica figura del artista/escritor atrae a París
un impresionante número de jóvenes literatos, que adoptan un estilo de vida
desordenado y anticonformista: la vida llamada ‘bohemia’ (‘vida gitana’),
caracterizada por la intolerancia y desprecio por el conformismo burgués.
Ibohémiense la loro tendenza a perseguire l’eccentricità, sono resi famosi dal
romanzo Escenas de la vida bohemia (1851) de Henri Murger (1822-1861), en el que
emerge con fuerza el tema de la revuelta generacional.
El rechazo a someterse a los valores morales e ideológicos burgueses es expresado por otros
artistas a través del autocontrol y el rechazo de todo lo que es ajeno al arte.
Este ideal emerge con fuerza en la novela Mademoiselle Maupin (1835) de
Théophile Gautier (1811-1872), que introduce el concepto del 'arte por el arte'
a los cuales se referirán luego los poetas llamados ‘parnasianos’, interesados en la búsqueda
de la belleza por encima de todo.
El poeta Charles Baudelaire (1821-1867) lleva a las extremas consecuencias la
contradicciones causadas por la lucha entre el artista y el mundo burgués: cultivando
La idea de una belleza "siniestra y fría" él esboza la condición
del artista "maldito y burlado como un albatros" por la sociedad con tonos de
grandeza.
NeI Fiori del Male(1857) él se refiere al impecable estilo de los parnasianos,
dotándolo, sin embargo, de elementos góticos propios de los trabajos del americano Edgar
Allan Poe (1809-1849).
Emergen así temas como la belleza por lo bizarro, que desmitifica los
amores románticos idealizados, a los que se contrapone el amor por las prostitutas
etoni perversos/sadistas.
Prende voce un nuevo estado de ánimo, el 'spleen', es decir, un sentido de náusea.
astracción que expresa la incomodidad por la pérdida de significado y de puntos de
referencia causada por la vida despersonalizada en las modernas metrópolis.
Baudelaire también opera una revolución del lenguaje poético, en la que a un
el léxico perfecto y alto se acompaña de términos bajos y crudos realistas.
En esta poesía entendida como 'brujería evocatoria' domina la figura retórica
dellasinestesia, que justapone percepciones que pertenecen a sentidos diferentes.
En el mismo período, Gustave Flaubert (1821-1880) elabora una revolución.
narrativa con su novela Madame Bovary (1857), en la que retrata la mezquindad
de la sociedad pequeña-burguesa a través de la historia de una mujer que, aburrida por
vida de campo, da rienda suelta a sus insatisfacciones a través del adulterio.
Flaubert en el texto elimina completamente las intervenciones directas del narrador,
al final de hacer emerger la más absoluta impersonalidad; introduce luego también el
discurso indirecto libre.
Algunos rasgos de la obra de Flaubert se acercan a los trabajos de los autores cercanos a
positivismo de Auguste Comte (1798-1857), según el cual la ciencia de la
la naturaleza y el método experimental eran las únicas herramientas de conocimiento ciertas.
Estas posiciones se mezclarán a lo largo del siglo XIX con las del biólogo
el naturalista inglés Charles Darwin (1809-1882), que en su origen de la
especie(1859) eL'origine dell'uomo(1871) elabora la teoría evolucionista basada
sus conceptos de selección natural y lucha por la existencia.
El historiador Hyppolite Taine (1828-1893) utiliza las posiciones positivistas para
leer también los fenómenos artísticos-literarios, para él condicionados por tres factores
determinantes: raza (transmisión hereditaria de características físico-mentales),
ambiente (contexto social/natural), momento (contexto histórico).
Émile Zola (1840-1902) lleva al extremo las posiciones de impersonalidad
y la objetividad de Flaubert en el ciclo de los Rougon-Macquart (1871-1893), con el que
lanzar la corriente literaria del naturalismo.
Proponiéndose a describir el mundo social a través de la objetividad de la 'historia'
natural'', en el ensayo El romanzo sperimentale (1880) él sostiene que la tarea
del romanziere es analizar los fenómenos psicológicos-sociales.
Por lo tanto, se deben replicar las formas de hablar reales de los personajes, incluso en
forme más vulgares y groseras; las personalidades y los destinos deben ser insertados
en la perspectiva darwiniana de la lucha por la existencia, cuyo resultado se
determinado por la raza, el ambiente y el momento.
En sus novelas, que tuvieron un enorme éxito y que influyeron en una
intera generación de novelistas en toda Europa, Zola presenta las consecuencias
más atroces de la organización social capitalista, a la que él quiere llegar a
corregir a través de la representación de sus contradicciones.
[Link] INTEGRADOS Y REBELDES ANTIBURGUESES
El Risorgimento se convierte de inmediato en un mito de fundación, que se debe transmitir a la
nuevas generaciones a través del género de la memoria, en el que se destaca
Quarto al Volturno. Notas de uno de los Mil (1880) de Giulio Cesare Abba
(1838-1910), que narra la epopeya garibaldina a través de su diario.
Tras la consecución de la unidad, a las contradicciones entre los patriotas de
diversas orientaciones siguen las de los nuevos agrupamientos políticos.
El desarrollo en lugar de la enseñanza pública ofrece a los intelectuales un
nuevo espacio de trabajo, gracias al cual pueden sostenerse y al mismo
tiempo para cultivar tus propios estudios sin tener que depender del mercado editorial.
Si asoman a la escena literaria también las mujeres, relegadas sin embargo a un segundo plano.
piano sia sul fronte della produzione (romanos de entretenimiento) que sobre
quello laborativo (maestras de primaria).
A los hombres, guardianes del patrimonio cultural italiano, les corresponden las cátedras
de los liceos y de las universidades, que los transforman en sacerdotes laicos.
Con esta entrada en la enseñanza superior se crea la figura
del poeta-profesor, que asume una posición dominante en el campo literario: sí
pensé en Carducci, profesor en Bolonia, universidad que se convertirá en pilar de la
ofensiva positivista sucesiva.
La industria editorial, dominada en estos años por géneros menos prestigiosos
como narrativa/teatro, se extiende sobre todo en el ámbito del periodismo: la
la aparición de los diarios contribuye al nacimiento de una opinión pública.
Si abre también en Italia ese dilema entre autonomía y mercado, que llevará a la
nacimiento en Milán (aproximadamente veinte años después de la experiencia francesa), del movimiento
de la 'scapigliatura'.
El término se usa por primera vez por Cletto Arrighi (seudónimo de Carlo
Righetti, 1828-1906) en la novela La Scapigliatura e il 6 Febbraio (1862), en la que
él traduce en un contexto italiano la experiencia de la bohemia parisina.
De hecho, la ciudad milanesa también comienza a llenarse de jóvenes autores, por lo
más lombardos y piemonteses, unidos por la transgresión programática
de los códigos culturales de conducta impuestos por la clase burguesa.
La revuelta desprendida no arrastra, sin embargo, a las instituciones literarias, y ya después del
1880 el movimiento se apaga.
El panorama literario italiano sigue siendo muy variado y complejo:
de hecho, por un lado, la poesía y el ensayo son los medios preferidos para construir
la identidad cultural, la narrativa se presta más a las nuevas necesidades de evasión y
entretenimiento.
En la segunda mitad del siglo, el desarrollo de la industria editorial obliga a los
escritores a plantearse el dilema entre la autonomía artística y la adaptación al mercado.
En general, asistimos a una verdadera competencia literaria, en la que el
el primado es continuamente reclamado por diversas escuelas poéticas, que
contienen sobre todo el consenso crítico.
Esto explica por qué en Italia existen, en los mismos años, los trabajos de
Verga y los de Fogazzaro.
4. LA SAGGISTICA LETTERARIA DE SANCTIS A LOS POSITIVISTAS
El estudio y la enseñanza de la literatura italiana tienen un papel crucial
en las primeras décadas postunitarias; la obra de valorización actualizante de
riscopertacondotta en estos años debe ser insertada dentro del clima de
competencia cultural entre los grandes Estados.
La actividad completa del crítico Francesco De Sanctis (1817-1883), desde el tiempo de la
lucha risorgimentale a los roles institucionales en la Italia unida, está dedicada
al intento de crear un vínculo entre valores resurgimentales e interpretación
crítica de la literatura (destinada luego a la enseñanza).
Nacido en la provincia de Avellino, De Sanctis se forma en Nápoles, donde enseñará.
La Estética y la Filosofía de la historia de Hegel.
Retomando la idea de evolución histórica del espíritu, De Sanctis identifica
en la dimensión estética una dimensión autónoma e insustituible, capaz
dare concretezza sensibile agli astratti contenuti culturali di un’epoca.
En 1860 De Sanctis se convirtió en ministro de la educación pública del primero
gobierno unitario y se encarga de renovar la universidad cooptando intelectuales
de formación laica e idealista.
Con iSaggi critici (1866) y el Saggio critico sul Petrarca (1869) él renueva el
género ensayístico, inaugurando en Italia el modelo de la moderna monografía
crítica.
Insatisfecho con los manuales en circulación, en 1870-1871 publica la Historia de la
literatura italiana, en la que reconstruye a través del filtro del idealismo la vida
de grandes autores, que contribuyeron a la construcción de la 'conciencia
nacional
La narración está pensada como una 'novela de formación de la conciencia
italiana'', basado en elecciones estilísticas que confieren a los diversos autores el papel de
personajes emblemáticos, que resumen en sí el sentido de una época y los destinos
alterni de la nación.
La literatura italiana llega a una síntesis italiana ideal con Manzoni y
Leopardi, después de los cuales aparece el socialismo en el orden político, el
positivismo en el 'orden intelectual'.
Nelle successive letture sull ’Ottocento italiano, De Sanctis distingue il
conflicto entre la escuela 'católico-liberal', a la que se refiere Manzoni, y aquella
‘’democrática’’, que se refiere a Mazzini; el excéntrico Leopardi queda fuera de
esta disputa.
Con la victoria de la Izquierda Histórica, De Sanctis deja la enseñanza para
regresará a la educación pública, pero sigue interesándose en las corrientes
letterarie ormai dominanti en Italia: positivismo y naturalismo.
Llegan cosasLa ciencia y la vida(1872) yEstudio sobre Emilio Zola(1878), en el que
el esfuerzo de una lectura dialéctica se vuelve a intentar, a pesar de que el naturalismo ha
messo in crisi la sua idea di literatura como lugar de formación de la
conciencia nacional.
Los sucesores de De Sanctis, como él mismo había previsto, impulsan la crítica
literaria en el seno del positivismo: Pasquale Villari (1826-1917), docente en
Firenze, inaugura la temporada del positivismo italiano con su La filosofía
positiva y el método histórico de 1866.
Notabilísima es la influencia internacional alcanzada en estos años por las
teorías del psiquiatra Cesare Lombroso (1835-1909), profesor en Turín y
autor del hombre delincuente (1876).
La nueva disciplina de la antropología criminal, de inspiración claramente
lombrosiana, está destinada a influir también en la representación literaria
del criminal y de los marginales.
La dirección positivista es aplicada por los estudiosos de la llamada 'escuela
storica'', que se afirma después de 1880 y que se propone realizar un
inventario científico sistemático del patrimonio cultural de la nación
a través de la filología, la restauración de textos y el estudio de antiguos manuscritos
ineditos.
5. LA POESÍA: LA RIBELLIÓN DESENFRENADA Y EL CLASICISMO DE
CARDUCCI
Por elección fuera del mundo universitario, los desaliñados llevaron adelante
una revuelta literaria y cultural contra el estilo de vida y la mentalidad burguesa.
Inspirado como todos los desarrapados por Baudelaire, Emilio Praga (1839-1875) es
autor de la colección poética Penombre (1864), en la que describe el sentido de
desaparición histórica a través de una ‘violencia blasfema’ a las dos mayores
instituciones culturales de la época: Manzoni y la religión, agredida a través de
elementos satánicos.
Con Praga entran también en la poesía italiana elementos provenientes
del ámbito de lo feo, de lo macabro y de lo grotesco.
Un paso adelante respecto al trabajo de Praga lo dio el amigo Arrigo
Boito (1842-1918), poeta y músico que trabaja en varios libretos de ópera utilizados
daVerdi.
La transición bohemia es mucho más decidida en la obra de Boito en comparación con la que
de Praga, respecto al cual enriquece la gama de provocaciones y de
rimas disacrantes.
El absoluto dominador de la escena poética en los últimos treinta años del siglo es
pero sin duda Giosuè Carducci (1835-1907), cuyo éxito se debe: tanto
alla sintonía entre la producción literaria y la imaginación de la clase dirigente; sea
la convergencia entre su figura de profesor-vate y las necesidades culturales
de la nueva Italia.
El mérito de Carducci es el de haber restaurado los antiguos institutos literarios y de
haber relanzado una ética burguesa vinculada a la religión laica del patriotismo.
Carducci se forma en Toscana en los años de las revueltas del risorgimiento, a las que sin embargo
no participa, centrándose en el estudio filológico-erudito de la literatura
italiana.
En esos años, la poesía está dominada por el gusto sentimental y espiritual de
Prati, a quien sin embargo Carducci, como laico y democrático radical, se siente ajeno;
esto lo impulsa a recuperar el materialismo de Giordani y Leopardi en las Rimas
(1857).
En 1860, el primer gobierno unitario lo nombra profesor de elocuencia en
la Universidad de Bolonia, donde permanece el resto de su vida.
Inspirado por el ambiente democrático-republicano de la Segunda República,
En estos años, Divinemazzinianoe se une a la masonería, convirtiéndose en un
ferviente anticlerical.
Las pruebas de este período, inicialmente incluidas en Levia Gravia (1868) y en las
Poesie (1871), encuentran colocación definitiva en los Levia Gravia y Giambi ed Epodi
(1882), caracterizados por una retórica clasicista.
En esta colección, Carducci logra realizar un nuevo género de poesía
civil, que extrae su belleza del patrimonio cultural/ideal de la
nación.
Carducci se hace portavoz de la racionalidad laica y materialista del progreso.
social, pero al mismo tiempo ataca el Cristianismo y revive los grandes
episodios históricos, leídos en clave mazziniana/masona como etapas del grande
recorrido humano en la lucha contra la tiranía y el oscurantismo.
En 1879, una historia extramatrimonial le permite reavivar su vida.
privada, devastada por la muerte de su hijo Dante en 1879; mientras tanto se liga
a los ambientes de la Izquierda Histórica y sobre todo se acerca a la monarquía,
convirtiéndose así en el 'poeta' de la nación.
También en el ámbito literario emergen novedades, en primer lugar la adhesión a una
poética del arte puramente inspirada por el movimiento parnasiano.
Ora Carducci se propone de componer una poesía 'objetiva', en grado de
reproducir la armonía y la perfección de los antiguos y libre de
sentimentalismo romántico.
El classicismo de Questorinnovato se transforma en la recopilación de las Odi barbare
(1887), donde Carducci se inspira en la métrica del Renacimiento, que a su vez
se apoyaba en la métrica cuantitativa antigua.
Influido por los grandes descubrimientos arqueológicos de la época, el poeta toscano hace
resonar en la lengua y en los espacios de los modernos (como el ferrocarril) lo perdido
música de la poesía grecolatina, creando un orden y sonoridades nuevas.
El nombre 'odi' es un llamado a la recopilación del mayor poeta latino, Horacio.
(65 a.C.-8 a.C.), a la que también se hace referencia retomando el nombre de la amada: Lidia.
En el texto surge claramente una concepción aristocrática de la poesía, en
este caso mutuado de Leopardi.
Se afirma en conclusión un clasicismo estético-ético, que adora en clave
neopaganismo, la vitalidad de la naturaleza, los placeres concretos de la vida, la luz y
el amor por Lidia.
El poeta-vate habla así a sus contemporáneos, ofreciéndoles un neopaganismo
idealizado, hecho de patriotismo, de un ethos laico y de autocontrol racional
da contraponer a la crisis desaliñada y a la moral cristiana.
En el ámbito político, recupera la grandeza de la Roma antigua para construir el
mito nacionalista de Italia como la heredera del prestigio y del dominio romano.
LeOdi barbarehanno un successo enorme proprio presso la borghesia, anche
por la familiaridad de esta con la poesía clásica.
También en las siguientes Rimas nuevas, Carducci se esfuerza por expresar sentimientos.
intimi de manera objetiva: en el Lamento antiguo, composición por la muerte del
Figura Dante, nunca usa la palabra 'yo' y para expresar el dolor utiliza la
metáfora del árbol despojado de la savia vital: 'mi planta/golpeada y
inaridita’'.
LeRime nuove exploran las modernas medidas romanas de la rima y del verso,
ma a través de la misma matriz patriótica y parnasiana de las Odi barbare; el
el llamado a episodios épicos/antiguos sirve en cambio para compensar la ausencia de un
patrimonio épico medieval italiano.
Carducci se presenta en esencia como el absoluto dominador del mundo
letterario italiano e autore culminante della tradizione letteraria nazionale; la
la nominación a senador en 1890 debe leerse como un reconocimiento del prestigio y
como el signo de la adhesión a la política reaccionaria de Crispi.
En 1906 también recibe el premio Nobel, pero a esta altura él ya es el
símbolo de un mundo desaparecido.
6. EL DESPEGUE INDUSTRIAL DE LA NARRATIVA Y LA LITERATURA
POR LA INFANCIA
La industria editorial ya apuesta cada vez más por la novela, que abre a
autores italianos un mercado inmenso, hasta entonces dominado por autores ingleses
y los franceses.
La figura del romanziere se va profesionalizando cada vez más: se rejuvenece lo
estilo, la sintaxis se vuelve simple y fluida, se enfoca en las aventuras y en
elementos exóticos o fantásticos para complacer todos los diversos gustos.
La narrativa de consumos se desliga así cada vez más de la más
ambiciosa a nivel literario; se ha hablado en diversas ocasiones de lo extraordinario
éxito de las novelas por entregas.
A raíz de la novela de Sue, Los misterios de París (1843), se escriben cada vez más
historias macabras de delitos ambientadas en los bajos fondos de las grandes metrópolis.
Los lectores burgueses prefieren en cambio novelas mundanas caracterizadas por un
moderado realismo, y que a menudo tienen como núcleo amores imposibles
de la alta sociedad; temas frecuentes son mujeres fatales, historias de adulterio,
corrupción, especulaciones financieras.
El crecimiento de la alfabetización femenina hace que también las mujeres entren
en la industria editorial como novelista y como lectoras; a estas últimas
son dedicados relatos edificantes y el nuevo género de la novela rosa.
Las escritoras narran en cambio la condición más realista, retratando protagonistas
costrette a fare i conti con el código cultural del tiempo que las quiere madres
listo para soportar cualquier cosa por la familia.
Incluso los niños y adolescentes se convierten en parte del público: de hecho, nace la
narrativa para la infancia, que combina diversión y propósito educativo.
La novela Corazón (1886) de Edmondo de Amicis (1846-1908) se convierte en el verdadero
mejor vendedor de su propio tiempo, convirtiéndose en la novela juvenil por excelencia para
diversas generaciones de italianos.
La novela sigue un año de una clase de escuela primaria en Turín, en la
cual confluyen niños y personajes provenientes de todas las clases
sociales, a las cuales se les dirige la invitación a adoptar un comportamiento humanitario,
de colaboración, patriótico, orientado al trabajo y al sacrificio (según los
principios de la ética burguesa).
La otra obra maestra para chicos de esa época es Las aventuras de Pinocho (1883)
del fiorentino Carlo Collodi (pseudónimo de Carlo Lorenzini, 1826-1890).
En el texto se combinan elementos de cuento de hadas con la anárquica voluntad de libertad de
niños, unidos sin embargo por una macroestructura narrativa que se adhiere a
un proyecto educativo: se trata de una inédita síntesis entre el género adulto y
realista de las novelas de formación, con el elemento fantástico de la fábula
(destino, orchi, seres antropomórficos).
La obra se convierte en una obra maestra involuntaria, que en su época tuvo menos
successo diCuore, ma divenendo in seguito una delle favole per ragazzi più
ama de siempre.
Esto se debe sobre todo a la fusión de motivos novelísticos, situaciones de la
novela gótica, del mito bíblico (la ballena), de la leyenda popular (el País de)
Balocchi), los mitos clásicos (las metamorfosis).
Esto, sin embargo, no oculta la mirada crudamente realista sobre la vida social
contemporánea: Pinocho vive la miseria, el hambre y los abusos de las autoridades.
Sin embargo, sus peripecias, incluso en los momentos más dramáticos, no resultan
mai lacrimosa en cuanto a prevalecer es siempre la alegre voluntad de divertirse
típica de la mentalidad rebelde de los niños y su distancia del mundo de los
adultos.
7. EL ARTE DE LA NOVELA: LOS DESPEINADOS, DOSSI, LOS VERISTAS
Gliscapigliatisono los primeros en asomarse a la escena literaria italiana a
unidad ya completada.
Ellos siguen itinerarios creativos diferentes, y sin embargo participan en una atmósfera
común, es decir, esa propensión a transgredir los códigos narrativos, lingüísticos y
literarios.
Los escabrosos exploran los ámbitos de lo morboso, de lo sucio y de lo perverso,
desarrollando al máximo la vocación irracional del Romanticismo europeo,
sin embargo, invirtiendo al mismo tiempo los modelos lingüísticos.
Apripista è Iginio Ugo Tarchetti (1839-1869), che nel suo romanzo Tosca
(1869) cuenta sobre el amor del protagonista-narrador por una mujer fea,
por el cual surge una pasión morbosa y contradictoria.
La pasión por la macabra fealdad de Fosca, representa mejor
la ambigua fascinación desaliñada por la perversión.
Tarchetti tiene el mérito de traducir en Italia el hilo de la fantasía y el
del horror (por lo tanto, las experiencias de Hoffmann y Poe): en sus Cuentos
fantásticos (1869) irrumpen el misterio, la pesadilla y lo sobrenatural.
Camillo Boito (1836-1914), hermano de Arrigo, en sus Historietas vanas (1876 y
1883) traduce el repertorio escabroso en situaciones menos extremas y surrealistas.
InSenso(1883), su novela más conocida, habla de la historia de amor entre una
nobildonna veneziana y un militar austríaco, que en realidad se concede a ella
solo para poder poner las manos en su dinero.
Se trata de un amor antirresorgimental, marcado por la bajeza moral
dell’amato; lo stesso finale, con la vendetta crudele della donna, è quanto di
más lejos de las idealidades románticas de la generación anterior.
El pavese Carlo Alberto Pisani Dossi (1849-1910) emprende de manera aún
más radical es el camino de la revuelta contra los códigos literarios actuales.
Noble de familia, Dossi está cerca del ambiente de la scapigliatura milanesa y
esordisce nel 1868 con il romanzo autobiografico L'Altrieri, in cui assume il
nombre ficticio de Guido Etelredi para hablar de su infancia y adolescencia.
El segundo novela, la Vida de Alberto Pisani escrita por Carlo Dossi (1870), ve
este continuo juego de espejos aún más exacerbado.
Las convicciones narrativas son desestabilizadas por digresiones, por bromas meta-
letterarie del narratore, incastri di tempo e persino inversione dei capitoli.
Sin embargo, lo que más capta la atención es el excentro del sistema lingüístico.
hecho de palabras que desmantelan la norma manzoniana: arcaísmos, locuciones
dialectales, calcos de lenguas extranjeras.
Surge una ortografía propia, por lo que palabras no planas son
accentuate y se introducen nuevos signos de puntuación: el efecto es una
deformación grotestca a veces, o una nitidez icástica de las percepciones.
El trabajo de Dossi es demasiado experimental para ser apreciado por el gran público.
público, mientras que la crítica más refinada aprecia notablemente el alto
grado de experimentalismo.
Después de 1870, el éxito internacional de las novelas de Zola hace que también en
Italia se abra el filón del realismo, que se concentra sobre todo en Milán en los
ambientes de la scapigliatura llamada 'democrática'.
El portavoz de esta nueva tendencia es Felice Cameroni (1844-1913), quien
sostiene la necesidad de recurrir al naturalismo francés para denunciar todas las
injusticias de la sociedad moderna; una propuesta que se traduce sin embargo en una solo
superficial imitación de los temas zolianos.
Giovanni Verga y Luigi Capuana (1839-1915), ambos sicilianos, son los dos
escritores que logran los resultados más interesantes.
Ambos comienzan con la novela de entretenimiento burgués, que deciden
di abbandonare dopo la lettura dei romanzi di Zola.
La novela de Capuana Giacinta (1878) se convierte desde el principio en el manifiesto del
verismoitaliano: la historia es la de una mujer que sufre una violación, y que
por esto vive una vida marcada por la deshonra, que busca recuperar
sposando un hombre que no ama, que sin embargo engaña en la noche de bodas,
quedando luego embarazada y abandonada por su esposo.
Los temas que emergen de la historia son el malestar psicológico de la
protagonista y el desasosiego social que se ve obligada a vivir.
La obra se inserta de inmediato en la disputa entre los defensores del verismo-
naturalismo y entre sus detractores, los primeros sostenidos por los descamisados, los segundos
de la crítica tradicional (a la que también se suma Carducci, hostil hacia la novela
y a la amenaza verista por sus líricas clasicistas/históricas).
Capuana en 1880 publica los Estudios sobre la literatura contemporánea, en los que
sostiene la necesidad de un 'método científico e impersonal'; paralelamente
Verga lleva a cabo la mayor revolución narrativa desde los tiempos de Manzoni.
La hegemonía positivista y el interés por los estudios populares, unidos al prestigio
di Zola (y a lo que alcanzó laboriosamente Verga y Capuana) hacen que
entre 1870 y 1880 se difunde en toda la península la narrativa verista.
I differenzi scompensi de Italia hacen que se difunda un verismo
‘’regional’’, en el sentido de profundamente vinculado a la realidad de referencia.
La revolución operada por Verga permanece sin imitadores, y en realidad la
la misma adhesión al código verista se revela muy superficial.
[Link] VERGA: LOS VENCIDOS Y ''LA ILUSIÓN COMPLETA DE LA
REALIDAD
Giovanni Verga (1840-1922) nace en Catania de una familia de propietarios.
terrieri: compie estudios privados y se une a los garibaldinos en 1860, experiencia
después de la cual se dedica a la escritura asiduamente.
En 1865 se traslada a Florencia, donde debuta con la novela epistolar.
Storia di una capinera(1871), en la que se habla de la monacación forzada, tema que
lo alinea a la temporada anticlerical fuerte en aquellos años en la literatura.
En 1872 se trasladó a Milán, ya el mejor centro editorial del país, donde se
se inserta en los ambientes mundanos y literarios, logrando confiar en lo grande
editriceTrevessu romanzoEva(1873), storia di un pittore catanese che va
en Florencia para buscar fortuna, fracasando sin embargo tanto en el arte como en el amor.
El estilo sigue siendo el del romanzo burgués de entretenimiento, mientras que lo nuevo es
el tema de la involución del protagonista, que marca un alineamiento con los
posiciones desaliñadas (a las cuales se confirma la adhesión en la introducción).
Con las dos siguientes novelas Tigre real (1874) y Eros (1875), también estas de
ambientación mundana, Verga se convierte en un escritor profesional, capaz
di complacer los gustos del público.
Verga también compone diversas novelas, entre las cuales a esta altura merece de
ser recordada Nedda (1874), historia de una campesina siciliana que quedó huérfana
ed incinta, che incapace di mantenersi vede morire la figlia di stenti; vengono
quienes repropusieron los íconos patéticos de la narrativa rural.
Entre 1878 y 1880, Verga elabora un radical cambio creativo que lleva a un
definitivo salto de calidad de su escritura.
Se trata de un cambio tan repentino que todavía hoy estimula diferentes
hipótesis en la crítica, y que muy probablemente fue debida a la novedad producida
dall’Assommoirdi Zola (1877).
Desde 1878, Verga adopta cada vez más los procedimientos estilísticos de la novela.
sperimentale de Zola, representando sus escenas a través de formas el más
impersonales y objetivas posibles.
El confronto con lo scrittore francese lo spinge a ir más allá de las solicitudes del
mercado, presentando así a los lectores un mundo opuesto al que
de las metrópolis: la natal Sicilia, con su mundo hecho de campesinos, pescadores,
mineros y jornaleros.
Un universo arcaico e immobile, primitivo y salvaje para quien lo observa desde
fuera.
El giro ocurre primero en los cuentos: en 1880 se publica la colección Vida de
campi, en los que emergen sobre todo dos textos, ''programáticos'' en algún
modo en cuanto contienen una suerte de líneas guía para la lectura.
El primer texto es la novela Fantasticheria, en la que el escritor aborda un 'drama
modesto e ignoto’’ nel quale emerge‘’l’ideale dell’ostrica’’, secondo cui l’unica
posibilidad para la gente de este mundo arrestado de sobrevivir en el mundo
contemporáneo, listo para divorciar a quien "se separa por curiosidad".
La segunda novela-manifiesto es la dedicatoria a Salvatore Farina de la novela
El Amante de Gramigna, en el que escribe haber elegido el método de la impersonalidad
para poder dar la idea de que la obra parece 'hecha por sí misma'.
En los relatos, la mano del artista permanece efectivamente invisible, dejando que
hay otras voces que narran los acontecimientos, voces que utilizan dichos y
metáforas de la charla popular y del dialecto; masa reforzada por el uso del
discurso indirecto libre.
La impersonalidad del autor se expresa a través de la mimesis detrás de las voces populares,
pero también a través de la ruptura de la tradición, que siempre había excluido de la
literatura las verdaderas voces de los humildes (solo Porta y Belli habían desempeñado una
operación similar, utilizando sin embargo el discurso directo.
La eclipsis del narrador permite a Verga obtener efectos dramáticos con
pocos detalles esenciales, sin por tanto el elemento melodramático de los
scapigliati.
Ejemplos son las novelas La loba, historia de la pasión erótica que abruma una
donna matura, eRosso Malpelo, historia de un joven minero lleno de ganas
de rebelarse y ser explotado por sus compañeros como una bestia.
El elemento melancólico y patético está totalmente eliminado, lo que deja
espacio a la objetividad de consideraciones crueles y despiadadas.
El enfoque más radical de este procedimiento llega con la novela I
Malavoglia (1881), historia de las desgracias vividas por una familia de pescadores de
AciTrezza.
En la Prefacio, Verga explica que la novela formará parte de un ciclo de cinco.
romanes destinados a contar las diferentes aspiraciones que mueven hacia la
investigación de lo mejor
Se pasará entonces de la 'lucha por las necesidades materiales' en Malavoglia, a la 'avaricia'
di ricchezze borghese in Mastro don-Gesualdo, poi alla avidità aristocratica
en la Duquesa de Leyra, a la 'ambición' política en el Honorable Escipión y por último
al artista, que ''siente todas estas ansias'' en el Hombre de lujo.
Se trata del único intento coherente de traducir de manera reducida en
contesto italiano el ciclo de los Rougon-Macquart de Zola.
En 'El ciclo de los vencidos', Verga demostrará que el camino hacia la evolución y el
el progreso es hermoso solo si se ve desde afuera, razón por la cual el escritor debe
interesarse por esta inquebrantable ''humana'' y por los ''vencidos'',
atrapados por esta nueva 'lucha por la existencia'.
La trama de los Malavoglia gira en torno al choque entre dos universos que son
del todo inconciliables: la integridad de la ética popular, hecha de resignación,
duro trabajo, sacrificio y solidaridad; la tensión por la ascenso social, hecho de
egoísmo, lucha de todos contra todos, favorecida por la historia y el cambio.
La Tercera Guerra de Independencia de 1866 entra en la historia justo para ofrecer
una visión desencantada y amarga del mundo contemporáneo.
En el ámbito lingüístico encontramos elecciones totalmente opuestas al modelo ofrecido
da Manzoni: todos los protagonistas y sus paisanos hablan a través de
fórmulas dialectales.
La presencia del autor está en cambio oculta mediante el uso del coro de
paisanos, que expresa juicios, cuenta antecedentes y comenta los diferentes
situaciones en lugar del autor.
Las voces también ofrecen perspectivas ideológicas diferentes, haciendo emerger los
due assi etici dell’intera vicenda: solidariedad arcaica e interés moderno por
honor y dinero.
La narración coral es posible gracias al enorme número de personajes, que
produce una 'confusión' capaz de dar 'la ilusión completa de la realidad'.
Verga escribe a Capuana que los Malavoglia han sido a nivel editorial un
‘’fiasco completo’’, que lleva a Verga a comprometerse con el mercado,
motivo por el cual la novela siguiente, El marido de Elena (1882), es de
ambientación burguesa y obtiene una buena respuesta del público.
Para reafirmar la revolución verista, detenida por las contradicciones de la literatura.
Moderna, son las colecciones de novelas Por las vías Novelle rusticane (1883).
Verga abre luego un ciclo zoliano también en teatro, por lo que concibe una trilogía.
de obras ambientadas entre los campesinos del Sur, en el proletariado de Milán y
en los salones aristocrático-burgueses.
El primer ladrillo es el acto único 'Cavalleria rusticana' (1884), basado en una novela.
diVita dei campi: se presenta el drama que lleva a la muerte de Turiddu, un
bracciante retornado del servicio militar, acusado por venganza por la amante
Santuzza (que ha quedado embarazada) de ser la amante de Lola, esposa del rico
carrettiere Alfio.
Para hacer atractiva al público la historia que finalmente conduce a la muerte de
Turiddu, Verga decide adoptar el modelo lingüístico basado en
fiorentino, reservando a los diálogos el tratamiento verista (se eliminan las
‘’tirate’’, que los actores hacían al público para expresar sentimientos/emociones
nascoste).
Se extraía una tragedia hecha de pasiones elementales y universales (amor, odio,
vendetta, gelosia y piedad), de motivaciones y causas religiosas/económicas/
morales, unidas a la trama amorosa tradicional del teatro burgués.
La obra ha tenido un éxito clamoroso en todas las ciudades más grandes de Italia y también
en el extranjero, pero tras el fracaso de la segunda obra, Verga vuelve al ciclo de los vinti
escribe la segunda novela verista: Mastro-don Gesualdo, ambientada entre 1820
es 1848 en Vizzini, un pequeño centro del catanese.
Verga reduce aquí las novedades estilísticas introducidas en los Malavoglia, poniendo a
fuego ya no una comunidad, sino un solo hombre, un ave rapaz individualista que
se enriquece enormemente, incluso a costa de sacrificar la única relación
afectivo sincero (el de la amante Diodata).
La de Gesualdo Motta es la historia de un hombre movido por el deseo de
posesión, presentada como motor oculto de la sociedad, que conduce a la lucha
de todos contra todos.
La culpa que paga el protagonista es sobre todo la de no conseguir
integrarse en la sociedad, sufrir del mal de vivir en la sociedad, un tipo de
redicale negatividad que recuerda a Leopardi.
Los motines de 1821 y 1848 aparecen en el trasfondo de esta historia: ellos han
como objetivo derribar los regímenes absolutistas e instaurar modernos
democracias.
Di questi elementi di positività nel romanzo di Verga non vi è però traccia: nel
el romance la lucha liberal y sus ideales son vistos como instrumentos miserables de
un juego de roles.
Así Gesualdo se convertirá en revolucionario en 1821, con el fin de enriquecerse, y a la
el mismo tiempo en 1848, para proteger su patrimonio, se convierte en conservador.
En comparación con los Malavoglia, Verga devuelve espacio a la palabra externa del
narrador: se expanden los momentos descriptivos, con una valencia a veces sugestiva
y a veces simbólica.
La mirada del narrador es sin embargo totalmente distante, e incluso cruel en
algunas ocasiones cuando va a ofrecer detalles grotescos y miserables.
La mayor variedad de ambientes y la unidad garantizada por el protagonista hacen que
el romance más fácil para los lectores en comparación con los Malavoglia, decretando así el
éxito.
Sin embargo, en toda Europa ha comenzado una nueva temporada, que hace colapsar el peso
del naturalismo/verismo, y que encuentra en Italia su máximo exponente
en la estética de D'Annunzio, que con su novela El Placer (1889) ofrece un
manifiesto de la nueva tendencia esteticista.
Verga, obligado ahora a representar un universo social mucho más variado,
abandona el proyecto del ciclo de los vintie y se dedica a la escritura
saltuariamente, hasta el agotamiento de la creatividad: el valor de su obra
será reconocido por la crítica solo a principios del siglo XX, cuando se impondrá
como un clásico de la narrativa naturalista europea.
5) ESTETAS, DECANDENTES, SIMBOLISTAS EN LA CRISIS DE
FINE SECOLO (1889-1903)
1. LA CRISIS DE FIN DE SIGLO DE CRISPI A GIOLITTI
En 1887 llega al gobierno el líder de la Izquierda, Francesco Crispi (1818-1901),
que domina la escena política durante una década.
Los últimos quince años del siglo XIX hacen emerger todas las contradicciones
de la época post-unitaria, precipitando al país en la 'crisis de fin de siglo'.
El crecimiento demográfico italiano se enfrenta a una economía estancada, con la
miseria de los campesinos, obligados a emigrar.
La masiva escolarización y la ampliación del sufragio han sumergido en
sistema político nuevos ciudadanos, deseosos de ampliar sus derechos: se
diffundiendo así se funda el Partido Socialista Italiano (PSI),
en los que conviven los 'reformistas', partidarios de la lucha parlamentaria, y los
‘’massimalisti’’, fautores de la revolución; siempre en esta temporada se
difunde notablemente el anarquismo.
También la Iglesia toma posición: con la encíclica Rerum Novarum (1891) el papa
León XIII (1878-1903) critica las injusticias del capitalismo y condena los
socialistas; así nacen cooperativas y asociaciones católicas.
El sacerdote marchigiano Romolo Murri (1870-1944), dirigente de una de
estas organizaciones católicas, apunta a una democratización de la
sociedad italiana según principios cristianos.
Sus posiciones se alinean con las de los cristianos 'modernistas', que buscan
de conciliar la teología cristiana y la ciencia; en 1903 estos son condenados
del nuevo papa Pío X (1903-1914).
En estos años surge la figura del intelectual polémico, capaz de
orientar el debate político-cultural a través de fórmulas y provocaciones
típico del periodismo.
La mayor parte de estos adoptan posiciones ultraconservadoras, hostiles a
masa inculta y a sus reivindicaciones sociales y defensores de un nuevo tipo de
patriotismo: el nacionalismo, que los lleva a identificar el Estado como un
organismo que para sobrevivir se ve obligado a buscar potencia y expansión.
Crispi, presionado por socialistas y nacionalistas, opta por una vía autoritaria que
assegunda a ambos: trata de favorecer la colonización y de aumentar el
prestigio internacional del país sosteniendo el imperialismo colonial en
África.
Los italianos son sin embargo derrotados por los abisinios en la batalla de Adua (1896),
che costa il governo a Crispi, costretto a dimettersi; l’umiliazione subita non
no hace más que alimentar el sentimiento imperialista y autoritario de los nacionalistas.
El apogeo de la crisis se alcanzó en el trienio 1898-1900, cuando se suceden la
revuelta de Milán (1898) contra el aumento del precio del pan y el asesinato
del rey Umberto I (1878-1900) cumplido en Monza por el anarquista Gaetano
Bresci (1869-1901).
El nuevo rey Vittorio Emanuele III (1900-1946) promete restaurar la paz
interna, confiando la tarea al liberal Giovanni Giolitti (1842-1928), que
promueve el compromiso entre las partes sociales y involucra en la gestión de lo
Estado los socialistas y los católicos.
2. ESTETAS, DECADENTES Y SIMBOLISTAS ENTRE EUROPA E ITALIA
Muchos intelectuales reaccionan a la crisis de fin de siglo acusando a la
cultura positivista, a la que se opone la teoría de la decadencia, capaz de
representar lo mejor posible las angustias de las clases medias y las élites frente a las nuevas
reivindicaciones socialistas.
El nuevo clima favorece la reevaluación del espiritualismo de época
romántica, y al mismo tiempo el mundo artístico-literario es afectado por
una común inclinación al estetismo, del frecuente tema de la decadencia y
el llamado a los procedimientos estilísticos del simbolismo francés.
Con 'estetismo' se entiende la propensión a extremar el ideal.
parnasiano de 'arte por el arte': el culto de lo bello se convierte en el valor supremo de
un fenómeno de costumbre, representado por la excéntrica figura del ‘dandy’
che modela su propia vida como una obra de arte.
El gusto decadente se refiere a las poéticas de Baudelaire y Flaubert, proponiendo
una belleza extraña y corrompida por el crucial elemento del vicio, presentado
a menudo en forma de erotismo refinado y perverso.
La literatura y las artes figurativas evocan el derroche, el culto al placer y la
corrupción moral de los grandes imperios decadentes: Roma, Constantinopla,
Alejandría.
En oposición al primado parnasiano de la objetividad personal, sin embargo, se
impone en estos años la necesidad de la unicidad de la vida interior a través de
un lenguaje inasible.
En Inglaterra, el punto de partida del nuevo ideal estético se debe situar en
grupo literario-artístico formado alrededor del poeta/pintor Dante Gabriel
Rossetti (1828-1882), que se remite a la Edad Media y al Quattrocento italiano.
En 1848 fundó la 'Hermandad Prerrafaelista', que eleva a posición
egemone la época pre-renacentista, haciendo así emerger atmósferas
rarefactas y soñadoras, ricas en detalles refinados y preciosos.
El poeta Algernon Charles Swinburne (1837-1909) inserta el ideal de belleza
femenino prerrafaelita sobre la imaginería erótica braudeliana, creando así la
figura de la mujer fatal, lugar común de la literatura de esta época.
A Walter Pater (1839-1894) se le debe atribuir la elaboración de una
teoría del estetismo, que crea un canon estético, que va de Platón a los cuadros
de Leonardo da Vinci.
En la Alemania de finales del siglo XIX se impone en cambio el irracionalismo, que
florece en el ámbito filosófico-musical, en primer lugar gracias a la recuperación
de la obra de Arthur Schopenhauer (1788-1860), sobre todo El mundo como
voluntad y representación (1819).
Schopenhauer presenta un mundo dominado por el inconsciente impulso vital
de la 'Voluntad de vivir', que impulsa a hombres y animales a conservarse en vida
buscando el placer, que sin embargo nunca se satisface.
El filósofo alemán identifica en el arte, pero sobre todo en la música, el medio
privilegiado para liberarse de las pulsiones de la Voluntad de vivir, que es del todo
indiferente al sufrimiento causado al hombre por la falta de satisfacción de
placeres propios.
El pensamiento de Schopenhauer, aplastado por el de su contemporáneo Hegel,
influencia el trabajo de Richard Wagner (1813-1883), que expone la propia
poética en La obra de arte del futuro (1849).
El compositor alemán sueña con devolver a la música ese valor 'sagrado' que
tenía en la tragedia griega: proyecta así una 'obra de arte total', capaz de
unir palabras, música y acción dramática.
El objetivo del teatro wagneriano es mover las emociones de los
espectadores, poniéndolos en comunión con el mito.
Este resultado se persigue con la tetralogía El anillo del Nibelungo (1854-
1872), en la que Wagner fusiona el canto de los espectadores y la sinfonía de la orquesta
en una única masa sonora de la que emergen los 'Leitmotiv' ('motivos
conductores), que deben imprimir atmósferas emotivas en la memoria
de los espectadores.
El encanto de Wagner y Schopenhauer también conquista a Friedrich Nietzsche
(1844-1900), filólogo y filósofo que en El nacimiento de la tragedia (1872) propone
una modalidad revolucionaria de concebir la tragedia griega, concebida como la
sintesis perfecta entre la perfección clásica y armónica del apolíneo
la incomprensible fuerza del dionisíaco (es decir, 'alegría, dolor y conocimiento').
Nietzsche propone así una visión de grecorromanidad totalmente opuesta a la que
entonces dominante (elaborada por Wilamowitz), basada en la co-presencia de
pulsiones antitéticas: armonía y desorden vitalidad/euforia.
Sin embargo, Nietzsche se aleja de Schopenhauer y Wagner, para llegar a
ad unacritica delle 'illusioni' artistiche, religiose e filosofiche su cui si
basado en los valores éticos de la civilización occidental.
En Así habló Zaratustra (1885) y en la Genealogía de la moral (1887) el filósofo
Tedesco parte de la posición de la 'muerte de Dios' para afirmar la caída de los
valores de la religión, derribados por la racionalidad científica del positivismo
científico, que sin embargo es ella misma una ilusión.
Vivir sin los valores morales de la religión significa aceptar lo eterno
repetición de propios actos, yendo más allá de los límites humanos y transformándose
así en un 'Ubermensch' ('sobre hombre'), capaz de imponer a los demás la
propia 'voluntad de poder', es decir, una tensión hacia la afirmación del yo y al
posesión.
A fines del siglo Nietzsche se convierte en una leyenda viviente en Europa, y a su
muerte sus teorías, desafortunadamente a menudo distorsionadas y extremadas, se convierten en
instrumentos ideológicos utilizados en polémicas ant positivistas y antiliberales.
En Francia está activa una nueva generación de poetas capaz de llevar
en el extremo las posiciones de Baudelaire.
El primero y más radical de estos innovadores es Arthur Rimbaud (1854-1891),
según el cual quien crea no es realmente consciente de sí mismo, razón por la cual es
es necesario convertirse en 'vidente' a través de un desarreglo de todos los sentidos.
El viaje en lo irracional y en lo prohibido se basa en la capacidad del vidente de
atender a 'visiones' que trascienden la realidad; eso se expresa en el idioma
a través de un uso recurrente de la sinestesia.
La de Rimbaud es una poesía basada en sensaciones, estados de ánimo y
percepciones que se asocian libremente en una poesía dotada de gran poder
evocativo.
Su obra, conocida por muy pocos, es valorada por el amigo-amante Paul.
Verlaine (1844-1896), que a su vez contribuirá a la transformación del
lenguaje poético del siglo XIX, cada vez más ligado a la indefinición de la
música.
Su colección Romanzas sin palabras (1874) se opone al estilo parnasiano y
adopta registros confidenciales y apagados y describe objetos y situaciones
cotidiana, expresando en primera persona afectos ingenuos, la languidez de la
decadencia y matices.
Con Stéphane Mallarmé (1842) esta búsqueda de un nuevo lenguaje poético
alcanza niveles nuevos.
En sus pocas y complejas líricas, Mallarmé aspira a una lengua suprema,
que se aleje del lenguaje indigno de la cotidianidad y supere lo normal
conexión entre sonido y significado.
Según Mallarmé, la poesía debe abandonar la exactitud parnasiana y buscar
el 'senso misterioso de la existencia', una sugerencia recorrida a través del
‘’símbolo’’, no interpretable a través de un código predefinido, pero ¿por qué y
elegido arbitrariamente en función de las ideas/sensaciones que suscita.
En 1883, con la recopilación Los poetas malditos (1883), Verlaine valoriza lo radical
de la poesía de Mallarmé y Rimbaud, creando así una literatura
de vanguardia, a la que se adaptan también los otros géneros.
Joris-Karl Huysmans (1848-1907) escribe la novela manifiesto A rebours (conocido
en italiano con el título deControcorrente, 1884), en el que narra la historia de un
dandy esteta y decadente, Jean des Esseintes.
La mezcla de esteticismo inclusivo y misticismo se acuerda perfectamente
toda la rinascita espiritualista en curso en las clases medio-altas.
La búsqueda permanente de novedades y la necesidad de diferenciación llevan sin embargo
los principales escritores a diferenciarse en varios grupos:
- El decadentismo se remite a Verlaine, por lo tanto buscan una poesía musical,
basada en emociones simples y cercanas a las de los bohemios.
- El simbolismo evoca a Mallarmé y vive la poesía como una religión
suprema, a cui votare un linguaggio complesso, sofisticato ed ermetico, che è
accesible para pocos.
Los simbolistas y decadentes ponen en crisis la hegemonía parnasiana en la poesía y
la naturalista en la narrativa, principalmente a través de posiciones ideológicas y
culturales conservadoras, difundidas a través de la revista Revue des deux mondes.
El director es Ferdinand Brunetière (1849-1906), que desde este escenario
mete en el orden del día la polémica contra el reformismo liberal y la
laicidad en el campo político.
Sus declaraciones sobre la 'quiebra del naturalismo y de la ciencia'
señalan el culmen del éxito de la mentalidad antipositivista.
LaRevue traduce y valora narradores extranjeros alternativos al naturalismo, en
De manera particular, los narradores rusos, cuyas obras satisfacen las necesidades de
religiosas y espirituales.
En Crimen y castigo (1866), Fedor Dostoevskij (1821-1881) presenta una historia
en los que emergen sobre todo los dilemas que desgarran el alma y la
psique del protagonista; las grandes novedades introducidas por los autores rusos son
pero recibidas solo parcialmente.
Paul Bourget (1852-1935) lleva al éxito el género de la novela psicológica
e imita a los novelistas rusos, pero solo para oponerse a la 'vulgaridad' de los ambientes
naturalisti el derroche y la elegancia de los ambientes sociales y aristocráticos, pero
también el tema del análisis del yo.
También en Italia, poco después de 1880, nuevas generaciones de intelectuales, arrastradas
de la mentalidad decadente, comienzan a poner en crisis el positivismo: una
svolta que parte de las ciudades de Florencia y Roma.
En Roma, la revolución es introducida por la revista Cronaca bizantina (1881-1885).
che contamina la poesía de Carducci con las posiciones de Schopenhauer y Pater,
elaborando un gusto literario parnassiano y prerrafaelita.
En los años siguientes se impone el estilo decadentista y simbolista de Pascoli y
D'Annunzio, y la revista Il Convito (1895-1900) se impone como punto de
referencia.
El Prólogo de la revista, escrito precisamente por D'Annunzio, es un manifiesto elitario
es antidemocrático.
La revista se dirige a un público reducido, de alta extracción social, en
el cual se difunde el pensamiento ‘ aristocrático’ de Nietzsche, que favorece
la idea de un nuevo 'Renacimiento latino' capaz de oponerse a la hegemonía
cultural de Europa del Norte.
El mayor centro de irradiación es, sin embargo, Florencia, donde está activo Angelo Conti.
(1860-1930), elaborador de un espiritualismo neoplatónico y enemigo jurado
de los positivistas, acusados de producir la ''putrefacción de la cultura''.
Fondeando Platón y Schopenhauer, Conti elabora una teoría ascética del arte
como instrumento de elevación espiritual, posición a la que se refieren las revistas
Vita Nuova(1889-1891) e Il Marzocco(1896-1932), quest ’ultimo rivale del
Convitonel ruolo de cabecera del esteticismo italiano.
En estas revistas conviven dos tendencias opuestas: por un lado el nacionalismo
agresivo e imperialista, cercano del elemento esteticista y aristocrático de
D'Annunzio y Pascoli; del otro lado el simbolismo humanitario y socialista de
Pascoli, que escribe sobre el Marzocco poemas e intervenciones teóricas.
3. GABRIELE D'ANNUNZIO: EL ESTETA DE PROFESIÓN
Gabriele d'Annunzio (1863-1938) nace en Pescara en una familia rica.
borghese, que le proporciona una instrucción classicista-humanista que lo lleva, a
solo dieciséis años, publicó su primera colección de versos: PrimoVere (1879),
inspirada en las Odas bárbaras de Carducci.
En 1881 se trasladó a Roma para los estudios universitarios y inmediatamente se
se inserta en el entorno periodístico y en los salones de la alta sociedad.
Desde el principio adopta el estilo de vida inconformista del dandi: los
escándalos eróticos, las relaciones mundanas y las intervenciones periodísticas lo
rendono el verdadero ídolo de la capital.
Escribe sobre la Crónica bizantina, cuyo editor Sommaruga, la publica en 1882
due libri: la raccolta di poesie Canto novo, in cui emerge un gusto per le
metáforas bizarras y preciosas, y la colección de novelas Tierra virgen, ambientadas
el nativo Abruzzo, un mundo primitivo y gobernado por instintos bestiales, que sin embargo
tienen como fondo una naturaleza sensual y exuberante.
Ya en esta primera fase de su producción, emergen en D'Annunzio dos
puntos fijos de su personalida cambiante: la disposición narcisista y
vitalidad sensual y arrolladora.
En el ámbito público, él demuestra ser muy capaz de captar los gustos
del público masivo, ya sea a través de medios convencionales o con los nuevos
medios de comunicación (como publicidad y cine).
Roma es en esos años, junto con Florencia, el principal centro de irradiación
de las nuevas poéticas antipositivistas, que D'Annunzio no solo logra hacer
propio, pero también para hacerlas adecuadas para un amplio público a través de un estilo
aúlico, arcaico e incluso esotérico.
En su producción se mezclan elementos de moda: desde las seductoras fatales,
la leyenda medieval; desde los episodios de perverso erotismo hasta las situaciones de
fábula.
Son frecuentes las alusiones sexuales, que atraen mucho a los lectores y que
sconvolgono la crítica, aún cerca del modelo carducciano.
El clima cultural de la época postunitaria ya está superado, y D'Annunzio de esto
es perfectamente consciente: el mercado requiere géneros de entretenimiento, y el
el poeta abruzzese se enfrenta a esta necesidad.
En 1885 se dedica a la 'forma novela', adaptándose a la nueva atmósfera: es
la génesis de El Placer (1889), novela en parte autobiográfica que introduce en
Italia atmósferas, elecciones estilísticas y personajes del nuevo gusto
antinaturalista.
A los personajes y a los ambientes populares burgueses, D'Annunzio contrapone
una alta sociedad idealizada, que se alinea con el gusto conservador de la Revue de
dos mundos.
La figura del protagonista Andrea también se refiere a modelos antinaturalistas.
Sperelli (que tiene en los personajes de Huysmans y Bourget sus antecedentes),
scisión entre el ideal del esteticismo y el autocontrol, y una psicología afectada por
‘’potencia volitiva’’ e hipersensibilidad nerviosa.
El narrador dannunziano, a diferencia de los Veristas, no se eclipsa: describe los
pensamientos de los personajes, los pensamientos, las inclinaciones íntimas y interviene con
comentarios, máximas y digresiones.
Los objetos y personajes no están representados con realismo, sino que son
trasfigurati estéticamente de descripciones líricas y comparaciones nobiliarias.
Il Piaceresi demuestra una hábil manipulación de materiales estéticos a la moda,
de ideologías elitistas y situaciones románticas estereotipadas, situadas dentro de
una estructura narrativa atractiva, basada en continuos flashbacks y anticipaciones.
Se trata de un producto pensado para la moderna industria cultural, que detrás
la pretensión de referirse solo a la clase media-alta, es en realidad absolutamente capaz
de seducir al público masivo.
El libro, salido en el mismo año que Mastro-don Gesualdo, es una extraordinaria
éxito, también a causa de las polémicas sobre la inmoralidad del protagonista.
D'Annunzio, ahora poeta y literato de éxito, se va imponiendo cada vez más.
en la escena literaria italiana como el sucesor de Carducci en el cargo de
vete
El punto de referencia sigue estando fuera de Italia: está en París.
guarda para mantenerse siempre constantemente actualizado sobre las corrientes estéticas
y filósofos más vanguardistas.
El Poema paradasiaco (1893) se alinea con las tendencias del simbolismo francés
a través de lo que en apariencia parece un lánguido diario sentimental,
pero que en realidad se presenta como una brillante reinvención temática-
musical destinado a la recuperación de los modelos hegemónicos en Francia.
De Verlaine y de Pascoli retoma la reelaboración de los buenos sentimientos y
de los afectos familiares, de los simbolistas en cambio las estatuas, los jardines de rosas y los
atmósfera elegante.
También en narrativa D'Annunzio recoge las nuevas modas culturales parisinas:
arrivano así Giovanni Episcopo (1892) y L'innocente (1892), con los que se reanuda
los temas de la novela rusa.
En los textos, por lo tanto, se encuentran sentimientos anormales y mórbidos; el Inocente si
concluir con el infanticidio cometido por el protagonista, incapaz de soportar
el engaño de la esposa, que quedó embarazada del amante.
El texto será apreciado sobre todo en Francia, permitiendo a D'Annunzio de
alcanzar la fama internacional.
Los romances siguientes El Triunfo de la Muerte (1894) y Las Vírgenes de las Rocas (1895)
introducen en cambio en la reflexión dannunziana el pensamiento de Nietzsche,
che in realtà il letterato italiano comprende molto poco, dal quale riprende la
noción de superhombre, que se transforma en un modelo ideológico-literario sobre
cuyas bases son sus alter egos literarios (más cercanos a los personajes de Byron que a lo
Zaratustra).
Se trata de la enésima elección exitosa, que acerca a D'Annunzio a las élites
conservadora y antidemocrática y que lo impulsa en 1897 a hacerse elegir en
Parlamento con ideas ultrarreaccionarias e imperialistas cercanas a la derecha, que
pero abandonará para sostener el obstruccionismo antiautoritario de la Izquierda
nel1900.
La crucero en Grecia al lado de la amante Eleonora Duse (1858-1924), actriz
de fama internacional, lo aproxima al ideal mitológico de la Antigüedad y lo
te empuja a teorizar un renacimiento latino (limitado a Francia e Italia, herederos de
Roma) que se opone al prestigio cultural nordeuropeo, personificado por
Wagner.
Esta posición encuentra su lugar en la novela-poema El fuego (1900),
ambientado en una Venecia suntuosa y melancólica, que crea una atmósfera que
destaca los efectos de la prosa lírica, que intenta recrear los leitmotivs wagnerianos.
El protagonista del texto, Stelio Effrena, es el enésimo alter ego del autor, que es
esta vez el instrumento para expresar una nueva poética de inspiración
schopenaueriana basada en el concepto de 'arte-olvido'.
Effrena/D’Annunzio sueña con un nuevo género de ópera, capaz de volver a poner
al centro la 'parola', rilegata da Wagner in secondo piano; il romanzo si
cierra con una escena emblemática: Stelio que lleva a cuestas el ataúd de
Wagner.
Los ideales expresados en El Fuego son retomados en el drama de ambientación
pastorale La hija de Jorio (1904): una revisión de las antiguas trilogías de los
agonías de la classicidad griega.
La obra está concebida en tres actos, cada uno de los cuales es autoconclusivo y
autosuficiente, además de estar basado en el principio aristotélico de unidad de espacio,
tiempo y lugar.
Los protagonistas no son, sin embargo, los del mito, sino los pastores del folclore.
abruzzese, inhabitants of an ancient land and out of time, colored however by the
principales tendencias contemporáneas.
La historia cuenta del enfrentamiento entre la autoridad patriarcal de Lázaro y los
sentimientos de su hijo Aligi, enamorado de la extranjera Mila.
El enfrentamiento culmina con el parricidio, tema típico de la tragedia griega, que era
estado actualizado ya por Dostoevskij en Los hermanos Karamazov (1880).
La culpa individual de Aligi se contrarresta con la violencia y la voluntad de
posesión carnal a la que se entrega el pueblo tras la muerte de Lázaro, una
situación dramática a la que solo el sacrificio "espiritual" de Mila pone
remedio.
Su última broma, 'la llama es hermosa' (gritada a Aligi mientras se lanza entre
la llama), resume la ambigüedad de la situación: ¿es quizás la consagración
¿de la vida al dionisíaco? ¿O una forma exaltada de delirio?
La referencia a elementos indecifrables se traduce en un lenguaje abstracto y
indecifrable, que confiere a los personajes una especie de ritualidad.
D'Annunzio vuelve también a la poesía, único campo en el que puede decir de
conocer a un competidor (Pascoli) capaz de contenderle la herencia de
Carducci.
En el ámbito lírico, el proyecto de 'Renacimiento latino' se transforma en lo ambicioso
ciclo de poemas titulado Laudes del cielo del mar de la tierra y de los héroes.
El término 'Laudis' hace referencia a la poesía religiosa medieval de San
Francesco de Asís (1181/1182-1226), pero también se refiere al imaginario
espiritual de los pre-rafaelitas.
La nueva poesía dannunziana, inspirada en las teorías anticristianas de Nietzsche,
si hace portadora de un culto pagano, sensual y superhombre de la naturaleza
de la voluntad de poder de los héroes.
El mundo clásico, ejemplo de orden moral y físico, es transfigurado en un
modelo de desbordante exaltación de instintos y sentidos.
Los libros de Laudinei proyectos iniciales son siete, titulados cada uno con el nombre
di una delle Pleiadi, tuttavia solo cinque sono portati a termine: Maia, Elettra,
Alción (1903), Merope (1912) y Asterope (1933).
Los temas neopaganos y superhumanos son tratados en Maia, donde aparece la Laus.
vitae, un experimento de poema épico moderno, en el que se celebran las
imprese del poeta.
D'Annunzio, retratándose como un nuevo Odiseo en viaje hacia Grecia,
presenta así un regreso regenerador a las fuentes del mito; llega así la
consagración pública a nuevo poeta-vate de la nación, también gracias a la
dedica a Carducci presente nel testo.
El segundo libro, Electra, está dedicado a la celebración de los héroes y, por lo tanto, está dirigido
toda la inspiración de una nueva poesía civil, en línea con las aspiraciones
nacionalistas e imperialistas del autor.
El tercer libro, Alcyone, ve un apartamiento de la máscara de 'vate' y la
celebración de la naturaleza, llevada a cabo a través de la revisión lírica del género
bucólico y de la mitología clásica.
El tema central es la celebración de la comunión entre el superhombre y el universo
natural, llevada a cabo a través del recurso a una elegancia formal apollinea y una
fuerte vitalidad dionisíaca.
Las poesías siguen un orden preciso: D’Annunzio las ha colocado de tal manera
che esse, diverse in metrica e teminel corso dei vari momenti, rappresentino
lo sbocciare, el rigoglio y el final del verano ('oasis del arte que revitaliza al artista
dalle durezze dell’esistenza)
El paso de la temporada está marcado por la presencia de los 'ditirambos', es decir,
largas secuencias de versos libres que tienen la función de marco ornamental y
el de hacer claro/dominante el elemento dionisíaco.
Las poesías 'preditirambiche' constituyen una fuente de inspiración para los poetas
del Novecento, y sin embargo representan una excepción.
D'Annunzio reduce los elementos simbolistas de la colección, dando en cambio más
espacio a los elementos y a las sensaciones (visuales, táctiles, auditivas, gustativas).
En lugar de montar ideologías como lo hace Pascoli, D'Annunzio prefiere usar
similitudes, gracias a las cuales yuxtapone una variada gama de
apariencias encantadoras.
Su actitud hacia la sensualidad y el placer, de matriz esteticista, ofrece en
Alcyonei sus mejores resultados: se trata sin duda de un trabajo de
coleccionista profesional de sensaciones.
D'Annunzio sin embargo también colecciona palabras, extrayendo de léxicos especializados,
arcaicos, esotéricos, raros, de antigüedades, insertados sin embargo en un moderno y refinado
código poético.
Fin da subito, Alcyonesi presenta come el capolavoro di D’Annunzio, capace
di tener un enorme impacto en los contemporáneos.
Mientras que en Europa es apreciado por las novelas y el teatro,
en Italia a principios del Novecento es famoso por su código poético y por su
imagen de esteta-vate-superhombre, que lo convertirán en el modelo absoluto
en la poesía.
Un modelo, que sí será puesto en crisis e incluso parodiado más tarde, pero
Che resta passaggio obligatorio para la poesía del siglo XX.
[Link]: LA VÍA INTIMISTA AL SIMBOLISMO
Giovanni Pascoli (1855-1912) es el único autor que compite con D'Annunzio el
primato en la poesía.
Nacido en San Mauro di Romagna en una familia perteneciente a la pequeña
burguesía agraria, que le garantiza una profunda formación humanística en
un colegio religioso.
Su vida está marcada por la trágica secuencia que lo lleva a enfrentar en
secuencia la muerte del padre (10 de agosto de 1867), quedó impune, la de
madre, di un fratello e di una sorella.
La ruptura del núcleo familiar abre en Pascoli heridas que le instilan el
deseo de recomponer la unidad perdida, restaurando la felicidad de los años
infantil.
En 1873 comienza a estudiar letras en Bolonia, donde asiste a las clases de
Carducci se inserta en su círculo, aunque sin abrazar el neopaganismo.
e ateo anticlericalismo del maestro.
Se convierte en miembro del Partido Socialista, aunque su militancia política ha
bien después de la participación en algunas manifestaciones filanarquicas.
La muerte del hermano mayor y la pérdida de la beca impulsan
Pascoli a la vida bohemia, que sin embargo abandona gracias al apoyo de
Carducci, que lo impulsa a graduarse en literatura griega en 1882.
Así se convierte en un profesor en los pequeños liceos de campo, un cargo que le
garantiza un salario con el que mantener a las hermanas Ida y María, con los
cual existe una especie de acuerdo tácito para no casarse; desde 1885 vive en
Masa.
El complejo esquema de celos, inhibiciones y deseos reprimidos causado por
el vivir simbiótico de los tres hermanos se refleja en los poemas de Pascoli, que proyecta
en las hermanas roles maternos/conyugales.
Cuando Ida se casa en 1895, Pascoli cae en un "desequilibrio nervioso" y se
se refugia en el vínculo con María; una relación que le permitirá evolucionar
muchos temas de su producción poética.
Las lecturas del joven Pascoli son sin duda ‘carduccianas’: de los clásicos
greco-latino, a la tradición italiana, incluyendo también a Goethe, Heine, Michelet,
Poe y los parnasianos.
Si bien Carducci relanza la imitación clasicista de los antiguos, Pascoli decide
diapprocciarsi directamente a su mundo, incluso a través de la arqueología.
Allontanándose del materialismo carducciano, Pascoli prefiere una lectura
espiritualidad de Platón, más cercana a la elaborada por el irracionalismo de
Eduard von Hartmann (1842-1906), autor de una Filosofía del inconsciente (1869)
en el que se fusionan Hegel y Schopenhauer y se sostiene la existencia de un principio
‘’inconsciente’’ que guía los fenómenos naturales.
Esta pasión por la irracionalidad lo aleja de los temas éticos y
risorgimentales, a los que prefiere las atmósferas encantadas del Orlando Furioso.
Mientras el joven D'Annunzio obtiene un abrumador éxito, Pascoli
conduce una vida retirada, como profesor de provincia, lejos de la
confusión de los ''poetas cromolitográficos'' contemporáneos.
Esta actitud se traduce en una estrategia editorial específica, basada en
primissullo esparcir silenciosamente sus versos en numerosas revistas.
Sus textos presentan una fuerte componente de novedad radical, debido a la
elecciones lingüísticas, estilísticas y a la musicalidad verbal/métrica.
Así se origina la primera colección: Myricae (1891), enriquecida en las diversas
ediciones con continuas adiciones hasta la edición definitiva de 1911.
El título deriva de un pasaje de las Bucólicas de Virgil (70-19 a.C.), que habla de
‘’humilesque myricae’’, es decir, ‘’arbustos humildes (tamargueras)’’, metáfora vegetal
ripresa da Pascoli para componer una poesía ‘’que se eleva poco de la tierra’’, que
habla de temas delicados, simples y aparentemente anti-sublimes.
Una poesía 'democrática', que se opone a la aristocrática propugnada
da D'Annunziana y que es ajena a toda pretensión de convertir al poeta en ''vate''.
Sin embargo, el descenso temático se expresa en el idioma de la cultura más alta, el
latino, que se presta aquí al proyecto de Pascoli de contaminar lo áulico y lo humilde:
cantos populares, por lo tanto, evocan pasos homéricos para revivir el encanto de
una campesina; estructuras elegantes se utilizan para referirse a herramientas utilizadas para
trabajar en los campos.
Pascoli no renuncia por lo tanto al imperativo parnasiano de la precisión, que de
fatto caracteriza la recopilación, resultado de una década de investigaciones creativas, de
exploración de la escena literaria contemporánea y de excavación en las zonas más
dolientes de su propia psique.
La primera edición de 1891 se caracteriza por un espacio limitado de
autonomía creativa, que le impide transgredir el imperativo
de la objetividad parnasiana lanzada por Carducci.
Para conciliar la impersonalidad con la idea de poesía como ''sueño'' (defendida
dai tardoromantici), Pascoli elige crear una poesía subjetiva en la que sin embargo
es el objetivo el que se impone.
Esto se traduce en el amplio uso de analogías, que casi parece evocar las
posición artística de los impresionistas franceses; por lo tanto, en su primera
la versión de Myricae está caracterizada por una intervención del yo-poetante reducido
alla nuda registrazione di come gli elementi del paesaggio si impongano nei
sensi.
La segunda edición (1892) se caracteriza por la inclusión de poesías íntimas
e privado, en el que encuentra espacio el luto por la destrucción de la familia: la historia
del asesinato que quedó impune del padre encuentra espacio en el día de los muertos,
inicialmente pensada como una prefacio en poesía mezclada con prosa.
Esta decisión confiere unidad a la colección, ahora caracterizada por un
común fondo emocional, sombrío y lacrimógeno, que presenta rasgos de novela y
melodramático.
El 'nido familiar', frágil refugio ante el mal del mundo, se une al lamento
por el abandono y la soledad de los huérfanos: emergen temas oscuros y
cercanos a los de Poe, por lo tanto sueños, apariciones espectrales, lo inexplicable
presencia de lo sobrenatural y las obsesiones personales.
La edición de 1892 abre una extraordinaria temporada creativa, caracterizada por
innovaciones estilísticas que llevan a Pascoli a distanciarse de representaciones
exactamente, de la musicalidad refinada.
Se trata de una inversión que sin embargo está oculta por un sutil juego de
disimulación de la radicalidad de los cambios.
Metáforas preciosas e irreales, sinestesia y el uso de verbos/adjetivos
los sustantivos hacen que su estilo sea más alusivo y elíptico: la poesía el Asiuolo,
en el que el canto del pájaro se convierte en un lamento luctuoso, es símbolo de esto
novedades.
Pascoli importa del mundo poético contemporáneo el primado de la
musicalidad, en este caso de sonoridades pobres y tenues: el trino de un
uccello, el susurro de las hojas, los repiques de las campanas, los susurros de los
fantasmas.
Una música íntima, suprimida, desmoronada, lejana de la majestuosidad imponente de
D'Annunzio.
Questo uso mimetico ed evocativo di sonorità verbali, indicato con il nome
di 'fonosimbolismo', rompe las fronteras de una lengua codificada, de la que el
recurrir a la onomatopeya: el 'tio tio tio' de los pájaros.
Se trata de un procedimiento antiquísimo, utilizado ya en la Antigüedad por
comediografo Aristófanes (445-388 a.C.), y desde entonces ha caído en desuso.
Los resultados a los que llega Pascoli lo acercan de alguna manera a los poetas malditos.
los simbolistas franceses, lo que les garantiza, además del reconocimiento de la crítica
también el de los colegios, también el de D'Annunzio, que importará diferentes
sugerencias pascolianas.
Questarivoluzione discreta expresa con tonos sinceros y conmovedores la
belleza de fenómenos naturales, el dolor de las personas comunes, la presencia
inspiegabile del soprannaturale, temi che si accordano alle sensibilità medio/
piccolo-borghese, de la cual Pascoli comparte la religión de los afectos familiares.
Este éxito explica las numerosas reediciones del texto, que ya se ha convertido en un
poeta apreciado por el gran público; mientras tanto también hace carrera: desde
escuela se convierte en docente universitario de letras clásicas.
De pequeño maestro provincial a intelectual reconocido, que publica
artículos y ensayos en las revistas más importantes, como El Convito y El Marzocco; en
frattempo se traslada a Castelvecchio con Ida, dedicándose al estudio y a
tre filoni di scrittura: poesía en italiano, en latín y crítica dantesca.
Pascoli hará salir simultáneamente ensayos, intervenciones y poesías que recogerá en
volúmenes diferentes.
En los ensayos, publicados con el título Mis pensamientos de variada humanidad (1903), Pascoli
aclara su opinión sobre la crisis de fin de siglo, deseando que una
‘’fraternidad de todos los hombres’’, invitados a la recuperación de los valores cristianos de
amor y caridad, puedan vivir en una sociedad sin conflictos.
El mito de la reconciliación interclasista lo vuelve sin embargo hostil hacia los socialistas.
que lo consideran demasiado católico, y también a los propios católicos, que lo consideran
demasiado poco ortodoxo.
La ideología de Pascoli no es tanto 'política', sino más bien una utopía
la sociedad como nido familiar ampliado, que para él puede constituirse a través del
recuperación de la función civil de la poesía, que enseña al hombre a buscar la
realidad etérea contenida en las pequeñas cosas.
Se trata de una concepción análoga a la del simbolismo, pero declinada
qui en clave antielitista y democrática, porque el poeta confía su visión a
todos los hombres, que pueden buscar la belleza a través de 'ojos nuevos'.
Esta teoría se expresa en el ensayo El niño (1897), en el que se sostiene que
que existe un vínculo directo entre la poesía y nuestra 'psique primordial y
perenne'', es decir, aquella huella de la propia infancia que permanece para siempre en
cada uno de nosotros y que es capaz de maravillarse e iluminar la poeticidad de las
cose.
Ilfanciullino ‘’ve todo con maravilla, todo como por la primera vez ’’, él
reconecta al lector con ''ese rincón del alma'' descuidado, al que
restituye el encanto perdido.
Pascoli, como Mallarmé, contrasta la poesía alta, que expresa ideologías,
la ‘pura’, que coincide con la lírica que tiene como cometido el
renovar la percepción humana de la naturaleza y 'reconfundirse en ella'.
Para revelar la eternidad de las cosas, es necesario un idioma capaz de desvelarlas, y
que por lo tanto sea capaz de ampliar el vocabulario poético italiano, también
a través de la inclusión de términos dialectales, desatendidos por la lengua nacional.
La idea de poesía pura distingue a Pascoli de los poetas dialécticos y realistas del XIX
siglo, porque en él la exactitud léxica es un medio para comunicar a través de
directo con la naturaleza.
Pascoli produce, como se ha dicho, también ensayos dantescos, dirigidos al público
universitario; en su lectura de la Divina Comedia se aparta de análisis
filológicas e histórico-constructivas.
La de Dante es para él una ascensión espiritual hacia la libertad interior y la
reconquista política de la libertad terrenal, una lectura que sin embargo es derrotada
de la crítica universitaria, que rechaza sus ensayos Minerva oscura (1898), Sotto el
velame(1900), La mirabile visione(1902).
La poesía del último decenio, paralela a la evolución de Myricae, intenta
diversas vidas en la lírica.
De los textos más largos nacen los iPoemetti (1897), cuya epígrafe 'paulo maiora'
premite la trattazione de temas más grandes y complejos, traducidos en la forma,
ya intentada por Carducci y D'Annunzio, del poemetto épico.
Se trata de una moderna revisión del epilio, con el que Pascoli se refiere
a la antigua poesía alessandrina, tratando sin embargo 'temas humildes y rurales'.
La recopilación gira en torno a dos ciclos: La siembra y El crecimiento, donde el amor y el
el matrimonio entre dos jóvenes campesinos se entrelaza con el curso de las estaciones
y los trabajos de los campos se describen con exactitud técnica.
Entrando así en juego los temas de la vida/muerte y del renacimiento de la naturaleza,
de la que se rechaza una visión materialista: ella es 'madre no madrastra' porque
sacar el bien incluso del mal.
La narración se lleva a cabo a través de un metro ilustre como la tercina
dantesca y conducida según las reglas de la épica: en tercera persona, de un
narrador omnisciente, con repeticiones que evocan las fórmulas fijas
omeriche.
Se trata de procedimientos noblificantes, que crean un juego de disonancias para
poner en escena eventos 'bajos', en el sentido de cotidianos; también el idioma está en
realidad humilde: objetos de cocina, alternancia de vernacular toscano/inglés y
persinoitaloamericano(''Ghita, ¡estás bien!…/Adiós'')
Este filón realista se desarrolla paralelamente a la poética simbolista, de
cuyas últimas líricas de Myricae, caracterizadas por procedimientos
estilísticos más complejos y oscuros, a través de los cuales el poeta enfrenta los turbamentos
más grandes que su propio yo.
El mundo vegetal está cargado de indefinidas valencias simbólicas en las que se
esprimonotensiones psíquicas indicibles, como en el muérdago, donde la planta
parasitario alude a una secreta angustia que consume la vitalidad del poeta,
che lucha y muere 'huyendo inmóvilmente'.
Pascoli, entretanto, crea sin embargo también versos en el más elevado canon estético de la
poesía contemporánea: nacen así las poesías en italiano, publicadas primero
sobre el elitario Convito y confluyen infinitos en los Poemas conviviales (1904).
A la misma matriz pertenece la producción en latín con la que desde 1892
obtiene continuas victorias en el concurso internacional de poesía latina de
Ámsterdam, a la que asisten los intelectuales más exclusivos y sofisticados.
Iversi latinisi conquistano una enorme popolarità in Europa, grazie alla loro
relectura estetizante del Renacimiento.
Pero para Pascoli, la composición en latín no es solo un ejercicio erudito, sino
también un laboratorio creativo; esta producción se recogerá en el volumen
póstumo deiCarmina(1914).
IPoemi conviviali sono invece dedicati a la antigüedad griega, cuya lectura resiente
del pensamiento de Nietzsche y sobre los estudios arqueológicos personales.
Sus poemas representan a los latinos y los griegos de cerca, comprometidos en acciones
de la vida cotidiana, durante las cuales se plantean preguntas propias a todos los
hombres.
Omero, Saffo, Solone e persino Alessandro Magno se interrogan sobre el sentido
de la vida, sobre la insensatez de la muerte y sobre temas cercanos a la espiritualidad
cristiana.
La epígrafe de los Conviviales es ejemplar: 'Non omnes arbusta adiuvant'.
certificado de la superioridad del tema tratado respecto a los de Myricae; este
la poesía alta está dedicada al director del Convito, De Bosis (1863-1924).
La elevada de los temas está acompañada de un léxico noble y del metro
classicista de los endecasílabos sueltos, utilizados sin embargo no para emular
la Antigüedad, más bien para dar voz a los miedos, a la melancolía y a
su sensibilidad intimista.
Pascoli lleva a cabo también los Cantos de Castelvecchio (1903), que él mismo indicó.
come una 'segunda serie de Myricae'; el término 'Canti' alude a Leopardi, con
cui se dialoga a distancia evocando una representación idílica de
naturaleza.
La especificación del lugar deja sin embargo espacio también al carácter privado de la
recogida: Castelvecchio es el lugar donde se ha recompuesto la unidad familiar
perdida, mientras el país natal está ligado a las últimas líricas.
El alternarse de muerte y renacimiento de la vegetación contrasta, en la
secuencia interrumpida invierno-primavera (sucesión que Pascoli explica en una
carta a un amigo), con el dolor y la precariedad de la muerte.
NeiCantiPascoli recorre con mayor conciencia técnica todos los
motivos de Myricae, explorando sin embargo también nuevas filones, explorando tanto la
polaridad de lo cotidiano tanto como la del sublime.
Se encuentran así relecturas poéticas del folclore campesino, transformaciones de
proverbios en leyendas y costumbres rituales.
Pascoli imita los metros cantilena de la música y de la poesía popular a través de
toni ingenuos, que también les permiten denunciar las difíciles condiciones del
proletariado.
Al mismo tiempo, sin embargo, también se activa en un sentido leopardiano, pero no
materialista, para contar su propia finitud y pequeñez frente a
a la inmensidad del cosmos.
En una conferencia de 1900, La nueva era, Pascoli había reivindicado el papel
de la poesía de hacer experimentar lo que la ciencia revela pero no expresa,
propositi que intenta poner en práctica en Los Cantos.
La revolución lingüística y métrica de Myricae se lleva a resultados extremos en
Canti, en los que continúa desarrollándose la contraposición entre norma y
trasgresión.
El imperativo de objetividad parnasiana se compara con el rechazo del
sentimentalismo romántico: en el paisaje ahora se esconde una realidad más
profunda y difusa, a menudo enigmática e indicible.
Surge una visión antinaturalista, basada en una continua superposición de
sensaciones, que causan la desorientación y la pérdida de consistencia del mundo
real; la misma musicalidad se hace más personal.
A principios del siglo XX, Pascoli está en la cima de su madurez creativa y es
travolto por los reconocimientos: el homenaje d'annunziano en Alcyone, la edición
de sus obras en Zannichelli, prestigioso editor de Carducci, y la
sucesión a este último en la cátedra de literatura italiana en Bolonia.
La autoridad ganada lo impulsa a cultivar también la poesía civil:
nacen así los Nuevos poemitas (1909), y luego las Odas e himnos (1906) y los Poemas italicos
(1911), en el que se abordan los nudos éticos y políticos de la historia nacional.
Aunque su sueño de reconciliación entre las clases encuentra poco espacio en
debate sobre el tiempo, sin embargo intenta participar: el célebre discurso
La grande proletaria se ha movido (1911), en la que se sostiene la invasión de Libia.
trasponiendo la competencia marxista entre las clases en el marco de la
competencia entre las naciones, testifica más la voluntad de alinearse
a la ideología de la clase media-burguesa que una elaboración ideológica propia.
La marginalidad relativa hace que los nuevos poetas no se opongan a él,
a diferencia de lo que se hará con D'Annunzio: con Pascoli las nuevas generaciones
mantienen un vínculo subterráneo, a menudo no declarado.
Pero sus transgresiones, cambiadas de función, representan el punto de inicio
de muchas líneas evolutivas de la poesía italiana del siglo XX.
[Link] FOGAZZARO ENTRE ESPIRITUALISMO Y ENTRETENIMIENTO
El camino del veneto Antonio Fogazzaro (1842-1911) refleja las grandes
transformaciones culturales de la segunda mitad del siglo, pero también
de la evolución del mundo católico.
Educado en la fe católica y en los ideales patrióticos, se plantea como objetivo
la conciliación del catolicismo y la modernidad, empujando así la
Iglesia para ir más allá de la condena reaccionaria sancionada por el Syllabus.
En los años sesenta frecuenta a los despeinados milaneses y en 1872 lleva a cabo la
conferencia del futuro de la novela en Italia, en la que ataca a la escuela realista y
propone una 'novela contemporánea, psicológica y social'.
Su primera novela, Malombra (1881), introduce en un marco cautivador y
rica en giros inesperados, atmósferas fantásticas al estilo de Hoffmann/Poe.
El protagonista de la historia es una joven noble de gustos mundanos y refinados,
Marina di Malombra, que vive en el castillo aislado de su tío, sobre el cual
aleggiano tetre leggende.
Después de encontrar una carta de la abuela Cecilia, la chica se convence de
ser la reencarnación y que el tío sea en cambio la reencarnación del abuelo,
que había mantenido en segregación hasta la muerte a su esposa, culpable de traición.
El otro protagonista es Corrado Silla, un escritor fracasado, en quien sin embargo Marina
ve la reencarnación del amante de la abuela.
Inicialmente, el joven se enamora del encanto tenebroso de Marina, pero después
viene redimido por el amor ''espiritual'' por Edith, que intenta redimirlo.
Marina mientras tanto se vuelve loca: primero causa la muerte del tío, y
infinito, cuando Corrado está a punto de abandonarla para dedicarse a una vida de
ascesi cristiana, uccide anche lui e si dilegua come uno spettro.
El tema al centro de la historia es sin duda el conflicto entre fe y
sensualidad, que ocurre en medio de escenarios inquietantes, profundas análisis
psicológicas y rodeado del encanto por lo oculto y las leyendas.
Marina es una heroína de encanto ambiguo, en la que se fusionan conexiones.
positivismo motivi romántico - scapigliati, caracterizados además por un aura
sobrenatural.
El narrador es sin duda tradicional: describe, interviene, inserta cartas,
carga los registros léxicos, inserta letras y es capaz de llevar al máximo la
tensión melodramática.
El éxito de la obra, notable, transforma a Fogazzaro en el nuevo
romancista católico de referencia, heredando el papel que había sido de
Manzoni y Tommaseo; incluso Verga, que publicó en el mismo año los
Malavoglia, le escribe para felicitarse.
El segundo libro Daniele Cortis (1858) fusiona el entrelazado sentimental y la novela.
di idee, dando voce alle speranze de los católicos liberales, ipotizando casi una
democracia cristiana
Las novelas de Fogazzaro tienen mucho éxito en Europa, donde son lanzadas.
dalla Revue des deux mondes, porque se adaptan a los nuevos climas antipsitivistas y
todas las tendencias neocatólicas.
En Italia, un artículo suyo, Los caballeros del espíritu (1894), es retomado por la periodista.
Matilde Serao (1856-1927) para propagar una literatura 'noble y para la
vida interior
Fogazzaro no se adecúa a las tendencias esteticistas, de hecho su
segundo gran novela de éxito Piccolo mondo antico (1895) está lejos
de las tendencias introducidas por D'Annunzio.
A diferencia de Malombra, libro de pasiones y excesos, Piccolo mondo antico es el
libro de la medida, de las emociones y de los dolores familiares, domésticos y
de la intimidad burguesa.
En el texto se narra la historia de amor entre Luisa Rigey, de extracción pequeña.
borghese, y el marqués Franco Maironi, que tiene como fondo la Segunda
Guerra de Independencia.
En el texto se mezclan la novela histórica, realista-burguesa y psicológica, que
juntos dan vida a una reconstrucción nostálgica y lírica de ese universo
los ideales cultivados por la burguesía del Risorgimento, que la Italia de finales de siglo
debería reencontrar.
La prosa es fluida y está caracterizada por la fuerte presencia de la voz narrativa,
siempre lista para ofrecer sutiles análisis psicológicos de los protagonistas.
La novela repite el éxito de Malombra, convirtiéndose en un clásico en la
formación de la clase media burguesa italiana y de la cultura católica del
Novecento.
A fines del siglo XIX, Fogazzaro aborda el tema de la reforma del catolicismo.
que hace interactuar con el conflicto entre el amor por la sensualidad y la superioridad
de la ascensión mística.
Los protagonistas de Fogazzaro viven amores difíciles debido a los vínculos sociales y
religiosos, que sin embargo deciden enfrentarse como pura comunión de almas.
El hijo de los protagonistas de Piccolo mondo antico, Piero, en la siguiente novela
El Santo (1905) sigue un camino de renovación espiritual, apartándose de la
pasión por la fascinante Jeanne Dessalle, y finalmente se convierte en la guía del
movimiento por la renovación de la Iglesia.
Estas novelas-manifiesto, cercanas a las posiciones de los modernistas, obtienen el
consenso de los lectores pero son desconfiados del clero oficial: en 1906 El Santo vendrá
incluso en el Índice de libros prohibidos.
6. EL VERISMO DE CAPUANA Y DE ROBERTO
Atraviesan la ola antinaturalista y antipositivista, los escritores veristas son
impulsar a revisar sus propias técnicas narrativas.
Capuana, que junto a Verga había sido el jefe del verismo, toma
públicamente le distantes del naturalismo con la segunda novela Perfume
(1892), en el que se mezclan elementos de psiquiatría positivista con elementos
fantásticos.
Después de algunos intentos de insertarse en los nuevos ambientes literarios, comienza a
interesarse por el espiritismo: el trabajo posterior La Esfinge (1895) representa
incluso una telepatía.
La solución convincente llega sin embargo solo con El marqués de Roccaverdina
(1901), historia de un aristócrata hundido en la locura después de haber asesinado
el hombre que su amante campesina había casado, logrando hacer que lo inculparan
un inocente.
La novela es verista en la ambientación (la Sicilia campesina y feudal), pero
moderno en los temas: una historia de culpa, de condenación y de pasiones extremas
que empujan al protagonista a la desagregación psicótica.
Anche Federico De Roberto (1861-1927) se forma en el seno de la escuela
verista, para luego desembarcar en el ámbito editorial milanés, desarrollando
soluciones técnicas de estilo verghiano.
Sus primeros intentos (1886-1900) son colecciones de cuentos: La suerte, Documentos
umani, El árbol de la ciencia y Procesos verbales, en los que lleva al extremo la técnica
de la desaparición del narrador.
NeiProcessi verbaliegli rende la narrazionesimile ad un documento, da cui il
richiamo al termine che indica le trascrizioni estenografiche degli interrogatori;
nunca entra en el punto de vista de los protagonistas ni ofrece su propia opinión.
Su obra maestra es la novela Los Viceré (1894), en la que las extraordinarias capacidades
técnicas están al servicio de la mirada desencantada y amarga con la cual se
recorre una fase de la historia italiana reciente.
Sin abandonar la técnica de la impersonalidad, De Roberto narra una historia
didegeneración física y moral, capaz por lo tanto de recibir mucho de la
sensibilidad de su época.
Si narra, por tanto, la historia de la familia aristocrática de los Uzeda, capaz de
adaptarse rápidamente a la transición Borbón-Savoya, que los transforma de
viceré del Antiguo Régimen a titulares de un gran grupo electoral, que los
rinde en grado de influenciar también la nueva Italia liberal.
De Roberto traza así una contrahistoria del Risorgimiento, gracias a la cual
desenmascara la vacuidad de los ideales de renovación risorgimentales y el
persistir en el Meridione de enormes desigualdades sociales.
Los trasfondos mezquinos y grotescos de la historia oficial se ejemplifican en la
frase pronunciada por uno de los protagonistas: 'Ahora que Italia está hecha, debemos hacer
nuestros asuntos
En estos mismos años, en la periférica área de Trieste austriaca, escribe los
sus primeras novelas Italo Svevo (seudónimo de Aron Hector Schmitz, 1861-
1921), Una vita(1892) y Senilità(1898).
Los primeros trabajos de Svevo son sin duda deudores del verismo, pero al mismo
tiempo proponen una nueva figura literaria, 'el inepto para vivir', una
personalidad corroída por un sentido de impotencia y extranjería a la vida.
Se trata de dos obras que inauguran un nuevo universo estético-mental
destinado a encontrar plena expresión y peso en el ámbito literario solo en
Novecento.
FECHAS MÁS IMPORTANTES
1802: Ugo Foscolo, Últimas cartas de Jacopo Ortis.
1807: Ugo Foscolo, De los Sepulcros.
1810: Vincenzo Monti, traducción del latín de la Ilíada.
1816: inicio en Italia del debate clásico-romántico.
1820: Walter Scott, Ivanhoe.
1820-1821: moti liberali; Alessandro Manzoni, Il cinque maggio e Marzo 1821.
Alessandro Manzoni, Adelchi.
1827:Alessandro Manzoni,Los novios (primera edición, la ''ventisettana'')
e Giacomo Leopardi, Operette Morali.
1840: Alessandro Manzoni, edición definitiva (‘’quarantana’’) de Los promesaos
esposi, enriquecidos con la Historia de la columna infame.
1848-1849: Insurrecciones liberales en toda Europa, en Italia comienza la Primera
Guerra de Independencia.
1859: Segunda Guerra de Independencia.
1860-1861: Impresa dei Mille, Vittorio Emanuele II es rey de Italia.
1866: Tercera Guerra de Independencia y conquista del Véneto.
1867: Ippolito Nievo, Las confesiones de un italiano (edición revisada y
póstuma).
1870: Guerra franco-prusiana, Italia conquista el Estado de la Iglesia, Roma
viene presa diviene capitale del Regno d’Italia.
1872: Friedrich Nietzsche, Nacimiento de la tragedia.
Giosuè Carducci, Odi bárbaras.
1880:GiovaniVerga,Vida de campos.
Giovanni Verga, I Malavoglia y Antonio Fogazzaro, Malombra.
1884: Joris-Karl Huysmans, Controcorriente.
1889: Giovanni Verga, Mastro-don Gesualdo y Gabriele D’Annunzio, Il Piacere.
1891-1892: Giovanni Pascoli, primeras dos ediciones de Myricae.
1894: Federico De Roberto, I Viceré.
1895: Antonio Fogazzaro, Piccolo mondo antico.
1897: Giovanni Pascoli, El niño y Poemetti.
1903: Giovanni Pascoli, Canti di Castelvecchio y Gabriele D’Annunzio, Alcyone.
Giovanni Pascoli, Poemi conviviali Gabriele D’Annunzio, La hija de
Jorio.