Clase de Doctrina – Modulo 2
Doctrina Basica
[Link] SALVACIÓN
“Ahora que estamos unidos a Cristo, somos una nueva creación. Dios ya no tiene en cuenta
nuestra antigua manera de vivir, sino que nos ha hecho comenzar una vida nueva. Y todo
esto viene de Dios. Antes éramos sus enemigos, pero ahora, por medio de Cristo, hemos
llegado a ser sus amigos, y nos ha encargado que anunciemos a todo el mundo esta buena
noticia: Por medio de Cristo, Dios perdona los pecados y hace las paces con todos.” – 2
Corintios 5:17-19 /TLA
Una nueva creación.
Un nuevo comienzo.
Para todos nosotros, que alguna vez anhelamos que se reseteara nuestra vida , que
empezáramos todo de nuevo esta es una buena noticia.
Pero antes de apreciar realmente las buenas noticias, necesitamos entender exactamente
porque necesitamos empezar de nuevo. ¿Porque necesitamos convertirnos en una nueva
creación? ¿Por qué necesitamos salvación?
El Problema: La Separación a causa de nuestro pecado
Existe una brecha incalculable que separa a Dios al hombre. La causa de esta separación es
el pecado.
¿Te has sentido alguna vez alejado de Dios? Todos lo hemos sentido. Sentirse alejado de
Dios es algo común. Muchos al percibir esta separación, creen que si buscan una religión que
los anime a hacer algunas obras, alguna “meditación trascendental” o asistir a algún santuario
religioso los acercara más a Dios. Pero ya que la separación de Dios es algo más que solo
intelectual o física les es imposible lograrlo a través de estos métodos.
La mano del SEÑOR no es corta para salvar, ni es sordo su oído para oír. Son las iniquidades
de ustedes las que los separan de su Dios. Son estos pecados los que lo llevan a ocultar su
rostro para no escuchar.” - Isaías 59:1-2/NVI
La separación entre Dios y el hombre es una separación espiritual y moral. Dios es Santo y
el hombre no lo es. Dios es bueno y el hombre no. Dios es justo y el hombre no. Todos los
hombres han pecado y por lo tanto todos están eternamente separados de Dios y todos sufrirán
las consecuencias de su pecado, que es la muerte eterna.
¿Qué es pecado?
Es romper la ley de Dios, y buscar la felicidad en fuentes que no son Él.
“por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios” – Romanos 3.23/RV60
“Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús
Señor nuestro.” – Romanos 6:23/RV60
El Estado del hombre lo imposibilita a decidir ser salvo por su propia determinación, o
intentar salvarse por obras. El hombre está muerto espiritualmente, totalmente incapaz de
salvarse o tomar la iniciativa para salvarse. No solo porque no puede, sino porque no quiere
y se rebela contra Dios intencionalmente.
“Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los
cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe
de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los
cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne,
haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira,
lo mismo que los demás.” – Efesios 2.1-3
“Además, como estimaron que no valía la pena tomar en cuenta el conocimiento de Dios, él
a su vez los entregó a la depravación mental, para que hicieran lo que no debían hacer. Se
han llenado de toda clase de maldad, perversidad, avaricia y depravación. Están repletos de
envidia, homicidios, disensiones, engaño y malicia. Son chismosos, calumniadores,
enemigos de Dios, insolentes, soberbios y arrogantes; se ingenian maldades; se rebelan contra
sus padres; son insensatos, desleales, insensibles, despiadados. Saben bien que, según el justo
decreto de Dios, quienes practican tales cosas merecen la muerte; sin embargo, no solo siguen
practicándolas, sino que incluso aprueban a quienes las practican.” – Romanos 1:28 -32
¿Puede Dios perdonar al hombre así nada más?
¿Tu estarías de acuerdo que un juez que dice ser justo deje salir al asesino de una persona
que amas, seria eso justo?
Si te das cuenta que no lo seria, Dios es más justo que tú y que yo y no puede dar por inocente
al culpable. Está claro que Dios es un Juez justo y alguien debe pagar esta deuda de justicia
que para el hombre es impagable dado que es una falta a un Dios eterno.
“Jehová, tardo para la ira y grande en misericordia, que perdona la iniquidad y la rebelión,
aunque de ningún modo tendrá por inocente al culpable” – Números 14.18
“El que justifica al impío, y el que condena al justo,
Ambos son igualmente abominación a Jehová.” – Proverbios 17.15
La Solución: El Sacrificio de Cristo y la Sustitución
La justicia de Dios demanda que alguien pague en un sacrificio por el pecado del hombre.
Motivado por el amor Dios toma la iniciativa y en la segunda persona de la santísima trinidad,
Jesucristo, viene a pagar la deuda que no podíamos pagar en una cruz.
Dios es Santo y no puede permitir el pecado ni que este se pase por alto. Pero también es
amoroso y compasivo, así no quiere que todo ser humano este separado eternamente de Él.
“…Ahora, al final de los tiempos, se ha presentado una sola vez y para siempre a fin de
acabar con el pecado mediante el sacrificio de sí mismo. Y así como está establecido que los
seres humanos mueran una sola vez, y después venga el juicio, también Cristo fue ofrecido
en sacrificio una sola vez para quitar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez,
ya no para cargar con pecado alguno, sino para traer salvación a quienes lo esperan.” –
Hebreos 9:26-28
¿Que fue exactamente lo que paso en la cruz? Jesús tomo nuestro lugar y nuestro castigo
cayó sobre El. El intercambio su justicia por nuestros pecados. El tomo nuestra maldición y
nos dio su bendición. La ira santa de Dios fue derramada sobre Jesús. Por su vida sin pecado,
Él era el único calificado que podía pagar la pena por el pecado humano y hacer un puente
en el vacío que había entre Dios y el hombre.
“Despreciado y rechazado por los hombres,
varón de dolores, hecho para el sufrimiento.
Todos evitaban mirarlo;
fue despreciado, y no lo estimamos.
Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades
y soportó nuestros dolores,
pero nosotros lo consideramos herido,
golpeado por Dios, y humillado.
Él fue traspasado por nuestras rebeliones,
y molido por nuestras iniquidades;
sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz,
y gracias a sus heridas fuimos sanados.
Todos andábamos perdidos, como ovejas;
cada uno seguía su propio camino,
pero el Señor hizo recaer sobre él
la iniquidad de todos nosotros.
Maltratado y humillado,
ni siquiera abrió su boca;
como cordero, fue llevado al matadero;
como oveja, enmudeció ante su trasquilador;
y ni siquiera abrió su boca.
Después de aprehenderlo y juzgarlo, le dieron muerte;
nadie se preocupó de su descendencia.
Fue arrancado de la tierra de los vivientes,
y golpeado por la transgresión de mi pueblo.
Se le asignó un sepulcro con los malvados,
y murió entre los malhechores,
aunque nunca cometió violencia alguna,
ni hubo engaño en su boca.
Pero el Señor quiso quebrantarlo y hacerlo sufrir,
y, como él ofreció su vida en expiación,
verá su descendencia y prolongará sus días,
y llevará a cabo la voluntad del Señor.
Después de su sufrimiento,
verá la luz y quedará satisfecho;
por su conocimiento
mi siervo justo justificará a muchos,
y cargará con las iniquidades de ellos.
Por lo tanto, le daré un puesto entre los grandes,
y repartirá el botín con los fuertes,
porque derramó su vida hasta la muerte,
y fue contado entre los transgresores.
Cargó con el pecado de muchos,
e intercedió por los pecadores.” – Isaías 53:3-12
“Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él
recibiéramos la justicia de Dios.” – 2 Corintios 5.21/NVI
“Cristo nos rescató de la maldición de la ley al hacerse maldición por nosotros, pues está
escrito: «Maldito todo el que es colgado de un madero».” – Gálatas 3.13/NVI
El Resultado: Nuestra Salvación
Cristo murió en la cruz para que nosotros podamos recibir el perdón por nuestros pecados y
ser reconciliados con Dios y tener vida eterna.
Por su vida sin pecado, la muerte no pudo detenerlo. El resucito de la muerte en el tercer día.
En Cristo experimentamos el perdón por nuestros pecados y la vida eterna. En El somos
restaurados para presentarnos justos delante de Dios y recibimos una nueva vida como sus
hijos.
“Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en
él no se pierda, sino que tenga vida eterna.” – Juan 3:16/NVI
“En él tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a
las riquezas de la gracia” – Efesios 1:7/NVI
“Pero ahora en Cristo Jesús, a ustedes que antes estaban lejos, Dios los ha acercado mediante
la sangre de Cristo.” – Efesios 2.13/NVI
La Respuesta del ser humano
Nosotros recibimos la salvación cuando dejamos de confiar en nosotros mismos y
arrepentidos de haber roto la ley de un Dios Santo, Justo y Bueno venimos en fe, creyendo y
poniendo nuestra confianza en lo que Cristo ha hecho por nosotros. Nuestra salvación es el
resultado únicamente de la Gracia de Dios, y basada en el sacrificio de Cristo perfecto y
completo por nosotros.
“El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el
evangelio.” – Marcos 1:15/RV60
“Que, si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó
de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con
la boca se confiesa para ser salvo.” – Romanos 10:9-10/NVI
“Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino
que es el regalo de Dios, no por obras, para que nadie se jacte.” – Efesios 2:8-9/NVI
Aplicación personal
- ¿Sientes pesar y dolor en tu corazón por haber toda la ley de tu Creador, Santo y Justo?
- ¿Has dejado de confiar en ti mismo y empezado a confiar en Cristo para salvación?
- ¿Aborreces el pecado y la tentación?
- ¿Has confesado a Jesús como tu Salvador y Señor?
- ¿Estás dispuesto a seguir y obedecerlo por el resto de tu vida?
Una Nueva Vida
Si has respondido si a todas estas preguntas, si el Espíritu Santo por medio de su Palabra ha
puesto en tu corazón el arrepentimiento para vida y has proclamado a Cristo como salvador
y Rey, te animamos a perseverar porque es el comienzo de una nueva vida, viviendo para la
eternidad.
Un corazón que sigue a Cristo es un corazón nacido de nuevo, y un corazón nacido de nuevo,
vive para su Dios.
Las próximas cinco lecciones te introducirán a algunas de las cosas nuevas que están
sucediendo en tu vida ahora.