Papers by Almudena de Benito

REVISTA EUROPEA DE INVESTIGACIÓN EN ARQUITECTURA (REIA), 2017
El control adulto siempre ha sido una
constante en la infancia, ejercido a través de
diferentes d... more El control adulto siempre ha sido una
constante en la infancia, ejercido a través de
diferentes dispositivos —que engloban desde el
fajado hasta los andadores, incluyendo distintos
modelos de sillas— todos basados en limitar
el movimiento infantil dentro del espacio
doméstico. El mobiliario de confinamiento
reduce la libertad del usuario, e intenta alargar
el tiempo de permanencia a través del juego,
restringiendo el desplazamiento en un entorno
que pertenece a los adultos. Los muebles y
las estancias infantiles domésticas reflejan la
relación de la sociedad de cada época con la
infancia: en algunos casos, se trata de integrar
a los pequeños con los adultos, en otros, de
adaptarse a sus necesidades y también a las
de sus progenitores. La transformación del
mobiliario en función del tiempo provoca
también cambios en la habitación infantil,
que puede expandirse hacia otras áreas de
la vivienda o incluso del edificio. Se acotan
los espacios y los muebles se protegen como
consecuencia de la preocupación por la
seguridad, lo que coarta la libertad de l*s
niñ*s. En la casa aumentada de hoy en día, se
vigila desde la tecnología, los bebés duermen
monitorizados y sus movimientos son
controlados, dentro de una supuesta libertad.

REVISTA EUROPEA DE INVESTIGACIÓN EN ARQUITECTURA. REIA, 2017
Considerar el espacio doméstico como el
primer ámbito de juego permite introducir
la experiencia ... more Considerar el espacio doméstico como el
primer ámbito de juego permite introducir
la experiencia de lo cotidiano como la base
del aprendizaje en la infancia. La acción del
juego en casa utiliza los objetos, el espacio y
el tiempo subvirtiendo sus funciones, usos y
significados originales.
La topografía alterada por una línea del
horizonte cercana al suelo, permite descubrir
nuevos lugares en los que los objetos y el
mobiliario aparecen como obstáculos y
oportunidades para colonizar. La creatividad,
ligada al instinto de supervivencia animal,
estimula la búsqueda de espacios donde
ocultarse. Esconderse detrás, debajo y
dentro de determinados objetos domésticos,
constituye una acción creativa que otorga
funciones nuevas y propone la libre
interpretación de elementos cotidianos como
el armario, la cama y la mesa. Dentro de la casa
surgen nuevas estructuras para esconderse,
construidas con enseres domésticos.
De la casa como albergue familiar, llena de
objetos y espacios secretos, se ha llegado a un
espacio transparente en el que la domesticidad
se expande fuera de la vivienda, ahora habitada
por grupos de convivencia no necesariamente
unidos por lazos familiares, y donde lo virtual
sustituye rápidamente a lo analógico. En este
nuevo espacio doméstico ¿es posible jugar?
Pasajes De Arquitectura Y Critica, 2002
... Buscando a Mies. Autores: Meritxell Lázaro, Almudena de Benito; Localización: Pasajes de arqu... more ... Buscando a Mies. Autores: Meritxell Lázaro, Almudena de Benito; Localización: Pasajes de arquitectura y crítica, ISSN 1575-1937, Nº 37, 2002 , pág. 56. Fundación Dialnet. Acceso de usuarios registrados. Acceso de usuarios registrados Usuario. Contraseña. Entrar. Mi Dialnet. ...
Pasajes De Arquitectura Y Critica, 2001
... La naranja orgánica. Autores: Almudena de Benito, Meritxell Lázaro; Localización: Pasajes de ... more ... La naranja orgánica. Autores: Almudena de Benito, Meritxell Lázaro; Localización: Pasajes de arquitectura y crítica, ISSN 1575-1937, Nº 30, 2001 , pág. 24. Fundación Dialnet. Acceso de usuarios registrados. Acceso de usuarios registrados Usuario. Contraseña. Entrar. Mi Dialnet ...
Resumen: Esta comunicación desea acotar la base de desarrollo de un taller de carácter lúdico y e... more Resumen: Esta comunicación desea acotar la base de desarrollo de un taller de carácter lúdico y educativo para niños en torno a lo arquitectónico.
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Papers by Almudena de Benito
constante en la infancia, ejercido a través de
diferentes dispositivos —que engloban desde el
fajado hasta los andadores, incluyendo distintos
modelos de sillas— todos basados en limitar
el movimiento infantil dentro del espacio
doméstico. El mobiliario de confinamiento
reduce la libertad del usuario, e intenta alargar
el tiempo de permanencia a través del juego,
restringiendo el desplazamiento en un entorno
que pertenece a los adultos. Los muebles y
las estancias infantiles domésticas reflejan la
relación de la sociedad de cada época con la
infancia: en algunos casos, se trata de integrar
a los pequeños con los adultos, en otros, de
adaptarse a sus necesidades y también a las
de sus progenitores. La transformación del
mobiliario en función del tiempo provoca
también cambios en la habitación infantil,
que puede expandirse hacia otras áreas de
la vivienda o incluso del edificio. Se acotan
los espacios y los muebles se protegen como
consecuencia de la preocupación por la
seguridad, lo que coarta la libertad de l*s
niñ*s. En la casa aumentada de hoy en día, se
vigila desde la tecnología, los bebés duermen
monitorizados y sus movimientos son
controlados, dentro de una supuesta libertad.
primer ámbito de juego permite introducir
la experiencia de lo cotidiano como la base
del aprendizaje en la infancia. La acción del
juego en casa utiliza los objetos, el espacio y
el tiempo subvirtiendo sus funciones, usos y
significados originales.
La topografía alterada por una línea del
horizonte cercana al suelo, permite descubrir
nuevos lugares en los que los objetos y el
mobiliario aparecen como obstáculos y
oportunidades para colonizar. La creatividad,
ligada al instinto de supervivencia animal,
estimula la búsqueda de espacios donde
ocultarse. Esconderse detrás, debajo y
dentro de determinados objetos domésticos,
constituye una acción creativa que otorga
funciones nuevas y propone la libre
interpretación de elementos cotidianos como
el armario, la cama y la mesa. Dentro de la casa
surgen nuevas estructuras para esconderse,
construidas con enseres domésticos.
De la casa como albergue familiar, llena de
objetos y espacios secretos, se ha llegado a un
espacio transparente en el que la domesticidad
se expande fuera de la vivienda, ahora habitada
por grupos de convivencia no necesariamente
unidos por lazos familiares, y donde lo virtual
sustituye rápidamente a lo analógico. En este
nuevo espacio doméstico ¿es posible jugar?
constante en la infancia, ejercido a través de
diferentes dispositivos —que engloban desde el
fajado hasta los andadores, incluyendo distintos
modelos de sillas— todos basados en limitar
el movimiento infantil dentro del espacio
doméstico. El mobiliario de confinamiento
reduce la libertad del usuario, e intenta alargar
el tiempo de permanencia a través del juego,
restringiendo el desplazamiento en un entorno
que pertenece a los adultos. Los muebles y
las estancias infantiles domésticas reflejan la
relación de la sociedad de cada época con la
infancia: en algunos casos, se trata de integrar
a los pequeños con los adultos, en otros, de
adaptarse a sus necesidades y también a las
de sus progenitores. La transformación del
mobiliario en función del tiempo provoca
también cambios en la habitación infantil,
que puede expandirse hacia otras áreas de
la vivienda o incluso del edificio. Se acotan
los espacios y los muebles se protegen como
consecuencia de la preocupación por la
seguridad, lo que coarta la libertad de l*s
niñ*s. En la casa aumentada de hoy en día, se
vigila desde la tecnología, los bebés duermen
monitorizados y sus movimientos son
controlados, dentro de una supuesta libertad.
primer ámbito de juego permite introducir
la experiencia de lo cotidiano como la base
del aprendizaje en la infancia. La acción del
juego en casa utiliza los objetos, el espacio y
el tiempo subvirtiendo sus funciones, usos y
significados originales.
La topografía alterada por una línea del
horizonte cercana al suelo, permite descubrir
nuevos lugares en los que los objetos y el
mobiliario aparecen como obstáculos y
oportunidades para colonizar. La creatividad,
ligada al instinto de supervivencia animal,
estimula la búsqueda de espacios donde
ocultarse. Esconderse detrás, debajo y
dentro de determinados objetos domésticos,
constituye una acción creativa que otorga
funciones nuevas y propone la libre
interpretación de elementos cotidianos como
el armario, la cama y la mesa. Dentro de la casa
surgen nuevas estructuras para esconderse,
construidas con enseres domésticos.
De la casa como albergue familiar, llena de
objetos y espacios secretos, se ha llegado a un
espacio transparente en el que la domesticidad
se expande fuera de la vivienda, ahora habitada
por grupos de convivencia no necesariamente
unidos por lazos familiares, y donde lo virtual
sustituye rápidamente a lo analógico. En este
nuevo espacio doméstico ¿es posible jugar?