OSADÍA QUE PROVOCA MILAGROS
Mateo 15:21 Saliendo Jesús de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón. 22 Y he aquí
una mujer cananea que había salido de aquella región clamaba, diciéndole: ¡Señor,
Hijo de David, ten misericordia de mí! Mi hija es gravemente atormentada por un
demonio. 23 Pero Jesús no le respondió palabra. Entonces acercándose sus discípulos,
le rogaron, diciendo: Despídela, pues da voces tras nosotros. 24 El respondiendo, dijo:
No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel. 25 Entonces ella vino y
se postró ante él, diciendo: ¡Señor, socórreme! 26 Respondiendo él, dijo: No está bien
tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos. 27 Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun
los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos. 28 Entonces
respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y
su hija fue sanada desde aquella hora. Jesús sana a muchos
Osadía significa: atrevimiento, intrepidez, arrojo o temeridad que refleja el
comportamiento de una persona.
El significado de osadía puede presentar diversos matices según el contexto. Su
significado más positivo asocia la osadía al valor. Tener osadía es tener valor.
Ahora bien, hoy en día mucha gente está falta de este ingrediente determinante en sus
vidas, como lo es la osadía.
La gente está acostumbra a vivir una vida cómoda y sin desafíos, el mundo los oprime,
les roba sus derechos, les roba sus hijos, e incluso sus anhelos y sueños, pero aun así
no hacen nada, no son una voz, sino un eco de la misma sociedad.
Estamos viviendo días muy determinantes, entender y saber movernos en los tiempos
divinos es clave para ver la Gloria de Dios a nuestro favor.
El pasaje que acabamos de leer nos da varias enseñanzas que podemos tomar de una
mujer determinada y con una actitud intrépida. osada para arrebatarle un milagro a
Jesús.
Ella se presentó delante de Jesús con las palabras correctas, presentó su caso
a aquel quien podía librar a su hija del tormento que vivía
Vs. 22 le dijo: Hijo de David, ten misericordia de mí!.
Con estas palabras estaba recociendo que Jesús era el Mesías prometido, que era el
Hijo de Dios, eso hizo llamar la atención de Jesús. Entendió que delante de ella estaba
el milagro para su hija y debía provocarlo.
No se rindió ni se detuvo ante el silencio de Jesús; ni mucho menos de las
miradas incrédulas de los discípulos (Vs. 23).
V. 23 Pero Jesús no le respondió palabra. Entonces acercándose sus discípulos, le
rogaron, diciendo: Despídela, pues da voces tras nosotros
Cuantas veces desistimos cuando vemos que la respuesta de Dios no llega, cuántas
veces dejamos de clamar porque vemos que en vez de que el Señor nos responda, Él
hace silencio.
Cuantas veces caemos en un estado de incertidumbre y desconfianza cuando nos
dejamos cambiar y debilitar nuestra Fe por los detractores externos. Es tiempo de
confiar, seguir perseverando. Que Dios no te responda, no quiere decir que no te ha
escuchado.
No se conformó con la respuesta de Jesús y apeló a la Gracia
Vs. 26 Respondiendo él, dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los
perrillos. 27 Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las migajas que caen
de la mesa de sus amos.
Es evidente que esta mujer tenía un objetivo claro y era arrebatarle un milagro a
Jesús, no a la fuerza, sino apelando a su bendita gracia. Ella sabía que aunque fuera un
poco de Jesús, era suficiente para ver su Poder reflejado en su vida y su familia.
Su fe era inquebrantable delante de Jesús
Vs. 28 Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo
como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora. Jesús sana a muchos
Si hay algo que al Señor le maravilla y le agrada de nosotros, es cuando caminamos en
fe. Cuando eres osado en la fe aceleras los tiempos de Dios a tu favor.
Hoy el Señor quiere levantar familias que tengan un espíritu temerario, intrépido, que
atesoren, que guarden, que atrapen y cuiden la palabra que Él nos ha hablado.
Tienes que creer que mientras no desistamos, mientras sigamos golpeando, orando,
clamando y manifestando su Reino a donde quiera que vayamos, los milagros van a
suceder, la gloria de Dios se va manifestar, y seremos testimonios andantes de lo que
Señor está haciendo en las naciones.
Oración
Padre Celestial, en el Nombre Poderoso de tu amado hijo Jesucristo, nos presentamos
como familias osadas, que no estamos dispuestos a entregar nuestros hijos ni nuestras
generaciones a un sistema anti Dios, de muerte y opresión, declaramos que el Poder
de la Sangre de Cristo cubre mi hogar, mi matrimonio, mis hijos, mis generaciones
futuras, mis finanzas y negocios en el Nombre de Jesús. Declaramos Señor, que
veremos tus milagros, tus maravillas y respuestas inusuales a nuestro favor en este
tiempo. Amado Padre, inúndanos con osadía y forja cada día el carácter de Cristo en
nosotros, en nombre de Jesús. Amén.
