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Pronunciación y Traducción de יהוה

Este documento discute el uso histórico y actual del nombre divino YHWH en la Biblia hebrea y en las traducciones y prácticas religiosas. Explora cómo el nombre divino dejó de pronunciarse aproximadamente en el siglo II a.C. debido a las creencias religiosas judías, y cómo la Iglesia primitiva y las traducciones posteriores usaron títulos como "Señor" en su lugar. Finalmente, analiza los argumentos a favor y en contra de volver a usar aproximaciones como "Yahvé" hoy

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Pronunciación y Traducción de יהוה

Este documento discute el uso histórico y actual del nombre divino YHWH en la Biblia hebrea y en las traducciones y prácticas religiosas. Explora cómo el nombre divino dejó de pronunciarse aproximadamente en el siglo II a.C. debido a las creencias religiosas judías, y cómo la Iglesia primitiva y las traducciones posteriores usaron títulos como "Señor" en su lugar. Finalmente, analiza los argumentos a favor y en contra de volver a usar aproximaciones como "Yahvé" hoy

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Pronunciaciones y Traducciones del nombre divino

‫יהוה‬

Historia y práctica

Andrew Case

Creative Commons Attribution Share-Alike


No dude en compartir y traducir este libro sin permiso.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 2

Contents
Introducción ..........................................................................................................................3
Uso del nombre divino en la Biblia hebrea ............................................................................4
El principio del fin para la pronunciación del nombre de Dios ...............................................7
La Septuaginta ................................................................................................................. 12
La Iglesia Primitiva y el nombre divino ............................................................................... 19
El uso de “Señor” en el Nuevo Testamento.......................................................................... 20
La Iglesia Primitiva y la Antigüedad Tardía ......................................................................... 25
Tradiciones de traducción desde la Reforma hasta el presente.............................................. 32
Biblias del Movimiento del Nombre Sagrado ...................................................................... 40
Volviendo a Éxodo 3:15 ...................................................................................................... 43
La evidencia para la pronunciación Yahvé ........................................................................... 44
La falta de evidencia para la pronunciación Yahvé .............................................................. 44
Objeciones a la pronunciación y traducción de ‫ יהוה‬.............................................................. 45
No tenemos una grabación de audio de Moisés ................................................................ 45
La pronunciación de Yahvé es históricamente artificial ...................................................47
Nehemiah Gordon ........................................................................................................... 48
Corremos el riesgo de “tomar el nombre de Dios en vano” .............................................. 48
Inconsistencia, agobiando al lector y creando obstáculos ................................................. 50
Los judíos se sentirán ofendidos ...................................................................................... 52
Estropea el efecto literario ............................................................................................... 54
Conclusión .......................................................................................................................... 54
Apéndice ............................................................................................................................. 56
Una perspectiva católica romana...................................................................................... 56
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 3

¡Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra! –Salmo 8:1

El nombre personal de Dios es Yahvé. Es un nombre extranjero, muy poco español, y muy
diferente de la buena palabra española ‘Dios’. Por esa razón––tal vez no sea por otra––, el
nombre Yahvé debe ser preservado, para que no se imagine que Dios es un español. Ahora es un
extranjero para todas las razas de la tierra. La misma incomodidad de dirigirnos a un dios, cuyo
nombre no es nativo del idioma de uno, en sí mismo nos alerta de la extrañeza de Yahvé hacia
cada dios creado a nuestra propia imagen. –David Clines1

Introducción
No recuerdo cuando fue que escuché por primera vez el nombre de Yahvé, pero durante mis
estudios en el seminario me di cuenta rápidamente de que era una pronunciación y una forma de
escribir aceptadas para el nombre de Dios, especialmente entre académicos. Los comentarios lo
usaban con regularidad y los profesores me aseguraron que era la aproximación más razonable
de la forma en que se pronunciaba originalmente.
Curiosamente, la mayor parte de lo que aprendí sobre el nombre divino fue de pasada durante
el seminario. No hubo ningún curso dedicado a ello, en ninguna clase se dedicó tan siquiera una
hora a discutirlo, ni se mencionó ningún libro recomendado o requerido sobre el tema. Ese hecho
ahora me entristece. A medida que profundizo en este tema, me doy cuenta de que hay suficiente
material de discusión como para desarrollar un curso completo sobre el nombre de Dios.
¿Por qué surgió este estudio e interés? Cuando mi esposa y yo comenzamos a crear Aleph
with Beth (un curso de video que enseña hebreo de forma comunicativa y natural), llegamos al
punto en que nos dimos cuenta de que necesitábamos hablar sobre el nombre divino. Así que
tuvimos que decidir cómo lo pronunciaríamos en los videos. Además, como consultor de
traducción, este es un tema importante que se necesita comprender para poder asesorar
adecuadamente a los equipos de traducción. Este libro es una oportunidad para explorar este
vasto campo de estudio, evaluar la evidencia y articular la posición a la que hemos llegado, así
como ayudar y alentar a otros a reevaluar las ideas preconcebidas que puedan tener sobre el
tema.

Este documento busca responder dos preguntas principales:


1) ¿Sería mejor para las traducciones de la Biblia hebrea usar alguna aproximación a Yahvé,
o un título como el Señor?
2) Al enseñar y leer el hebreo hoy fuera de Israel, ¿sería mejor pronunciar su nombre como
una aproximación como Yahvé, o decir Adonai (Señor)?

Ahora bien, desde el principio debe quedar claro que este estudio no tiene la intención de
abordar el sentido o el significado del nombre de Dios. Para eso recomiendo la disertación de
Austin Surls que por el momento solamente se encuentra en inglés: Making Sense of the Divine
Name in the Book of Exodus (2015), así como el artículo/estudios de Peter Gentry, “‘The Glory
of God’—The Character of God’s Being and Way in the World: Some Reflections on a Key
Biblical Theology Theme,” Southern Baptist Journal of Theology vol 20.1 (2016): 149-161.

1
David Clines, “Yahvé and the God of Christian Theology” Theology, vol. 83 (Sage: 1980), 324.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 4

Por otra parte, en su libro sobre la cosmovisión del Antiguo Oriente, Walton escribe: “Las
culturas antiguas consideraban que algo existía cuando tenía un nombre y una función…. [El
nombre] es la identidad del dios y enmarca la ‘existencia’ del dios”. Se podría argumentar que
las culturas modernas son muy parecidas. En Occidente, por ejemplo, estamos obsesionados con
tener nombres especiales para todo, desde enfermedades hasta condiciones psicológicas y tipos
de personalidad. El impulso de nombrar cosas y personas es prominente en las culturas de hoy.
Esta realidad destaca la importancia de una deliberación cuidadosa y meticulosa con respecto a la
traducción y pronunciación del nombre de Dios.
Cabe decir que la situación con el nombre de Dios en América Latina es muy diferente a la
situación en el mundo de habla inglesa. Aunque existe una antigua tradición de usar el nombre
de Jehová en inglés, esa tradición casi ha desaparecido y ha sido reemplazada por el título de
SEÑOR. Pero debido a la amplia influencia de la Reina-Valera, Jehová como nombre propio de
Dios permanece fuerte hasta el día de hoy. Esto es a la vez afortunado y desafortunado. Es una
suerte porque, como se discutirá más adelante, usar un nombre real para Dios es mejor que solo
usar un título para reemplazar su nombre, incluso si la pronunciación de ese nombre no es
históricamente precisa. A la vez Jehová es una tradición desafortunada porque se basa en un
error que se cometió por ignorancia hace siglos cuando muchos no sabían que los masoretas (los
antiguos escribas que se dedicaron a copiar meticulosamente la biblia hebrea) habían usado
vocales falsas en el nombre hebreo de Dios para indicar a los lectores que debería leerse como
‘adonai. Entonces, el nombre Jehová es el resultado de ese malentendido, donde uno lee las
consonantes YHWH con las vocales de ‘adonai. A pesar de esto, como se verá en los
argumentos más adelante en este libro, Jehová sigue siendo una mejor tradición que usar siempre
y solamente un título para Dios como el SEÑOR. Por lo tanto, gran parte de este libro será más
relevante para los estadounidenses que para los latinoamericanos, pero la historia sigue siendo
importante e instructiva para las generaciones futuras de hispanohablantes.

Uso del nombre divino en la Biblia hebrea


Antes de mirar la evidencia histórica fuera de la Biblia, es importante enmarcar todo según lo
que sabemos de las Escrituras.
Aunque Éxodo 3:15 se discutirá en una sección posterior, deberíamos comenzar con este
versículo aquí. “Dile esto al pueblo de Israel: Yahvé (‫)יהוה‬, el Dios de vuestros padres, el Dios
de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, me ha enviado a ustedes. ‘Este es mi nombre
para siempre, y por eso seré recordado por todas las generaciones.” En hebreo, la última oración
dice: ‫ה־שּׁ ִמי ְלע ָֹלם וְ זֶ ה זִ ְכ ִרי ְלד ֹר דּ ֹר‬
ְ ֶ‫ ז‬Literalmente: “Este (es) mi nombre para siempre, y este
(es) mi memorial/recuerdo/mención a generación generación”. Algunas versiones como la SSE
traducen ‫ זִ ְכ ִרי‬como memorial, pero la palabra en este contexto puede entenderse como que
implica el hablar del nombre, ya que las cosas que permanecen tácitas generalmente se pierden
en las culturas orales. Así se traduce la BJ: “Este es mi nombre para siempre, por él seré
invocado de generación en generación”. La entrada para el sustantivo ‫ זֵ ֶכר‬en el léxico hebreo y
arameo del AT de Holladay dice lo siguiente: ‫זֵ ֶכר‬: cs. = ; sf. ‫זִ ְכ ִרי זִ ְכ ָר‬: — 1. mención (de un
nombre) Dt 32:26; - 2. Nombre o invocación solemne de Dios Ex 3:15.
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Case 5

En Isaías 26:8, el nombre de Dios y la “mención/memoria” están emparejados, recordando


Éxodo 3:15: “Oh Yahvé, ... tu nombre y memoria ( ‫וּלזִ ְכ ְר‬
ְ ) son el anhelo del alma” (LBLA). Lo
opuesto a esta memoria es la tumba, donde el nombre de Yahvé no se escucha. Así, el salmista,
después de dirigirse a Yahvé por su nombre, dice: “Porque en la muerte no hay memoria ( ‫)זִ ְכ ֶר‬
de ti; en el Seol, ¿quién te alabará?” (Sal. 6:5, ver también Ec. 9:5). Oseas retoma Éxodo 3:15
también cuando escribe: “Yahvé, Dios de los ejércitos, Yahvé es su nombre conmemorativo
(‫( ”)זִ ְכרוֹ‬Os. 12:5).2 El salmista también retoma el mismo tema: “Tu nombre, oh, Jehová, es
eterno, tu memoria, ( ‫ )זִ ְכ ְר‬oh, Jehová, por todas las generaciones” (Sal. 135:13). Las versiones
en español suelen traducir ‫ זִ ְכ ְר‬en este versículo como “tu renombre” o “tu memoria.” Lo que
está claro es que este versículo es una reafirmación o resumen de la revelación de Dios de su
nombre en Éxodo, y sería útil para los lectores del español mantener la conexión traduciendo ‫זֵ ֶכר‬
consistentemente en ambos lugares.
La séptima definición de ‫( זכר‬la raíz verbal del sustantivo ‫ )זֵ ֶכר‬en el léxico BDB es:
“recordar, con la mención implícita del objeto ‫ ”יהוה‬Ellos dan un ejemplo de esto en Jeremías:
“Si digo: ‘No lo mencionaré, ni hablaré más en su nombre’, (‫א־אזְ ְכּ ֶרנּוּ‬
ֶ ֹ ‫א־א ַד ֵבּר עוֹד ל‬
ֲ ֹ ‫ )וְ ל‬hay en
mi corazón como un fuego ardiente encerrado en mis huesos, y estoy cansado de contenerlo, y no
puedo” (Jer. 20:9). Craigie comenta:

Como resultado de la burla (v 7), el reproche y la mofa (una palabra diferente a la del v 7) (v 8),
Jeremías había decidido no proclamar más la palabra…. La palabra ‫זכר‬, aquí traducida como
“mencionar”, significa con mayor frecuencia “recordar” o “conmemorar” (17:4). Ciertamente,
Jeremías no está proponiendo olvidar a Yahvé como hace el pueblo. En este caso, el verbo debe tener
la connotación de mencionar. Esa connotación encaja bien con “ni hablaré”, negándose a hablar en el
nombre de Yahvé. 3

Aquí el deseo de dejar de hablar el nombre de Yahvé no es por respeto o reverencia, ni


porque Jeremías lo considerara tabú o inefable. Es simplemente porque está cansado de ser
perseguido por ello.
Si volvemos al Éxodo, encontramos una forma hifil de ‫ זכר‬que se usa para prohibir la
mención (y por lo tanto, recordar) los nombres de otros dioses: “y los nombres de otros dioses no
mencionarás (‫ ) ַתּזְ ִכּירוּ‬ni de vuestros labios se oirán “(Ex 23:13). La NVI adopta un enfoque
diferente y traduce “No invoquen los nombres de otros dioses”, probablemente porque es obvio
que Yahvé y los profetas mismos pronuncian los nombres (o títulos) de otros dioses a lo largo de
las Escrituras hebreas, pero no con el propósito de invocarlos. El punto del versículo es que el

2
Varias versions como LBLA oscurecen completamente esto al traducir simplemente "el SEÑOR es su
nombre". Asumo que ‫ ֵז ֶ֣כר‬se utiliza en paralelismo sinónimo con ‫ שׁם‬en lugares como Salmo 135:13.
3
Peter C. Craigie, Jeremiah 1–25, in vol. 26 of Word Biblical Commentary (Dallas: Word Incorporated, 1991),
273–274.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 6

nombre de Dios es el único digno de estar en boca de la gente y, por lo tanto, recordado y hecho
famoso. No se debe permitir a otros dioses competir con él en esta arena.
En la misma línea, Josué dice, “y los nombres de sus dioses no mencionarás (‫ ) ַתּזְ ִכּירוּ‬ni
jurarás por ellos, ni los servirás, ni te inclinarás ante ellos” (Jos. 23:7). En otras palabras, un
acuerdo unilateral de silencio cuando se trata de los nombres de los dioses es una forma de
olvidarlos y menospreciarlos, lo que ayudará a los israelitas a evitar jurar por ellos y servirlos.
Entonces la pregunta es, ¿por el nombre de quién deben jurar? La Escritura habla claramente
de esta pregunta en Deuteronomio 6:13: “Es a Yahvé tu Dios a quien temerás. A él servirás y por
su nombre jurarás.” De nuevo: “Temerás a Yahvé tu Dios. Le servirás y te aferrarás a él, y por
su nombre jurarás” (Deut. 10:20). Jeremías, como un estudiante fiel de la Torá, reitera la
importancia de esto: “Y sucederá que, si aprenden diligentemente los caminos de mi pueblo,
jurarán por mi nombre, ‘Vive Yahvé’, así como enseñaron a mi pueblo que jure por Baal,
entonces serán edificados en medio de mi pueblo” (Jer. 12:16). Esta es una promesa sorprendente
para restaurar a las otras naciones junto con Judá, si aprenden los caminos del pueblo de Yahvé.
Por lo tanto, está claro que jurar por el nombre de Yahvé constituye una marca importante de
aquellos que le pertenecen y lo siguen. A la inversa, está claro que Yahvé no le da ningún valor
a evitar el uso de su nombre por reverencia, o para evitar el riesgo de blasfemia. En
consecuencia, evitar usar el nombre de Yahvé para hacer un voto sería ir en contra de sus deseos
explícitos.
Mucha gente en la Biblia hebrea se ajusta al deseo de Yahvé de que su nombre sea usado
para jurar o hacer votos. Booz le dice a Rut: “Viva Yahvé, yo te redimiré” (Rut 3:13). El pueblo
le dice a Saúl: “¿Ha de morir Jonatán, el que ha hecho esta grande salvación en Israel? No será
así. Vive Yahvé, que no ha de caer un cabello de su cabeza en tierra, pues que ha actuado hoy con
Dios.” (1 Sam. 14:45). Incluso Saúl dice de David: “Vive Yahvé, que no morirá” (1 Sam. 19:6).
Elías dice: “Vive Yahvé, Dios de Israel, delante de quien estoy, que no habrá lluvia ni rocío en
estos años, excepto por mi palabra” (1 Rey. 17:1). Micaías dice: “Vive Yahvé, que lo que diga mi
Dios, eso hablaré” (2 Cr. 18:13).
Por lo tanto, está claro que hombres justos como Booz y Elías juraron por el nombre de
Yahvé. También vale la pena señalar que los hombres justos también usaron el nombre en los
saludos formulados. Gordon escribe,

Si estuviera prohibido usar el nombre, esperaríamos que los hombres justos del antiguo Israel cuyas
acciones están registradas en el Tanaj se abstuvieran de usarlo. Sin embargo, encontramos el nombre
usado repetidamente por los antiguos israelitas…. el nombre incluso se utiliza en lo que se puede
describir como contextos “casuales”. Así, Booz y los judíos de su época usaron el nombre de ‫יהוה‬
como un saludo, como leemos en Rut 2:4: “Ahora Booz vino de Belén y dijo a los que estaban
cosechando: ‘¡Que ‫ יהוה‬esté con ustedes!’ Y ellos le respondieron: ‘¡Que ‫ יהוה‬te bendiga!’”4

Aunque no hay un acuerdo uniforme entre los comentaristas sobre cuán casual o formulado
fue este saludo, las opiniones son ciertamente especulaciones. Lo que está claro es que el nombre
divino se está utilizando en un contexto no religioso como una especie de saludo. El contexto le
da más peso a la idea de que se trataba de un saludo estándar como “¡Buenos días!” También
4
Nehemiah Gordon, “The Ban on the Divine Name”, http://messianicfellowship.50webs.com/ban.html,
consultado el 22 de junio de 2020. Creo que la mayoría de las conclusiones de Gordon con respecto al nombre
divino están equivocadas, y su investigación no demuestra suficiente rigor (más sobre esto más adelante), pero
plantea algunas preguntas importantes y hace algunas buenas observaciones.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 7

señala el hecho de que el nombre no se consideraba demasiado sagrado para pronunciarlo en las
interacciones cotidianas.
Otro verso que parece corroborar el saludo de Booz también proviene de la época de los
Jueces. El mensajero de Yahvé se le aparece a Gedeón y le dice: “Yahvé está contigo, varón
esforzado y valiente” (Jueces 6:12). Esto, como se verá más adelante, fue considerado por
muchos a lo largo de la historia de la interpretación judía como un uso legítimo del nombre de
Yahvé en un saludo análogo al que vemos en Rut.
Además, es importante observar cómo Elí instruye al joven Samuel para que se dirija a Dios
en 1 Samuel 3:9: “Elí le dijo a Samuel: “Ve, acuéstate, y si te llama, dirás: Habla, Yahvé, por
favor. Tu siervo oye”. Es sorprendente que un sacerdote de Dios le diga a un niño que llame a
Dios por su nombre directamente. Uno pensaría que si los antiguos israelitas tuvieran la fuerte
costumbre de mostrar respeto a Dios dirigiéndose a él solo por “mi Señor”, entonces Elí le habría
dado instrucciones a Samuel para que lo hiciera, pero no lo hizo. Por lo tanto, una vez más, el
argumento de que uno debe evitar dirigirse a Dios por su nombre por respeto no se sostiene en el
testimonio de las Escrituras. Uno podría objetar que Elí no era un sacerdote particularmente
bueno, y que Samuel no terminó usando el nombre de Dios cuando respondió a Yahvé (v 10:
“Habla, porque tu siervo oye”), pero eso sería especulación. A la luz del uso del nombre de Dios
por parte de otras personas justas como Booz y Elías, la respuesta más convincente es que Elí
simplemente está de acuerdo con una buena tradición y no le está dando malos consejos a
Samuel. Dado el amor de Dios hacia los niños que se muestra a lo largo de las Escrituras, no
debería sorprender que les dé la bienvenida para que lo llamen por su nombre.
Finalmente, debe observarse que Yahvé se hizo único entre los dioses de las naciones al
revelar su nombre personal. Todos los demás dioses alrededor de los hebreos fueron llamados
por títulos o elementos de la creación que gobernaban o representaban. Algunos ejemplos
incluyen Baal (Señor), Dagón (probablemente trigo) y Molech (gobernante ‫מלך‬, con las vocales
de vergüenza ‫ בּ ֶֹשׁת‬sustituidas). Si bien la etimología de algunos dioses como Asera sigue siendo
misteriosa, el patrón parece ser claro: los dioses paganos no tenían nombres personales. Esto
tiene sentido a la luz del hecho de que no estaban destinados a estar relacionados a nivel
personal. Los dioses paganos no estaban allí para tener una relación familiar, como un padre con
su hijo o un esposo con su esposa, sino para ser manipulados con el fin de obtener una buena
vida. Por lo tanto, podría sugerir que perdamos este sorprendente contraste entre los dioses
paganos y Yahvé cuando evitamos usar el nombre personal que él reveló y solo usamos un título.
Al traducir solamente “Señor” en el Antiguo Testamento, podemos cegar involuntariamente al
lector a esta singularidad particular del único Dios verdadero. ¿Pone en duda esto
consecuentemente lo que hicieron los escritores del Nuevo Testamento? Para nada, como se verá
más adelante.

El principio del fin para la pronunciación del nombre de Dios


Entonces, ¿cómo pasaron los israelitas de jurar por el nombre de Yahvé y usarlo en simples
saludos a prohibir su uso por completo? Dios mismo nos da una pista de lo que pudo haber
motivado este histórico cambio de actitud hacia su nombre en el libro de Amós. Este libro se
remonta al siglo VIII a.C. y, por lo tanto, representa la evidencia más antigua de lo que pudo
haber causado el cambio. Amós advierte al pueblo del exilio y la destrucción venideros que
castigará su orgullo y la opresión de los pobres y necesitados. Al describir los horrores del juicio
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 8

inminente de Yahvé, dice algo interesante: “Y si el pariente que viene a llevarse los cuerpos
fuera de la casa para quemarlos le pregunta a alguien que pueda estar escondido allí: ‘¿Hay
alguien más contigo?’ Y él dice: “No”, entonces él continuará diciendo: ‘¡Cállate! No debemos
mencionar el nombre de Yahvé’” (Amós 6:10). Stuart comenta sobre la última parte del
versículo:

El punto parecería ser que después de la terrible matanza llevada a cabo por Yahvé, los pocos
supervivientes angustiados y aterrorizados no podrán soportar más miserias y por eso querrán evitar
la “mención” (‫ )הזכיר‬de Yahvé. Dado que el hablante ya usa el nombre de Yahvé, el tema no puede
ser la prohibición de una mera formulación oral, sino que debe referirse a invocar a Yahvé (cf. ‫הזכיר‬
en Isa 48:1) en oraciones de lamentación o similares. Yahvé se habrá convertido en enemigo, no
amigo. Los sobrevivientes querrán que se mantenga alejado, no que regrese.5

Por tanto, existe la fuerte posibilidad de que algunos hebreos estuvieran tan traumatizados
por lo que sucedió bajo el juicio de Yahvé que prefirieron no hablar más de él. Este trauma
podría haberse convertido fácilmente en nunca mencionar su nombre por temor a que de alguna
manera pudieran correr el riesgo de caer bajo un juicio similar. Este miedo inducido por el
trauma podría haber evolucionado hacia la sustitución de títulos por el nombre de Dios, que los
judíos luego etiquetaron como un signo de “reverencia” o “respeto”. Esta idea de evitar su
nombre por “reverencia”, sin embargo, no se puede encontrar evidenciada en las Escrituras, sino
que se describe en tradiciones posteriores.
Durante el período intertestamental, la Biblia hebrea se tradujo al griego, y sucedió algo
interesante en la traducción de Levítico 24:16. El hebreo original dice:

‫יוּמת‬
ָ ‫וְ נ ֵֹקב ֵשׁם־יְ הוה מוֹת‬
El que blasfeme contra el nombre de Yahvé, ciertamente será condenado a muerte.

El griego, por otro lado, dice ὀνομάζων δὲ τὸ ὄνομα κυρίου θανάτῳ θανατούσθω: “Que muera
condenado a muerte cualquiera que pronuncie el nombre del Señor”. Según la edición de
Goettingen de Levítico, no hay ninguna variante aquí; la tradición del manuscrito es unánime en
que este no fue un caso aislado en la traducción, sino que se convirtió en el estándar. Para
entender lo que pudo haber sucedido, debemos mirar con atención el verbo ‫ נקב‬y tener en cuenta
frases relevantes en los versículos 11 y 15, que dicen respectivamente:

el hijo de la mujer israelita blasfemó contra el Nombre y maldijo.


‫ת־ה ֵשּׁם וַ יְ ַק ֵלּל‬
ַ ‫ן־ה ִא ָשּׁה ַהיִּ ְשׂ ְר ֵא ִלית ֶא‬
ָ ‫וַ יִּ קֹּב ֶבּ‬
καὶ ἐπονομάσας ὁ υἱὸς τῆς γυναικὸς τῆς Ισραηλίτιδος τὸ ὄνομα κατηράσατο6

5
Douglas Stuart, Hosea–Jonah, in vol. 31 of Word Biblical Commentary (Dallas: Word Incorporated, 1987),
364.
6
“Y el hijo de la mujer israelita blasfemó después de pronunciar el nombre”.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 9

El que maldice a su Dios, cargará con su pecado.


‫'היו וְ נָ ָשׂא ֶח ְטאוֹ‬
ָ ‫ִאישׁ ִאישׁ ִכּי־יְ ַק ֵלּל ֱא‬
ἄνθρωπος ὃς ἐὰν καταράσηται θεόν ἀμαρτίαν λήμψεται7

Según HALOT ‫ נקב‬puede significar 1) perforar, 2) arreglar, establecer, 3) denotar, maldecir o


calumniar. La última opción, “calumniar”, sólo se atestigua en este capítulo, Levítico 24,
mientras que al mismo tiempo el significado de “maldecir” aparece claramente en Job 3:8 y Prov
11:26.

Los traductores de la LXX pueden haber traducido ‫ נקב‬en Levítico 24:16 como “nombrar,
´pronunciar” por cualquiera de las siguientes razones:

1. En un espíritu de piedad, no se atrevieron a traducir “maldecir/blasfemar/calumniar”


directamente relacionado con el nombre divino, por lo que usaron el circunloquio para
generalizar o suavizar la frase.
2. Simplemente entendieron mal el verbo hebreo.
3. Permitieron que la creencia sobre la pronunciación del nombre divino influyera en su
traducción.

Debido a la fuerte influencia de la LXX en el judaísmo post-exílico y la Iglesia primitiva,


esta lectura puede haber llevado a la proliferación de dudas en contra de la pronunciación del
Nombre. Si una creencia en contra de la pronunciación ya prevalecía durante el tiempo de la
traducción, entonces puede haber servido para fortalecer esa creencia. Es cierto que esto es una
especulación, aun así es una prueba importante que debe ser mencionada y considerada en la
búsqueda de una razón por la que hubo un cambio de rumbo contra la pronunciación del nombre
divino.

El Talmud de Babilonia ofrece otra explicación, pero no tan antigua como Amós o la LXX:

Los griegos [seléucidas] decretaron que el nombre de Elohim no se podía pronunciar en voz alta; pero
cuando los asmoneos crecieron en fuerza y los derrotaron, decretaron que el nombre de Elohim se
usara incluso en los contratos ... cuando los rabinos se enteraron de esto, dijeron: ‘Mañana esta
persona pagará su deuda y el contrato se tirará sobre el montón de basura’ por lo que prohibieron su
uso en los contratos.8

Entonces, de acuerdo con este relato del Talmud, la prohibición de usar el nombre de Yahvé
comenzó como uno de los decretos anti-Torá promulgados por el tirano griego seléucida Antíoco
IV Epífanes alrededor del año 168 a.C. Esto era parte de su plan para convertir a los judíos en
griegos. Pero cuando Judas Macabeo derrotó a los griegos, restauró el uso del nombre divino y

7
“La persona que blasfeme contra Dios pecará/albergará el pecado”.
8
Michael L. Rodkinson trans. The Babylonian Talmud: Original Text, Edited, Corrected, Formulated, and
Translated into English, vol. 1. (Boston: The Talmud Society, 1918), Rosh Hashannah 18b.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 10

estableció una ley que “requería el uso del nombre de ‫ יהוה‬en los contratos para que cada judío
recuperara el hábito de usar el nombre divino. Pero los rabinos se opusieron a este decreto y
prohibieron el uso del nombre en los contratos “.9
De los tres principales grupos religiosos judíos descritos por Flavio Josefo en los siglos
anteriores de Cristo (saduceos, fariseos y esenios), sólo los saduceos defendían el uso del nombre
divino y exigían su uso en los contratos. Los esenios, por otro lado, se opusieron estrictamente a
la mención del nombre de Yahvé en el reglamento de su comunidad:

Cualquiera que hable en voz alta el nombre santísimo de Elohim, [ya sea cuando...] maldice o hable
frívolamente o como un grito en tiempo de prueba o por cualquier otra razón, o mientras está leyendo
el libro o rezando, debe ser expulsado, para no volver nunca más al cuerpo de la comunidad.10

El contexto más amplio de esta prohibición no da ninguna razón, ya sea por reverencia o
respeto. Hay que tener en cuenta que la prohibición no se limita a usar el nombre de Yahvé al
maldecir, sino incluso en la oración o por cualquier otra razón. Este tipo de prohibición general
ignora la enseñanza de las mismas escrituras del Antiguo Testamento que la comunidad esenia es
famosa por preservar.
Para asegurar la completa eliminación del uso del nombre divino, llegaron a escribir el
nombre en escritura paleohebrea, que la persona promedio no podía leer, ya que había caído en
desuso en el siglo III a.C.; incluso aunque el resto de sus documentos hebreos están escritos en
escritura cuadrada aramea. Pero en caso de que alguien supiera leer la escritura paleohebrea,
algunos de los pergaminos usaban cuatro puntos negros • • • • en lugar de ‫ יהוה‬para evitar que
alguien lo leyera. Entonces, uno podría leer algo como, “Y • • • • habló con Moisés, diciendo…”.
Basado en su propia declaración explícita con respecto a la prohibición, cualquier intento de
afirmar que esta práctica fue por el bien de “reverenciar” el nombre de Dios es pura
especulación. Basado en la enseñanza bíblica anterior, esta práctica de los esenios logra
exactamente lo contrario de lo que Yahvé deseaba.
Escritos posteriores en la Mishná del siglo III d.C. describen la actitud en desarrollo de la
enseñanza judía sobre el tema de pronunciar el nombre de Yahvé: “Los siguientes no tienen
porción en el mundo por venir: ... uno que pronuncia el nombre divino tal como está escrito”.11
Pero la enseñanza rabínica posterior no siempre está de acuerdo con esta prohibición. Un
ejemplo de ellos es la siguiente línea de desarrollos del comentario judío sobre el saludo de Booz
y Jueces 6:12:

Cuando los sectarios pervirtieron sus caminos y dijeron que solo había un mundo, decretaron que
debían decir, “por los siglos de los siglos” [lit. desde el fin del mundo hasta el fin del mundo].
También decretaron que una persona debería saludar a su prójimo en el nombre de Dios, como dice:
“Y he aquí, Booz vino de Belén y dijo a los segadores: ‘Que el Señor esté con ustedes’. Y ellos le
respondieron: ‘Que el Señor lo bendiga’” (Rut 2: Y también dice: “El Señor está contigo, valiente
guerrero” (Jueces 6:12). Y también dice: “Y no desprecies a tu madre cuando envejezca” (Proverbios
23:22). Y también dice: “Es tiempo de actuar en nombre del Señor, porque han violado tu enseñanza”

9
Nehemiah Gordon, “The Ban on the Divine Name,” accessed June 22, 2020,
http://messianicfellowship.50webs.com/ban.html.
10
The Rule of the Community, 1QS 6:27-7:2.
11
Mishnah Sanhedrin 10:1
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 11

(Salmos 119:126). Rabí Natan dice: [esto significa] “Han violado tu enseñanza. Es hora de actuar en
nombre del Señor ”.

El Talmud luego comenta sobre el comentario anterior de Berakhot 9:5:

Los Sabios también instituyeron que uno debe saludar a otro en el nombre de Dios, es decir, uno debe
mencionar el nombre de Dios en su saludo, como está dicho: “Y luego Booz vino de Belén y dijo a
los segadores: El Señor está con ustedes, y le dijeron: El Señor lo bendiga” (Rut 2: 4). Y dice: “Y el
ángel de Dios se le apareció y le dijo: Dios está contigo, guerrero valiente” (Jueces 6:12). Y dice: “Y
no desprecies a tu madre cuando sea vieja” (Proverbios 23:22), es decir, no se deben descuidar las
costumbres que hereda. Y para que no digas que está prohibido mencionar el nombre de Dios, dice:
“Es hora de trabajar para el Señor; han invalidado Tu Torá” (Salmos 119:126), es decir,
ocasionalmente es necesario negar los preceptos bíblicos para cumplir la voluntad de Dios, y saludar
a otro es ciertamente la voluntad de Dios.12

Berakhot 63a: 7-8 luego ofrece más comentarios sobre el tema:

La Guemará explica: Y si dices: Booz dijo esto por su cuenta, y no prueba nada con respecto a la
práctica normativa, ven y escucha una prueba del versículo: “El Señor está contigo, guerrero valiente”
(Jueces 6:12). Y si dices que fue un ángel quien le dijo esto a Gedeón, que quizás este versículo fue el
ángel que le informó a Gedeón que el Señor está con él, pero no es la fórmula estándar de un saludo,
ven y escucha la prueba del versículo: “Y no desprecies a tu madre cuando sea vieja” (Proverbios
23:22); las costumbres de los ancianos de la nación son una fuente adecuada de la cual derivar
halakha.

Después de lo anterior viene un comentario adicional (Makkot):

¿Por qué fue insuficiente la prueba de la declaración de Booz a los recolectores? La Guemará explica:
Y si dijeras: Es Booz quien lo hizo por su cuenta, y desde el Cielo no estaban de acuerdo con él;
venga y escuche la prueba, y dice: “El Señor está contigo, guerrero valiente”. El ángel saludó a
Gedeón con el nombre de Dios, lo que indica que hay acuerdo en el Cielo de que esta es una forma
aceptable de saludo.

Finalmente, el comentario judío moderno sobre la discusión dice lo siguiente:

Los sabios también decretaron que estaba permitido, e incluso digno, saludar al prójimo usando el
nombre de Dios, al igual que Booz y los otros segadores. Por lo general, los decretos están destinados
a cambiar una práctica anterior. Aquí, el trasfondo histórico es un poco confuso. Supongo que las
generaciones anteriores pensaron que era incorrecto usar el nombre de Dios para saludar a un simple
ser humano. Por el contrario, según los sabios, dado que los seres humanos fueron creados a imagen
de Dios, hay un poco de divinidad en cada ser humano. Entonces, en cierto sentido, saludar a un
prójimo usando el nombre de Dios es como saludar a Dios usando el nombre de Dios. Por lo tanto, no
solo está permitido, sino que se fomenta. Los dos últimos midrashim no están relacionados
específicamente con los dos decretos mencionados anteriormente, sino que son exhortaciones más
bien generales a obedecer los decretos de los sabios.

12
Mishnah Berakhot 54a:1-9
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 12

Curiosamente, la práctica típica y la cultura abrumadora en torno al nombre divino en Israel hoy
en día es completamente contraria a lo que concluyen estos comentarios. En nuestra
investigación no hemos encontrado una razón para esto.

La Septuaginta
La mayoría de la tradición de la traducción griega del Antiguo Testamento (LXX) usaba
kurios (señor) en lugar del nombre divino. Los grandes manuscritos cristianos Sinaiticus,
Alexandrinus y Vaticanus tienen kurios en lugar de YHWH. ¿Qué motivó esto? Algunos
estudiosos han sugerido que esta fue una estrategia utilizada por las autoridades para facilitar la
helenización de los judíos. Al suprimir el nombre especial de Dios y usar kurios, hizo más
universal y más fácil armonizar con los emperadores y dioses del mundo grecorromano.13
Baudissin argumentó que la práctica posterior de los masoretas (de marcar a YHWH con vocales
alternas) surgió del precedente establecido por la LXX. “Sostuvo esto principalmente porque no
consideraba que kurios fuera simplemente una forma piadosa de evitar la articulación del
Tetragrámaton, sino que se usaba un nombre divino semítico distinto (‘adon)”.14
Como ya se mencionó anteriormente, se ha descubierto que algunos manuscritos griegos de
la Biblia hebrea difieren del estándar de usar kurios para el Nombre, especialmente entre los
Rollos del Mar Muerto. Un rollo que contiene la segunda mitad de Deuteronomio, que data de
mediados del siglo I a.C. no contiene ninguna evidencia de kurios en absoluto. En cambio, el
escriba dejó grandes espacios donde habría ocurrido el nombre divino, marcó los espacios con un
punto a cada lado y luego insertó el Nombre en hebreo entre los puntos. Esto puede indicar que
el primer escriba no pudo, ni se le permitió, escribir el Nombre en hebreo, y por lo tanto lo dejó
para otro.15
Los fragmentos de pergamino de Nahal Hever de los Profetas Menores (8Hev XII gr), que
datan de alrededor del 50 a.C. hasta 50 d.C. tienen el nombre divino escrito en escritura
paleohebrea en 28 lugares, como en las imágenes de abajo.

13
Robert Wilkinson, Tetragrammaton: Western Christians and the Hebrew Name of God (Leiden: Brill, 2015),
51.
14
Wilkinson, Tetragrammaton, 54.
15
Ibid., 55.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 13

Esta misma escritura arcaica se puede encontrar en 12 manuscritos hebreos de Levítico y Job del
Mar Muerto, y se usa consistentemente en todos esos manuscritos.16
Otra evidencia interesante de Qumrán es 4QpapLXXLevb, que data del siglo I a.C., que
traduce iaô en lugar del nombre divino, en vez de kurios. Frank Shaw sostiene que este
manuscrito representa una disputa antigua sobre la pronunciación o la evitación del Nombre, y
que su uso no desapareció tan pronto como algunos han propuesto.17 Si esto constituye evidencia
de la práctica de traducción original de los primeros traductores de la LXX sigue siendo una

16
See Emanuel Tov, “The Biblical Texts from the Judean Desert,” in The Bible as a Book: The Hebrew Bible
and the Judean Desert Discoveries, eds. Edward D. Herbert and Emanuel Tov (London, 2002), 151.
17
Frank Shaw, The Earliest Non-Mystical Jewish Use of Iaô (unpublished dissertation, University of
Cincinnati, 2002) in Wilkinson, Tetragrammaton, 56.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 14

especulación.

Volviendo al uso del paleo-hebreo de los fragmentos de Nahal Hever, algunos han
pensado que esto marca el nombre divino como algo demasiado sagrado para ser pronunciado.
Pietersma argumentó que estos manuscritos griegos que escriben YHWH en hebreo son en
realidad manifestaciones posteriores de una motivación arcaizante por parte de los escribas (algo
por lo que la comunidad esenia parecía tener predilección), en lugar de evidencia de lo que
habría producido la primera práctica de traducción de la LXX. En otras palabras, Pietersma
mostró que probablemente era indicativo de cierta insatisfacción con la forma en que
manuscritos anteriores habían traducido a YHWH como kurios. Señaló que en el texto hebreo
encontramos hwhyl (‘a YHWH’) cientos de veces, y esto se traduce en manuscritos de la LXX
posteriores como κυρίῳ (“Señor” en el caso dativo). Un ejemplo de esto se encuentra en Génesis
4:3 donde Caín trajo el fruto de la tierra como una “ofrenda/sacrificio a YHWH”:

‫ִמנְ ָחה ַליהוה‬


qusi,an tw/| kuri,w|

De modo que el argumento de Pietersma podría resumirse con la siguiente pregunta: si el


manuscrito LXX más antiguo hubiera traducido el nombre divino en letras hebreas, sin la
preposición inseparable (p.ej. qusi,an hwhy), ¿Cómo habrían sabido los revisores posteriores
insertar kurios en el caso dativo? En otras palabras, ¿cómo sabrían los revisores posteriores
cuando había una preposición lamed adjunta al nombre divino?18 Este argumento es desafiado,
sin embargo, por la solución de insertar el artículo dativo τῷ antes del Nombre escrito en hebreo,
que se evidencia en el manuscrito 8HevXIIgr ya mencionado.

18
Albert Pietersma, “Kyrios or Tetragram,” 85-101. See also J.W. Wevers, “The Rendering of the Tetragram in
the Psalter and the Pentateuch: A Comparative Study,” in The Old Greek Psalter Studies in Honour of Albert
Pietersma, eds. R.J.V. Hiebert et al. (Sheffield: Bloomsbury, 2001), 21-35.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 15

Más evidencia de tw/| que precede al Nombre en hebreo ocurre en 4QLXXLevb en Levítico 3:11,
14 y 4:3. Wilkinson escribe:

El uso de estos manuscritos ha debilitado el argumento de Pietersma porque kurioi (dativo) podría
ser una sustitución de iaô o del Tetragrámaton con el artículo dativo tôi. El artículo en Zacarías
9:1 del Rollo de los Profetas Menores quizás fue insertado, ya que de otra manera no habría
indicación del caso del Tetragrámaton, y también podría estar representando l. El artículo
nominativo en Habacuc 2.20 no resuelve ninguna ambigüedad y no representa nada en hebreo.
Perkins, “Kurios”, acepta el argumento de Pietersma de que dado que el traductor usa el artículo
genitivo y, a veces, el artículo dativo para representar lyhwh, es más probable que un “sustituto de
kurios” sea consistente en su interpretación en lugar de elegir ahora uno, ahora el otro. M. Rosel
también defiende un kurios original, señalando que, aunque yhwh generalmente se traduce por
kurios y ʾelohim por theos, hay varios lugares en el Éxodo griego donde kurios traduce ʾelohim y
41 casos donde theos lo hace por yhwh. La mayoría de estos casos parecen textualmente bastante
firmes. Dado que no hay evidencia de que el Vorlage de los traductores fuera diferente de nuestro
texto masorético, si el traductor original escribió iaô o un Tetragrámaton hebreo, entonces
debemos suponer una variación improbable de un revisor que eligió entre kurios o theos. Más
probablemente, el traductor original usó la palabra que consideró adecuada en ese momento.
Rosel también considera que la traducción griega de Levítico 24:16 que ordena la muerte para
alguien que “nombra el nombre del Señor” [la versión de la LXX] aboga por el uso de kurios allí,
porque un traductor que usa iaô o un tetragrámaton hebreo violaría el mandamiento (asumiendo
que nombrar también significa escribir). Martin Rosel, “La lectura y traducción del nombre
divino en la tradición masorética y el Pentateuco griego”, Journal for the Study of the Old
Testament 31 (2001), 411–428.19

Pietersma sostuvo que los traductores originales escribieron kurios sin el artículo en griego
porque lo consideraban un nombre propio, una idea a la que volveremos más adelante cuando
consideremos la cuestión de la percepción de kurios por parte de los autores del NT.20 Por el
contrario, Emanuel Tov explicó la ausencia del artículo como evidencia de una sustitución
mecánica de iaô por kurios realizado por escribas cristianos. Concluyó que iaô “representa la
etapa más antigua atestiguada en la historia de la traducción de la LXX, cuando el nombre de
Dios estaba representado por su transliteración, al igual que cualquier otro nombre personal en la
LXX”.21 Sin embargo, Tov no explica suficientemente su punto de vista, ni proporciona pruebas
suficientes para construir un caso convincente.

19
Wilkinson, Tetragrammaton, 61.
20
Pietersma, “Kyrios or Tetragram,” 98.
21
Emanuel Tov, “The Greek Biblical Texts from the Judean Desert,” in The Bible as a Book: The Hebrew Bible
and the Judean Desert Discoveries, eds. Edward D. Herbert and Emanuel Tov (London: Oak Knoll, 2002), 112-113.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 16

El padre de la Iglesia, Orígenes, comentó que los manuscritos LXX “más precisos” tenían el
nombre divino en letras hebreas antiguas, pero no se garantiza que tuviera acceso a los
manuscritos más antiguos, y es probable que se estuviera refiriendo al texto revisado de Aquila,
que vino más tarde. Patrick Skehan presentó un intento de colocar las diferentes versiones LXX
del Nombre en orden cronológico de la siguiente manera:22

1. ιαω
2. escritura cuadrada hebrea
3. escritura paleo-hebreo
4. κυριος

Wilkinson concluye que, “dada la escasez de evidencia y el desafío de fechar el material con
precisión, puede ser mejor sostener que diferentes convenciones fueron sostenidas por diferentes
grupos, quizás al mismo tiempo. Además, deberíamos permitir la posibilidad de diferentes
prácticas en diferentes libros: en algunos de los profetas, puede parecer definitivamente que
kurios fue el original, pero esto no tiene por qué haber sido así en otros libros”.23 Continúa
escribiendo:

Una transliteración original de la Septuaginta del Tetragrámaton hebreo como iao gana
plausibilidad a partir de otros usos tempranos de este nombre. Diodoro de Sicilia I.94.2 (siglo I
d.C.) afirma que Moisés refirió sus leyes al “dios llamado Iaô”. Iaô, veremos más adelante,
también se puede encontrar en los autores patrísticos y en los papiros mágicos. Varro (116-27 a.
C.) nos dice que el dios judío se llama iao en los misterios caldeos. También recuerda en su
pronunciación la forma del Tetragrámaton que se encuentra en los papiros elefantinos yhw, que
discutimos en la Introducción. Dioscórides Pedanius (40-90 d.C.) en su Peri Painonias 11.2
clama: “Sé conmigo, Señor (kurios) Dios Iaô, Iaô”. El gramático alejandrino Elio Herodiano
(180-250 d.C.), escribiendo sobre ortografía (Peri Orthographias), suplica: “¿Puedo curarte con
Iaô”. Mucho más tarde, el gramático del siglo V Hesiquio, también de Alejandría, en su Léxico
(1212) explica el nombre Ozeias (Oseas) como “Fuerza de Iao” (ischus iaô).24

Orígenes también presenta más evidencia para iaô en su comentario sobre Juan 1:1 al glosar el
nombre ieremias como meteorismos iao (exultación de Iao).25 Se pueden encontrar más
apariciones de iaô en Codex Machalianus (Q):
1. Como nota marginal en Ezequiel 1:2 donde iôakeim se define como iaô etoimasmos
(Iao ha preparado)
2. Como nota marginal en Ezequiel 11:1 donde banaiou se interpreta como oidodomê ê
oikos iaô (…).

Por tanto, otra cronología de la traducción de la LXX podría ser la siguiente:

1. ιαω
2. κυριος
22
Patrick W. Skehan, “The Divine Name at Qumran, in the Masada Scroll and in the Septuagint” in Bulletin of
the Society of Septuagint and Cognate Studies, no. 30 (1980): 14-44.
23
Wilkinson, Tetragrammaton, 63.
24
Ibid., 65.
25
GCS Origines 4.53.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 17

3. escritura cuadrada hebrea / escritura paleo-hebreo

Lo anterior se explica por la tendencia posterior a hebraizar, como lo demuestran las revisiones
de Aquila, que usaban el tetragrámaton en escritura paleo-hebrea en lugar de kurios (vea imagen
a continuación). Es muy probable que se trate de un arcaísmo reaccionario provocado por el
conflicto entre cristianos y judíos. Parece que, aunque el Nombre fue escrito en paleo-hebreo, se
pretendía que se pronunciara como kurios cuando se leía en voz alta. Esto es evidente en un lugar
de los fragmentos de Aquila donde no había espacio para escribir “en la Casa de YHWH”, por lo
que el escriba tradujo el nombre divino con un nomen sacrum como KU con un macron sobre la
U, que representa κυρίου.26

Otra evidencia de hebraizar se encuentra cuando PIPI aparece en algunos manuscritos, usando
letras griegas para aproximarse a la apariencia del nombre divino en hebreo. Los fragmentos
hexaplaricos de C. Taylor muestran que Aquila, Symmachus y la columna LXX tienen ΠΙΠΙ
donde YHWH estaría en hebreo.27 Orígenes escribió en una carta a Marcella que “Aquellos que
no entienden [el nombre divino] generalmente lo leen como ΠΙΠΙ (pipi) debido a la similitud de
las letras con las que se encuentran en los libros griegos”.28 Una vez más, Orígenes comentó que
“el Tetragrámaton se lee Adonai como un nombre propio, pero entre los griegos se dice
kurios”.29
Durante el período en que se produjo el Gran Rollo de Isaías (1QIsaa,siglo II a.C.) hay
evidencia de una aversión a pronunciar el Nombre, incluso mientras se dicta la Escritura por el
simple hecho de copiar. Por ejemplo, el rollo de Isaías usó escritura cuadrada hebrea para
escribir el nombre divino, y parece que el escriba estaba escribiendo por dictado. Así, 3:17 tiene
adonai donde debería estar YHWH, y 3:18 tiene a YHWH donde debería estar adonai. Si solo
estuviera escuchando adonai para YHWH en el dictado, entonces es de esperar este tipo de
confusión. En ambos casos, corrigió su error en el espacio encima de cada palabra. Se puede
encontrar más evidencia de este error en 6:11, 7:14, 9:7 y 21:16.30 Esto, junto con otra evidencia,
demuestra que el Nombre se pronunció como adonai mucho antes de la tradición masorética.

26
Charles Taylor, Hebrew-Greek Cairo Genizah Palimpsests from the Taylor-Schechter Collection: Including a
Fragment of the Twenty-Second Psalm According to Origen’s Hexapla (Cambridge: University Press, 1900), 16.
27
Taylor, Hebrew-Greek Cairo Genizah Palimpsests, 6-11.
28
Jerome Ep. 25 ad Marcellam (PL XXII.228f, CSEL LIV.218-220).
29
In Psalmos 2.2
30
Wilkinson, 76.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 18

Lo que queda en duda es si es probable que lo kurios apareció primero en la tradición de


la LXX. Vasiliadis ofrece un resumen útil de cómo ha progresado el debate a lo largo de los
años:

La traducción griega original del nombre divino ha resultado ser un tema muy debatido. Se ha
puesto una gran cantidad de esfuerzo académico en esta cuestión, especialmente como resultado
de descubrimientos más recientes que desafiaron supuestos previamente sostenidos. Más
específicamente, W. G. von Baudissin (1929) sostuvo que desde sus orígenes la LXX había
traducido el Tetragrámaton por κύριος, y que en ningún caso este último era un mero sustituto de
un αδωναι anterior. Basado en evidencia más reciente disponible, P. Kahle (1960) apoyó que el
Tetragrámaton escrito con letras hebreas o griegas se retuvo en el Antiguo Griego y fueron los
cristianos quienes más tarde lo reemplazaron con κύριος. S. Jellicoe (1968) coincidió con Kahle.
H. Stegemann (1969/1978) argumentó que Ιαω /i.a.o/ se usó en la LXX original. G. Howard
(1977/1992) sugirió que κύριος no se usó en el antiguo griego precristiano. P. W. Skehan (1980)
propuso que había habido un desarrollo textual con respecto al nombre divino en este orden: Ιαω,
el Tetragrámaton en caracteres hebreos cuadrados, el Tetragrámaton en caracteres paleo-hebreos
y, finalmente, κύριος. M. Hengel (1989) ofreció un esquema similar para el uso de κύριος para el
nombre divino en la tradición LXX. Desarrollando la posición de R. Hanhart (1978/1986/1999),
A. Pietersma (1984) consideró κύριος como la versión griega original del Tetragrámaton en el
texto Antiguo Griego. Este punto de vista fue apoyado posteriormente por J. W. Wevers (2005) y
M. Rosel (2007). Además, Rosel argumentó en contra de que Ιαω sea la versión LXX original del
Tetragrámaton. G. Gertoux (2002) propuso que el reemplazo del Tetragrámaton por ‫ אדני‬fue
gradual entre el 300 a. C. a 100 d.C. y que Ιαω era un sustituto arameo del Tetragrámaton usado
desde 200 a.C. hasta mediados del siglo II d.C., en un momento en que apareció la práctica de los
escribas de nomina sacra. K. De Troyer (2008) argumentó que θεός era la versión original del
Tetragrámaton en griego y solo más tarde κύριος se convirtió en la versión estándar después del
uso más extenso de ‫ ;אדני‬obviamente, algunos judíos leyeron Ιαω en su Biblia griega al menos
hasta el siglo I antes de nuestra era. L. Perkins (2008) sugirió que Ιαω era un cambio secundario
al κύριος original. G. D. Kilpatrick (1985), E. Tov (1998/2004/2008), J. Joosten (2011) y A.
Meyer (2014) concluyeron que los argumentos de Pietersma no son convincentes. Más
particularmente, Tov ha apoyado que los traductores originales usaban una forma pronunciable
del tetragrámaton hebreo (como Ιαω), que luego fue reemplazado por κύριος, mientras que las
recensiones griegas lo reemplazaron con transliteraciones en caracteres hebreos cuadrados o
paleo-hebreos. R. Furuli (2011), después de comparar las diversas propuestas, argumentó que
κύριος no reemplazó al Tetragrámaton antes de la Era Común y los autógrafos de la LXX
incluían el Tetragrámaton en alguna forma de Ιαω. En verdad, la evidencia sólida disponible
apoya esta última tesis.31

Al final, el asunto sigue sin resolverse; hay evidencia en ambos lados del debate,
dejándonos principalmente para especular sobre lo que hicieron los primeros traductores de la
LXX con el nombre divino. Si bien estamos convencidos de que kurios fue lo primero, para los
propósitos de esta presentación no es necesario llegar a una conclusión definitiva sobre este
punto, sino más bien presentar la evidencia y los argumentos. Cualquiera que sea el caso, parece
que hubo controversia o confusión entre los traductores y revisores de la LXX con respecto a qué
hacer con el nombre divino, así como un interés especial en él. Como hemos visto, parece haber
habido tensión en torno a este tema durante el levantamiento macabeo, lo que puede haber

31
Pavlos Vasileiadis, “Aspects of rendering the sacred Tetragrammton in Greek,” Open Theology, vol. 1
(2014): 60-61.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 19

contribuido a la confusión. Otra posibilidad sugerida tentativamente por Wilkinson es que la


lectura griega de Lev. 24:16 marca un momento decisivo que puede haber iniciado el reemplazo
progresivo de Ιαω por κύριος en los manuscritos de la LXX. No es un asunto sencillo, y quizás
sea uno que requiera una investigación más meticulosa para resolverlo. Una cosa importante a
tener en cuenta es que la inhibición de pronunciar YHWH precedió al trabajo de los escribas
cristianos. Al mismo tiempo, debe admitirse que no podemos saber con certeza que el nombre
divino fue estandarizado en su interpretación durante el tiempo de Jesús y los apóstoles.
Otra pregunta que queda por resolver es si los manuscritos del griego antiguo que
contienen Ιαω en lugar del nombre divino estaban traduciendo genuinamente lo que pensaban
que era la pronunciación original, o algún tipo de circunloquio para proteger su santidad.
Vasileiadis vuelve a comentar sobre esto:

Se ha sugerido que esta forma del nombre divino era: (a) una transliteración vocálica aproximada
de la ‫ יהוה‬original de cuatro letras como /y..ho.w/ teniendo la ‫ ה‬final eliminada como inaudible,
(b) una transliteración literal del nombre divino tardío de tres letras ‫( יהו‬/y..ho/ o /y..hu/) y, por lo
tanto, solo “parte del Tetragrámaton” (y, también, más adelante como el término de reenganche,
‫ )יאו‬o (c) un equivalente de traducción que se originó o fue “alimentado” a partir de otros
dominios semánticos. Los dos últimos casos permitirían el uso de Ιαω como nombre sustituto en
lugar del Tetragrámaton completamente escrito, con el objetivo de “proteger” el carácter sagrado
del nombre completo. 32

La Iglesia Primitiva y el nombre divino


Si bien los manuscritos precristianos demuestran una variedad de formas de traducir YHWH,
los manuscritos griegos cristianos son uniformes en el uso de kurios, y ninguno se ha encontrado
con el Nombre escrito en paleo-hebreo, escritura cuadrada o como ΠΙΠΙ. En cambio, los
manuscritos cristianos primitivos usaban un conjunto de abreviaturas conocidas como nomina
sacra. Estas abreviaturas tienen una línea horizontal encima de ellas como señal de que no está el
nombre completo. Los ejemplos incluyen theos, kurios, christos e iesous. Otros que aparecen
ocasionalmente en forma abreviada: pneuma, anthropos, stauros, pater, huios, soter, meter,
ouranos, Israel, daveid y hierousalem. No tenemos evidencia de que estas palabras fueran
consideradas inefables o impronunciables. Tampoco tenemos evidencia de que esta abreviatura
haya nacido de la tradición judía. Durante los primeros tres siglos d.C. parece ser una práctica
exclusivamente cristiana.33
Lo que debe mencionarse es que los escritos del Nuevo Testamento, como las cartas de Pablo
y el Apocalipsis (véase Apocalipsis 1:3) estaban destinados a ser leídos en voz alta. Debido a la
larga tradición de inhibición con respecto al nombre divino, es dudoso que una comunidad mixta
de judíos tolerara la pronunciación del Nombre. Además, no tenemos ningún testimonio
inequívoco de rabinos de que los cristianos leían el Nombre en voz alta.

32
Vasileiadis, “Aspects of rendering the sacred Tetragrammton in Greek,” 68.
33
Wilkinson, 90-91.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 20

El uso de “Señor” en el Nuevo Testamento


Cualquier debate sobre la pronunciación del nombre divino debe abordar el tema del uso de
“Señor” en el NT. Este es quizás el tema más importante en la discusión y, si no se trata
adecuadamente, no se puede avanzar hacia una conclusión. En otras palabras, el hecho de que el
Nuevo Testamento nunca use el nombre personal de Dios como se revela en el Antiguo
Testamento, o incluso una aproximación de él, es crucial.34 ¿Por qué los autores del Nuevo
Testamento decidieron hacer esto? Los escritores nunca nos dan su razón, por lo que todo lo que
sigue aquí es especulación. Sin embargo, es un intento honesto abordar el problema.
Primero, debe entenderse que la LXX se convirtió en el estándar para el mundo judío que se
estaba olvidando del hebreo en medio de un mundo cada vez más dominado por otros idiomas
como el griego, el arameo y el latín. Los escritores del Nuevo Testamento lo citaron
extensamente y llegó a ser un texto apreciado por la Iglesia primitiva.
Cuando un texto se usa como estándar durante siglos como lo fue la Septuaginta, muchas
cosas se arraigan en la tradición. Con el tiempo, ese texto puede cambiar o influir en cómo se usa
el idioma. Es muy probable que el título kurios en griego llegara a entenderse como un nombre
propio. Aunque no es técnicamente ni léxicamente exacto decir que kurios es un nombre, llegó a
entenderse como tal porque fue tratado de esa manera. Si una comunidad trata un título como un
nombre propio durante siglos, inevitablemente llegará a entenderse como un nombre propio. Las
generaciones posteriores continuarán usándolo, no porque crean que está mal pronunciar el
nombre real, sino simplemente porque consideran que es el nombre de Dios.
Esto no es difícil de entender porque ha sucedido en español. Muchas generaciones se han
acostumbrado a escuchar y leer “el Señor” como el nombre de Dios, y ya no lo reconocen como
un título. La tradición puede cambiar nuestras categorías mentales, y ahora para muchos “el
Señor” ocupa el espacio de un nombre propio. Si alguien se sienta a analizar “el Señor”, admitirá
que es un título con el artículo definido. Pero en su propio inventario léxico interno, “el Señor”
es un nombre. De acuerdo con la percepción de “el Señor” en el español moderno, quizás
podríamos escribirlo como un nombre propio unificado “elSeñor”. Eso representaría con mayor
precisión cómo se percibe y se trata. Este fenómeno no está tan extendido en español como en
inglés, porque muy pocas personas y traducciones en los Estados Unidos han conservado el
nombre Jehová como la Reina Valera de América Latina. Por eso se debe reconocer que para
muchos latinoamericanos el nombre de Dios sigue siendo un nombre (Jehová) y no un título.
Esto ha sucedido en otros idiomas. Hablamos de este asunto con estudiantes brasileños que
están acostumbrados a escuchar y leer el nombre divino traducido como “el Señor” en portugués.
Dijeron que, sinceramente, no lo consideran un título. Piensan en ello como un nombre. Se siente
como un nombre cuando lo usan y, por lo tanto, cambiarlo en una traducción les haría sentir
como si el nombre familiar y personal de Dios hubiera sido cambiado, y esto alienaría a los
lectores. Es importante señalar que esta razón para retener “el Señor” en una traducción es
diferente de mostrar “reverencia” o evitar el uso indebido del nombre de Dios, que se deriva de
un malentendido de uno de los Diez Mandamientos.
Hay otro ejemplo de nuestra vida personal que ayuda a ilustrar cómo los nombres pueden
rápidamente arraigarse profundamente en nuestra percepción de alguien. Un amigo mío, al
cumplir los sesenta, decidió que ya no quería que la gente lo llamara Mike, sino Michael. En
algún momento se había dado cuenta de que Michael es un nombre hebreo, y el sufijo –el es la

34
Reconocemos que el Apocalipsis tiene la palabra teofórica aleluya (ἁλληλουϊα) cuatro veces en el capítulo
19, pero no lo consideramos como reconocimiento intencional y transliteración por Juan del nombre divino.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 21

palabra para Dios. Por lo tanto, quería volver a poner a Dios en su nombre. Cuando me dijo esto,
comencé a llamarlo Michael, pero no me pareció natural y me costó un esfuerzo consciente
recordarlo. Sospecho que otras personas lucharon o se negaron a cambiar la forma en que
siempre lo habían llamado, porque después de un par de años me dijo que no me preocupara por
llamarlo Michael. La nueva versión de su nombre no había tenido éxito, así que se rindió. Esta
historia tiene una aplicación obvia, de menor a mayor, en esta discusión sobre el cambio de la
tradición del nombre de Dios. Si fue tan difícil simplemente cambiar el nombre de un hombre a
la versión completa del mismo nombre después de décadas, ¡cuánto más difícil sería cambiar el
nombre de Dios por un nombre que suene completamente diferente, después de siglos! Crearía
un obstáculo masivo y una distracción para los apóstoles que estaban ocupados tratando de
pelear otras batallas.35
Estoy convencido de que los autores del Nuevo Testamento no percibieron kurios
simplemente como un título, sino más bien como una tradición centenaria a la que la gente
estaba acostumbrada para referirse a Dios de manera personal. Ciertamente estaban al tanto de la
historia de la progresión desde las cuatro letras YHWH a Adonai (Señor), pero como estaban
tratando de comunicarse claramente con los oyentes que no hablaban hebreo y estaban
familiarizados con llamar al Dios de Israel kurios, lo mantuvieron como una convención para
evitar confusiones en su mensaje.
Al mismo tiempo, estaban interesados en anunciar una nueva alianza en la que se exaltara un
nuevo nombre: Jesús. En Filipenses 2:9-11 Pablo escribe: “Por lo cual Dios también le exaltó
hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se
doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua
confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.”
Gordon Fee ofrece los siguientes comentarios útiles sobre el versículo 9 de este pasaje:

¿Qué quiere decir Pablo con “el nombre que es sobre todo nombre”? Aquí las opciones son
básicamente dos, “Jesús” o “Señor”. Por un lado, hay mucho para recomendar que “el nombre” se
refiera a su nombre terrenal “Jesús”. Después de todo, eso es lo que comunica la siguiente frase, “en
el nombre de Jesús”. Si es así, entonces Pablo no quiere decir que ahora se le ha dado ese nombre,
sino que, al exaltarlo mucho, Dios le ha otorgado al nombre de Jesús un significado que supera a
todos los demás nombres. Además, “Jesús” es de hecho un nombre, mientras que “Señor” podría
argumentarse que es un título.
Por otro lado, la mayoría cree que el otorgarle el nombre “Señor”, como el equivalente de Yahvé,
es cómo Jesús ha sido exaltado al lugar más alto. De hecho, si no fuera por la frase “en el nombre de
Jesús” en la siguiente cláusula, este sería el punto de vista universal. A su favor está la segunda parte

35
Chris Lovelace señala amablemente que “los judíos piadosos del primer siglo evitaron usar la palabra theos para
referirse a Dios. El evangelio de Mateo refleja esta tendencia al usar la frase “reino de los cielos” en lugar del “reino
de Dios” de Lucas (aunque el “reino de Dios” ocurre raramente en Mateo). Considérese también Marcos 14:61. El
sumo sacerdote le pregunta a Jesús si es hijo del “Bendito”. El autor bíblico es consciente de la costumbre de usar el
circunloquio para evitar llamar a YHWH por su nombre, o incluso llamarlo theos. Aun así, Marcos no tiene ningún
problema en ignorar estas convenciones cuando habla con su propia voz de autor en el Evangelio. Esto es revelador,
creo. Muestra que los autores del Nuevo Testamento no necesariamente se sintieron obligados a ser sensibles a sus
vecinos piadosos evitando el uso de theos. Incluso Mateo, quien frecuentemente evita referirse a Dios como theos,
ocasionalmente usa theos para indicar a Dios. Esto parece probar que los escritores del Nuevo Testamento estaban
rechazando (al menos un poco) las costumbres prevalecientes de usar el circunloquio para evitar violar el tercer
mandamiento. Hay que tener en cuenta que los circunloquios en Mateo no son para evitar decir YHWH, sino para
evitar decir theos en referencia a YHWH (basado en el uso paralelo en Lucas, etc.) “. Correspondencia personal, 14
de mayo de 2020.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 22

de la cláusula de resultado (v. 11), que toda lengua confesará que “el Señor es Jesucristo”. Pero lo que
más lo favorece es la clara “intertextualidad” que se está gestando aquí. La cláusula de resultado
doble que compone vv. 10 y 11 es un préstamo directo del lenguaje de Isa 45:23, donde Yahvé (el
Señor) dice que “ante mí (el Señor) se doblará toda rodilla y jurará toda lengua (LXX, confesar)” que
“sólo en YHWH están la justicia y la fuerza”. Este énfasis en Yahvé, “el Señor”, como aquel a quien
todos rendirán reverencia, parece certificar que lo que Pablo tiene en mente no es otro que el nombre,
Yahvé mismo, sino en su forma griega de “el Señor”, que ahora ha sido “entregado” a Jesús.36

Por lo tanto, estoy de acuerdo con Fee en que “el nombre que es sobre todo nombre” es
Yahvé. Esto probablemente también tiene otra capa de significado: el nombre Jesús, ‫יֵשׁוּ ַﬠ‬,
“Yeshua” es una forma tardía y abreviada del nombre Josué, ‫יְ הוֹשֻׁ ַﬠ‬, que significa “Yahvé es
salvación”. El nombre divino está históricamente incrustado en el nombre de Jesús, que habla de
su liberación. Aunque Mateo no menciona directamente el elemento teofórico en el significado
del nombre de Jesús, sí escribe, “porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (Mateo 1:21).
Fee también explica la frase “toda lengua confiesa que Jesucristo es el Señor” en el versículo
11:

En la sinagoga judía, el apelativo “Señor” había sido sustituido mucho antes por el “nombre” de
Dios (Yahvé). Los primeros creyentes ahora habían transferido ese “nombre” (Señor) al Jesús
resucitado. Así, dice Pablo, al resucitar a Jesús de entre los muertos, Dios lo exaltó al lugar más alto y
le otorgó el nombre de Dios, en el sentido hebreo del Nombre, refiriéndose a su investidura con el
poder y la autoridad de Dios. Por otro lado, el monoteísmo de Pablo se mantiene intacto por la frase
final, “para gloria de Dios Padre”. Así, muy de acuerdo con 1 Cor 8:6, donde hay un solo Dios (el
Padre, de quien y para quien son todas las cosas, incluyéndonos a nosotros mismos) y un solo Señor
(Jesucristo, por quien son todas las cosas y nosotros por él), entonces aquí, esta oración final
comienza con Dios exaltando a Cristo otorgándole “el nombre” y concluye con la misma nota
teológica, que todo esto es para la propia gloria de Dios Padre.37

Hay una declaración sorprendente de Jesús en la oración del sumo sacerdote que vale la pena
mencionar. “He manifestado tu nombre a los pueblos que del mundo me diste” (Juan 17:6). Lo
más probable es que este sea un uso típico de “nombre” para representar a la persona completa y
su carácter (p.ej. Juan 1:12), pero también puede haber una alusión al hecho de que Jesús ha
logrado lo que Dios comenzó en la zarza ardiente, así como en el monte Sinaí (Ex 34). En el
mismo pasaje Jesús también ora por sus discípulos: “Padre Santo, guárdalos en tu nombre” (Juan
17:11). Luego, luego ora: “Les di a conocer tu nombre, y continuaré dándolo a conocer, para que
el amor con el que me has amado esté en ellos y yo en ellos” (v 26).38 Aquí puede ser posible ver
una implicación de que el nombre de Jesús ahora está siendo promovido en lugar de YHWH.
También vale la pena señalar que Apocalipsis se refiere al nombre del Padre de Jesús,
pero sin deletrearlo: “Entonces miré, y he aquí, en el monte Sion estaba el Cordero, y con él
144.000 que tenían escrito su nombre y el nombre de su Padre en sus frentes” (14:1). Más tarde,
Juan se refiere al mismo tipo de marca, pero el contexto parece mezclar a Dios (el Padre) y el
Cordero (el Hijo): “Verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes” (22:4). Es muy probable

36
Gordon D. Fee, Paul’s Letter to the Philippians, The New International Commentary on the New Testament
(Grand Rapids: Eerdmans, 1995), 221–222.
37
Gordon D. Fee, Paul’s Letter to the Philippians, 225–226.
38
Ver también Riemer Roukema, “Jesus and the Divine Name in the Gospel of John” in Van Kooten, ed.,
Revelation of the Name (Leiden: Brill, 2006), 207-223.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 23

que esto sea una conexión con Éxodo 28, que muestra que el pueblo de Dios se ha convertido en
un verdadero “reino de sacerdotes”, en marcado contraste con aquellos con la marca de la bestia.
Tanto Jesús como los apóstoles tenían un fuerte deseo de comunicarse y eliminar los
obstáculos para la transmisión de su mensaje. Un ejemplo es cuando Jesús hace esto aparece en
Marcos 12:30 mientras está respondiendo a uno de los escribas. Él cita Deuteronomio 6:5 al
decir: “Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente y
con todas tus fuerzas”. Pero el versículo en Deuteronomio en realidad dice: “Tú amarás a Yahvé
tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas”. Jesús agrega “con toda
tu mente” al mandamiento, aunque no está en hebreo. Lo hace porque el corazón, en la
cosmovisión hebrea antigua, también era la sede del pensamiento. Para los escritores del Antiguo
Testamento no existía la dicotomía posterior de mente versus corazón. Esta dicotomía se había
convertido en parte de la cultura del primer siglo debido a la influencia griega, por lo que Jesús
les habla de una manera que pueden entender con mayor claridad. Esto muestra su deseo de
adaptar incluso la cita de las Escrituras en aras de la claridad. Por lo tanto, no sería sorprendente
que se adaptara al uso de adonai, “Señor”, con el fin de quitar los obstáculos de los oídos de sus
oyentes.
Finalmente, hay una razón aún más convincente por la que Dios, en su soberanía, ordenó
que adonai se convirtiera en la pronunciación estándar que hizo a kurios la traducción estándar
de su nombre en la LXX y el NT. Esta es la sencilla razón que menciona Martín Lutero en el
prefacio de su traducción al alemán: “que los lectores pueden así sacar la firme conclusión de
que Cristo es el Dios verdadero”.39 El uso de kurios en la LXX estaba allanando el camino para
una manera perfecta, conveniente e inteligible de conectar a Jesús con Yahvé.
Un ejemplo viene de Pedro: “santificad a Cristo como Señor en vuestros corazones” (1 P. 3:15
NAS). Michaels proporciona un comentario útil:

Pedro sigue con su midrash [enseñanza] de Isa 8:1340, sustituyendo τὸν Χριστόν por αὐτόν de la LXX
(κύριον αὐτὸν ἁγιάσατε, “al Señor mismo debes reverenciar”). Es posible leer τὸν Χριστόν como
aposición a κύριον (“el Señor Cristo”), o al revés (“Cristo el Señor”). O τὸν Χριστόν podría ser el
objeto directo de ἁγιάσατε, con κύριον como predicado acusativo (“Cristo como Señor”). La
comprensión de Pedro de κύριος principalmente como una designación de Jesucristo se vio
anteriormente en 2:3, así como en la sustitución de κυρίου por τοῦ θεοῦ ἡμῶν en 1:25 (citando Isa
40:8).41

La capacidad de usar la misma palabra fluidamente para Yahvé y Jesús a lo largo del NT hizo
que la superposición fuera natural y más evidente. Facilitó una alta cristología e infundió sin
esfuerzo la declaración “Jesús es el Señor” con un doble significado (Rom 10:9). Este doble
significado es posible porque kurios estaba cumpliendo una doble función como Señor y Yahvé.
Irónicamente, la falta de distinción hizo más fácil distinguir a Jesús como el único Dios
verdadero, Yahvé mismo. Considérese nuevamente cómo esta convención hizo posible la
enseñanza de Pablo en 1 Corintios 8:5-6:

39
Martin Luther, Luther’s Works, Vol. 35: Word and Sacrament I, ed. Jaroslav Jan Pelikan, Hilton C. Oswald,
and Helmut T. Lehmann, vol. 35 (Philadelphia: Fortress Press, 1999), 248–249.
40
“A Yahvé de los ejércitos, a él santificad.” ‫ֶאת־יְ הוה ְצ ָבאוֹת אֹתוֹ ַת ְק ִדּישׁוּ‬
41
J. R. Michaels, 1 Peter, vol. 49 in Word Biblical Commentary (Dallas: Word, 1998), 187.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 24

Pues aunque haya algunos que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos
dioses y muchos señores), 6 para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden
todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las
cosas, y nosotros por medio de él.

Así como Jesús se vio a sí mismo en todo el Antiguo Testamento (Lucas 24), y así como los
apóstoles identificaron constantemente a Jesús con Yahvé a través de la alusión y la cita directa
de pasajes del Antiguo Testamento, el uso de kurios permitió a los primeros cristianos ver y
escuchar esa continuidad a través de los Testamentos. Les permitió leer sobre “el Señor” en la
LXX y pensar en Jesucristo. Por lo tanto, parece que lo que los hombres quisieron oscurecer el
nombre Yahvé con el título adonai/kurios, Dios quiso para bien identificar a Cristo como el Dios
de Israel con una especie de hipervínculo a través de los pactos.
Los escritores del NT también hicieron esto con “nombre” como patrón de diseño. En
Hechos esto es particularmente evidente, donde se menciona “nombre” unas treinta veces en
relación con Jesús o Yahvé. Nótese la superposición entre Jesús y Yahvé en los siguientes
versículos:

 “Entonces salieron de la presencia del concilio, regocijándose de haber sido tenidos


por dignos de sufrir afrentas por causa del Nombre” (Hechos 5:41, ver Levítico
24:11).
 “Pero el Señor le dijo:” Ve, porque él es mi instrumento escogido para llevar mi
nombre ante los gentiles, los reyes y los hijos de Israel. Porque yo le mostraré cuánto
le será necesario padecer por mi nombre” (Hechos 9: 15-16). Llevar el nombre de
Dios es una conexión directa con Éxodo 20:7: “No llevarás el nombre de Yahvé tu
Dios en vano”.
 “Entonces entraba y salía entre ellos en Jerusalén, predicando abiertamente en el
nombre del Señor” (Hechos 9:28).
 “De él todos los profetas dan testimonio de que todo aquel que cree en él, recibe el
perdón de los pecados por su nombre” (Hechos 10:43).

Además, el fenómeno kurios permitió declaraciones valiosas como la de Pablo aquí: “Porque
‘todo el que invoque el nombre del Señor será salvo’” (Rom. 10:13, Joel 2:32). Moo comenta
sobre esta cita exacta de la LXX diciendo: “En el Antiguo Testamento, por supuesto, aquel a
quien la gente pedía salvación era Yahvé; Pablo refleja la alta visión de Cristo común entre la
iglesia primitiva al identificar a este con Jesucristo, el Señor”.42
Esto luego plantea la pregunta de si los editores y traductores modernos deben continuar con
la tradición de la LXX y el Nuevo Testamento por el bien de comunicar la identidad de Cristo
como Yahvé al traducir a YHWH como “SEÑOR” en el AT. Diríamos al respecto que es
innecesario por algunas razones. Primero, si se busca la palabra Adonai en el AT, hay más de
700 ocurrencias, la mayoría de las cuales se refieren a Yahvé. Aunque no se trata de tantas
ocurrencias como Yahvé, es sustancial, definitivamente memorable e inequívocamente se refiere
al mismo Yahvé. Considérese un versículo como Jeremías 32:17 que dice lo siguiente en la NVI:
“‘¡Ah, Señor mi Dios! ¡Eres tú quien has hecho los cielos y la tierra con tu gran poder y con tu
brazo extendido! Nada es demasiado complicado para ti.” Señor mi Dios es lo que varias

42
Douglas J. Moo, The Epistle to the Romans (Grand Rapids: Eerdmans, 1996), 660.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 25

traducciones eligen hacer con Adonai Yahvé (‫ ) ֲאד ַֹני יְ הוִ ה‬en hebreo (RV tiene Señor Jehová).
Esto se deriva de la tradición de los masoretas que usaron las vocales de ‫"הים‬
ִ ‫( ֱא‬Dios) para ‫יהוה‬
con el fin de para evitar decir “Señor Señor” que suena redundante, a pesar de que Dios no se
encuentra en ninguna parte. Los masoretas (y muchos traductores de en español y otros idiomas
siguiendo su ejemplo) hacen esto unas 280 veces en el AT.
Una mejor solución sería traducir “Señor Yahvé/Jehová”, ya que sería más exacto. Al mismo
tiempo, el título/nombre Señor se conservaría como un hipervínculo a Señor en el NT. Tal
interpretación no socava ni le quita mérito a la unión de Yahvé y Jesús, más bien mejora la
conexión. Ahora, un lector del Nuevo Testamento vinculará mentalmente la declaración “Jesús
es el Señor” con más de 700 versículos donde Dios es llamado “Señor”, y simultáneamente
podrá vincular a Jesús con el nombre Yahvé. La superposición de la que disfrutaban los
apóstoles se conservaría sin dejar de honrar el deseo de Dios en Éxodo 3:15.
En conclusión, los autores del Nuevo Testamento probablemente usaron kurios, “Señor”,
porque se había convertido en el equivalente de un nombre personal en ese momento, y el
propósito de sus escritos no era corregir las tradiciones antiguas que no amenazaban
directamente los principios centrales de la fe y el Evangelio. Más importante aún, abrazaron la
tradición como ordenada por Dios con el propósito de mostrar que Jesús era el Yahvé del Primer
Testamento encarnado, el Rey de reyes y Señor de señores. Los editores modernos no tienen
necesidad de continuar la tradición de la LXX y el NT para comunicar la identidad de Cristo
como Yahvé, ya que la palabra Adonai/Señor aparece tantas veces en la Biblia hebrea en
referencia a Yahvé.

La Iglesia Primitiva y la Antigüedad Tardía


¿Fue el NT único en su uso de kurios?, ¿qué hizo la gente con el nombre divino después del NT?
Como veremos, algunos siguieron evitando la pronunciación, mientras que otros buscaban
recuperar su pronunciación original o utilizarla de diversas formas. El primer ejemplo proviene
de la primera obra judeo-cristiana Didache, también conocida como La enseñanza del Señor a
través de los Doce Apóstoles a las Naciones (Διδαχὴ Κυρίου διὰ τῶν δώδεκα ἀποστόλων τοῖς
ἔθνεσιν). Es un breve tratado anónimo de los primeros cristianos escrito en griego koiné, fechado
por los eruditos modernos en el primer siglo, que demuestra algunos de los primeros cultos y
cristología, donde el nombre se menciona pero no se escribe, al igual que en el NT. Además, se
utiliza el sustituto “Señor”. El comienzo de una oración en la obra dice:

Te damos gracias, Santo Padre, por tu santo nombre, que has hecho tabernáculo en nuestros
corazones, y por el conocimiento, la fe y la inmortalidad que nos has dado a conocer a través de
tu siervo Jesús. A ti sea la gloria por los siglos. Tú, Señor Todopoderoso, creaste todas las cosas
por amor de tu nombre, y diste de comer y de beber a los hombres para su disfrute, para que te
dieran gracias; y a nosotros nos diste comida y bebida espiritual y vida eterna, por medio de tu
siervo…”.

San Jerónimo, debido a su distinción como traductor hebraísta y ortodoxo, dejó su propio
impacto con respecto al Nombre en su obra de De decem Dei Nominibus, “Sobre los diez
Nombres Divinos”. Los diez nombres sobre los que escribió fueron: El, Eloim, Eloe, Sabaoth,
Elion, Ieje aser Ieje, Adonai, Ia, Iao y Saddai. Esta idea de diez nombres de Dios también
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 26

aparece en un tratado griego anónimo sobre el tema que se encuentra referido por primera vez en
los comentarios de Orígenes sobre el Salmo 2 (PG XII.1104), donde el nombre divino se traduce
como Iae. Resulta que todas las formas del nombre divino que encontramos en los escritos de los
padres de la iglesia también se encuentran en los papiros mágicos griegos.43
A partir del testimonio de Ireneo en el siglo II d.C. en Contra las herejías, encontramos que
los gnósticos se referían a Dios como Iaoth, un compuesto de YHWH con “Sabaoth”. Clemente
también escribió sobre el nombre divino, diciendo: “El nombre místico de cuatro letras que se
colocó solo a aquellos a quienes el lugar santísimo era accesible se llama Iaou…” (Stromata V.
6:34). También escribió que Cristo era el Tetragrámaton usado en el turbante del sumo sacerdote
(Stromata V. 38: 6-7).
Una prueba importante proviene de Teodoreto de Cyrrhus (c. 393-460) quien escribió un
trabajo llamado Pregunta 15 sobre Éxodo 7. Allí comentó sobre YHWH: “Los samaritanos lo
llaman Iabe mientras que los judíos lo llaman Ia”.44 Se ha asumido comúnmente que la
pronunciación samaritana “reflejaba el sonido de la palabra no distorsionado por las inhibiciones
judías contra la vocalización y, por lo tanto, era una fuerte evidencia de que la vocalización
original era Yahvé, que fue (y es) defendida, como sabemos, también por argumentos
morfológicos.”45 Al mismo tiempo, Nicolas Fuller (1557-1626) rechazó iabe como un error
obvio en la transmisión del texto de Theodoret, mientras que otros han encontrado evidencia de
iabe e iaba en los papiros mágicos, que pueden haber sido de origen samaritano. Otra posibilidad
es que iabe sea simplemente una traducción del título samaritano yafeh “El Bello”, usado por
Dios. Al final, es difícil saber exactamente cuán libres eran los samaritanos en su pronunciación
del nombre divino.46
Para la época de Orígenes comenzamos a ver actitudes y creencias sobre el nombre divino (y
los nombres hebreos en general) que evolucionan más lejos de las raíces bíblicas y aventurarse
en terrenos extraños. Orígenes creía que los nombres apuntan a la naturaleza más profunda de los
objetos, el hebreo era el idioma de la creación y que los nombres hebreos pierden su eficacia
cuando se traducen. También prefirió la interpretación esencialista del lenguaje desarrollada por
los estoicos (Contra Celsus 1.24), que enfatiza la superioridad de los nombres hebreos sobre
todos los nombres de otros idiomas. Esta idea finalmente se convirtió en la creencia de que los
nombres hebreos tenían poder para hacer exorcismos, milagros y maravillas.47 Él escribió: “Estos
nombres [hebreos] en consecuencia, cuando se pronuncian con ese grupo de circunstancias que
lo acompañan que es apropiado a su naturaleza, poseen un gran poder; y otros nombres,
nuevamente, corrientes en la lengua egipcia, son eficaces contra ciertos demonios que solo
pueden hacer ciertas cosas”.48 En esencia, durante la época de Orígenes había dos filosofías en
competencia: 1) los nombres divinos ofrecen algún tipo de conexión con lo divino, 2) los
nombres arbitrarios y convencionales de Dios son adecuados.
Justino Mártir (m. 165 d.C.), un filósofo convertido al cristianismo y apologista del judaísmo,
tenía otras teorías sobre el nombre de Dios. Rechazó la capacidad del lenguaje humano para

43
Ver también Gideon Bohak, Ancient Jewish Magic (Cambridge, 2008), 147.
44
Natalio Fernández Marcos and Angel Sáenz-Badillos, Theodoreti Cyrensis. Quaestiones in Octateuchum.
Edito Critica (Textuos y Estudios “Cardenal Cisneros” de la Biblia Poligota Matritense) 17 (Madrid, 1979), 112.
45
Wilkinson, 127.
46
Ibid.
47
Ibid. Ver también J. Dillon, “The Magical Power of Names in Origen and Later Platonism,” in Origeniana
Tertia, eds. R.P.C. Hanson and H. Crouzel (Rome, 1985), 188-207.
48
Quoted in Wilkinson, 131.
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Case 27

definir a Dios y afirmó que Dios no tiene un nombre propio: “Acepta sólo a los que imitan la
excelencia que reside en él: la templanza, la justicia y la filantropía y tantas virtudes como
particulares de un Dios que es llamado sin nombre propio” (Apol. I.10). Argumentó que los
dioses griegos no pueden considerarse dioses porque tienen nombres propios, ya que la acción de
nombrar implica un amo que nombra y un esclavo que es nombrado (Apol. Sec. 6). Esta visión se
extendió por los gnósticos e incluso hasta la Reforma. 49
Clemente de Alejandría, nacido a mediados del siglo II d.C., argumentó de manera similar a
Justino Mártir. Como otro filósofo convertido, escribió:

Dios no tiene forma ni nombre. Aunque atribuimos nombres, no deben tomarse en su sentido estricto;
cuando lo llamamos Uno, Bueno, Mente, Existencia, Padre, Dios, Creador, Señor, no le estamos
confiriendo un nombre. Al no poder hacer más, utilizamos estas denominaciones de honor, para que
nuestro pensamiento pueda tener algo en que descansar y no divague al azar…. Queda que el
Desconocido sea aprehendido por la gracia divina y la Palabra procedente de él (Stromata 5.12).

Ireneo, el obispo de Lyon en el siglo II, contribuyó con otra pieza interesante a la discusión.
Creyó y enseñó que el Hijo era el que le hablaba a Moisés en Éxodo 3:14. “Porque es el Hijo que
descendió y ascendió para salvación de los hombres. Así, por el Hijo que está en el Padre y tiene
al Padre en sí mismo, el que es ha sido revelado” (Adversus Haereses, 3.6.2, cursiva agregada).
Eusebio de Cesarea ofrece otra perspectiva sobre el uso del nombre divino cuando escribe:

La combinación de las siete vocales contiene la enunciación de un nombre prohibido, que los hebreos
indican con cuatro letras y aplican al poder supremo de Dios, habiendo recibido la tradición, dicen, de
padre a hijo que esto es algo indecible y prohibido a la multitud. Y uno de los sabios griegos,
habiendo aprendido esto, no sé de dónde, lo insinuó oscuramente en verso, diciendo lo siguiente;

Siete vocales dicen mi nombre ... el Dios poderoso,


El Padre Eterno de la humanidad:
La lira inmortal soy yo, que guía el mundo
Y conduce la música de las esferas arqueadas.50

Cuando llegamos a San Agustín, encontramos su opinión contraria a otras como Ireneo con
respecto al ángel en Éxodo 3:14. Creía que era un ángel creado que se hacía pasar por Dios, a
través del cual Dios hablaba.
En este punto es importante destacar el impacto de la obra de pseudo-Dionisio en el
pensamiento cristiano posterior sobre el nombre divino. Hacia principios del siglo VI produjo un
corpus unificado de cuatro obras griegas: Los Nombres Divinos, La Teología Mística, La
Jerarquía Eclesiástica y La Jerarquía Celestial.

Recibidas como obra del primer converso ateniense del apóstol Pablo (Hechos 17:34), a quien la
tradición consideraba tanto el primer obispo de Atenas como un mártir, las obras alcanzaron un
estatus apenas inferior al canon de la Escritura misma ... Posteriormente, el pseudo-Dionisio fue
asimilado con frecuencia a la Cábala. La teología mística fue traducida al inglés en el siglo XIV por
el autor de La nube de desconocimiento como divinidad escondida. El rico lenguaje paradójico de las
obras, su vocabulario raro o innovador, y su sintaxis laberíntica casi exigen la amplia atención

49
Ibid., 137.
50
C.F.W. Jacobs, Anthologia Graeca, vol. 12 (Leipzig, 1794-1813), 34.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 28

exegética que han recibido a medida que las sucesivas edades han buscado a tientas sus intuiciones
místicas.51

Un ejemplo de su escritura y teología se puede ver en lo siguiente:

Por lo tanto, de ninguna manera es cierto decir que conocemos a Dios, no en su naturaleza ..., sino por
el orden de todas las cosas que él ha establecido, y que lleva ciertas imágenes y semejanzas de sus
paradigmas divinos, ascendemos paso a paso, en la medida en que podamos seguir el camino, hacia lo
trascendente, negando y trascendiendo todo y buscando la causa de todo. Por tanto, Dios es conocido
en todos y aparte de todos…. Y este es, además, el conocimiento más divino de Dios, que se le
conoce por el desconocimiento, según la unión que trasciende el entendimiento, cuando el
entendimiento se aparta de todo y se abandona, y se une a los rayos deslumbrantes y en ellos y de
ellos es iluminado por las inescrutables profundidades de la sabiduría (DN VII. 3:869 C-872 B).

En esencia, con respecto al nombre de Dios, Dionisio creía que “los teólogos lo alaban por
todos los nombres y como el Sin Nombre”.52

Como ya se mencionó, el nombre divino jugó un papel importante en los círculos gnósticos y
los textos mágicos. El uso mágico del Nombre abundó en los siglos previos a la Reforma,
especialmente en lugares alejados del control de las autoridades religiosas. En el gran papiro
mágico de París (PGM IV) hay instrucciones para hacer una filacteria que contenga los nombres
iaeô e iaô. Luego sigue un encantamiento: “Yo conjuro por el dios de los hebreos, Jesús, Iabe,
Iaê…” (PGM IV 3019-2024).53 Otro texto mágico copto también identifica a Cristo con el
nombre divino: “Iao, Iao, Cristo Pantocrátor” (LIII.83).54
Tradiciones judías posteriores como Toledoth Jesu acusaron al propio Jesús de usar el
nombre divino para la hechicería, ya que el uso del Nombre era extenso en la magia del judaísmo
del segundo templo. Mezclado con todo esto estaba el uso de los nombres de los ángeles
(probablemente el libro más importante de la magia judía, el Libro de los Misterios, tiene
alrededor de 700 nombres de ángeles) y nuevas combinaciones de las letras YHWH o sustitutos
de él.55 En Josefo también se encuentran ecos de la mentalidad mágica judía:

En un contexto de curación, Josefo menciona la importancia de no revelar los nombres de los ángeles.
(Guerra 2.142); en los Jubileos, los ángeles le dan a Noé un conocimiento curativo especial (10:10–
17; 48:10); en Enoc, los vigilantes de Azazel enseñan a la humanidad el secreto de las raíces y las
plantas, y Rafael es responsable de las enfermedades y heridas humanas (40.9). Por otro lado, uno
encuentra que un médico también podría curar, usando el nombre de Dios. Vea Yom. 3,7 (40d).56

La mayoría de los papiros mágicos griegos proceden del siglo IV d. C., pero posiblemente
sean más antiguos. Contienen evidencia de una especie de sincretismo pagano, en el que los
nombres divinos se enumeran generosamente. Incluso los nombres de los patriarcas bíblicos

51
Wilkinson, 149.
52
Citado en Wilkinson, 153.
53
Ver también P.W. van der Horst, “The Great Magical Papyrus of Paris (PGM IV) and the Bible,” in Jews and
Christians in Their Graeco-Roman Context (Tubingen, 2006), 269-279.
54
A.M. Kropp, Ausgewählte koptische Zaubertexte, vol. 1 (Brussels, 1930), 25.
55
See Joshua Trachtenberg, Jewish Magic and Superstition (University of Pennsylvania, 2004), 97-110.
56
Wilkinson, 170.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 29

hebreos aparecen con frecuencia, junto con los títulos de Dios. Orígenes, en su obra anti-gnóstica
Contra Celsum, explica parte de la situación en torno a estos textos paganos:

Hay que saber que quienes compusieron estas cosas ni entendieron los textos mágicos ni captaron
el significado de la divina Escritura, sino que lo mezclaron todo. De la magia tomaron a Ialdabaoth y
Astraphaios y Horaios, mientras que de la Escritura hebrea tomaron Iao (también llamado Ia por los
hebreos), Sabaoth, Adonaios y Eloaios. Ahora bien, los nombres que tomaron de las Escrituras son
epítetos del Único Dios, pero estos enemigos de Dios no entendieron esto, como ellos mismos
admiten, y pensaron que Iao era un dios, Sabaoth otro y un tercero además de este era Adonaios (a
quien la Escritura llama Adonai) y aún otro era Eloaios (a quien los profetas llaman en hebreo Eloai)
(6.32).

También tenemos evidencia de un español llamado Priscillian que fue acusado de hacer uso
de un amuleto que llevaba el Tetragrámaton con fines mágicos. Y esto nos lleva a algunas de las
tradiciones que rodean al Nombre en los textos rabínicos. Se consideró que estaba dotado de un
poder incomparable. 57

El uso del nombre para sellar el Abismo en la creación se menciona ... en Hekhalot Rabbati 23 y
en bMakkot 11a, donde un fragmento con el nombre escrito en él es arrojado al Abismo para contener
las aguas que amenazan al mundo. bBerajot 55a atribuye a Rav la idea de que Bezalel, el constructor
del tabernáculo, sabía cómo combinar las letras con las que se crearon el cielo y la tierra. Génesis 2:4
e Isaías 26:4 se interpretan como prueba de que una letra del nombre divino se usó para crear el
mundo, y otra se usó para el mundo venidero (Pesikta Rabbati 21)…
El conocimiento del nombre alguna vez estuvo muy extendido, pero debido a la corrupción de la
sociedad humana, fue restringido continuamente hasta después de la muerte de Simón el Justo
(bYoma 39b, jYoma 40d). La muerte de Simón el Justo (identificado por los cristianos como Simeón,
el anciano sacerdote del templo que bendijo al niño Jesús) ocurrirá con frecuencia en las historias
cristianas del uso del nombre. El nombre se redujo: después de la destrucción de Templo, constaba de
dos letras (bEr. 18b). El estado actual del mundo es tal que las oraciones no se escuchan porque no
contienen el nombre (Midrash Salmos 91.8), una situación que debe remediarse en el mundo
venidero.
Sin embargo, el uso del Tetragrámaton no se limitó a la creación. Salomón tenía un anillo con un
nombre divino para someter al demonio Ashmodei (bGit. 68b). Moisés lo usó para matar al egipcio
(Éxodo Rabá en 2.14; PdeRK 19). “¿Qué vió el mar? Vio el nombre divino grabado en el bastón de
Aarón y huyó”. El nombre también permitió a Salomón volar (bSanh 95a). Una mujer usó el nombre
divino para ascender al cielo y Dios la convirtió en una estrella. El Tetragrámaton se utilizó para
animar imágenes sin vida. Abraham creó almas vivientes por este método (Génesis Rabba 39, sec.
14). Scholem compara esto con la creación de un homúnculo por Simon Magus en las Homilías
Pseudo-Clementinas (II.26) y con historias posteriores de golem. El becerro de oro de Jeroboam
estaba animado por el nombre que se le puso en la boca (bSota 47a). Nabucodonosor dio vida a una
imagen colocando el pectoral del sumo sacerdote con el nombre en la boca de la imagen o escribiendo
el nombre en su frente. Daniel eliminó el nombre besándolo, y la imagen volvió a perder vida (Cantar
de los Cantares Rabá 7,9). Dos rabinos crearon un becerro con el nombre (bSanh 65b / 67b).58

Además de la tradición judía, el libro de oraciones del siglo X de Saadia Gaon muestra cómo
el nombre divino a veces se usaba en la devoción:

57
Wilkinson, 185.
58
Wilkinson, 186.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 30

En cuanto a Tu glorioso nombre ... Lo has ocultado a la mayoría de la gente; sólo se le ha transmitido
a cualquiera que sea modesto, humilde, temeroso de Dios, lento para la ira y que no busque sus
propios intereses. En cada generación has revelado algo de su secreto. 59

Los rabinos también idearon otros complejos sustitutos del nombre divino, tanto para evitar
pronunciarlo con exactitud como para acceder a su poder. Algunos de estos nombres tenían doce,
cuarenta y dos y setenta y dos letras, y sólo fueron revelados a aquellos considerados dignos y en
quienes se podía confiar para mantener su secreto.60
El Talmud contiene mucha más tradición sobre el nombre divino, incluida una historia sobre
una tablilla de oro inscrita con el nombre inefable que Moisés usó para levantar el ataúd de metal
de José desde el fondo del Nilo, donde los egipcios lo habían hundido (Melkita en Éxodo 13:18).
También enseña que Dios usó la versión de 72 letras de su nombre para defender a Israel. Pero se
vuelve aún más extravagante cuando miramos el libro del 3er Enoc, que habla de uno de los
ángeles de Dios con el nombre de Metatrón, que se considera que es “YHWH menor”:

… Y puse sobre él mi honor, mi majestad y el esplendor de mi gloria que está sobre el trono de
mi gloria. Lo llamé Yhwh menor, el príncipe de la presencia, el conocedor de secretos. Por cada
secreto que le revelé como padre y todos los misterios le dije con rectitud ... Setenta nombres tomé de
[mis] nombres y lo llamé por ellos para realzar su gloria allí. R. Ismael dijo: “Le dije a Metatrón: ¿Por
qué te llaman por el nombre de tu creador, con setenta nombres? [¿Por qué] eres más grande que
todos los príncipes, más alto que todos los ángeles?”

El punto de todo esto es que el nombre divino entró en una época de uso caótico en la
antigüedad tardía, que siguió en la Edad Media. Mucha gente no tenía idea de qué era o qué
significaba, pero era útil para propósitos supersticiosos. Paganos, judíos y cristianos usaban el
nombre divino en diversas formas en amuletos, maldiciones y exorcismos, y esto generalmente
significaba que se pronunciaba en voz alta de alguna manera. En la Edad Media, el conocimiento
del hebreo y el griego en la cristiandad era escaso, el analfabetismo era común, pero la Biblia
todavía era el libro más estudiado. La mayoría de los laicos no tendrían ningún conocimiento de
la Biblia excepto por lo que escucharon de la predicación del clero.61
El desarrollo del nombre “Jehová” fue un error que estaba listo para ocurrir. La convención
de los masoretas de señalar las cuatro letras YHWH con las vocales del hebreo ‘adonai o ‘elohim
no era conocida por todos, y se hizo cada vez menos conocida por los cristianos. El
antisemitismo desenfrenado (los judíos eran a menudo vistos en Europa como la encarnación
misma del mal) y los ataques a la literatura judía (como el Talmud, que fue declarado herético en
1240 y quemado por miles) que rabiaron en la Edad Media también jugaron una parte en
mantener el conocimiento del hebreo al mínimo.
Debido a la ignorancia extendida del hebreo, personas como Bernardo de Claraval (1090-
1153) se permitieron imaginar que cada letra del Nombre representaba “una etapa en el camino
hacia la salvación y una forma en que Dios está con nosotros”.62 Esta época también estuvo
marcada por muchos errores ortográficos del Tetragrámaton, como ylya. Incluso los papas
59
I. Davidson et al., Siddur R. Saadja Gaon (Jerusalem, 1978), 379, quoted in Wout Jac. van Bekkum, “What’s
in the Divine Name? Exodus 3 in Biblical and Rabbinic Tradition” in Van Kooten, ed., Revelation of the Name, 6.
60
bYoma 3.8 (40d); Eccl R 3.11; bKidd 71a; Gen R. 44.19; AdRN A13
61
Wilkinson, 215.
62
Ibid., 222.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 31

probaron suerte en la interpretación creativa del Nombre. El Papa Inocencio III (1199-1216, que
se convirtió en Papa a los 37 años) vio el Nombre como una revelación del misterio de la
Trinidad. Su ortografía del Nombre era IEVE, que luego escribió mal en su De Sacro Altaris
como ioth, he, vau, heth, que interpretó como “el principio de la pasión de la vida”.63

Vasiliadis en su artículo “Aspectos de la traducción del Tetragrammton sagrado en griego”


proporciona un análisis de todas las traducciones griegas del nombre divino a lo largo de los
siglos. Hace dos observaciones dignas de mención. La primera es que una de las razones por las
que el Nombre fue silenciado fue “el mayor sentido de degradación moral”.64 Cita a I. H. Weiss
al decir que “Los sacerdotes, al ver la decadencia de la fe y el temor de Dios, no se consideraban
a sí mismos ni a sus contemporáneos dignos de proclamar o de oír el nombre de Dios”.65
En segundo lugar, Vasiliadis escribe:

En la posterior contemplación trinitaria post-nicena sobre la definición y la interrelación de términos


teo-ontológicos como φύσις (naturaleza), οὐσία (esencia), ὑπόστασις (sustancia) y πρόσωπον
(persona), hubo un intento de reconciliar lo bíblico deus revelatus y el filosófico deus absconditus.
Cualquier nombre usado para describir la esencia de Dios no sería aceptable, un dilema filosófico que
no se encuentra en las Escrituras Hebreas. Basilio de Cesarea, quien escribió a mediados del siglo IV
d. C., infirió que las operaciones (o energías) de Dios descienden hasta nosotros, pero Su esencia
permanece fuera de nuestro alcance. A principios del siglo VI d. C., una teología más completa del
nombre de Dios se explica en el corpus pseudo-dionisíaco y especialmente en la obra Sobre los
nombres divinos. Dos siglos después, Juan de Damasco intentó un enfoque bastante más equilibrado
de esta teología. Eventualmente, el Dios cristiano podría describirse al mismo tiempo como Dios sin
nombre, Dios con muchos nombres y Dios con todos los nombres. 66

Finalmente, una de las contribuciones más importantes al estudio del nombre divino es el
increíble apéndice de Vasiliadis que presenta una lista exhaustiva y sistemática de cada
transcripción o transliteración griega del Tetragrámaton desde la antigüedad hasta el presente, la
fecha más temprana en la que se identificó cada una y referencias o fuentes correspondientes.
Tras examinar estas seis páginas de diferentes maneras en que se ha traducido, se muestra que

63
Bk I cap xxx PL CCXVII, cols. 785 and 789.
64
Open Theology, vol. 1 (2014), 56-88.
65
I. H. Weiss, as quoted by A. Marmorstein, Old Rabbinic Doctrine (New York: KTAV, 1968), 20.
66
Pavlos Vasileiadis, “Aspects of rendering the sacred Tetragrammton in Greek,” Open Theology, vol. 1
(2014): 58.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 32

simplemente no se puede concluir que alguna vez hubo una forma universalmente “correcta” de
deletrear o pronunciar YHWH en griego. La variedad es enorme.

Tradiciones de traducción desde la Reforma hasta el presente

Después de la LXX y el NT, las versiones latinas como la Vulgata siguieron la tradición y
utilizaron Dominus para traducir Yahvé o Adonai. (Esta práctica sigue siendo la regla para toda la
liturgia católica romana hasta el día de hoy. 67 Vea los apéndices para más información sobre la
perspectiva católica romana). Luego, durante la Reforma, Lutero decidió continuar con la
tradición de la LXX y el NT. Dio las siguientes razones en el prefacio de su traducción al alemán
del Antiguo Testamento:

Quien lea esta Biblia también debe saber que he tenido cuidado de escribir el nombre de Dios que los
judíos llaman “Tetragrámaton” en letras mayúsculas así, SEÑOR [HERR], y el otro nombre que ellos
llaman Adonai sólo la mitad en letras mayúsculas así, LOrd [HErr]. Porque entre todos los nombres
de Dios, estos dos solos se aplican en las Escrituras al Dios verdadero y real; mientras que los otros a
menudo se atribuyen a ángeles y santos. He hecho esto para que los lectores puedan sacar la firme
conclusión de que Cristo es el Dios verdadero. 68

Parece que Lutero entendió que los autores del Nuevo Testamento mantuvieron esta tradición
para que la gente pudiera “sacar la fuerte conclusión de que Cristo es el Dios verdadero”, al
asociar a Cristo el kurios con el kurios del Antiguo Testamento en lugar de tener dos nombres
propios diferentes, Yahvé y Yeshua. Lutero quería hacer lo mismo. Irónicamente, lo que los
judíos habían comenzado como una forma de reverenciar el nombre terminó siendo usado por los
autores del Nuevo Testamento y Lutero para crear la ofensa máxima para ellos (Jesús = Dios),
según Lutero.
Cuando Juan Calvino tradujo los Salmos al francés, decidió usar a Jehová. Escribió sobre
esta decisión de la siguiente manera:

Sería tedioso contar las diversas opiniones sobre el nombre “Jehová”. Ciertamente, es una
superstición repugnante de los judíos que no se atrevan a hablar, ni a escribirlo, sino a sustituirlo por
el nombre “Adonai”; ni apruebo su enseñanza, que dice que es inefable porque no está escrita según
una regla gramatical. Sin controversia, se deriva de la palabra ‫ היה‬o ‫ הוה‬y, por lo tanto, los
comentaristas eruditos dicen con razón que es el nombre esencial de Dios, mientras que otros son, por
así decirlo, epítetos. Entonces, puesto que nada es más peculiar de Dios que la eternidad, se le llama
Jehová, porque tiene existencia de sí mismo y sostiene todas las cosas mediante su inspiración
secreta. Tampoco estoy de acuerdo con los gramáticos, que no quieren que se pronuncie, porque su
inflexión es irregular; porque su etimología, de la que todos confiesan que Dios es el autor, es para mí
más que cien reglas.69

67
Véase el Liturgiam Authenticam, que incluía la siguiente directiva: “De acuerdo con la tradición inmemorial
... el nombre de Dios todopoderoso expresado por el tetragrámaton hebreo (YHWH) y traducido en latín por la
palabra Dominus, debe ser traducido a cualquier lengua vernácula por un palabra equivalente en significado".
68
Martin Luther, Luther’s Works, Vol. 35: Word and Sacrament I, ed. Jaroslav Jan Pelikan, Hilton C. Oswald,
and Helmut T. Lehmann, vol. 35 (Philadelphia: Fortress Press, 1999), 248–249.
69
John Calvin, Commentaries on the Four Last Books of Moses Arranged in the Form of a Harmony by John
Calvin, trans. Charles William Bingham (Edinburgh: Calvin Translation Society, 1843), 127.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 33

La versión Wycliffe de la Biblia en inglés usó “the Lord”, así como versiones en inglés
posteriores. La Biblia King James agregó el matiz de escribir el SEÑOR en mayúsculas cuando
representaba a YHWH, excepto en cuatro lugares (Éxodo 6: 3, Salmo 83:18, Isaías 12: 2 e Isaías
26: 4) donde los traductores sintieron que es necesario traducirlo como un nombre propio, y en
estos lugares aparece el nombre “Jehovah”.
Casiodoro de Reina, el traductor de la versión española más famosa de la Biblia, se interesó
especialmente en traducir fielmente el nombre divino y evitar la sustitución de un título. Nacido
en 1520, a los 37 años se hizo monje y luego entró en contacto con el luteranismo, lo que lo llevó
a unirse a la Reforma Protestante. Debido a la Inquisición española, él y una docena de otros
monjes huyeron del país y terminó en Ginebra por un tiempo. Tras rechazar el rígido ambiente
de la Ginebra de Calvino, Reina pasó su exilio en otros lugares como Londres, Amberes,
Frankfurt, Orleans y Bergerac, en los que continuó trabajando en la traducción de la Biblia al
español. En el prólogo de la publicación de su obra en 1602, escribió lo siguiente:

Resta que en especial demos razón de algunos vocablos antes inusitados, que en ella hemos
retenido, y asimismo de nuestras anotaciones y argumentos de capítulos. Cuanto a lo primero, hemos
retenido el nombre (Iehová), no sin gravísimas causas. Primeramente porque donde quiera que se
hallará en nuestra versión, está en el texto Hebreo, y nos pareció que no lo podíamos dejar, ni cambiar
por otro sin infidelidad y sacrilegio singular contra la ley de Dios, en la cual se manda "Que no se le
quite , ni se le añada", (Dt.4.4 y Pr.30.5). Porque si en las adiciones arriba mencionadas, no nos
movió este escrúpulo, hay razón diferente; porque nuestras adiciones no se pueden denominar
"adiciones al texto", sino declaraciones libres, que en tanto tendrán algún valor, en cuanto son
conformes al texto. Añadir a la Ley de Dios y a su Palabra, se entiende, cuando a los mandamientos, o
constituciones de Dios, los hombres temerarios añaden sus tradiciones, conque, o deshacen el
mandamiento de Dios, o le añaden mayor dureza por superstición. Ejemplo de lo primero puede ser lo
que el Señor dice en Mt.15.4…. Así que en lo que hasta ahora se ha usado acerca de este nombre, es
expresamente quitar y añadir, ambas cosas en el hecho de quitar el nombre (Iehová), y poner (Señor,
o Dios) en su lugar, que aunque en la sustancia de la cosa que significan no haya variación, la hay en
las circunstancias, en la manera y razón de significar, lo que no importa poco. Asimismo nos pareció,
que esta mutación no se puede hacer sin contravenir el consejo de Dios, y en cierta manera, quererlo
enmendar, como si El hubiese hecho mal todas las veces que su Espíritu en la Escritura declaró este
nombre, y hubiera de ser este otro. Y pues es cierto, que no sin particular y gravísimo consejo, Dios lo
manifestó al mundo, y quiso que sus siervos lo conociesen e invocasen por él; temeraria cosa es
dejarlo; y superstición temeraria dejarlo, con pretexto de reverencia. Y para que mejor se vea esto así,
no será fuera de propósito mostrar, de donde ha venido esta superstición acerca de este santo nombre.
Está contado en el Levítico, que estando el pueblo de Israel en el desierto, recién sacado de Egipto, un
mestizo, hijo de un Egipcio y de una Israelita, riñendo con otro del pueblo, pronunció, (o declaró,
como dicen otros), el santo nombre: "y dijo mal a Dios", quiere decir, "blasfemó de Dios por este
sacro nombre", de la manera que también ahora los impíos, Cristianos, reniegan de él, y lo botan y
pisotean en sus cuestiones, por mostrarse valientes. Por ser esta palabra blasfema tan nueva en el
pueblo de Dios, el blasfemo fue puesto en prisión, y desde a poco apedreado de todo el pueblo: Y a
esta ocasión, fue puesta Ley entonces por mandato de Dios, que el que en el pueblo de Israel dijese
mal a Dios, fuese castigado; y el que PRONUNCIASE (o declarase) el santo nombre, muriese por
ello. Quiere decir: blasfemase con el santo nombre, como blasfemó aquel por cuya ocasión se puso la
Ley. Los rabinos modernos, de la palabra "pronunciar", (no entendiendo el intento de la Ley), sacaron
esta superstición en el pueblo, ser ilícito pronunciar, o declarar, el santo nombre, no mirando que,
además de que el intento de la Ley era claro, por la ocasión del blasfemo, después de aquella Ley, lo
pronunciaron Moisés, Aarón, Josué, Caleb, Débora, Gedeón, Samuel, David, y todos los profetas y
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 34

píos Reyes; y finalmente fue dulcísimo en la boca de todo el pueblo, que lo cantó en Salmos y
alabanzas, como aparece por todo el discurso de la Santa historia. Así que de la superstición de los
modernos Rabinos, salió esta ley encaminada del diablo para con pretexto de reverencia, sepultar, y
poner en olvido del pueblo de Dios, su santo nombre, con el cual solo El quiso ser diferenciado de
todos los otros dioses. Ni esta es arte nueva suya. Decimos Rabinos modernos, no porque sean los de
nuestro tiempo, sino los que vinieron después de los profetas, ignorantes de la Ley divina, y
establecedores de nuevas tradiciones, por haber ignorado las virtudes de las que Dios les dio, y aun no
poco, ya ignorantes de la pura y antigua lengua Hebrea, por el frecuente comercio de las otras
naciones, aunque fueron antes del advenimiento glorioso del Señor, de los cuales parece bien, haber
sido los Setenta [la Septuaginta] intérpretes, que tradujeron primero en Griego la Escritura al Rey
Ptolomeo de Egipto, los cuales parecen haber dado fuerza a esta ley supersticiosa, con haber ellos
falseado primero que nadie el sacro texto, traduciendo siempre "Señor", en lugar de "Jehová", y
suprimiendo del todo el santo nombre con pretexto, a la verdad, supersticioso, y envidioso del bien de
las gentes, de que no eran dignas de que se les comunicasen los misterios divinos.
Véase ahora, si está bien que esta superstición continúe, o que cese, habiendo Dios dado mejor
entendimiento; y que el pueblo Cristiano lo conozca y adore en Cristo por el mismo nombre, conque
el se dio a conocer a los padres, y ellos le conocieron e invocaron, y por el cual, El prometió por sus
profetas, que se daría a conocer a las gentes, para que le invocasen por él. Este dirá (dice Isaías) yo
soy de Jehová; el otro se llamará del nombre de Jacob; el otro escribirá con su mano, A Jehová, etc.
Alguno nos podría alegar aquí, que ni Cristo ni los Apóstoles en sus escritos enmendaron este error,
etc. A esto respondemos, que ellos nunca se encargaron de hacer versiones, ni de corregir las hechas,
sino que atentos a mayor y más principal asunto, que era la anunciación del advenimiento del Mesías,
y de su Reino glorioso, se servían de la versión común, que entonces estaba en uso, que parece haber
sido la de los Setenta, porque en ella tenían de sobra para su principal intento. Otra obligación tiene,
quien hace profesión de traducir la divina Escritura, y darla en su integridad. Ni tampoco acá estamos
determinados de tomar cuestión con nadie sobre este asunto; ni constreñir a ninguno a que pronuncie
este nombre, si la superstición judaica le pareciere mejor que la pía libertad de los Profetas y píos del
Antiguo Testamento: puede pasarlo cuando leyere, o en lugar de él, pronunciar "Señor", como hacen
los Judíos, con que nos confiese, que en traducirlo, no hemos salido de nuestro deber. Y al fin no se
peca en escribirle e imprimirle en letras Hebreas, tampoco debe de ser pecado escribirle en otras
lenguas y letras. La significación del nombre es muy conveniente a lo que significa: porque es tomado
de la primera propiedad de Dios, que es el del ser, lo cual es propio suyo, y todo lo demás que existe
en el mundo, lo tiene mendigado de Él. Por esta causa, aunque todos los otros nombre de Dios, son
comunicados a algunas criaturas por alguna dispensación especial, este otro es incomunicable a otro
que a Él; porque ser fuente del ser, y el que por sí es, sin dependencia de otro, a Él solo conviene; de
donde se infiere evidentemente que si en la Escritura se halla comunicado al Mesías y al Espíritu
Santo (como se halla muchas veces) es argumento invencible de que son de una misma esencia divina
con el Padre, no obstante que el Mesías tenga también la misma naturaleza humana que nosotros. Y
pues que el mismo Dios declaró a Moisés este su nombre de la manera dicha, no hay para que nadie
comente más sobre ella.

En el siglo XIX, los eruditos alemanes comenzaron a señalar que el nombre “Jehová” era una
pronunciación incorrecta, pero muchas obras académicas en Inglaterra continuaron usando
“Jehová”. A pesar de estas tendencias, los cristianos ingleses no vieron la necesidad de producir
una versión alterada de la Biblia. Matthew Arnold refleja esta actitud de la siguiente manera:

La versión en inglés ha creado ciertos sentimientos en la mente del lector, y estos sentimientos no
deben ser alterados si la nueva versión ha de tener el poder de la antigua. Sin duda, esta
consideración debería gobernar al corrector al determinar si debe poner a Jehová donde la versión
antigua pone a Señor…. [Cuando uno] considera qué representa el nombre en cuestión para los
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 35

cristianos ingleses, qué son los Salmos para ellos, qué lugar ocupa la expresión El Señor en los
Salmos y en la Biblia inglesa en general, qué sentimientos y recuerdos se entrelazan con él, y cuál
es la fuerza del sentimiento; [cualquiera que] considere todo esto, [nunca] se permitiría, en una
versión de los Salmos para uso popular, abandonar la expresión establecida El Señor para
sustituirla por Jehová. En cualquier caso, Jehová es un mal sustituto de él, porque para el lector
inglés no tiene su propio significado e incluso tiene, lo que es fatal, un sonido mitológico. El
Eterno, que usa una de las versiones francesas, es mucho más preferible. El Eterno es en sí
mismo, sin duda, una mejor interpretación de Jehová que El Señor. En la disquisición y la crítica,
donde es importante mantenernos lo más cerca posible del sentido exacto de las palabras, El
Eterno puede presentarse con ventaja; y quien haya escuchado a los escolares judíos usarlo, como
lo hacen, al repetir los Mandamientos en inglés, no puede sino sentirse impresionado y satisfecho
con el efecto de la traducción. En su propio uso privado de la Biblia, cualquiera puede, si quiere,
cambiar a el Señor en El Eterno. Pero en la actualidad, para el lector general de la Biblia o de
extractos de ella, seguramente el Señor es una expresión consagrada. El significado que en sí
mismo conlleva es un significado que no está en desacuerdo con el nombre original, aunque sea
posible traducir este nombre original de manera más adecuada. Pero, además de los contenidos
que un término conlleva en sí mismo, debemos considerar los contenidos con los que los
hombres, en uso prolongado y reverencial, lo han llenado; y por eso decimos que cualquier
corrector literario de la Biblia inglesa hace bien en la actualidad en retener a el Señor, debido a
los sentimientos que esta expresión ha creado en la mente del lector inglés, y ha dejado allí
firmemente fijada.

No fue hasta la década de 1880 que Yahvé se convirtió en una pronunciación más utilizada
entre eruditos y estudiantes. Luego, en 1901, los académicos estadounidenses prepararon su
propia revisión de la versión revisada de la KJV para su publicación en Estados Unidos, que
llegó a conocerse como la American Standard Version (Versión Estándar Estadounidense, ASV).
En esta versión, decidieron usar a Jehovah de manera consistente. Aunque sabían que Jehovah
no era una pronunciación precisa, decidieron que se recibiría mejor porque aún era más conocido
que Yahvé. Explicaron en su Prefacio:

El primer cambio recomendado en el Apéndice [de la Versión Revisada en Inglés] - el que sustituye a
“Jehová” por “SEÑOR” y “DIOS” - es uno que no será bienvenido para muchos, debido a la
frecuencia y familiaridad de los términos desplazados. Pero los revisores, después de una cuidadosa
consideración, llegaron a la convicción unánime de que una superstición judía, que consideraba el
nombre divino como demasiado sagrado para ser pronunciado, ya no debería dominar en el inglés o
en cualquier otra versión del Antiguo Testamento, como afortunadamente no lo hace en las
numerosas versiones hechas por los misioneros modernos. Este nombre conmemorativo, explicado en
Ex. iii. 14, 15, y enfatizado como tal una y otra vez en el texto original del Antiguo Testamento,
designa a Dios como el Dios personal, como el Dios del pacto, el Dios de la revelación, el Libertador,
el Amigo de su pueblo; - no meramente el “Eterno” abstracto de muchas traducciones francesas, sino
el Auxiliar siempre vivo de aquellos que están en problemas. Este nombre personal, con su riqueza de
asociaciones sagradas, vuelve ahora al lugar en el texto sagrado al que tiene un derecho
incuestionable.

Benjamin B. Warfield, quien era influyente en el momento de la publicación, expresó su


propia firme aprobación de la ASV:

No podemos entender cómo puede haber alguna diferencia de opinión en cuanto a lo correcto de este
paso. Este es el nombre personal del Señor, por el que ha elegido que su pueblo lo conozca: la pérdida
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 36

sufrida al transmutarlo en su título descriptivo nos parece inmensa. Sin duda, hay disputas en cuanto a
la forma verdadera del nombre, y nadie supone que “Jehová” es esa forma verdadera. Pero tiene el
valor de la forma verdadera para el lector inglés; y sería mera pedantería sustituirlo por Yahvé o por
cualquiera de las otras formas que ahora usan con más o menos inexactitud los escritores escolásticos.
Consideramos que no es poca cosa para el lector en inglés del Antiguo Testamento que por primera
vez en su versión popular se encuentre declaradamente con “Jehová” y aprenda todo lo que “Jehová”
ha hecho y ha hecho por Su pueblo.70

Independientemente de la opinión de Warfield, el público tuvo más dificultades para aceptar el


cambio masivo. Como señaló el Princeton Seminary Bulletin, “Por muy correcta que sea esta
práctica en la teoría académica, porque la palabra en hebreo es un nombre propio, no un título,
fue desastrosa desde el punto de vista del uso litúrgico, homilético y devocional de la Biblia, y
fue casi universalmente desagradable”.71 Por lo tanto, cuando llegó el momento de revisar la
ASV, el comité decidió volver a usar “el SEÑOR” en lugar de Jehová. El RSV se publicó en
1952. El prefacio explica la decisión:

Una desviación importante de la práctica de la ASV es la representación del nombre divino, el


“Tetragrámaton”. La Versión Estándar Americana usó el término “Jehová”; la versión King James
había empleado esto en cuatro lugares, pero en todas partes, excepto en tres casos donde se empleó
como parte de un nombre propio, se usó la palabra inglesa Lord (o en ciertos casos Dios) impresa en
mayúsculas. La presente revisión vuelve al procedimiento de la versión King James, que sigue el
precedente de los antiguos traductores del griego y el latín y la práctica establecida desde hace mucho
tiempo en la lectura de las escrituras hebreas en la sinagoga. Si bien es casi seguro, si no del todo, que
el nombre se pronunció originalmente como “Yahvé”, esta pronunciación no se indicó cuando los
masoretas agregaron signos de vocales al texto hebreo consonántico. A las cuatro consonantes
YHWH del Nombre, que habían llegado a considerarse demasiado sagradas para ser pronunciadas,
adjuntaron signos vocales que indicaban que en su lugar debería leerse la palabra hebrea Adonai que
significa “Señor” (o Elohim que significa “Dios”) . Los antiguos traductores griegos sustituyeron el
nombre por la palabra Kyrios (Señor). La Vulgata también usó la palabra latina Dominus. La forma
“Jehová” es de origen medieval tardío; es una combinación de las consonantes del nombre divino y
las vocales adjuntas a él por los Masoretas pero pertenecientes a una palabra completamente
diferente. El sonido de Y está representado por J y el sonido de W por V, como en latín. Por dos
razones, el Comité ha vuelto al uso más familiar de la Versión King James: (1) la palabra “Jehová” no
representa con precisión ninguna forma del Nombre jamás usada en hebreo; y (2) el uso de cualquier
nombre propio para el único Dios, como si hubiera otros dioses de los que tenía que distinguirse, fue
descontinuado en el judaísmo antes de la era cristiana y es totalmente inapropiado para la fe universal
de la iglesia cristiana.72

Mientras que los traductores de al ASV tenían sus propias razones para usar Jehová, el unitario
inglés Joseph Priestly tenía una razón diferente impulsada teológicamente. Intencionalmente
quiso oscurecer cualquier conexión verbal entre Dios y Jesús y mantener una clara distinción
entre los dos. Propuso la siguiente regla para producir una nueva versión: “En el Antiguo

70
Benjamin Warfield, Review of the American Standard Version in ”The Presbyterian and Reformed Review”
vol. 13 (1902), 646.
71
Robert C. Dentan, “The Story of the New Revised Standard Version,” Princeton Seminary Bulletin vol 11,
no. 3 (Nov 1990): 212.
72
Michael Marlowe, “The Translation of the Tetragrammaton,” Bible Researcher, last modified September,
2011, http://www.bible-researcher.com/tetragrammaton.html.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 37

Testamento, que la palabra Jehová sea traducida por Jehová, y también la palabra κυριος en el
Nuevo, en pasajes en los que hay una alusión al Antiguo, o donde puede ser apropiado para
distinguir a Dios de Cristo”.73 Aunque su versión nunca se publicó, los arrianos publicaron una
versión usando su regla en 1952. Más tarde, los testigos de Jehová publicaron su Traducción del
Nuevo Mundo, que “usa el nombre Jehová para traducir κύριος en muchos lugares, a fin de
evitar que alguien identifique a Cristo con Dios.”74
En 1966, los eruditos católicos romanos publicaron la Biblia de la Nueva Jerusalén en
Inglaterra con el propósito expreso de reproducir lo que se hizo con la Biblia de Jerusalén
francesa. La NJB fue la primera versión católica romana de la Biblia en inglés basada en los
idiomas originales en lugar de la Vulgata latina. 75 El comité decidió usar a Yahvé
consistentemente a lo largo de la traducción, a pesar de que la tradición católica prohibiría su uso
para la lectura pública de las Escrituras y la liturgia por eso solamente. En el prólogo, el editor no
entra en detalles sobre su filosofía detrás de la decisión, pero ofrece algunos comentarios:

Los Salmos presentan un problema especial para los traductores ya que, a diferencia de otras
partes de la Biblia, el salterio no es solo un libro para leer, sino una colección de versos que se cantan.
Además, muchos de ellos son tan familiares en su forma del siglo XVI que cualquier cambio puede
parecer una impertinencia. No obstante, también aquí el primer deber de un traductor es transmitir lo
más claramente posible lo que escribió el autor original. No debería intentar inyectar una cualidad
retórica y una orotundidad de cadencia que pertenecen más verdaderamente a la primera época
isabelina en Inglaterra que a los originales hebreos. Debe evitar los baños puros de la monotonía de la
prosy, por supuesto, pero será consciente de que ya no existe un “lenguaje poético” aceptado que
pueda usarse para dar dignidad artificial a declaraciones sencillas. Sin duda, sería peligroso dar
prioridad a la forma de la traducción sobre el significado.
Es especialmente en los Salmos donde el uso del nombre divino Yahvé (acentuado en la segunda
sílaba) puede parecer inaceptable, aunque de hecho la forma aún más extraña Yah se usa
constantemente en la aclamación Hallelu-Yah (¡Alabado sea Yah!). No es sin duda que se ha utilizado
esta forma precisa, y sin duda, aquellos que quieran utilizar esta traducción de los Salmos pueden
sustituir el tradicional “el Señor”. Por otro lado, esto supondría perder gran parte del sabor y
significado de los originales. Por ejemplo, decir “El Señor es Dios” es sin duda una tautología, como
decir “Yahvé es Dios” no lo es.76

Su sucesora, The New Jerusalem Bible (1985), mantuvo el uso de Yahvé, y sigue siendo una
versión popular utilizada por los católicos romanos, aunque todavía no está permitida para la
misa, etc. Pero en 2019 la marea cambió, y The Revised New Jerusalem Bible cambió a Yahvé
por ‘el SEÑOR’. El editor Henry Wansbrough explica por qué en el prólogo:

Poco después de su elección como Papa, Benedicto XVI fue abordado por el Gran Rabino de Roma,
quien dijo que el uso de una posible vocalización del nombre divino era ofensivo para los judíos. El

73
Joseph Priestly, “Rules of Translating for A Plan to Procure a Continually Improving Translation of the
Scriptures” in The Theological and Miscellaneous Works of Joseph Priestley, ed. J.T. Rutt, vol. 17 (London: G.
Smallfield, 1820), 532.
74
Marlowe, “The Translation of the Tetragrammaton.”
75
See Divino Afflante Espiritu (1943) (c.f. NJB p34), a letter in which permission is granted to abandon the
tradition of only translating from the Vulgate, by Pope Pius XII.
76
Alexander Jones, ed., The Jerusalem Bible (New York: Doubleday, 1966).
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 38

Papa Benedicto XVI presentó el asunto a la Pontificia Comisión Bíblica y recomendamos el uso de
“SEÑOR”, con mayúsculas, para YHWH, sugerencia que el Papa aceptó. 77

Sorprendentemente, el prólogo no menciona que la NJB no era adecuada para uso litúrgico.
Desde una perspectiva externa, parece que la motivación para vender más biblias sería poderosa;
el cambio de Yahvé al SEÑOR ahora permite que la RNJB compita con la NRSV para su uso
durante la misa. Puede ser que esto fuera una motivación para el cambio, pero no lo
suficientemente “espiritual” como para mencionarlo en el prólogo. La razón por la que se
menciona parece mucho más políticamente correcta que la ambición de ganar más dinero a
través de una mayor popularidad.
Si yo hubiera sido el Papa, me hubiera gustado preguntarle al Gran Rabino de Roma, “¿Por
qué le importa lo que hay en nuestra traducción de la Biblia? ¿También quieres convertirte en
discípulo de Cristo?” Para que el Papa capitulara ante tal solicitud sobre la base de una posible
ofensa también requeriría que eliminara el Nuevo Testamento, ya que la mayoría ofende a los
judíos, especialmente a las enseñanzas de Jesús y la identificación con Dios. Pablo era muy
consciente de lo que estaba haciendo cuando dijo: “predicamos a Cristo crucificado, piedra de
tropiezo para los judíos” (1 Cor 1:23).

Finalmente, veamos un caso particularmente interesante de traducción del NT al hebreo


moderno. La Sociedad Bíblica de Israel describe el dilema que enfrentaron en esta obra con
respecto al nombre divino:

En la traducción hebrea del Nuevo Testamento era necesario decidir en cada aparición de kurios si se
traducía adonai o ‫ יהוה‬o alguna otra cosa. En el caso de las citas de las Escrituras hebreas, la decisión es
bastante simple. En un pasaje como Mateo 22:44, el Nuevo Testamento hebreo moderno vuelve al
original del Salmo 110:1 y dice, “ne’um yhvh (por tradición se lee como adonai) le’adoni”, donde las
traducciones al inglés han traducido, “El Señor dijo a mi Señor”.
Observe en el ejemplo anterior que Mateo está citando palabras que Jesús habló a una audiencia.
¿Jesús o alguien más en el Nuevo Testamento habría pronunciado realmente el nombre divino? La
respuesta debe ser no. Sin embargo, los traductores se sintieron justificados al dejar la redacción original
del Salmo, a pesar de que Jesús habría dicho las palabras “ne’um adonai ladoni”, sustituyendo adonai por
el Tetragrámaton. En este caso, estaban copiando del Salmo original en lugar de citar las palabras reales
que salieron de la boca de Jesús.
Otros casos en los que se habla de Dios en forma directa son las palabras de Isabel, María y Zacarías
en Lucas 1:28, 46, 68. En todos estos casos, la primera edición del Nuevo Testamento en hebreo moderno
usó ‫ יהוה‬para traducir kurios, aunque los tres hablantes habrían dicho adonai, al igual que el lector
moderno.
Los traductores de la Septuaginta, que tendían a ser bastante literales en sus traducciones, se habían
enfrentado al problema inverso: ¿cómo podían distinguir entre adonai y ‫ יהוה‬en su traducción griega de la
Biblia hebrea? La solución en la que generalmente parecen haberse decidido fue convertir adonai en ho
kurios (el Señor), y ‫ יהוה‬simplemente en kurios sin el artículo definido. Esto se hizo sin distinción de si el
pasaje era un discurso directo o narrativo. La Septuaginta se tradujo durante un período de varias
generaciones, y esta regla no fue seguida de manera consistente por sus diversos traductores.
Es interesante notar que el griego del Nuevo Testamento también tiene ambas formas, kurios y ho
kurios, a veces incluso una al lado de la otra (p.ej., Lc. 1:9,11; 1:25, 28, 32; 1:45 , 46). Para hacer las

77
Dom Henry Wansbrough, The Revised New Jerusalem Bible (New York: Penguin Random House, 2019).
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 39

cosas más complicadas, la forma de kurios sin el artículo definido se usa ocasionalmente de Jesús, como
en Lucas 2:11 (“… nace [un] salvador, que es el Mesías, [el] Señor”).
La primera edición del Nuevo Testamento hebreo de las Sociedades Bíblicas Unidas, con algunas
excepciones, había utilizado la práctica de la Septuaginta como guía al traducir ho kurios como adonai y
kurios sin el artículo definido como YHVH. Sin embargo, algunos miembros del comité editorial
cuestionaron esto. En primer lugar, la distinción no sería clara para los lectores modernos a quienes podría
parecer extraño encontrar que el Tetragrámaton se usa en el habla directa. En segundo lugar, los lectores
israelíes modernos dirán adonai cuando encuentren ‫ יהוה‬en el texto.
Para ayudar a tomar la decisión, preguntamos a varios israelíes con un buen dominio académico del
hebreo si la traducción debería mantener yhvh o sustituirla por una abreviatura como ‫ יָהּ‬o ‫י‬, las cuales son
comunes en la literatura hebrea y se leen como adonai o ha-shem, “el nombre”. Las opiniones estaban
divididas, aunque la mayoría estaba a favor de mantener el por qué, excepto en el discurso directo.
Algunos de ellos argumentaron que usar ‫ יָהּ‬o ‫ י‬daría la impresión de que el Nuevo Testamento es
simplemente otro libro secular con menos santidad que la Biblia hebrea.
Aquellos que argumentaron en contra de usar ‫ יהוה‬dijeron que simplemente nunca se ha hecho en
otros textos que no sean la Biblia hebrea, desde la antigüedad hasta hoy. Además, dijeron, es probable que
más israelíes lean el Nuevo Testamento si no contiene el nombre divino. La primera de estas objeciones
es contraria a la evidencia: el nombre divino se encuentra en material no bíblico en los Rollos del Mar
Muerto y especialmente en el Rollo del Templo. La segunda objeción no es del todo segura. Aquellos
israelíes que estén interesados en leer el Nuevo Testamento probablemente no se desanimen por la
aparición del Tetragrámaton. Aquellos que se niegan a leer el Nuevo Testamento lo hacen debido a las
objeciones a Jesús y Pablo y la historia del trato “cristiano” de los judíos; cambiar ‫ יהוה‬a ‫ יָהּ‬o ‫ י‬no hará
ninguna diferencia para ellos.
Se decidió abandonar la solución de la Septuaginta y tratar cada caso por sus propios méritos. Cada
una de las más de 300 apariciones de kurios en el Nuevo Testamento tuvo que verificarse en su contexto.
Cuando se trataba de un discurso directo, podía ser traducido por ha’adon, el Señor, adonai, o incluso
elohim, Dios, como lo habían hecho a veces los propios traductores de la Septuaginta (en la dirección
contraria, por supuesto). La única excepción a esto es cuando el hablante está citando un versículo de la
Biblia hebrea que incluye el Tetragrámaton. En estos casos, como en el ejemplo de Mateo 22:44 citado
anteriormente, se ha mantenido el ‫ יהוה‬original. En las secciones narrativas, se ha dejado en la traducción
el ‫ יהוה‬en casi todos los casos. Algunos de los casos de los Evangelios son de hecho frases comunes en las
que el nombre divino de Dios es normal. Entre ellos se encuentran malak ‫יהוה‬, el ángel del Señor, yom
‫יהוה‬, el día del Señor, yad ‫יהוה‬, la mano del Señor, y kevod ‫יהוה‬, la gloria del Señor. Aquí el Nuevo
Testamento hebreo ha conservado la frase familiar.
En algunos lugares se necesita una decisión rayana en lo teológico para determinar cómo traducir
kurios. ¿Qué se debe hacer, por ejemplo, en una situación como Lucas 19:31, 34: “Dirás: ‘El Señor lo
necesita’”? ¿Debía entender el dueño que el Señor necesitaba el pollino o que ‫ יהוה‬lo necesitaba? En la
traducción hebrea moderna sería posible traducir kurios como ha’adon, el Señor o como adonai, el Señor.
Las traducciones al inglés generalmente no tienen que tomar esa decisión porque usan el Señor distintivo
solo en las Escrituras hebreas. Los traductores del hebreo moderno decidieron usar ha’adon, dejando
abierta la interpretación de que Jesús, el maestro de los discípulos, necesitaba el pollino. La traducción a
veces implica inevitablemente interpretación, y en este caso la interpretación podría haber ido en
cualquier dirección.
O, para tomar un ejemplo similar, ¿cómo vamos a entender las palabras de Jesús en Marcos 5:19: “Ve
a casa con tu familia y diles lo que ho kurios ha hecho por ti”? La primera edición hebrea del Nuevo
Testamento usó ‫יהוה‬, pero no tenía por qué ser tan inequívoco ya que Jesús no habría pronunciado el
nombre divino. Está claro que Jesús dijo adonai o ha’adon. Hacer kurios aquí como adonai perdería la
ambigüedad. Es mejor quedarse con ha’adon, que podría haber sido entendido por el endemoniado recién
curado (así como por los lectores de hoy) para referirse al Señor o a Jesús. A juzgar por el versículo 20, el
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 40

ex-endemoniado pudo haber entendido esto último, porque salió a proclamar en la Decápolis “cuánto
había hecho Jesús por él”.
Como regla general, se decidió que el Nuevo Testamento hebreo moderno se quedaría con adon,
Señor) o adonai, Señor para kurios en lugar de usar el Tetragrámaton ‫יהוה‬. Las excepciones a esto son las
citas de la Biblia hebrea en las que aparece ‫ יהוה‬en el original. También se pueden encontrar otras
excepciones menores en lugares donde el contexto parecía exigir el uso de ‫( יהוה‬por ejemplo, Apocalipsis
19:6).

El alcance limitado de este libro no permite la inclusión de las decisiones relativas a la


traducción del nombre divino en muchas traducciones realizadas a lo largo de los siglos en otros
idiomas. Como puede verse en la encuesta de su tratamiento en versiones en inglés, no ha habido
claridad ni consenso, y las tradiciones han demostrado ser inconstantes.78

Biblias del Movimiento del Nombre Sagrado


En este punto debe reconocerse que existe un fenómeno de rápido crecimiento de biblias que
expresan el nombre de Dios de maneras que se esfuerzan por preservar su historicidad, muchas
con el mismo tipo de tendencias arcaizantes de los esenios. Peter Unseth es uno de los pocos
académicos que ha pasado tiempo analizando estas versiones y la teología que las impulsa. El
escribe,

Desde 1960, se han producido más de una docena de traducciones de la Biblia en inglés con el
objetivo explícito de restaurar las formas hebreas originales de los nombres divinos, utilizando
consistentemente formas como “Yahvé” y “Yeshua” tanto en el Antiguo como en el Nuevo
Testamento.79

Esto es algo que nació del Movimiento del Nombre Sagrado (MNS), que comenzó dentro de la
Iglesia de Dios (Adventistas del Séptimo Día), y fue difundido por Clarence Orvil Dodd en la
década de 1930 a través de su revista llamada The Faith (la fe). Este movimiento pretende buscar
adaptar el cristianismo a sus “raíces hebreas” en la práctica, la fe y la adoración. La Asamblea de
Yahvé fue la primera organización religiosa del MNS, formada en Holt, Michigan en la década
de 1930. Los adherentes al MNS también generalmente guardan muchas de las leyes y
ceremonias del Antiguo Testamento, como el sábado del séptimo día, los festivales de la Torá y

78
Para el relato de las decisiones modernas tomadas en Papúa Nueva Guinea con respecto a la interpretación
del nombre divino en múltiples traducciones del Antiguo Testamento, véase Phil King, Perspectives on Translating
YHWH in Papua New Guinea, available at
https://www.academia.edu/7781444/Perspectives_on_Translating_YHWH_in_Papua_New_Guinea. See also: David
Moomo, “Translating YHWH into African languages,” Scriptura 88 (2005): 151-60. Nico Daams, “Translating
YHWH,” Journal of Translation 1.1 (2005): 47-55. John David Ekem, “The Rendering of the Divine Name YHWH
in Some Ghanaian Bible Translation Projects,” The Bible Translator 56.2 (2005): 71-76 (74). Benjamin Rai, “What
Is His Name? Translation of Divine Names in Some Major North Indian Languages,” The Bible Translator 43.4
(1992): 443-46. Helmut Rosin, The Lord Is God: The Translation of the Divine Names and the Missionary Calling
of the Church (Amsterdam: Netherlands Bible Society, 1956), 97ff.
79
Peter Unseth, “Sacred Name Bible Translations in English: A Fast-Growing Phenomenon,” Bible Translator
vol. 62, no. 3: 185-194.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 41

las leyes alimentarias de kashrut. También rechazan la Trinidad como una doctrina no bíblica y
consideran paganas las fiestas de Navidad y Pascua.80
La primera Biblia del Nombre Sagrado fue publicada por Angelo Traina en 1963,
llamada The Holy Name Bible (la Biblia del nombre santo). Unseth proporciona una lista de
algunas otras versiones de la Biblia de Nombres Sagrados que siguieron a la versión de Traina:

— Restoration of Original Sacred Name Bible (ROSNB), Missionary Dispensary Bible


Research, 1st ed. 1976, 5th ed. 1977.
— The Sacred Scriptures, Bethel Edition, Assemblies of Yahvé, Bethel, PA, 1981.
— Ebionite (portions), 1985, 1986. http://ebionite.org.
— The Scriptures, Institute for Scripture Research, South Africa, 2d ed. 1998.
— Restored Name King James Version, 1998. http://www.eliyah.com/Scripture/.
— Zikarown Say’fer (a.k.a. Sacred Scriptures, Family of Yah Edition) , James Meyer,
2000. http://www.wordofyah.org/scriptures/.
— The Word of Yahvé, Assembly of Yahvé, 2d ed. 2003.
— Restoration Scriptures True Name Edition, Moshe Yoseph Koniuchowsky, 2003;
3d ed., 2006.
— Hebraic-Roots Version, James Trimm, Institute for Scripture Research, 2004.
— Sacred Name King James Bible, by John Hurt, 2005.
— THE HEBREW BIBLE: The Old Testament, KJV, Holy Name & Divine Titles
Edition, 2006. http://www.israelect.com.
— Natural Israelite Bible, English Version (NIBEV), 2006. http://www.yahsheua.com/
natural_israelite_bible.htm.
— The Besorah,31 Pamela Stanford, Urchinsea Designs, 2008.
— Human Instruction Manual (HIM), Nazarite.net.
— Halleluyah Scriptures, Halleluyah Scriptures.com.
— exeGeses companion BIBLE, Herbert Jahn.
— Transparent English Bible: Underway, only small portion available.
— Paleo Name Version (portions only), Todd Effren. http://www.torahzone.net/.
— Aramaic English New Testament, Andrew Roth, Netzari Press.

El prefacio de La Palabra de Yahvé explica:

El objetivo principal al producir esta nueva edición de las Escrituras fue el deseo de
representar con precisión los nombres más sagrados de nuestro Padre y Su Hijo. Ha sido la
tradición de la mayoría de los traductores sustituir términos más comunes y familiares, como
señor y dios, en lugar de los mismos nombres inspirados por el mismo Yahvé. Creemos que se
trata de una grave injusticia. Esta sustitución no solo roba la riqueza y plenitud de los idiomas
originales, sino que probablemente rompe directamente el tercer mandamiento que leemos en
Éxodo 20:7.
El nombre personal del Padre Celestial, Yahvé, fue inspirado en los textos hebreos y
arameos del Antiguo Testamento casi 7000 veces. Esto incluye 134 casos en los que los escribas
masoréticos cambiaron a Yahvé por el hebreo más común adonai. En todos los casos en los que
Señor, o Dios fue sustituido por el Nombre Sagrado en el texto en inglés, hemos insertado
correctamente a Yahvé…. Debido a que no existe una traducción precisa de elohim, hemos

80
“Sacred Name Movement,” accessed October 5, 2020,
https://en.wikipedia.org/wiki/Sacred_Name_Movement.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 42

transcrito ese título al inglés. En cuanto a adonai, soberano o maestro sirve como una traducción
adecuada en la mayoría de los casos.81

Cabe señalar que su acusación de quebrantar el tercer mandamiento se aplica a los escritores
del Nuevo Testamento, y en ninguna parte del prefacio abordan ese tema. Sin embargo, sí
afirman que “En los últimos años, muchos eruditos han propuesto que existen originales
semíticos que subyacen al texto griego de gran parte del Nuevo Testamento”.82 No fundamentan
esa afirmación ni admiten que se trata de una pura especulación y, por tanto, no mejora su grave
acusación.
Tampoco fundamentan su uso de “Yahvé” como la pronunciación correcta del nombre
divino, ni explican por qué no hay una traducción precisa de elohim, una afirmación que es una
tontería si no se da una buena razón. Finalmente, al leer todo el prefacio, parece darse el caso de
que, como no creen en la Trinidad, hablan de Jesús como distinto a Yahvé. Por lo tanto, en su
mente, Yahvé es el padre de Jesús, y Jesús no es Dios, aunque es el salvador del mundo.

La siguiente es una muestra de cómo algunas de estas versiones traducen a YHWH en


Deuteronomio 6:4:

The Besorah
The Scriptures ‫יהוה‬
ROSNB YAHVAH
Word of Yahvé Yahvé
Sacred Name KJV YHVH
NIBEV Yahvé
exeGeses companion BIBLE Yah Veh

Ninguna de estas biblias es publicada por editores bien establecidos, y gran parte de la
teología que las impulsa es problemática.

Aquellos que producen y usan Biblias de los Nombres Sagrados no son teológicamente
uniformes, pero hay varios distintivos teológicos que se repiten con frecuencia. Están unidos en
su creencia en la importancia vital de usar formas hebraicas de nombres sagrados. Además, la
mayoría de ellos observan el día de reposo del séptimo día y la Fiesta de los Tabernáculos,
celebran la luna nueva y no comen cerdo. Algunos enfatizan la forma exacta de los nombres
sagrados tanto como para decir que aquellos “que adoren a JEHOVÁ y JESÚS o como quieras
llamarlo, tendrán la Marca de la Bestia”. Además, “Encontramos la salvación en un solo nombre:
el nombre sagrado Yahvé. No se encuentra pronunciando el nombre ‘Jesucristo’ o incluso su
forma hebrea original ‘Yahushua ha-mesías’”. Muchos de sus sitios web afirman que el nombre
“Jesús” se deriva del nombre del dios “Zeus” y “Cristo” es de “Krishna”, pero sin evidencia
creíble o apoyo académico.83

También debe notarse que el consenso general entre los proponentes de este movimiento es
que el NT fue escrito originalmente en hebreo y arameo. Algunos de los malentendidos en torno
81
“Preface to the Word of Yahvé,” accessed October 5, 2020 http://assemblyofYahvé.com/wp-
content/uploads/2015/04/Bible-Read-More.pdf.
82
Ibid.
83
Unseth, “Sacred Name Bible Translations in English,” 188.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 43

a esto probablemente se han derivado de obras como las de George Howard (The Hebrew Gospel
of Matthew (El evangelio hebreo de Mateo), 1987). Aquellos que tienen una inclinación por
hebraizar o judaizar el cristianismo tienden a gravitar hacia este tipo de ideas sobre un NT hebreo
original, aunque es completamente especulación. Aunque la teoría es atractiva, no hay evidencia
manuscrita de que el NT haya sido escrito originalmente en algo diferente al griego.
George Howard también propone que κύριος como título de Yahvé o como traducción del
Tetragrámaton se encuentra solo en copias cristianas posteriores de la Septuaginta.84 Esta
propuesta fue acogida con entusiasmo por los testigos de Jehová como parte de su arsenal de
pruebas de que todas las referencias al “Señor” en el NT se refieren a Dios y no a Jesús.
Unseth agrega que los proponentes de las Biblias del Nombre Sagrado ven el texto griego
actual del Nuevo Testamento “como una traducción y defectuoso por no haber preservado las
formas hebraicas de los nombres, particularmente los nombres sagrados. Por lo tanto, creen que
es apropiado insertar/restaurar nombres de base semítica en sus traducciones del Nuevo
Testamento. Creen que el uso de nombres sagrados basados en el hebreo es para todas las
personas, no solo para los judíos, y para todos los tiempos”.85
Sospecho que estas versiones han enturbiado las aguas en esta discusión y han creado una
asociación de secta alrededor de aquellos que se esforzarían por pensar cuidadosamente sobre las
implicaciones de Éxodo 3:15 y otra evidencia bíblica. Potencialmente, esto podría ser otra
objeción a traducir el Nombre divino como Yahvé o una aproximación de Yahvé en la
traducción, ya que inadvertidamente podría dar crédito a movimientos desequilibrados e inútiles
como este. Esto no sería sorprendente, ya que las sectas históricamente han hecho que los
protestantes ortodoxos reaccionen fuertemente a sus errores y descarten todo lo bueno que
podrían haber tenido junto con lo malo. Desafortunadamente, lo más probable es que muchos
tengan la tendencia a ignorar el pensamiento cuidadoso sobre el nombre divino simplemente
porque asumen que ese pensamiento siempre y solo está asociado con grupos extremistas como
el MNS.

Volviendo a Éxodo 3:15


Después de examinar la evidencia, tal vez sea útil volver a Éxodo 3:15 y hacer la pregunta:
“¿Qué quiere Dios con respecto a su nombre?” Él dice: “Dile esto al pueblo de Israel: ‘Yahvé
(‫)יהוה‬, el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, me ha
enviado a ti.’ Este es mi nombre para siempre, y así seré recordado por todas las generaciones”
(Ex 3:15). Una cosa parece clara: el deseo personal de Dios es que sea recordado por todas las
generaciones como ‫יהוה‬.
En algunas culturas, la mejor manera de recordar a alguien es hablar de él por su nombre. Por
el contrario, cuando alguien quiere olvidar la existencia de una persona (tal vez por el mal que
hizo o por la vergüenza que trajo a la familia) busca silenciar a cualquiera que diga su nombre.
En el sacramento de la Cena del Señor, los cristianos regularmente “hacen esto en memoria” de
Jesús. En la misma línea, una pregunta que debería hacerse eco a lo largo de esta discusión es:
¿Cómo pueden los hijos de Dios recordarlo a través de todas las generaciones como Yahvé si
rara vez, si es que alguna vez, escuchan o dicen su nombre, o lo leen en su traducción de la

84
George Howard, “The Tetragram and the New Testament,” Journal of Biblical Literature, vol. 96 (1977): 63-
83.
85
Howard, “The Tetragram and the New Testament,” 187.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 44

Biblia hebrea? En medio de la confusión, el miedo fuera de lugar y la reverencia equivocada que
rodea al nombre divino, hay algo maravillosamente útil en este deseo simple, lúcido y específico
expresado por Dios mismo en Éxodo 3.

La evidencia para la pronunciación Yahvé

¿Cómo terminaron los eruditos con la pronunciación generalmente reconocida “Yahvé”? Hay
varias pruebas que señala el Anchor Bible Dictionary, algunas de las cuales ya se han analizado
en profundidad:

La más larga de las dos formas reducidas de sufijo del nombre divino, yāh y yāhû, indica que el
nombre probablemente tenía la forma fonética / yahw- / con una vocal final. La vocal se proporciona
sobre la base de la observación de que el nombre deriva de una raíz verbal hwy, que requeriría la
vocal final /ē/; esta inferencia es confirmada por el elemento yahwı̄ que aparece en los nombres en el
idioma amorreo (ver TDOT 5: 512; la relevancia de los nombres amorreos es cuestionada por Knauf
1984: 467). En las letras arameas de Elefantina en Egipto (ca. 400 a. C.; ANET, 491–92), el nombre
divino aparece en la ortografía yhw, probablemente con la vocalización / yahû / (TDOT 5: 505).
Ejemplos del nombre divino escrito en letras griegas, como Iao (equivalente a “Yaho”), Iabe
(conocido por los samaritanos, Teodoreto [siglo IV d. C.] y Epifanio), Iaoue, Iaouai (Clemente de
Alejandría [siglo III] ), e Iae también favorece la forma “Yahvé” (NWDB, 453).86

El artículo de Wikipedia también es útil para entender esto. Aquí está parte de lo que dice:

La lectura del Tetragrámaton castellanizada como "Jehová" comenzó a ser cuestionada ya desde el
siglo XVIII, a partir del siglo XX se llegó al consenso de que el modo correcto de transcribirlo es
"Yahvé" (castellanizado generalmente como "Yahvé"), una forma que ya se encuentra en los Padres
griegos…. Del mismo modo hay acuerdo general sobre la pronuncia del nombre corto Yah que
aparece en el Salmo 89:8 y en la expresión ‫( הַ לְּ לוּ יָה‬hallelû Yah, ¡Alabad a Yah!) en
los Salmos 104:35 y 150:1,6 y que se encuentra en forma griega en Apocalipsis 19:1-6. Tampoco hay
dudas sobre la pronunciación de -yahu, que no existe como nombre independiente sino solo como
elemento constitutivo de nombres teofóricos como los de Isaías (Yesha'eyahu) y Jeremías
(Yirmeyáhu). Más allá del consenso, que se refiere a la mejor reconstrucción posible del nombre, se
ha señalado que hay otras formas del mismo nombre como Yaho, Yehuah o quizás Yehóh (a veces
abreviado como Yoh) presente en nombres teofóricos como Josafat (Yehoshafat)
o Josué (Yehoshuá).87

La falta de evidencia para la pronunciación Yahvé


Como puede verse hasta ahora, la evidencia de “Yahvé” como la pronunciación histórica está
lejos de ser abrumadora. Austin Surls, en su excelente disertación Dando sentido al nombre
divino en Éxodo señala que hay más pruebas contundentes para “Yahu” que “Yahvé”. El escribe:

Aunque la forma “Yahvé” se ha establecido como el punto de vista de consenso en los círculos
académicos, se basa en muy poca evidencia sólida. La mayoría está de acuerdo en que una conexión

86
D. N. Freedman, The Anchor Bible Dictionary vol. 6 (New York: Doubleday, 1996), 1012.
87
https://es.wikipedia.org/wiki/Yahveh#Pronunciación
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 45

etimológico-gramatical entre ‫ אֶ הְ יֶה‬y ‫ יהוה‬sugiere que ‫ יהוה‬debería vocalizarse como una forma yiqtol
en tercera persona de ‫היה‬. Los eruditos han corroborado esto apelando correctamente a la forma Ἰαβέ
en Orígenes, Teodoreto y Epifanio, pero erróneamente a la forma Ἰαουέ en Clemente de Alejandría.
Sin embargo, la conexión etimológico-gramatical no es sensible a la forma de nombrar explícitamente
los juegos de palabras y malinterpreta la función de los nombres propios usados en ellos. Además, la
evidencia griega es demasiado tarde para hacer afirmaciones sustantivas sobre la forma hebrea
original de este nombre antiguo. La forma Ἰαβέ nunca se atribuye a la práctica judía en las fuentes
existentes, sino solo a los samaritanos y paganos.
Aunque siempre es una opinión minoritaria, la afirmación de que “Yahu” era la forma original
tiene mucho que elogiarla. La presencia de un afijo consistente de tres letras en los nombres
teofóricos constituye su primer testimonio. Es notable que la forma escrita ‫ יהו‬aparece en un frasco en
el sur del Negev (ca. 800 a.C.) mientras que ‫ יהו‬también aparece en la isla Elefantina unos 400 años
después. Además, la gran cantidad, fecha temprana y amplia distribución geográfica de la forma
griega Ἰάω predomina sobre la forma de consenso (ver Tabla 5 y Figuras 2 y 3 a continuación).
Sin embargo, es poco probable que esta forma sea original, porque incluso la evidencia más
antigua de la forma “Yahu” no es lo suficientemente temprana para verificar esta afirmación. Esta
forma no puede dar cuenta de la he final del Tetragrámaton, y la waw probablemente no funcionó
originalmente como una letra vocal. La forma original probablemente tenía un waw consonántico, un
he final que era consonántico, y quizás fue seguido por una vocal corta que nunca se escribió. La
vocalización de ‫ יהוה‬probablemente habría sido más larga que la de “Yahu”, pero fonéticamente
similar - quizás se simplificó cuando se agregó a los nombres teofóricos. La antigüedad del nombre y
las consonantes débiles sobre las que se construye hace poco probable que descubramos su forma o
vocalización original. Los siguientes son posibles: “Yahwahu”, “Yahawhu”, “Yahuwah” o
“Yehwahu”.
Si esta hipótesis es correcta, entonces el nombre divino se parece a la mayoría de los nombres
propios en los juegos de palabras de nombres explícitos del Pentateuco en que la mayoría no
corresponde a una forma verbal o nominal precisa. Además, el nombre ‫ יהוה‬parece ser
etimológicamente opaco. Tal nombre personal hace referencia directa al portador del nombre sin
agregar ningún sentido (significado descriptivo) a su referencia. Tal nombre debe tomar su sentido de
la narrativa bíblica en lugar de una supuesta etimología.
El nombre divino ‫ יהוה‬se explica en Éxodo 3:13-15 (a través de la asonancia) para anticipar la
poderosa intervención de YHWH y los actos subsiguientes de salvación en nombre de su pueblo. La
frase ‫ אֶ הְ יֶה אֲשֶ ר אֶ הְ יֶה‬no describe la esencia o el carácter de YHWH, pero pospone tal declaración para
un tiempo posterior. El “nombre propio” divino no hace más que responder a la pregunta de Moisés,
mientras deja que el futuro revele qué sentido debería atribuir Israel al nombre. YHWH ofreció su
nombre como una clavija en la que colgar descripciones de todo lo que estaba a punto de hacer, ser y
decir.88

Objeciones a la pronunciación y traducción de ‫יהוה‬

No tenemos una grabación de audio de Moisés

88
Austin Surls, Making Sense of the Divine Name in the Book of Exodus: From Etymology to Literary
Onomastics, accessed November 22, 2020,
https://www.academia.edu/23163338/Making_Sense_of_the_Divine_Name_in_Exodus_From_Etymology_to_Liter
ary_Onomastics, 122-24.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 46

Una objeción a la pronunciación del nombre divino (‫ )יהוה‬es que se ha perdido la


pronunciación exacta.89 Dado que no existe un acuerdo unánime sobre cómo debe pronunciarse,
es mejor evitar decirlo en absoluto. Mi respuesta a eso comienza con el nombre de Jesús.
¿Realmente pronunciamos a Jesús como lo hicieron los autores bíblicos? Empecemos por el
español. La jota no suena nada como hubiera sido en griego (ie). En inglés es peor. Solo el
último sonido de la “s” en la pronunciación en inglés se corresponde con la pronunciación griega
Ἰησοῦς (“i-e-SUS”), y la pronunciación griega tiene muy poco en común con la pronunciación
hebrea en la que se basa. Pero, independientemente de ese hecho, lo usamos constantemente en
el mundo del cristianismo, sin pensarlo dos veces. Ciertamente, esto no se debe a que no
respetemos el nombre de Jesús. Tampoco se debe a que todos los demás idiomas del mundo
pronuncian Jesús como nosotros.
Lo mismo puede decirse de muchos nombres en la Biblia, como Eva, que pronunciamos de
una manera que está muy lejos de cómo sonaba probablemente en el hebreo temprano y
posterior. Sin embargo, esa desconexión e inexactitud no nos hace dudar en pronunciar ese
nombre, y muchos otros. Alguien podría argumentar que la coherencia requeriría que dejemos de
pronunciar el nombre de Jesús y siempre lo sustituyamos por Señor o por el Cristo, o bien, elegir
una pronunciación para el tetragrámaton y usarla como lo hacemos con el nombre de Jesús.
Otra respuesta a la objeción es que las personas que han vivido en el extranjero están
acostumbradas a que sus nombres se pronuncien mal de diversas formas. El nombre de mi esposa
es Bethany, pero el español latinoamericano no tiene el sonido “th” del inglés en su inventario
fonético. Los hispanohablantes tampoco pueden pronunciar fácilmente la “a” en su nombre como
suena en inglés. Entonces, inevitablemente, terminan pronunciándolo como Bétani. Otros
prefieren usar el equivalente en español del nombre, que es Betania porque la pronunciación en
inglés es demasiado difícil o confusa. En el caso de mi propio nombre, Andrew, hay algunas
personas en países de habla hispana que intentan pronunciarlo lo más cerca posible del inglés,
pero terminan diciendo Andréu, lo que ha cambiado el sonido de manera bastante drástica.
Luego hay otros que simplemente me llaman (como prefiero) por el nombre equivalente en
español, Andrés. Usando la misma lógica que este argumento en contra de pronunciar el nombre
divino, debería insistir en que los que no hablan inglés se dirijan a mí exclusivamente con un
título como consultor o señor, o simplemente hombre. Sin embargo, puedo apreciar y navegar la
realidad de que mi nombre se representa de manera diferente y, en un sentido, de manera
inexacta. Por tanto, ¡cuánto más debe poder soportar Jesús los cambios en la pronunciación de su
nombre en todo el mundo y a lo largo de la historia! Jesús y Yahvé son el mismo Dios (Jn 8:58),
por lo tanto, si Dios acepta una variedad de pronunciaciones de Jesús, aceptará varias
pronunciaciones de Yahvé.
También debe observarse que en Éxodo 3 “Dios está expresando su deseo de que todas las
personas en todas partes vengan a usar este nombre para él. En la omnisciencia de Dios, habría
sabido que los hablantes de diferentes idiomas tendrían que pronunciar su nombre de acuerdo

89
En este artículo, supongo que el lector entiende que existe una larga tradición de manuscritos de que el
nombre se escribe sin vocales en hebreo, y que los masoretas incorporaron la tradición de decir "Señor" (adonai en
hebreo) en sus copias manuscritas marcando artificialmente el nombre. cuatro consonantes del nombre ‫ יהוה‬con
vocales de adonai, contribuyendo así a la pérdida de la pronunciación real a lo largo de la historia. Se pueden
encontrar más detalles sobre este tema en línea y en muchos libros y biblias de estudio. Aunque conozco bien los
argumentos de Nehemiah Gordon en contra de esta idea, no me convencen en absoluto. Consulte el título sobre
Gordon en la sección "Objeciones" para obtener más información al respecto.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 47

con la fonética de esos idiomas. Sin embargo, Dios todavía indicó que este era el nombre con el
que quería que todos lo conocieran”. 90
En conclusión, la objeción de pronunciar YHWH porque no podemos estar 100% seguros de
cómo se pronunció originalmente no es una objeción válida, ni es consistente con nuestro
tratamiento de otros nombres bíblicos, especialmente el nombre de Jesús, quien es Yahvé mismo.
Para ser coherentes con nuestra voluntad de pronunciar el nombre de Jesús de muchas formas
diferentes en todo el mundo, debemos considerar llamar a Yahvé por un nombre, sin importar
cuál sea. Realmente no importa si es Jehová o Yao o Yahvé o lo que sea; solo necesita ser un
nombre (con algún mérito histórico y lingüístico) en lugar de un título.

La pronunciación de Yahvé es históricamente artificial


Una objeción relacionada con la anterior es que Yahvé es una reconstrucción artificial basada
en la fonología histórica. The Theological Wordbook of the Old Testament, implica que YHWH
probablemente se habría pronunciado como “Yajawaja” en la época de Moisés, pero admiten que
solo pueden especular:

Debe mencionarse una posibilidad alternativa para la pronunciación original del Tetragrámaton.
En realidad, hay un problema con la pronunciación de “Yahvé”. Es una extraña combinación de
elementos antiguos y tardíos. La primera aparición extrabíblica del nombre está en la Piedra Moabita
de aproximadamente 850 a.C. En ese momento, las letras vocales apenas comenzaban a usarse en
hebreo. Si YHWH representa una ortografía anterior al 900 A.C. (como parece probable), la “h” final
debería haberse pronunciado. La pronunciación Yahvé asume la terminación de un verbo lamed-he,
pero estos verbos en los días de Moisés terminaban en una “y” (cf. para bānâ el Ug. Impf. Ybny).
Entonces, la terminación “eh” es una forma tardía. Pero en hebreo en los últimos tiempos, una “w”
que comenzaba una palabra o sílaba cambiaba a “y” (como en los verbos pe-waw y el verbo hāyâ en
sí). Así que la “w” de Yahvé representa una pronunciación anterior al mosaico, pero la “eh” final
probablemente representa una forma post-davídica.
En vista de estos problemas, puede ser mejor simplemente decir que YHWH no proviene del
verbo hāwâ (presumiblemente hawaya en su forma temprana) en absoluto. Hay muchos lugares en el
Antiguo Testamento donde ahora se reconoce que el paralelo de un nombre y su significado no es
necesariamente etimológico. Por ejemplo, I Sam 1:20 probablemente no significa que el nombre de
Samuel se deriva del verbo šāmaʿ “escuchar”. Génesis 11: 9 no significa que Babel provenga del
verbo bālal “confusión”, sino solo que las dos palabras suenan algo parecidas. Asimismo, se dice que
Jacob significa tanto “talón” (Génesis 25:26) como “suplantador” (Génesis 27:36). Hay muchos otros
ejemplos de este dispositivo que deben tomarse como una paranomasia, un juego de palabras, más
que como una etimología. Por lo tanto, bien podemos sostener que YHWH no proviene del verbo
hāwâ que se cita en la primera persona ʾehyeh “Yo seré”, sino que es una palabra antigua de origen
desconocido que sonaba algo así como el verbo hāwâ sonaba en los días de Moisés. En este caso, no
sabemos cuál fue la pronunciación; solo podemos especular. Sin embargo, si la palabra se escribiera
con cuatro letras en la época de Moisés, esperaríamos que tuviera más de dos sílabas, porque en ese
período no había letras vocales. Todas las letras se hicieron sonar.
Al final del período del AT, los papiros elefantinos escriben la palabra YHW para que se lea ya
sea yāhû (como en nombres como Shemayahu) o yāhô (como en nombres como Jehozadek). La
pronunciación yāhô se vería favorecida por la forma griega posterior iaō encontrada en fragmentos
griegos de Qumrán (siglos II o I a.C.) y en materiales gnósticos de los primeros siglos cristianos.
Teodoreto en el siglo IV d.C. declara que los samaritanos lo pronunciaron iabe. Clemente de
Alejandría (principios del siglo III d.C.) lo vocalizó como iaoue. Estos son testigos bastante tardíos y

90
Chris Lovelace, correspondencia personal, 14 de mayo de 2020.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 48

parecen contradecir el testimonio judío mucho anterior de Elefantina y los elementos del nombre,
ninguno de los cuales termina en “eh”. 91

Al final, como ya se argumentó en la sección anterior, no importa si "Yahvé" resulta ser leve
o drásticamente diferente de la pronunciación original en el Sinaí. Lo que importa es cómo
buscamos entender, obedecer y honrar el deseo explícito de Dios en Éxodo 3:15.

Nehemiah Gordon
Aunque la enseñanza de Nehemiah Gordon no es necesariamente una objeción a pronunciar
o traducir el nombre divino, es importante hacer una advertencia al lector con respecto a mucho
de lo que tiene que decir. Como judío caraíta, es famoso por su franqueza en la pronunciación
del nombre divino y se ha vuelto cada vez más influyente, especialmente dentro de los círculos
no académicos donde la gente se deslumbra fácilmente por su aparente dominio del hebreo.
Él argumenta que los masoretas no señalaron a YHWH con las vocales de Adonai, sino que
más bien estaban preservando la pronunciación secreta y correcta del nombre de Dios, que él
afirma es “Yehovah”. Gordon argumenta esto en sus escritos y a un nivel muy popular en las
entrevistas de YouTube, así como en su influyente podcast. Su opinión ha ganado muchos
seguidores que predican que deberíamos dirigirnos a Dios como Yehovah, muchos de los cuales
se apresuran a corregir a cualquiera que lo pronuncie de otra manera.
Desvelar todos los “juegos de manos eruditos” y el engaño de Gordon va más allá del alcance
de este libro, pero el lector debe saber que está (intencionalmente o no) suprimiendo pruebas y
presentando afirmaciones falsas para respaldar sus especulaciones. Para aquellos interesados en
explorar sus errores y desinformación en detalle con ejemplos claros, evidencia y explicaciones,
busquen en YouTube el canal “Evangelios hebreos”,92 que se dedica exclusivamente a ayudar a
las personas a navegar las enseñanzas de Gordon con discernimiento.
Aunque la pasión de Gordon por el nombre de Dios es contagiosa y habla con convicción y
confianza, parece estar suprimiendo pruebas que no se ajustan a sus puntos de vista y se ha
entregado a especulaciones inverosímiles que no ayudan.

Corremos el riesgo de “tomar el nombre de Dios en vano”


Una de las objeciones más comunes a lo largo de la historia ha sido que cualquiera que
pronuncie el nombre divino corre el riesgo de “tomar el nombre de Dios en vano”.
Desafortunadamente, el mandato de Éxodo 20:7 se ha malinterpretado durante siglos. Así es
como dice una traducción al inglés: “No tomarás (‫ )ל ֹא ִת ָשּׂא‬el nombre Jehová tu Dios en vano
(‫) ַל ָשּׁוְ א‬, porque no dará por inocente Jehová al que tome su nombre en vano”.
Carmen Joy Imes proporciona la siguiente aclaración útil sobre cómo debemos entender este
mandato. Ella argumenta esencialmente que está prohibiendo a los israelitas representar mal a
Yahvé. Por lo tanto, la idea que se ha popularizado como “tomar el nombre de Dios en vano”
realmente tiene que ver con dar una falsa impresión del carácter de Dios:

91
J. Barton Payne, “484 ‫הָ וָה‬,” ed. R. Laird Harris, Gleason L. Archer Jr., and Bruce K. Waltke, Theological
Wordbook of the Old Testament (Chicago: Moody Press, 1999), 211.
92
https://www.youtube.com/channel/UCUROTvY5TpC5ccw-YbrMkbQ
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 49

Le he preguntado a mucha gente qué creen que significa este versículo (lo llamaremos el
“mandamiento del nombre”). La mayoría de la gente asume que el mandamiento del nombre enseña
que se supone que no debemos usar el nombre de Dios como una palabrota (como en la frívola,
“¡Dios mío!”). En cambio, deberíamos usarlo con reverencia. Estoy de acuerdo en que debemos
honrar el nombre de Dios usándolo con reverencia, pero no creo que las palabrotas sean el problema
que el mandamiento del nombre busca abordar...
Sin embargo, el mandamiento del nombre no dice nada sobre juramentos o maldiciones. De
hecho, no hay palabras relacionadas con el habla. Traducido simplemente, dice: “No llevarás/cargarás
el nombre de Yahvé, tu Dios, en vano”. Quizás es por eso que he podido contar 23 interpretaciones
claramente diferentes del mandamiento del nombre. Parece una declaración extraña: ¿cómo se “lleva”
el nombre de Dios? No es de extrañar que los intérpretes hayan ido a menudo a otros pasajes (ya sea
dentro o fuera de la Biblia) esperando una aclaración. La mayoría asume que “llevar el nombre” es la
abreviatura de algo como “llevar el nombre en los labios”, que sería decir el nombre, o “levantar la
mano al nombre”, lo que significaría hacer un juramento.
Pero hay una explicación mucho más sencilla. Lo perdemos porque involucra una metáfora que
no nos es familiar. Poco después de la entrega de los Diez Mandamientos en el Sinaí, Dios le dio
instrucciones a Moisés con respecto a la construcción del tabernáculo, que albergará las dos tablas de
piedra y las vestiduras oficiales del sumo sacerdote, quien oficiará. La prenda de vestir que es de
importancia central para la posición de Aarón como sumo sacerdote es un delantal de tela en el pecho
tachonado con 12 piedras preciosas. Estas piedras deben estar inscritas, cada una con el nombre de
una de las 12 tribus de Israel. Yahvé instruye a Aarón para que “lleve los nombres de los hijos de
Israel” cada vez que entra en la tienda sagrada (Éxodo 28:12, 29). Aarón lleva literalmente sus
nombres. Los lleva consigo mientras realiza sus deberes oficiales. Sirve como representante
autorizado del pueblo ante Dios. También lleva el nombre de Yahvé en su frente, lo que lo distingue
como el representante de Dios ante el pueblo.
Tan especial como es, Aaron es un modelo visual de lo que toda la comunidad del pacto está
llamada a ser y hacer. En el Sinaí, Yahvé seleccionó a Israel como su posesión más preciada, reino de
sacerdotes y nación santa (Éxodo 19:5-6). Los tres títulos designan a Israel como el representante
oficial de Yahvé, apartado para mediar en su bendición a todas las naciones. Al seleccionar a los
israelitas, Yahvé los ha reclamado como suyos, de hecho, marcándolos con su nombre como reclamo
de propiedad. Debido a que llevan su nombre, están encargados de representarlo bien. Es decir, no
deben llevar ese nombre en vano. Esto va mucho más allá de los juramentos o la pronunciación del
nombre de Dios. Se extiende a su comportamiento en todos los ámbitos de la vida. En todo, lo
representan. Son su departamento de relaciones públicas. Las naciones están observando a los
israelitas para descubrir cómo es Yahvé.
¿Aún no estás convencido? Mire la bendición de Aarón en Números 6:24-27. Después de la
ordenación de Aarón como sumo sacerdote (donde fue vestido con las vestiduras especiales) y la
consagración del tabernáculo y el pueblo, su primer acto oficial fue pronunciar esta bendición sobre el
pueblo (véase Levítico 9:22). Es muy probable que hayas escuchado la bendición antes. A menudo se
usa en iglesias y sinagogas:
Jehová te bendiga, y te guarde;
Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia;
Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz.
Pero, ¿alguna vez ha leído el siguiente versículo? “Entonces pondrán mi nombre sobre los
israelitas, y yo los bendeciré”.
¿Ves? Es bastante explícito. Dios puso su nombre sobre los israelitas como reclamo de propiedad.
Llevaban un tatuaje invisible. No debían llevarlo en vano.93

93
Carmen Joy Imes, “Shattered: Top Ten Myths about the Ten Commandments (Part 3),” last updated May,
2018, https://carmenjoyimes.blogspot.com/2018/05/shattered-top-ten-myths-about-ten.html. See also her
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 50

El mandamiento del nombre se aclara aún más en pasajes como Isaías 44:5, que dice: “Este
dirá: ‘Yo soy de Yahvé, ese será llamado por el nombre de Jacob, y aquel escribirá sobre su
mano: ‘De Yahvé, y será llamado con el nombre de Israel”.94 Deuteronomio 28:9–10 también
sirve para conectar la pertenencia a Yahvé y llevar su nombre: “Yahvé te establecerá como un
pueblo santo para él, como te ha jurado, si guardas los mandamientos de Yahvé tu Dios y andas
en sus caminos. Y todos los pueblos de la tierra verán que eres llamado por el nombre de Yahvé
[i.e. llevas el nombre de Yahvé], y te temerán.”95
En conclusión, a pesar de las opiniones de muchos a lo largo de la historia, el mandamiento
del nombre de Éxodo 20:7 no implica de ninguna manera que el nombre de Dios no deba ser
pronunciado como él lo reveló. Más bien, requiere que aquellos que afirman estar asociados con
el único Dios verdadero, Yahvé, no deben traer reproche a su reputación y carácter a través de
sus acciones y palabras.

Inconsistencia, agobiando al lector y creando obstáculos


Se ha demostrado que los escritores inspirados del Nuevo Testamento tenían razones válidas
para usar “Señor”. Aunque no sabemos exactamente qué estaban pensando, creo que podemos
adivinar, dentro de lo razonable, sus motivos. A la luz de esos motivos (mencionados
anteriormente), y a la luz de Éxodo 3:15, examinemos cómo los publicadores de la Biblia
Estándar Cristiana (en inglés) objetan el uso de Yahvé en su traducción. La Christian Standard
Bible (CSB) se retractó recientemente de su práctica de traducir el nombre divino como Yahvé
en su anterior traducción al inglés (HCSB). Aunque esta versión es una traducción al inglés, los
mismos conceptos en el debate aplican a las traducciones al español. Lo que sigue es su propia
explicación completa de su sitio web:

En el Antiguo Testamento, Dios da su nombre personal más de 6,000 veces. Conocido como el
Tetragrámaton, el nombre es YHWH en el texto hebreo. No se puede pronunciar a menos que se
agreguen vocales. Tradicionalmente, las traducciones de la Biblia en inglés han optado por no
proporcionar vocales para que YHWH sea pronunciable; simplemente traducen este nombre como un
título (Señor). Esta práctica muestra sensibilidad hacia algunos que creen que llamar a Dios por su
nombre personal es demasiado informal. También hay un debate sobre qué vocales deben agregarse a
YHWH para que sea pronunciable. La HCSB rompió con la tradición y tradujo a YHWH como
“Yahvé” 656 veces en el Antiguo Testamento. La intención era compartir con el lector el nombre
personal de Dios en contextos donde Dios se estaba refiriendo a su nombre. Cuatro consideraciones
llevaron al Comité de Supervisión de Traducciones de CSB a apartarse de la práctica de HCSB y
alinearse con otras traducciones al inglés.
Primero, la HCSB fue inconsistente al representar a YHWH como “Yahvé” en solo 656 de más
de 6,000 ocurrencias de YHWH. En muchos casos, un solo versículo contiene múltiples apariciones
de YHWH en hebreo. Como ejemplo de inconsistencia, la HCSB en Job 1:21 dice: “El Señor da y el
Señor quita. Alabado sea el nombre de Yahvé”. Versos como este plantearon la pregunta: ¿qué
criterio siguió HCSB al elegir entre “Yahvé” y “Señor”? Los criterios se establecieron en la

dissertation, Bearing Yhwh’s Name at Sinai: A Reexamination of the Name Command of the Decalogue
(Eisenbrauns, 2018).
94
Se reconoce aquí que el versículo en hebreo no está totalmente claro si se escribirá con la mano o sobre la
mano (véase la RV60).
95
Peter J. Gentry and Stephen J. Wellum, Kingdom through Covenant (Wheaton: Crossway, 2012), 343-344.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 51

Introducción de la HCSB, pero muchos lectores sintieron que el enfoque debería ser completamente
consistente, interpretando a YHWH como “Yahvé” cada vez o volviendo al “Señor” tradicional.
En segundo lugar, la total coherencia en la traducción de YHWH como “Yahvé” abrumaría al
lector. Como ejemplo, Números 9:23 se leería de la siguiente manera si HCSB hubiera sido
completamente consistente en su uso de “Yahvé”. “Acamparon por orden de Yahvé, y partieron por
orden de Yahvé. Ellos cumplieron el requisito de Yahvé de acuerdo con el mandato de Yahvé a través
de Moisés “
En tercer lugar, la retroalimentación constante de los lectores mostró que la falta de familiaridad
con “Yahvé” era un obstáculo para leer la HCSB. Por ejemplo, muchos informaron que sentían que
“Yahvé” era una innovación, y malinterpretaron la intención detrás de usar el nombre formal de Dios.
Por lo tanto, una traducción que valora la precisión y la legibilidad se vio limitada por una elección de
traducción que no brindó claridad al lector.
Cuarto, al citar textos del Antiguo Testamento que incluyen una ocurrencia de YHWH, el Nuevo
Testamento traduce YHWH con la palabra kurios, que es un título (Señor) en lugar de un nombre
personal. Con este precedente en la mano, la mayoría de los traductores de inglés han optado por
traducir YHWH como “Señor” en lugar de “Yahvé”. Por estas razones, CSB está en línea con la
mayoría de las traducciones al inglés en su interpretación de YHWH como “Señor”. En los lugares
donde Dios introduce o enfatiza el nombre de su pacto, CSB tiene una nota al pie que dice: “Lit
Yahvé”.96

Estas cuatro razones deben responderse a su vez.


Primero, el comité de supervisión de la CSB admitió que no fueron consistentes en la
interpretación de Yahvé. Sin embargo, concluyen que su falta de consistencia es una razón para
dejar de intentarlo por completo. Encuentro esta razón contraproducente y poco convincente.
En segundo lugar, creen que una interpretación totalmente consistente de Yahvé “abrumaría
al lector”, pero no logran explicar cómo es que repetir “el SEÑOR” una y otra vez no abruma al
lector. En inglés ambas opciones tienen solo dos sílabas.97
En tercer lugar, recibieron comentarios negativos de los lectores, quienes dijeron que el uso
de Yahvé lo convertía en un obstáculo para leer la HCSB. Esta sensibilidad parece estar de
acuerdo con lo que pudo haber estado involucrado en la decisión del escritor del NT de usar
kurios. Pero sería más útil si el comité abordara por qué creen que los autores del NT harían lo
mismo en su posición. Por ejemplo: 1) los autores del NT no eran una empresa editorial que
intentara vender Biblias, por lo que el dinero no era una posible motivación para eliminar los
obstáculos para los lectores, 2) los autores del NT no estaban publicando una nueva versión de la
Biblia hebrea para un pueblo que ya tenía muchas opciones diferentes para elegir.98 Si el comité
de CSB reconoce y aborda estas diferencias, ayudará a que su razonamiento sea más transparente
y útil.
Hay muchas áreas en un proyecto en las que un equipo de traducción se ve obligado a
conformarse por diversas razones. Hay miles de ejemplos triviales que se podrían mencionar,

96
Thomas Schreiner, “Q&A: Translation Decisions for the Christian Standard Bible,” last updated January,
2017, https://csbible.com/wp-content/uploads/2017/01/Translation-Decisions-QA.pdf.
97
Bob Carter también señala: “Es una práctica de traducción normal reemplazar un nombre con un pronombre
cuando el idioma de destino lo requiere. Y de hecho, hicieron esto en Números 9:23. ‫ יהוה‬aparece 4x en el versículo,
pero CSB solo tiene “el SEÑOR” 3x y el cuarto se reemplaza por “su”. “Correspondencia personal, 12 de mayo de
2020.
98
El mundo moderno de habla inglesa ya tiene acceso a la Biblia en docenas de versiones, lo que permite a los
editores la libertad de actuar en contra de la tradición y presentar el nombre de Dios como un nombre en lugar de un
título.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 52

desde temas críticos con el texto hasta temas gramaticales, pero la mayoría de ellos no se acercan
a la gravedad del uso del nombre personal y distintivo de Dios, ya que es un asunto
explícitamente importante para Dios mismo.
La cuarta y última razón del comité de supervisión de la CSB es la más relevante. Reconocen
el uso del NT de kurios en griego (κύριος el título “Señor”) en lugar del nombre divino como un
estándar que desean seguir. Esta objeción es aceptable a la luz de la discusión previa sobre el
deseo de los autores del Nuevo Testamento de comunicarse claramente e identificar a Jesús con
Yahvé. Sin embargo, el comité de supervisión debe proporcionar sus propios criterios para seguir
el ejemplo del NT. Primero, deben mostrar lo que creen que fueron las razones del uso del NT de
“el Señor”. En segundo lugar, deben demostrar una justificación convincente para seguir esas
razones del NT en el contexto actual.
En tercer lugar, se les debería exigir que argumenten por qué los apóstoles harían lo mismo
en su lugar, si se les diera la oportunidad de publicar una traducción del AT en un idioma que no
sea el griego, con acceso a los medios de comunicación y la conveniencia de poder comunicar
sus razones en un prefacio, notas de estudio, notas al pie de página, etc. Por ejemplo, deben
responder a la pregunta: “Si Pablo estuviera vivo hoy, en un mundo donde Yahvé es un nombre
ampliamente utilizado en el mundo académico y entendido por muchos para fuera el nombre
personal de Dios, y él estaba publicando una traducción de la Biblia principalmente para que la
leyeran los gentiles, ¿todavía decidiría publicar una versión del Antiguo Testamento usando ‘el
Señor’?” La respuesta, en sus mentes, puede muy bien ser un rotundo SÍ, pero aún necesitan
articular su lógica de manera convincente y demostrar cuidadosamente que han considerado el
tema desde todos los ángulos. Cuarto, deben abordar Éxodo 3:15 y tratar de manera adecuada y
responsable las tensiones creadas por ese pasaje. Ignorar ese pasaje cuestiona la credibilidad de
su razonamiento y socava sus objeciones a la alternativa. 99

Los judíos se sentirán ofendidos


Como ya se ha observado, muchos judíos pueden sentirse ofendidos por la pronunciación del
nombre divino de cualquier forma además de Adonai o Hashem, aunque esta reacción ignora la
enseñanza de la Mishná como vimos anteriormente en Berakhot 9:5. “Aunque la prohibición de
la pronunciación se aplica solo al Nombre de cuatro letras, los judíos por lo general no
pronuncian ninguno de los muchos Nombres de Dios excepto en oración o estudio. La práctica
habitual es sustituir letras o sílabas, de modo que Adonai se convierte en Adoshem o Ha-Shem,
Elohaynu y Elohim se convierten en Elokaynu y Elokim, etc.”100 Por lo tanto, para muchos que
viven y trabajan en Israel, la cuestión de pronunciar el nombre divino puede ser emocional y
personal, incluso volátil. 101 El Dr. Jan Verbruggen ofrece un ejemplo de esto en la siguiente
publicación en línea:

99
Esto también debería ser necesario para cualquier proyecto de traducción en otros idiomas mayoritarios y
minoritarios. El equipo/comité debe poder articular en el informe o resumen de traducción su posición sobre los
cuatro temas y defenderlos.
100
Jewish Concepts: The Name of God, accessed May 14, 2020, https://www.jewishvirtuallibrary.org/the-
name-of-god.
101
“Some rabbis asserted that a person who pronounces YHVH according to its letters (instead of using a
substitute) has no place in the World to Come, and should be put to death.” Ibid.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 53

No creo que sea un pecado, ni siquiera un error, pronunciar el nombre divino, siempre que se use
de manera reverente. Sin embargo, todavía no lo pronuncio por dos motivos:
1. Habiendo estudiado con maestros judíos (o maestros que ellos mismos tenían maestros judíos),
estoy acostumbrado a decir adonai en lugar de “Yahvé”.
2. Esta segunda razón, para mí, es la más fuerte. Una vez asistí a una conferencia que intentaba
cerrar la brecha entre judíos y cristianos evangélicos. Uno de los oradores, un conocido erudito
evangélico, habló elocuentemente sobre su tema, mientras pronunciaba el nombre divino como
‘Yahvé’. Al hacerlo, noté que algunos de los eruditos judíos presentes estaban tan consternados que
estaban temblando físicamente. Entonces, para no ofender a nuestros amigos judíos (los cristianos
parecemos haber sido expertos en eso en el pasado), he optado por no pronunciar el nombre divino. A
mi modo de ver, no hay razón para erigir un muro innecesario entre nosotros.102

Como se dijo anteriormente, cualquier objeción que no se refiera tanto a Éxodo 3:15 como al uso
que hace el NT de “el Señor” socava su relevancia para la discusión. Los motivos de Verbruggen
son admirables y están guiados por el amor, que es digno de elogio. Obviamente, nadie quiere
ser acusado de antisemitismo, ni los verdaderos seguidores de Cristo desean ofender
intencionalmente a nadie por malicia. Nadie quiere construir barreras entre judíos y cristianos.
Al plantear objeciones como esta de Verbruggen, sugiero que sería justo plantear la pregunta
paralela de qué podría ofender a Dios y construir barreras innecesarias entre él y nosotros.
¿Podría ser posible mostrar a nuestros amigos judíos cuánto amamos, reverenciamos y honramos
a Dios por medio de realmente usar su nombre? No parece descabellado pensar que podríamos
aprovechar esa oportunidad para modelar la obediencia a los deseos de Dios en Éxodo 3:15. No
creo que los judíos deban ser los únicos que puedan mostrar su reverencia por Dios al no decir su
nombre. Más bien, los cristianos deben tener la libertad de leer la palabra de Dios, seguirla y
honrar su deseo de que usemos su nombre como él lo ha revelado para que sea recordado por
todas las generaciones. Somos los extranjeros que estamos llamados a unirnos a él y “amar el
nombre de Yahvé” (Isa 56:6). Si queremos “amar su nombre” (Salmo 69:36), debemos ofrecer
razones bíblicas sólidas y cuidadosas por las que decidimos ocultarlo ante los hombres o en las
traducciones.
También debe mencionarse que los judíos a veces argumentan que cualquier sentido común
de respeto impide dirigirse a Dios por su nombre. El argumento es que cualquier niño que se
dirigiera a su padre por su nombre personal en lugar de “Padre” sería una falta de respeto.
Entonces, lógicamente, deberíamos temblar de indignación si un hijo de Dios habla con Dios
usando su nombre, tal como lo haríamos si un hijo lo hiciera con su padre. Este argumento es
convincente porque la mayoría de las culturas comparten esta reacción emocional cuando un
niño llama a su padre por su nombre. La mayoría de la gente puede sentir empatía por el horror
que uno puede sentir ante tal muestra de falta de respeto. Pero este argumento emocional no
resiste la inundación de evidencia bíblica de lo contrario que se presenta en la primera parte de
este libro. La forma en que nos dirigimos a Dios debe ajustarse al modelo bíblico y a los propios
deseos explícitos de Dios, no a los instintos culturales.
Una vez más, hay espacio para el crecimiento del respeto mutuo entre judíos y cristianos
sobre este tema. El abrumador ejemplo de los patriarcas y profetas que usan el nombre de Dios
libre y abiertamente debería hacer que los judíos se detengan antes de reaccionar negativamente
ante la elección cristiana de imitar a los justos de la antigüedad. Las reacciones cáusticas al uso

102
Jan Verbruggen, “Pronouncing the Divine Name,” last updated December 9, 2013,
https://transformedblog.westernseminary.edu/2013/12/09/pronouncing-the-divine-name/.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 54

del nombre de Dios son injustificadas según la evidencia bíblica. Así como yo respeto (sin
mostrar temblorosa indignación) la elección de un judío de no pronunciar el nombre de Dios,
invitaría a los judíos a respetar con calma la elección de un cristiano de pronunciar el nombre de
Dios.

Estropea el efecto literario


Similar a la objeción del comité CSB, Michael D. Marlowe, el editor de bible-researcher.com
expresa la siguiente queja sobre el uso de Yahvé por parte de ASV: “El tetragrámaton hebreo o
nombre divino (representado como ‘Señor’ en el Nuevo Testamento) se traduce en todas partes
como ‘Yahvé’, lo que estropea el efecto literario de muchos pasajes, especialmente en los
Salmos “.103
Mi respuesta a esta objeción es simple: el efecto literario es subjetivo y, por lo tanto, no debe
darse como un argumento significativo a favor o en contra del uso de Yahvé. Gleason Archer
expresa la opinión exactamente opuesta sobre el mismo ASV en lo siguiente:

El propósito declarado de estos traductores es abandonar todo el inglés bíblico tradicional y producir
una traducción completamente nueva sobre la base del vocabulario y el uso del inglés contemporáneo.
Esta búsqueda de la modernidad no ha ido a los extremos de la Nueva Biblia en inglés, ni es una mera
paráfrasis de Phillips. En realidad, a menudo muestra una vitalidad real que es refrescantemente
original y da un mayor impacto al pensamiento del autor antiguo. Muy llamativo es el abandono del
tradicional “SEÑOR” por el Tetragrámaton , y también del tradicional “Jehová”, a favor de la
pronunciación histórica, “Yahvé”. La RSV, la NEB y la mayoría de las otras traducciones modernas
se han alejado de esto, pero se ve y suena muy bien (al menos para este revisor) en este trabajo, y
puede servir para alentar a los futuros traductores a seguir su ejemplo. 104

Conclusión
Barry Webb, en la introducción a su traducción y comentario sobre Jueces, proporciona un
buen modelo de cómo abordar este problema tanto con humildad como con honestidad. El
escribe:

Es cierto que hay algo bastante presuntuoso en los eruditos (especialmente los cristianos) que deciden
usar el nombre personal de Dios (en realidad, su propia versión hipotética de él) cuando aquellos que
nos transmitieron el texto como Sagrada Escritura se abstuvieron de hacerlo. Sin embargo, he optado
por representar el Tetragrámaton como Yahvé, principalmente debido a la forma intensamente
personal en la que se representa a Dios en la narrativa de los Jueces, como un personaje que interactúa
con otros personajes y manifiesta toda la angustia que implica estar en una relación comprometida
con personas que le son infieles una y otra vez. Me pareció que un título descriptivo como SEÑOR
hacía demasiado hincapié en una dimensión de esta relación a expensas de otras y, por lo tanto, era
mucho menos adecuado para el drama involucrado que el Nombre personal. Espero que los lectores
judíos perdonen mi impertinencia.105
103
Marlowe, “The Jerusalem Bible (1966),” accessed May 6, 2020, http://www.bible-researcher.com/jerusalem-
bible.html.
104
Gleason Archer, “The Old Testament of The Jerusalem Bible,” Westminster Theological Journal vol. 33
(May 1971): 191-94.
105
Barry Webb, The Book of Judges (Grand Rapids: Eerdmans, 2007), 71.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 55

Este documento se propuso responder a dos preguntas principales:


1) ¿Sería mejor para las traducciones de la Biblia hebrea usar alguna aproximación a
Yahvé, o un título como el de Señor?
2) Al enseñar y leer hebreo hoy fuera de Israel, ¿sería mejor pronunciar su nombre como
una aproximación como Yahvé, o decir Adonai (Señor)?

He hecho todo lo posible por considerar cuidadosamente los dos criterios principales
(Éxodo 3:15 y el uso de kurios, el Señor en el NT) y responder a las objeciones. Mi respuesta a la
pregunta uno sería, en la mayoría de los casos, Yahvé, ya que la gran cantidad de apariciones de
Adonai en la Biblia hebrea serviría para lograr lo que los escritores del Nuevo Testamento
querían, mientras que al mismo tiempo seguiría sonando familiar para aquellos que lo aprecian.
la tradición de las traducciones usando algún equivalente del título “Señor”. Obviamente, para
las nuevas traducciones en otras comunidades lingüísticas, esta decisión recaerá en última
instancia en la comunidad lingüística. Pero los animaría a tomar una decisión sólo después de
una meticulosa deliberación y una comprensión cabal del asunto; y deberían poder justificar su
decisión a la luz de los dos criterios principales.
Con respecto a la pregunta dos: concluyo que uno debería intentar pronunciar alguna
aproximación a Yahvé en la mayoría de las situaciones. Si me encontrara enseñando hebreo
bíblico a un grupo de judíos en Israel, por amor y respeto por ellos, elegiría usar a Adonai si
expresaban ofensa por la alternativa, tal como creo que los apóstoles habrían hecho. Dicho esto,
me aseguraría de explicarles mucho de lo que hay en este documento para asegurarme de que
continúen en su tradición con los ojos bien abiertos a los problemas. El amor y el respeto me
obligarían a tratar de persuadirlos para que piensen clara, bíblica y honestamente sobre el asunto.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 56

Apéndice
Una perspectiva católica romana

De Antonius Lupus:

Primero, debemos reconocer que no existe ninguna ley, canónica o Divina, que prohíba el uso del
nombre divino incluso en su pronunciación más adecuada fuera de los eventos litúrgicos. Por lo tanto,
uno puede encontrar muchas Biblias, devocionales, textos y otros que tienen el nombre divino
impreso o usado de tal manera que espera una expresión verbal. La Iglesia, siendo el Nuevo Israel,
tolera esta práctica y realmente no habla de una forma u otra, sino que simplemente afirma que se
respeta la costumbre de la reverencia sustitutiva del Nombre. La devoción privada, sin embargo, es un
asunto diferente. Hablando teológicamente, uno puede justificar con bastante facilidad la habilidad de
un cristiano (o incluso la correcta, en algún sentido) para verbalizar el nombre divino. Somos
literalmente hijos e hijas de Dios; conocemos a Dios a través de la intimidad de Jesucristo; Dios
habita dentro de nosotros, etc. El uso del nombre divino también puede proporcionar una intimidad
con Dios y un sentido de identidad más profunda con el Antiguo Pacto, que ha sido continuado y
cumplido en el Nuevo.

En segundo lugar, está claro que se pueden hacer concesiones con el nombre divino para
mantener el uso cercano pero imperfecto por respeto al Nombre. La pronunciación del Tetragrámaton
es muy precisa y sigue una forma de hebreo que ya no se habla de forma nativa. Por lo tanto, uno
puede fácilmente “distorsionar” las verdaderas pronunciaciones manteniendo la estructura general.
Algunos ejemplos incluyen: “Yaveh”, “Iahveh”, “Yahvé”, “Yah”, “Jahveh”, “Jah”, “Iabe”, “Yao”,
etc. También se puede utilizar un dispositivo fundado por nuestros antepasados judíos que inserta
diferentes vocales en el Tetragrámaton creando nuevos nombres (que son, por naturaleza, títulos)
como: “Jehová”, “Yehowah”, “Yahoveh”, “Yiyeh”, “ Jehoveh “, y más.

En tercer lugar, debemos reconocer que el Nombre de Dios se encuentra más plenamente en
Cristo que en el Tetragrámaton . El nombre “Jesús” se deriva del hebreo “Yehoshua” (que significa:
“YHWH salva”). Fue acortado a mediados o finales del Antiguo Pacto a “Yeshua”, que es la forma
hebrea / aramea del Nombre de Nuestro Señor. Por lo tanto, cada vez que se menciona el Nombre de
Jesús, el nombre divino está incluido por la naturaleza de la fórmula hebraica como “Yeh”, “Yah” y
“Yoh” todas forman expresiones lingüísticamente equivalentes del Nombre: “Iahveh”. Esta verdad
nos recuerda que el Nombre de Jesús es mucho más exaltado y digno de reverencia que incluso el
nombre divino en el Nuevo Pacto. El Catecismo de la Iglesia Católica explica:

CIC, 2666: Pero el único nombre que lo contiene todo es el que recibió el Hijo de Dios en su
encarnación: JESÚS. El nombre divino no puede ser pronunciado por labios humanos, sino
asumiendo nuestra humanidad. La Palabra de Dios nos lo entrega y podemos invocarlo: “Jesús”,
“YHWH salva”. El nombre “Jesús” lo contiene todo: Dios y el hombre y toda la economía de la
creación y la salvación. Rezar “Jesús” es invocarlo y llamarlo dentro de nosotros. Su nombre es el
único que contiene la presencia que significa. Jesús es el Resucitado, y quien invoca el nombre de
Jesús recibe al Hijo de Dios que lo amó y se entregó por él.

Entonces yo diría que un cristiano es libre de usar el nombre divino (preferiblemente en una
forma comprometida) durante sus devociones privadas; especialmente si se invoca en silencio. Sin
embargo, cualquier expresión debe ir acompañada de la debida reverencia, honor y sentido de lo
sagrado. Cualquier uso del nombre divino o títulos y palabras relacionados con él (Dios, Señor, etc.)
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 57

que se usen de manera irrespetuosa o incluso frívola es un pecado contra el Segundo Mandamiento.
Dicho esto, animo, en cambio, a que se cultive un mayor uso y un sentido de reverencia en el Nombre
de “JESÚS”, como dice el Catecismo anteriormente. En el Nombre “JESÚS” recibimos todo lo que
fue, es y será el poder del nombre divino, YHWH, y también la Presencia misma de Cristo en
nuestros corazones. Yo personalmente oro con el uso: “Iahveh” a Dios, especialmente en ocasiones
importantes o trascendentales, sin embargo, me esfuerzo por seguir las enseñanzas del Catecismo y
confío más en el Nombre de Cristo que en el nombre divino como se usaba en el Antiguo Pacto.

Someto todo lo que he dicho, escrito o insinuado al juicio y corrección de la Santa Madre Iglesia;
muy especialmente la Santa Iglesia Romana bajo cuyo cuidado Dios me ha puesto. Cualquier cosa
aquí que contradiga las enseñanzas de la Santa Madre Iglesia de alguna manera es nula, inválida y
completamente incorrecta y debe ser vista como tal.106

106
Antonius Lupus, accessed May 8, 2020, https://forums.catholic.com/t/what-is-the-offical-church-teaching-
on-using-gods-name-Yahvé-in-general/305949/9.
Pronunciando y Traduciendo el nombre divino ‫יהוה‬
Case 58

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