LA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL PABLO A LOS
*ROMANOS*
*CAPÍTULO 6*
En el principio del capítulo 6 el Apóstol Pablo, retoma un tema
que ya había tocado en el capítulo 3: 6-8, *tengamos en cuenta
que cuando se retoma un tema es porque, entre otros motivos,
se quiere dejar en claro el concepto* y al ahondar más en este
tema, despejar toda duda o error doctrinal.
1 *¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para
que la gracia abunde?*
Pero a diferencia de lo explicado antes, esta vez se basa, en el
cambio personal, en la conversión interior, la cual es una obra que
el Espíritu Santo produce, y por eso a la pregunta anteriormente
formulada por Pablo a los romanos, él mismo responde:
2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al
pecado, ¿cómo viviremos aún en él?*
3 ¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en
Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte?
En todo este capítulo, el Apóstol descubre a quienes dividen a
Cristo, y a quienes se imaginan que la justicia gratuita nos es dada
por El, sin novedad de vida.
En los versos 1 al 14, Pablo descubre a quienes por ignorancia
o por malicia intentan tergiversar LA GRACIA y a quienes se
imaginan que la justicia gratuita nos es dada por Él, pero
*sin incluir en eso una “Nueva vida”*, y acá subrayo porque
lo que les está diciendo Pablo es que son nuevas personas, la
antigua persona fue muerta con Cristo.
2 Porque los que somos muertos al pecado, ¿cómo viviremos
aún en él?
Este es un argumento sacado de la posición contraria porque
quien peca, ciertamente vive en pecado; mas nosotros hemos
muerto al pecado por la gracia de Cristo, y es por tanto falso decir
que la gracia da fuerza al pecado que suprime. La verdad es ésta:
*Que jamás los fieles son reconciliados con Dios sin que al
mismo tiempo se cumpla el don de la regeneración.*
Para eso somos justificados, es decir, para que sirvamos a Dios en
pureza de Vida.
La expresión *“de ninguna manera”* con la que comienza el
*Verso 2* Lit. “¡que nunca sea así!” Esta expresión ocurre
catorce veces en las epístolas de Pablo (10 en Romanos: 3:4, 6,
31; 6:2, 15; 7:7, 13; 9:14; 11:1, 11).
Es la expresión más enérgica en griego para repudiar una
afirmación e implica la sensación de indignación frente a los que
se atrevan a creer que esa afirmación sea cierta.
*Verso 3*: bautizados en Cristo Jesús. Esto no se refiere al
bautismo en agua. Pablo emplea aquí la expresión “bautizados”
en un sentido metafórico, Todos los cristianos, al depositar fe para
salvación en Él, han sido sumergidos en la persona de Cristo en
un sentido espiritual.
Una vez aclarado el asunto del pecado y la misericordia, y
fundamentando su respuesta en nuestra “inmersión” en Cristo,
continua Pablo detallando como sucede esto.
En pocas palabras les dice que ellos (los romanos que aceptaron a
Cristo) , murieron en la cruz con ÉL, y de la misma forma,
resucitaran .
*Verso 6*: Nuestro viejo hombre (fue crucificado juntamente
con él). Cuando se refiere al viejo hombre, se refiere al ser
humano corrompido por el pecado, aquel que desea hacer las
cosas de la carne y se rebela contra el CREADOR.
De este abuso tan perverso que el hombre comete (y que en la
Escritura es llamado, iniquidad, perversidad) sólo lo puede
"enderezar" la gracia de Dios. "Lo torcido difícilmente se puede
enderezar", Ec. 1: 15; Y esto se dice no sólo por la terquedad de
los perversos, sino ante todo por el hecho de que el hombre está
infectado en lo más profundo de su ser por el pecado.
Los que han muerto vivirán con ÉL aquí en la tierra bajo las
normas divinas, ya sin pecado alguno.
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Cristo murió al pecado en dos sentidos:
*1)* Con respecto al castigo del pecado porque Él satisfizo sus
demandas legales sobre los pecadores,
*2)* En relación con el poder del pecado, al quebrantar para
siempre su poder sobre aquellos que le pertenecen.
Su muerte nunca tendrá que repetirse (He. 7:26, 27; 9:12, 28;
10:10; cp. 1 P. 3:18). El punto de Pablo es que los creyentes han
muerto al pecado de la misma manera.
*Del verso 11 al 14* Pablo recalca que son muertos al pecado,
pero vivos para con Dios, y exhorta para que no se presten a
pecado, ni sus cuerpos, ni sus miembros y vas mas allá, utilícense
como instrumentos de justicia.
Siervos de justicia.
*Verso 15* ¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo
la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera.
*A simple vista parece la misma pregunta que en el versículo
1, pero no.*
En 6:1 Pablo habla de la *permanencia* del creyente en el
pecado, mientras aquí habla solamente de pecar, y de igual
manera una como la otra merece la misma respuesta, “de ninguna
manera”
*La gracia no da licencia para una vida de pecado*; tampoco
da licencia para pensar que los pecados ocasionales no tienen
importancia.
Vuelve a rechazar la idea. (Recordar la explicación de “ninguna
manera” que vimos más arriba).
Usa una comparación, somos esclavos del pecado o de Cristo? ,
solo tienen 2 opciones dice Pablo, o están con Dios ó están con el
pecado.
Entonces, continua su explicación, con este ejemplo confirmando
que uno se hace esclavo de aquello a quien obedece y les
recuerda:
*Verso 20*: Porque cuando erais esclavos del pecado, erais
libres acerca de la justicia.
Inmediatamente les hace ver el resultado,
*Verso 21*: ¿Pero qué fruto teníais de aquellas cosas de las
cuales ahora os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte.
Y así como los exhorta a usar de buena manera sus cuerpos, da
por seguro que la elección que hicieron es buena, entonces
tendrán buenos frutos y como fin la vida eterna *(Verso22)*.
Les muestra 2 opciones decíamos más arriba con su
correspondiente paga.
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